Prueba: Mercedes-Benz GLB 200 Progressive 7G-DCT

viernes, 10 de julio de 2020



Evaluamos al nuevo Mercedes-Benz GLB en su variante GLB 200 Progressive 7G-DCT con un motor 1.3 turbo de 163 cv.
Mercedes-Benz Uruguay puso a la venta en marzo a su nuevo SUV, el GLB. Llega desde México con una versión de acceso llamada Progressive, con un 1.3 turbo de 163 cv de potencia asociado a una transmisión automática de siete relaciones. Autoblog pudo probarlo durante más de 760 kilómetros.

El GLB es uno de los SUVs más nuevos de la gama de Mercedes-Benz. Su historia se remonta a hace algo más de un año atrás, cuando en el Salón de Shanghái 2019 la marca alemana lo anticipó en formato conceptual y donde Autoblog fue el primer medio uruguayo en verlo en persona (ver nota). Conocido de forma interna como X247, este SUV compacto deriva de la cuarta generación del Clase A (ver lanzamiento) y fue mostrado en su formato definitivo apenas dos meses más tarde. 

Se mostró por primera vez a nivel mundial en el Salón de Frankfurt de 2019 (ver nota) y como fuera anunciado (ver nota) ahora llega a Uruguay importado desde Aguascalientes, México en una sola variante de equipamiento (GLB 200 Progressive), con un 1.3 turbo de 163 cv de potencia y asociado a una transmisión automática de siete relaciones, con tracción delantera.


Cabe destacar que el GLB no es el reemplazante del GLA (ver nota) sino que es una oferta diferente y complementaria, al tener tres filas de asientos de forma opcional (que es de serie para Uruguay). Por el momento se está ofreciendo en esa configuración mencionada y a un precio de U$S 69.990 (ver lanzamiento), mientras que a mediados de junio se puso a la venta el GLB 250 4MATIC Progressive 8G-DCT a un precio de U$S 79.990 (ver lanzamiento), en tanto que hace algunos días atrás, se sumó a la gama el Mercedes-AMG GLB 35 4MATIC con una potencia de 306 cv a U$S 99.990 (ver lanzamiento).

Por eso para comenzar a conocer al GLB es que Autoblog probó hace algunas semanas atrás al GLB en su variante de entrada de gama (por ahora), es decir un GLB 200 Progressive, con el mencionado impulsor cuatro cilindros 1.3 turbo de 163 cv de potencia asociado a una transmisión automática de siete relaciones. Y a continuación se transcribirá el análisis completo del nuevo integrante de la familia de SUVs de la firma de la estrella.


Exterior

Mientras todos los SUVs de Mercedes-Benz (sin ser el Clase G) apuntan a líneas redondeadas y suavizadas, como los GLA, GLC o GLE, el GLB decidió irse por el carril de lo cuadrado y rectilíneo. Es más, muchos decidieron llamarlo "baby-G" cuando comenzaron a mostrarse sus primeras imágenes. Sin embargo, está más emparentado con el Clase GLS que con el icónico Geländewagen por eso de tener una tercera fila de asientos. A propósito, ¿sabían que la "G" en todos estos modelos significa "vehiculo todoterreno" en alemán? Bueno, ahora lo saben y pueden alardear de ello en los asados con amigos. Bueno, ahora no. Mejor cuando termine la pandemia.

Otra cosa (menos importante, pero que llena un párrafo más de este informe) que pasarán a saber es que el GLB me fue ganando con el correr de los meses. Al principio no me convencía. Pero al verlo en persona y convivir con él algunos días, le terminé agarrando cariño. Este GLB es el denominado Progressive, que es el segundo escalón de equipamientos de la gama a nivel mundial.


Se lo identifica por fuera al llevar una parrilla con dos lamas de color plata e insertos cromados, protección estética de bajos delante y detrás en cromo de alto brillo, revestimientos de las puertas de superficie estructurada en negro con elementos de adorno cromados en diseño de estribo, embellecedores visibles de las salidas de escape, listones cromados en la línea de cintura y en la línea de las ventanillas y barras longitudinales para el techo de aluminio.

Otra forma de distinguirlo es por las llantas de aleación de 18 pulgadas con 5 radios dobles color negro brillante y pulidas a alto brillo, que en la unidad probada iban montadas sobre cuatro neumáticos Pirelli Scorpion Verde en medida 205/55 R18, con característica runflat (más sobre esto al final del apartado interior). También se lo puede identificar por tener unas luces delanteras con faros LED High Performance, que se destacan por su excelente poder lumínico sobre todo en la noche. Además cuenta con una firma lumínica específica que le queda muy bien también.


Ese detalle se transcribe a la parte trasera, donde este GLB 200 también cuenta con ópticas LED posteriores para las luces de freno y posición. Visto desde el ¾ posterior es donde este SUV guarda más similitudes con el más grande Clase GLS. Son casi dos gotas de agua, solo que una está escalada a un tamaño más urbano y amigable con los espacios de estacionamiento de las cocheras de los edificios. Es que el GLB, al igual que el GLA, es un sport utility compacto. Como su letra final indica, va entre medio de la A y la C, o en este caso, GLA y GLC.

