Probamos al Nissan Versa en sus dos versiones más equipadas, las Advance M/T y Exclusive CVT (foto). |
Tras su llegada en diciembre pasado, llegó el turno de evaluar a la nueva generación del Nissan Versa en sus versiones Advance con caja manual y Exclusive con transmisión automática CVT, ambos equipados con el mismo impulsor, un 1.6 litros de 118 cv de potencia. Prueba doble, a continuación.
Al ser la segunda vez que pruebo al Nissan Versa (ver prueba), no voy a aburrirlos con la historia completa y detallada de un modelo que comenzó hace ya nueve años atrás con la primera generación del modelo, con la tarea de reemplazar al Tiida Sedán (ver prueba). A finales de 2011 ese producto llegó a Uruguay (ver lanzamiento) en cuatro versiones, dos manuales y dos automáticas, nucleadas en dos niveles de equipo, Sense y Advance. Y fue todo un éxito de ventas como bien sabrán.
Pero la segunda generación (o tercera si llamamos al Tiida Sedán como Versa, que es como lo denominaban en otros mercados) no apareció hasta 2019. Este producto se denomina internamente como N18 y fue presentado en el Salón de Nueva York de 2019 (ver nota) para los mercados de los Estados Unidos y Canadá, donde está entre los productos más accesibles de aquellos países norteamericanos.
Este nuevo Versa mantiene la misma plataforma de su antecesor, denominada V, y en diciembre de 2019 llegó a nuestras costas importado desde la planta mexicana de Aguascalientes en dos versiones, equipadas en todos los casos con una mecánica 1.6 litros de 118 cv de potencia, asociada a una transmisión manual de cinco marchas (Advance) o automática X-Tronic CVT (Exclusive). Lo hizo con precios de preventa de U$S 21.990 y U$S 23.990 respectivamente, que una vez comercializadas las 70 unidades promocionales, pasarían a U$S 22.490 y U$S 24.490 (ver lanzamiento) y en enero de 2020 a U$S 22.990 y U$S 25.490.
En enero de 2020, Nissan Uruguay le sumó a la gama a un nivel más, denominado Sense, que se comercializa por U$S 20.990 (ver lanzamiento). Pese a esto, el Versa anterior seguirá ofreciéndose en variantes Drive con caja manual y automática (ver lanzamiento) como la opción más accesible, y se prevé que en algunos meses más, pase a denominarse V-Drive como ya lo hace en México (ver nota). Pero antes de que esto suceda, Autoblog salió a probar al nuevo modelo en sus versiones intermedia y tope de gama en una evaluación de más de 2.000 km recorridos, sumando los kilómetros manejados con ambas unidades. Y el análisis completo de este test doble se transcribe a continuación.
Exterior
Si hay dos cosas por las que el Versa anterior es famoso es por su espacio interior y su controversial diseño exterior. Existe gente a la que le gustaba el estilo del auto, pero jamás conocí a alguien así y dudo que alguien lo calificara de atractivo. Con el pasar de los años, e incluso con un facelift de por medio, más que no gustar, la vista de muchos se fue acostumbrando al diseño sin que nos importara mucho seguir criticándolo y me incluyo en esa lista.
Pero una vez que apareció el nuevo Versa, ahí es cuando más cuesta sostener que el modelo anterior podía llegar a parecerle atractivo a alguien. Nissan dio un giro completo en términos de estilo y ahora este sedán está entre los más agraciados, elegantes y mejor logrados del segmento. Tanto, que encontré durante los días de prueba a más de un usuario de Sentra (ver prueba) en los estacionamientos mirándolo con cariño y preguntándome por el auto. Ahora el diseño de este Nissan es uno de los aciertos más grandes de este segmento.
Yendo con las unidades de prueba, aunque luzcan similares, como dice el dicho popular, "el diablo está en los detalles". Por ejemplo, vistos de frente los Advance y Sense se diferencian del Exclusive por tener una parrilla con un logotipo en tres dimensiones, mientras que en el tope de gama es liso porque por detrás oculta los sensores del sistema de frenado inteligente de emergencia (IEB) junto a la cámara de estacionamiento delantera. También son diferentes las ópticas: en el Advance y Sense, son halógenas con un funcionamiento solo correcto, mientras que en el Exclusive son LED, de excelente poder lumínico durante la noche.
En el perfil las diferencias se limitan a las llantas y neumáticos. En el Sense, utiliza llantas de acero estampado sobre tazas plásticas de 15 pulgadas sobre neumáticos en medida 195/65 R15. El Advance, en tanto, pasa a tener llantas de aleación de 16 pulgadas sobre neumáticos Continental PremiumContact 6 en medida 205/55 R16 y el Exclusive, llantas de aleación diamantadas de 17 pulgadas sobre neumáticos Continental ContiPremiumContact 2 E medida 205/50 R17. En ambos casos el diseño es -casi- el mismo, solo que hay una ligera diferencia de tamaño y acabado de la llanta.