Este GLB es el quinto modelo de Mercedes-Benz en utilizar a la plataforma modular MFA de Daimler derivada de la generación anterior de productos de tracción delantera (Modular Front Architecture, de ahí la sigla), aunque modificada en profundidad, para pasar a denominarse ahora MFA-2. Las dimensiones del GLB son 4.634 mm de largo, un ancho de 1.834 mm y un alto de 1.658 milímetros. La distancia entre ejes es de 2.829 mm. Frente a un GLC, es 35 mm más corto, 56 más angosto y 14 mm más alto, mientras que la batalla es 44 milímetros menor. Por otra parte, en comparación con la segunda generación del GLA que llegará más adelante a nuestro país (ver nota), el GLB es 224 mm más largo, 47 mm más alto y su distancia entre ejes es 100 mm mayor. Eso sí, comparten el mismo ancho.


Interior

Por dentro la receta es idéntica a la de sus hermanos, los Clase A (ver prueba) o A Sedán (ver prueba), pero acompasada a los cánones del universo de los SUVs. Y esto significa que es la nueva referencia del segmento en términos de estilo. Luce moderno y es también. Hasta parecería que los diseñadores se dedicaron en hacer un producto sutil y taimado para los ajenos y espectacular para los usuarios que lo puedan disfrutar puertas adentro. Comencemos por algo que se mantiene respecto los Clase A: la posición de manejo. 

Como buen auto alemán -aunque se produzca en México, lo sé-, es impecable gracias a múltiples regulaciones (todas manuales, pero sin ajuste lumbar) que permiten ir sentado muy arriba o abajo, cerca o alejado. Los asientos tienen extensor para muslos y una regulación en inclinación, siendo a su vez, amplios y cómodos. Se lo percibe espacioso y luminoso, mientras que en relación a la ergonomía, todo lo que haya que tocar, está al alcance de la mano, en especial con los prácticos trackpads que lleva en el volante para comandar las funciones del tablero y de la pantalla multimedia.


En términos de calidad el GLB, mantiene el nivel de sus hermanos provenientes desde el Viejo Continente. Hay piezas compartidas con modelos más caros, como ser el volante y todo lo que tocamos o vemos, se siente premium. De todas formas siguen habiendo algunas piezas no tan a la vista, como la botonera baja de la consola central, o los mandos de la columna de dirección para limpiaparabrisas/luneta, así como el comando del selector de cambios, que podrían tener un nivel superior, más propio de un Mercedes-Benz, digamos. De todas formas, aprueba con buena nota y está entre los mejor terminados del segmento.

Este habitáculo "en terrazas" que se reparte entre las informaciones del vehículo y los mandos, comienza con los dos pantallas. Perdón: pantallotas. La primera es la del tablero, que es un panel de instrumentos digital con pantalla a color de 10,25 pulgadas. Ahí se pueden ver el velocímetro y la cantidad de combustible en el depósito. ¿Y el tacómetro? ¿Y el medidor de temperatura del líquido refrigerante? Todo está, no desesperen. Habrá que ir buscándolos scrolleando con unos prácticos trackpads que el GLB tiene el volante y estas informaciones (y otras) irán pudiéndose configurar a gusto del conductor.


Pero la estrella del GLB es sin dudarlo el sistema multimedia MBUX con AM/FM/4USB/Bluetooth con pantalla táctil de 10,25 pulgadas, integración de smartphones mediante Apple CarPlay y Android Auto, panel táctil con haptic feedback, funciones ampliadas MBUX y sistema LINGUATRONIC con comprensión del habla. Si bien acá abajo van a poder ver un video mío interactuando con este sistema de "inteligencia artificial", voy a explicar un poco la experiencia bastante rápido así pueden verlo mejor en acción en el video que publiqué en el adelanto de la prueba del Clase A, aunque ni siquiera pude abarcar un 10% de todo lo que puede hacer (ver video).

Con el MBUX (Mercedes-Benz User Experience) se pueden encender o apagar luces interiores, el climatizador, hacer llamadas, enviar mensajes de texto o WhatsApp, consultar datos de la computadora de a bordo, por ejemplo. La usabilidad, al igual que en los Clase A, es excelente. Los comandos están duplicados y hasta triplicados, así que se puede acceder a las distintas funciones desde la pantalla táctil (que es casi tan rápida y sensible como la de un buen celular), desde un touchpad que vibra con el tacto ubicado en el centro de la consola (donde habitualmente iría el selector de cambios) o por LINGUATRONIC, que son los comandos fónicos.


Aprende costumbres, como elegir una emisora de radio favorita, o realizar una llamada todos los días a la misma hora. También permite abrir o cerrar la cortinilla del techo solar o cambiar la temperatura del climatizador mediante comandos vocales. Es brillante. Se activa mediante la frase "Hola Mercedes" o solo diciendo "Mercedes". También se puede desactivar esta función para que cada vez que digamos "Mercedes" no se active por accidente. Me ha pasado y puede llegar a tornarse un poco insoportable. Así y todo, en términos de conectividad, es la nueva referencia del segmento.

Pero dejemos la parte techie un rato para hablar de la habitabilidad que es el otro diferencial del GLB por sobre otros SUVs compactos. Al ser un producto pensado para un uso familiar, veamos cómo son las plazas posteriores. Por el hecho de tener una mayor distancia entre ejes (+100 mm) que el GLA, así como también una segunda fila de asientos que pueden deslizarse, reclinarse o plegarse, tres adultos grandes podrán acomodarse con facilidad, sin llegar a tocar los asientos delanteros con las rodillas, y además la altura al techo no es tampoco ajustada, pese a llevar un gran techo solar que roba algunos centímetros a lo alto. Son tres plazas muy habitables, cómodas y espaciosas. Es más, dentro del segmento de los SUVs compactos, el GLB pasa a ser la nueva referencia en este sentido.


En caso de tener que llevar a un tercer ocupante atrás, tampoco presentará inconveniente ninguno. El piso es casi plano, y el ancho es correcto, en tanto que la distancia al techo es un poco más generosa que en las plazas laterales. Digamos que si se busca confort trasero, el GLB justifica su existencia sobre el GLA, que si bien es un producto bastante habitable, queda apenas atrás en este sentido frente a su hermano mayor, producto de una carrocería también más generosa en tamaño, tanto por dentro como por fuera.

Otro punto (muy) destacado es que los anclajes para sillas infantiles en la fila del medio son dos y a diferencia de otros modelos con siete asientos, también presenta otros dos más en la tercera fila, así como los airbags de cortinas, también cubren las cabezas de los ocupantes de estas posiciones. En términos de comodidades a bordo, hay portaobjetos, posavasos y hasta dos conexiones USB-C para los dos pasajeros de la última fila.



Ya que la menciono, es la gran justificación para elegir al GLB por sobre sus hermanos GLA y GLC. Si vamos a la práctica es recomendable para adolescentes (sí niños porque cuenta con dos anclajes para sillas) ya que pese a disponer de una altura suficiente al techo, estas dos plazas adicionales se ven limitadas por el espacio disponible para las piernas obligando a desplazar hacia delante la fila de asientos del medio (en proporción 60:40) para ir en relativa comodidad. Esto permite hasta 140 milímetros más de lugar para las piernas de la tercera fila. Es decir, es un SUV para cinco pasajeros y otros dos ocasionales en un viaje corto. Un 5+2, más que un siete plazas reales, digamos.

El acceso a estas plazas se realiza volcando los respaldos de la segunda fila y el hueco es bueno a lo alto, pero algo estrecho a lo ancho. Es más, la propia marca aclara en su manual de instrucciones y en el marco de las puertas traseras, que los asientos de la tercera fila son aptos solo para seres humanos de hasta 1,68 m, aunque en un viaje corto se podrán acomodar algunos más altos porque el techo permite algo más de espacio que en las plazas del medio. Estos dos asientos se pueden plegar 50:50 si no se utilizan para ampliar el volumen del baúl, que es otro de los puntos fuertes del GLB como veremos a continuación. Bueno, en realidad depende de cuánta gente llevemos.



El baúl posee unos muy escasos 144 litros con las siete plazas en uso, ampliables hasta los más generosos 570 l con la segunda fila de asientos rebatida, 640 litros deslizando el asiento trasero, o unos amplios 1.680 l rebatiendo las dos filas traseras. Como punto a destacar, cuenta con la apertura/cierre eléctrico del portón trasero con sistema de apertura sin manos, es decir, pasando el pie por debajo del paragolpes, ya es suficiente para abrir o cerrar el baúl.

Muy práctico. También lo es rebatir las cinco butacas individuales, con mecanismos muy sencillos de utilizar, incluso con una sola mano. Lo que es no tan práctico, es la ausencia de un neumático de auxilio. En su lugar, viene con un kit de reparaciones TIREFIT y los neumáticos son del tipo runflat, es decir, que pueden circular pinchados. El problema es si tenemos una rajadura grande o corte. Ahí no sirven para nada. 


Motor y transmisión

La oferta mecánica de este SUV, como dije más arriba, se divide en dos opciones. La primera es el GLB 200 que lleva la mecánica M 282, un impulsor nuevo y desarrollado entre Daimler y Renault. Se trata de un cuatro cilindros con 1.333 cc de cilindrada (aunque Mercedes-Benz se empeñe a decir que es un 1.4, es un 1.33), inyección directa con turbocompresor, intercooler y sistema de desconexión de cilindros.

Produce 163 cv de potencia disponibles a las 5.500 rpm y un torque máximo de 250 Nm entre las 1.620 y 4.000 vueltas. Va asociado a una transmisión automática de siete velocidades y doble embrague denominada 7G-DCT. Es la misma receta ya vista en los A 200 Hatch y Sedán probado hace casi un año atrás, por lo que no hay novedades en este aspecto. De todas formas, vamos a repasar cómo se comporta este conjunto moto-propulsor.


Es un impulsor que presenta una respuesta a bajo y medio régimen (entre 1.200 y 3.500 rpm) sorprendente para una cilindrada tan pequeña. Da agilidad en ciudad y ruta, mientras que recién por arriba de las 5.000 vueltas empieza a mantener un comportamiento más aplacado. El par motor es plano en casi todo el rango de utilización, teniendo como resultado una mecánica elástica y progresiva. Además de ser suave en su funcionamiento e ir muy bien insonorizado, al menos hasta las 5.000 rpm, luego se deja sentir más en el habitáculo.