Ya en el sector posterior, las diferencias son mínimas entre los Sense, Advance y Exclusive. Salvo por la presencia de la cámara de retroceso (Advance y Exclusive), todos los Versa se ven idénticos desde este ángulo, porque incluso son de serie en las tres versiones los sensores de estacionamiento traseros. Un detalle del remate posterior es que Nissan está empezando a usar en todos sus sedanes el mismo lenguaje de diseño, con un falso techo flotante, que se aprecia mejor en las unidades con colores claros, no como en estos que son Azul Cobalto (Advance) y Gris Oxford (Exclusive).
En comparación con la generación que reemplaza (cifras entre paréntesis), el nuevo Versa mide 4.495 mm de largo (4.492 mm), 1.739 mm de ancho (1.695 mm), 1.455 mm de alto (1.506 mm) y tiene una distancia entre ejes de 2.618 milímetros (2.600 mm). Esa reducción en la batalla, como veremos más adelante, mejora la estética exterior, pero en contrapartida, reduce la habitabilidad trasera en comparación a la generación que se reemplaza. Pero falta un poco para llegar a esa parte, paciencia.
Interior
Al igual que por fuera, en este sector no queda nada del Versa anterior. Es más, ahora quedó más emparentado con el Kicks (ver prueba) que con la generación previa, porque la disposición de los elementos e incluso algunas piezas (muchísimas) son compartidas con el SUV que hace dos años que lidera el segmento en nuestro mercado. También es grande el salto de calidad percibida entre este Versa y el que se reemplaza. Ya no parece un auto low-cost, ahora tiene un nivel bastante superior.
Al igual que en el Kicks hay plásticos rígidos de buena calidad, otros blandos y texturados que simulan ser cuero (solo en esta versión Exclusive, los Advance llevan un plástico rígido símil cuero con costuras) así como unos asientos delanteros que según la información de prensa se llaman "Zero Gravity" y (cito) "proveen un mejor soporte a las áreas del tórax y la pelvis para un aumento en la comodidad, reducción en la fatiga y mayor seguridad." Todo eso para decir que son muy cómodos (que lo son, no se discute).
Habladurías aparte, son butacas muy mullidas que permiten estar sentado varias horas sin cansancio, aunque el asiento podría tener unos centímetros extra para apoyar mejor los muslos. La posición de manejo cuenta en ambas versiones con un volante que se deja regular en altura y profundidad con recorridos correctos (aunque no abundantes), mientras que la butaca está ubicada algo alta incluso en la posición más baja del asiento. Más allá de eso, como dije, se logra una postura bastante cómoda y a gusto para cualquier contextura física.
En el Sense, el tablero es bien clásico, con dos relojes para velocímetro y tacómetro, además del medidor de nivel de combustible que es digital y se puede ver en un un display monocromo de buena resolución. Pero en los Advance y Exclusive, Nissan se despacha con un display de siete pulgadas configurable a color, dejando solo el velocímetro con aguja y pasando al resto de los instrumentos a formato digital. A su vez, el tope de gama, al tener navegador integrado, suma estas funciones al instrumental junto a una brújula, así como también las asistencias a la seguridad, que veremos más adelante.
Al centro de la consola en los Advance y Exclusive está la pantalla táctil de siete pulgadas con AM/FM/MP3/Aux-In/USB/iPod/Bluetooth/Android Auto/Apple CarPlay y comandos por voz. La interfaz es fácil de usar, pero algo lenta en la respuesta y con una resolución (muy) mejorable en las cámaras de 360º, que dicho sea de paso, son muy útiles para estacionar en la versión Exclusive.
También en esta variante, como dije antes, incorpora el navegador integrado con un mapeado bastante bueno de nuestro territorio y muchas funciones para configurar a gusto. En lo personal, prefiero usar Waze con CarPlay, es más práctico. El Sense, por su parte, lleva una radio con AM/FM/Aux-In/Bluetooth/iPod/3USB y audio streaming.
El Versa anterior gozaba de las mejores plazas traseras del segmento al tener un techo bastante elevado y un respaldo posterior bien inclinado, que permitía viajar muy cómodo. Esta nueva generación resignó algo de comodidad en pos de mejorar el diseño exterior, pero no por ello pasa a ser un producto limitado en este aspecto.
Dos adultos de 1,80 m podrán ir con bastante comodidad en todas las cotas, ya que el espacio para la cabeza, hombros y piernas es generoso, pero ya no tanto como antes. En el caso de tener que llevar tres adultos atrás, el respaldo y asiento central tiene más relieve que los laterales y es angosto en su ancho, mientras que el falso túnel de transmisión no robará tanto espacio como en otros rivales porque es bastante plano.
Pasando al baúl, Nissan declara una capacidad de 424 litros para esta segunda generación, siendo 43 menos que antes. Si bien no llega a ese número mágico de los 500 litros que muchos rivales sacan cartel, de todas formas el volumen da más que bien para las intenciones de un padre de familia y su troupe.