La transmisión 7G-DCT, como ya dije más de una vez, queda un escalón por detrás de la DSG del Grupo Volkswagen así como de la nueva DKG de BMW. A la del GLB se la nota un poco más lenta de reacciones, pero esto ya es hilando bajo un criterio muy fino, porque su funcionamiento es intachable e igual de eficiente que la que llevan los modelos de Audi o BMW. No tiene siquiera un modo "Sport", sino que lo reemplaza por un más honesto "M" de manual, que se activa mediante las levas de cambio integradas al volante, que tampoco retienen las marchas cuando imprimimos un manejo más enérgico, sino que pasan solas al cambio superior.


Fábrica declara una aceleración de 0 a 100 km/h en 9,1 segundos y una velocidad final de 207 km/h. En relación a los consumos, Mercedes-Benz declara 7,4 l/100 km en ciclo urbano, 5,2 l/100 km en ruta y 6,0 litros cada 100 kilómetros en el combinado. Son cifras bastante prometedoras, pero veamos cómo se trasladaron en la prueba. Durante las pruebas, logré como mejores cifras 7,9 l/100 km en ciclo urbano, 5,9 l/100 km en ruta, y 6,9 litros cada 100 km en ciclo mixto.

Como verán, hay diferencias de consumo entre el registro teórico y el práctico, pero incluso llevándolo con "rock and roll", los números no suelen dispararse tanto. Por ejemplo, el "peor" consumo de ruta, fue de 6,1 l/100 km, lo cual habla de que este impulsor es muy eficiente sin importar si va instalado en un hatchback compacto o en un SUV para siete pasajeros. Es ejemplar en este sentido. El peso en vacío, en tanto, es de 1.555 kg, mientras que el depósito de combustible aloja 52 litros de capacidad y 6 de reserva.


Comportamiento dinámico

El Clase A de cuarta generación ya demostró en la evaluación de su variante de cinco puertas y también en el Sedán, que es un producto con un chasis muy competente y refinado en comparación con su antecesor. En el caso del GLB, se toma esa receta y se lleva al universo de los SUVs compactos, con una posición de manejo algo más elevada, pero manteniendo todas las virtudes que ya fueron remarcadas en las sendas evaluaciones de sus hermanos de plataforma y mecánica.

Por tal motivo, un GLB 200 es un vehículo muy confortable y bastante bien resuelto en términos de comodidad para hacer varios kilómetros. El chasis se comporta de maravillas en la ciudad, con un accionar muy neutro y como dije más arriba, equilibrado. La suspensión tiende al confort, aunque no deja de ser firme, y va asistida por unos neumáticos con perfil 55 que saben filtrar a la perfección las imperfecciones de la calzada. Hilando muy fino, el tren trasero puede ser propenso a transmitir un poco más en un cruce de vías de tren o ante un lomo de burro, pero ni llega a rebotar cuando bajamos de él, por lo que el confort de marcha siempre estará asegurado.


El motor 1.33 se resuelve bien para el uso urbano y por su suavidad, pareciera que tiene una cilindrada mayor. En los semáforos responde bien en todas las salidas, aunque el sistema Start-Stop tiene una reacción algo lenta a veces. Este GLB 200, a su vez, cuenta con el sistema DYNAMIC SELECT con selección de cuatro programas de conducción (Confort, Sport, Eco, Individual), que alteran el comportamiento del vehículo en función de qué modo elijamos.

Actúa sobre la dirección, el motor y caja. Por eso, la 7G-DCT permite que en ciudad se pueda viajar en "D6" a 70 km/h va a unas 1.500 vueltas, si usamos el modo de manejo "Eco", al igual que en el modo "Confort", mientras que en el modo "Sport" pasa a D5 con el impulsor girando a 2.600 revoluciones. A su vez, si usamos el modo "Eco", activa el modo de circulación por inercia y desactiva dos cilindros como expliqué en el apartado de motor, con el fin de reducir los consumos.


Esta forma de "navegación a vela" se activa cuando levantamos el pie del acelerador y se mantendrá durante al menos cinco segundos. Pero no lo notaremos hasta que veamos el tacómetro con la aguja digital "muerta". La caja queda en "D" indicada en color verde, siempre que eso produzca un ahorro de carburante. Este modo de "rueda libre" por llamarlo en criollo, dejará que el motor siempre gire a apenas 800 rpm.

A velocidades de ruta constantes, por su parte, el GLB 200 hace gala de lo descansado que se puede llevar al motor. A 110 km/h en D7 viaja a unas 1.700 vueltas en "Confort", al igual que si usamos el modo de manejo "Eco", en tanto que utilizándolo en el modo "Sport" pasa a D6 con el impulsor girando a 2.300 revoluciones. A su vez, los adelantamientos en ruta son muy buenos. Pisando a fondo el acelerador y activando el kick-down de la caja, podrá bajar de 7ª a 3ª en un par de segundos, yendo de 80 a 110 km/h en unos más que correctos y exactos 6,0 segundos.


La dirección, por su parte, cuenta con asistencia variable es muy directa, e ideal para tramos trabados, como puede ser un camino secundario a una ruta. A la hora de estacionar, por el contrario, se torna muy suave y ligera. Pero como buen SUV compacto, es en las rutas donde se siente más a gusto. Y es por eso que en este ámbito es donde se explota todo el potencial dinámico que tiene.

Presenta un comportamiento muy franco, va sobre rieles en lo recto, y a la hora de hacer cientos de kilómetros no solo es cómodo y silencioso, también tiene un conjunto mecánico excelente para hacerlo. A nivel dinámico es uno de los SUVs compactos con tracción delantera más capaces de este segmento. Va tan bien apoyado que sorprende y considero que está al mismo nivel de los Volvo XC40, BMW X1 o Audi Q3, en ese orden.


En cualquier situación, sin importar qué tanto le exijamos, lleva las cuatro ruedas imantadas al piso, transmitiendo mucha confianza al volante. Si vamos a los hechos, el GLB está muy lejos de ser un off-roader, sino todo lo contrario. Es un animal del asfalto pero en otros mercados ya ofrece tracción integral 4MATIC.

Más allá de tener un despeje pensado para meterse, de forma muy mojigata, por caminos secundarios con ripio, tierra, o arena, los neumáticos que lleva de serie están diseñados solo para ser usados en calles y carreteras. En relación a las capacidades fuera de ruta, declara un ángulo de ataque de 18º, de partida, 18,3º, mientras que el ventral es de 13,9. El despeje al suelo, en tanto, es de 200 mm.


Equipamiento

Por ahora, la gama del GLB se reduce a una sola versión denominada Progressive ofrecida en mecánica GLB 200 y 250. Ofrece de serie: pack eléctrico (cuatro levantavidrios, espejos y bloqueo), espejos retrovisores exteriores calefaccionados, paquete de retrovisores con sistema antideslumbramiento automático y retrovisores exteriores abatibles eléctricamente a ambos lados, conexión automática de las luces de cruce con luz de marcha automática, luces delanteras con faros LED High Performance, luces traseras LED, sensor de lluvia, climatizador automático de una zona THERMATIC, asientos delanteros con regulación en altura y lumbar manuales, computadora de a bordo, volante multifunción deportivo en cuero regulable en altura y profundidad, respaldos traseros de la segunda fila de asientos abatibles y reclinables 40:20:40 con desplazamiento longitudinal de los asientos de la segunda fila con ayuda para la entrada y salida en el vehículo EASY-ENTRY, respaldos traseros de la tercera fila de asientos abatibles 50:50, sistema de mantenimiento activo ASSYST, función de parada y arranque ECO, cámara de retroceso, sistema TEMPOMAT con SPEEDTRONIC (control de velocidad crucero con limitador de velocidad), tapizados en símil de cuero ARTICO, línea de equipamiento exterior Progressive (parrilla con dos lamas de color plata e insertos cromados, protección estética de bajos delante y detrás en cromo de alto brillo, revestimientos de las puertas de superficie estructurada en negro con elementos de adorno cromados en diseño de estribo, embellecedores visibles de las salidas de escape, listones cromados en la línea de cintura y en la línea de las ventanillas y barras longitudinales para el techo de aluminio), línea de equipamiento interior Progressive (asientos de confort con paquete de confort para los asientos incluido con ajuste de la inclinación y de la profundidad de la banqueta del asiento, redes portaobjetos en los respaldos de los asientos delanteros, volante deportivo multifunción en cuero con costuras de adorno negras y embellecedor cromado de 2 piezas, difusores de aire de color negro con aro exterior cromado, red portaobjetos en el espacio reposapiés del acompañante, techo interior de tela color negro, portavasos doble y llave del vehículo con marco de adorno cromado), sistema multimedia MBUX con AM/FM/4USB/Bluetooth con pantalla táctil de 10,25 pulgadas, integración de smartphones mediante Apple CarPlay y Android Auto, panel táctil con haptic feedback, funciones ampliadas MBUX y sistema LINGUATRONIC con comprensión del habla, DYNAMIC SELECT con selección de cuatro programas de conducción (Confort, Sport, Eco, Individual), instrumental digital con pantalla a color de 10,25 pulgadas, interfaz USB-C en el compartimento multiuso y en la consola central de la parte trasera, función de arranque KEYLESS-GO, portón trasero EASY-PACK con accionamiento eléctrico para apertura y cierre manos libres (Hands Free-Access), techo solar eléctrico panorámico, paquete de estacionamiento con ayuda activa para aparcar PARKTRONIC, y llantas de aleación de 18 pulgadas con 5 radios dobles color negro brillante y pulidas a alto brillo sobre neumáticos en medida 205/55 R18.


Es una dotación bastante generosa para ser un nivel intermedio, aunque si rascamos un poco, aparecen algunos varios faltantes que deberían ser de serie como ser: butacas con regulaciones eléctricas y memorias, llave manos libres, o un climatizador automático de dos zonas con salidas de aire para las plazas traseras. Son elementos prescindibles. Creo que el GLB tiene todo lo necesario y sin dudas goza de contar con el mejor sistema de infoentretenimiento y conectividad del momento. El GLB 250, en tanto, suma a la lista del GLB 200: asiento del conductor de ajuste eléctrico con función de memoria, apoyo lumbar con 4 vías de ajuste en ambos asientos delanteros, y llantas de aleación de 19 pulgadas con 10 radios, en color negro mate y pulidas a alto brillo, sobre neumáticos en medida 235/50 R19.

Para aquellos que quieran más, siempre Mercedes-Benz ofrece una larga lista de opcionales, ya sea de elementos de confort como de personalización estética. Dos detalles del equipamiento: las conexiones USB son Tipo C, es decir, son las más modernas y por ende, todavía demandan un adaptador. Hay siete en el vehículo, dos adelante y cuatro atrás. Y el otro, es que el sensor de lluvia en caso de detectar agua en el parabrisas, cierra las ventanillas del vehículo incluso estando apagado el motor. Brillante solución.


Seguridad

Al igual que en el apartado techie, en este Mercedes-Benz también "went to town" como dicen los angloparlantes. El GLB trae de serie: siete airbags, frenos ABS, control de tracción (ASR), control de estabilidad (ESP), sistema ATTENTION ASSIST para detectar síntomas típicos de fatiga y advertencia al conductor del riesgo de sufrir microsueños, ADAPTIVE BRAKE con función de frenos secos al conducir bajo la lluvia y ayuda al arranque en pendientes, COLLISION PREVENTION ASSIST PLUS advertencia de colisión incluyendo servofreno de emergencia activo y frenado parcial autónomo para evitar una colisión o mitigar sus consecuencias, freno de estacionamiento electromecánico con función "Hold", siete apoyacabezas regulables en altura, siete cinturones de seguridad de tres puntas, faro antiniebla trasero, advertencia del desgaste de las pastillas de freno, servofreno de emergencia BAS con detección automática de situaciones de frenado de emergencia, y asistencia para aplicar la fuerza máxima de frenado, monitoreo de presión de los neumáticos, y anclajes i-Size y TopTether para sillas infantiles en la segunda y tercera fila de asientos.

En este sentido Mercedes-Benz sigue siendo la referencia dado que los rivales de Audi (Q2/Q3) y BMW (X1/X2) siguen sin ofrecer en nuestro mercado tecnologías de prevención de colisiones o de mitigación de impactos de serie o en opción. No así el Volvo XC40 que tienen una dotación apenas más amplia que el GLB, sumando conducción semi-autónoma en la versión R-Design, tope de gama. Pero bueno, son rivales circunstanciales, porque a diferencia del Mercedes-Benz, carecen de una tercera fila de asientos. Los frenos cuentan con discos autoventilados adelante y con discos sólidos atrás.


Su funcionamiento es más que satisfactorio, y detienen al GLB en línea recta siempre, aunque con cierta tendencia a bloquear de forma prematura dependiendo del asfalto, sin llegar a perjudicar la performance de frenado ni siquiera sobre una superficie mojada. También como decía, cuentan con una función de secado de los discos en días de lluvia, aproxima las pastillas a los discos de freno en cuanto el conductor levanta el pie del acelerador. De ese modo disminuye el tiempo de respuesta de los frenos.

Los controles de estabilidad y tracción no son completamente desconectables, aunque en la pantalla del instrumental te haga creer que sí. Cada maniobra en la que la retaguardia quiera superar a la vanguardia, se verá interrumpida por estos sistemas junto al accionar constante de la tracción delantera. En otras palabras: intentar ir en contra de Mercedes-Benz y su electrónica pro-seguridad, es un arrancar apostando con puntaje negativo. Y dejando las bromas aparte, está perfecto que sea así.


Precio y garantía

No estoy obviando lo de "competidores" en el título por error. GLB está solo en el mercado. Pero no solo en Uruguay, sino en todo el mundo. Ninguna de las marcas premium rivales está ofreciendo (por ahora) un SUV compacto con capacidad para siete pasajeros. El GLB 200 Progressive 7G-DCT se comercializa a un precio de U$S 69.990. La siguiente mecánica es el GLB 250 4MATIC Progressive 8G-DCT con un 2.0 litros de 224 cv de potencia a U$S 79.990. La garantía es de 2 años sin límite de kilometraje.

Al no tener rivales directos, es imposible no salir a buscarle algunos que se puedan acercar, al menos en concepto, al GLB. Es decir, SUVs con tres filas de asientos por un precio similar. En el entorno de los U$S 70.000, la oferta a nivel local incluye a todos estos productos: Hyundai Santa Fe 2.4 AWD Limited A/T (U$S 69.990)Land Rover Discovery Sport Pure S AWD 2.0 Si4 A/T (U$S 75.900), Dodge Journey SXT (7 plazas) 3.6 V6 AWD A/T (U$S 72.900) y Mazda CX-9 2.5 Turbo SKYACTIV-G AWD Full A/T (U$S 74.900). En todos los casos se trata de SUVs medianos con tres filas de asientos, es decir, pertenecen al segmento del GLC, por ejemplo. Aunque en términos de precio, se acercan al GLB, en su mayoría por ser de marcas generalistas.


Y es a este público al que Mercedes-Benz está tratando de captar con el GLB mientras Audi, BMW o Volvo no ofrezcan un SUV compacto con tres filas de asientos. La idea es poder acercarle al cliente de las marcas generalistas un producto premium a precios similares, pero con equipamientos de confort y seguridad que lo posicionan apenas por encima de lo que ofrecen modelos, tal vez con mayores dimensiones o mecánicas, pero con un nivel estatutario, digamos, menor.

También es cierto que por debajo de los U$S 70.000 existen muchas opciones igual de válidas para aquellos clientes que precisen capacidad para siete pasajeros. Ya sea dentro de los SUVs compactos así como también de los monovolúmenes y MPVs. Por ejemplo con mecánicas similares al GLB, e incluso compartiendo segmento, en el entorno de los U$S 60.000 está el Peugeot 5008 GT Line 1.6 THP 165 EAT6 (U$S 59.500), y si bajamos hasta los U$S 50.000 tenemos al Volkswagen Tiguan Allspace 2.0 TSI Highline DSG 4MOTION (c/3 filas de asientos) (U$S 53.290).


Conclusión

Los vehículos para siete pasajeros son como un juego de destornillador: se compran porque surgió una necesidad puntual, más que por una "calentura". Suelen ser productos pensados para cubrir una demanda de clientes que precisan espacio o asientos en donde llevar a su prole, compras lógicas por sobre todo. De todas formas en los últimos años, familias que no tienen más de tres críos, han optado por estos modelos para completar el famoso carpooling del colegio con los amiguitos del barrio (privados, casi siempre en ambos casos).

Pero para el paterfamilias, utilizar estos vehículos era hasta hace unos años, casi que una declaración del final de sus días de disfrute al volante. Eran productos incómodos, poco refinados en términos dinámicos y con toda la atención prestada en el desarrollo en el objetivo principal: llevar mucha gente de un punto a otro y nada más. Modelos como este GLB, así como otros SUVs compactos, salieron a quebrar con esto porque con el correr de los desarrollos, se fue logrando combinar el comportamiento de una berlina con la practicidad de una carrocería con un interior modulable y espacioso.


Ahora son modelos atractivos y deseables, que pueden ser usados a diario solo por uno de los dos adultos de la casa sin importar qué rol desempeñen, así como también servir para irse bien lejos de vacaciones con toda la familia. En el caso de Mercedes-Benz, además, lo hace con uno de los diseños más diferenciales del segmento de los SUVs compactos, así como también con un interior que es la nueva referencia del segmento en términos de conectividad y estilo, o equipamientos de seguridad que también lo despegan del resto.

Una de las preguntas que hice en el adelanto de esta evaluación era si se justifica la diferencia de U$S 13.500 entre un GLB y un GLC, casi a igualdad de equipamientos, pero con la diferencia de la tercera fila de asientos y una mecánica bastante menos potente. La respuesta es ambigua, como casi todo en la vida. Si se busca un habitáculo amplio y modularidad, sí, no hay que dudarlo. El GLB es la compra ideal y no me sorprendería que pasara a ser el nuevo best seller de la gama, porque es uno de esos modelos que "hace todo bien". Por eso cuando lo vi por primera vez en el Salón de Shanghái 2019 titulé: "debería venderse como pan caliente".


Pero si las necesidades de espacio no apremian y la potencia es algo fundamental, el GLC es perfecto para cubrir todas las demandas de un cliente de este rango de precios, y ahora más en sus versiones híbridas enchufables. Sin embargo, es una comparación caprichosa a más no poder también. Son clientes muy distintos y aunque parezca raro de comprender, también lo son aquellos que eligen un GLA por encima del GLB y viceversa. Mercedes-Benz no solo abrió un nuevo sub-segmento. También está creando una nueva necesidad de mercado.

Y en esto han sido pioneros desde siempre. Muchos tal vez no lo recuerden, pero esta marca fue la primera en embarcarse en el segmento de los SUVs premium con el primer Clase ML allá a mediados de los años noventa. Más lejos en el tiempo incluso, utilizó la misma fórmula con los primeros Clase G. Ahora el GLB es otro de esos "adelantados" de la categoría y tal vez por eso aún muchos no logren entender la lógica de su existencia. Sin embargo, en poco tiempo más, cuando la competencia empiece a desarrollar conceptos similares, una vez más se podrá ver que Mercedes-Benz no estaba solo sumando un producto más a su gama. También estaba abriéndole la puerta a un mercado entero.



A favor
  • Calidad de materiales
  • Capacidad del baúl con cinco plazas en uso
  • Conjunto mecánico
  • Diseño
  • Equipamientos de confort y seguridad
  • Equilibrio de suspensiones
  • Habitabilidad para cinco adultos
  • Modularidad interior
  • Prestaciones
  • Posición de manejo
  • Tecnología aplicada a la conducción
En contra
  • Capacidades off-road limitadas
  • Capacidad del baúl con siete plazas en uso
  • Habitabilidad de la 3ª fila de asientos para adultos
  • Sin neumático de auxilio




FICHA TÉCNICA:

MOTORIZACIÓN
Cilindrada (cc) 1.333
Número de cilindros: 4
Número de válvulas: 16
Relación de compresión: 10,6:1
Diámetro x carrera (mm): 72,2 x 81,4
Inyección: directa con turbocompresor e intercooler y sistema de desconexión de cilindros
Potencia máxima (cv/rpm) 163/5.500
Torque máximo (Nm/rpm) 250/1.620
TRANSMISIÓN
Caja de velocidades automática secuencial de siete relaciones 7G-TRONIC
Tracción delantera
DIRECCIÓN
De piñón y cremallera con asistencia eléctrica variable
FRENOS
Delanteros: de discos ventilados y perforados
Traseros: de discos sólidos
EJES - SUSPENSIÓN
Delantera: McPherson independiente
Trasera: eje rígido con elemento torsional
NEUMÁTICOS
Dimensiones: 205/55 R18
Rueda auxiliar: N/D
PRESTACIONES
Velocidad máxima (km/h) 207
Aceleración 0-100 km/h (s) 9,1
Consumo (l/100km) Urbano: 7,4 - Carretera: 5,2 - Mixto: 6,0
DIMENSIONES/PESO
Capacidad del baúl (l) 144/570/640/1.680
Peso en vacío (kg) 1.555
Peso en orden de marcha (kg) N/D
Largo total (mm) 4.634
Ancho total (mm) 1.834
Alto total (mm) 1.658
Distancia entre ejes (mm) 2.829
Capacidad del tanque de combustible (l) 52 (más 6 de reserva)
Despeje al suelo (mm): 200
Capacidades off-road (º): Ángulo de ataque: 18 - Ángulo ventral: 13,9 - Ángulo de salida: 18,3

Galería: Mercedes-Benz GLB 200 Progressive 7G-DCT Créditos: Autoblog y Diego Olivera.
Prueba Mercedes-Benz GLB 200 Progressive 7G-DCT

EQUIPAMIENTO:

EXTERIOR
Llantas de aleación de 18 pulgadas con 5 radios dobles color negro brillante y pulidas a alto brillo
Faro antiniebla trasero LED
Faros delanteros LED High Performance
Grupos ópticos traseros LED para luces de freno
Línea de equipamiento exterior Progressive (parrilla con dos lamas de color plata e insertos cromados, protección estética de bajos delante y detrás en cromo de alto brillo, revestimientos de las puertas de superficie estructurada en negro con elementos de adorno cromados en diseño de estribo, embellecedores visibles de las salidas de escape, listones cromados en la línea de cintura y en la línea de las ventanillas y barras longitudinales para el techo de aluminio)
Luces diurnas LED
SEGURIDAD
Airbags frontales, laterales delanteros, de cortinas, y de rodillas para conductor
Apoyacabezas delanteros y traseros (7)
Cinturones de seguridad inerciales de tres puntos (7)
COLLISION PREVENTION ASSIST PLUS advertencia de colisión incluyendo servofreno de emergencia adaptativo y frenado parcial autónomo para evitar una colisión o mitigar sus consecuencias
Control de estabilidad (ESP)
Control de tracción (ASR)
Fijaciones i-Size y TopTether para sillas infantiles en la segunda y tercera fila de asientos
Frenos ABS
Monitoreo de presión de los neumáticos
Servofreno de emergencia (BAS) con detección automática de situaciones de frenado de emergencia, y asistencia para aplicar la fuerza máxima de frenado
Sistema de alerta por cansancio ATTENTION ASSIST
Sistema de regulación electrónica de los frenos ADAPTIVE BRAKE con ayuda al arranque en pendientes
CONFORT
Asientos delanteros con regulación en altura y lumbar manuales
Cámara de retroceso
Cierre centralizado de puertas con mando a distancia
Climatización automática THERMATIC de una zona
Computadora de a bordo
Conexión automática de las luces de cruce con luz de marcha automática
Cuadro de instrumentos digital con pantalla a color de 10,25 pulgadas
Dirección con servoasistencia variable en función de la velocidad
Espejos retrovisores externos eléctricos, plegables y calefaccionados
Función de parada y arranque ECO
Freno de estacionamiento electro-mecánico con función "HOLD"
Función de arranque KEYLESS-GO
Interfaz USB-C en el compartimento multiuso y en la consola central de la parte trasera
Interruptor DYNAMIC SELECT con selección de cuatro programas de conducción (Confort, Sport, Eco, Individual)
Levantavidrios eléctricos delanteros y traseros con sistema de un toque
Línea de equipamiento interior Progressive (asientos de confort con paquete de confort para los asientos incluido con ajuste de la inclinación y de la profundidad de la banqueta del asiento, redes portaobjetos en los respaldos de los asientos delanteros, volante deportivo multifunción en cuero con costuras de adorno negras y embellecedor cromado de 2 piezas, difusores de aire de color negro con aro exterior cromado, red portaobjetos en el espacio reposapiés del acompañante, techo interior de tela color negro, portavasos doble y llave del vehículo con marco de adorno cromado)
Limpiaparabrisas con sensor de lluvia
Paquete de estacionamiento con ayuda activa para aparcar PARKTRONIC
paquete de retrovisores con sistema antideslumbramiento automático y retrovisores exteriores abatibles eléctricamente a ambos lados
Portón trasero EASY-PACK con accionamiento eléctrico para apertura y cierre manos libres (Hands Free-Access)
Respaldos traseros de la segunda fila de asientos abatibles y reclinables 40:20:40 con desplazamiento longitudinal de los asientos de la segunda fila con ayuda para la entrada y salida en el vehículo EASY-ENTRY
Respaldos traseros de la tercera fila de asientos abatibles 50:50
Sistema multimedia MBUX con AM/FM/4USB/Bluetooth con pantalla táctil de 10,25 pulgadas, integración de smartphones mediante Apple CarPlay y Android Auto, panel táctil con haptic feedback, y sistema LINGUATRONIC con comprensión del habla
Sistema de mantenimiento activo ASSYST
Sistema TEMPOMAT con SPEEDTRONIC (control de velocidad crucero con limitador de velocidad)
Tapizados mixtos en símil de cuero ARTICO
Techo solar eléctrico panorámico
Volante multifunción deportivo en cuero de tres radios regulable en altura y profundidad con levas de cambio

PRECIO Y GARANTÍA:

U$S 69.990. Garantía: 2 años sin límite de kilometraje

COMERCIALIZA:

Autolider S.A. Rambla Baltasar Brum 2986. Tel. 22094444. Web: www.mercedes-benz.com.uy