En caso de precisar más espacio, se pueden rebatir los respaldos traseros en proporción 60:40 para las versiones Advance y Exclusive, aunque la marca no dice cuál es la capacidad que se consigue así. El Sense tiene posibilidad de rebatirlo, pero de forma enteriza. Más allá de esto, el volumen es muy generoso en comparación con varios rivales.
Por debajo de una alfombra -de calidad bastante mejorable-, se esconde el auxilio, que en los Versa anteriores era uno en medida 185/65 R15 con llanta de chapa. Ahora se pasó al lado oscuro al usar una de esas "tipo galleta", es decir, un neumático Maxxis T125/70 D15.
Recordemos que el Advance lleva unos 205/55 R16 y el Exclusive 205/50 R17, mientras que el Sense 195/65 R15. Por lo que no queda ni cerca a las dimensiones de las titulares para ninguna de las tres versiones del Versa. Es una pena que Nissan haya decidido sumarse a esa tendencia de los neumáticos de dimensiones reducidas. Con el de 185/65 R15 zafaba bien.
Motor y transmisiones
Aunque la mecánica es la conocida de la generación anterior, el Nissan Versa tuvo algunas mejoras en términos de tecnología aplicada, compartiendo ahora la configuración ya vista en los Kicks (ver prueba), Note (ver prueba) o también Renault Grand Captur 1.6 (ver contacto) o Stepway (ver contacto). En todos estos productos, a diferencia del Versa anterior o del March (ver prueba), se incorpora un sistema variable de válvulas (CVTCS).
En la segunda generación del Versa, el conocido HR16DE de 1.6 litros (1.598 cc), con doble árbol de levas a la cabeza, 16 válvulas, e inyección multipunto, produce una potencia de 118 cv a las 6.000 rpm, y un torque máximo de 154 Nm a las 4.400 vueltas. Va asociado a una transmisión manual de cinco relaciones como es el caso de los niveles Sense y el Advance evaluado, o una una automática X-Tronic CVT con simulación de seis marchas prefijadas, que Nissan denomina D-StepLogic Control.
Como pasa en los otros Renault y Nissan que lo montan, en líneas generales se trata de un propulsor correcto (solo eso) y progresivo, sin mucha agilidad en el bajo régimen (menos de 2.000 vueltas), pero bastante enérgico en la zona media y alta del tacómetro (3.500-4.500 rpm). Además es un impulsor silencioso tanto en ralentí como por debajo de las 5.000 vueltas, ya que cuenta con un buen trabajo de insonorización al habitáculo.
Pero a diferencia de los dos Renault mencionados, en el Versa se muestra con una agilidad mayor que en aquellos, en especial ante las recuperaciones de velocidad como veremos más adelante en el informe. Tal vez la respuesta a esto corresponde a la diferencia de pesos y sobre todo, de aerodinámica, a favor del modelo de Nissan. Esto también es aplicable al Kicks, modelo frente al que estos dos Versa, manifiesta una respuesta apenas más aletargada, aunque más vívida que en los productos de Renault que utilizan este impulsor.
Volviendo a los dos Versa evaluados, el nivel Advance utiliza una transmisión manual de cinco relaciones (ya hay varios rivales con seis...), mientras que el Exclusive lleva una CVT con simulación de seis marchas prefijadas como dije más arriba. Comenzando el análisis por la versión manual, presenta un tacto de caja bastante agradable, sin imprecisiones, aunque con un recorrido algo largo, que como veremos más adelante, prioriza los consumos.
Pasando a la CVT presente en el Exclusive, lleva una función que simula el cambio de marchas (y que en Nissan se llama D-StepLogic), para evitar el efecto conocido de las CVT: al acelerar a fondo, el tacómetro no se clava en el régimen más elevado, sino que va variando hasta que se alcanza la velocidad deseada, igual que en una caja con convertidor de par tradicional y en el caso de este Versa, simulando hasta seis marchas virtuales. Aunque en el pasado estas transmisiones tuvieron casos de roturas y una confiabilidad cuestionable, Nissan dice haber solucionado estos problemas en el nuevo Versa al igual que en los Kicks y Note.
Aunque no tiene levas en el volante (ni tampoco las precisa, hay que decirlo), se las puede pasar desde el selector en el modo "L" (por "low") aumenta la acción freno/motor, y un botón para conectar o desconectar la función "Sport" que eleva el régimen del motor 2.000 rpm más que cuando lo llevamos desactivado. Le otorga cierta agilidad al vehículo porque hace trabajar al impulsor a niveles más altos, pero al final del día es más ruido que nueces. Por el resto, es la misma transmisión de siempre en cuanto a funciones.
Pasando a la CVT presente en el Exclusive, lleva una función que simula el cambio de marchas (y que en Nissan se llama D-StepLogic), para evitar el efecto conocido de las CVT: al acelerar a fondo, el tacómetro no se clava en el régimen más elevado, sino que va variando hasta que se alcanza la velocidad deseada, igual que en una caja con convertidor de par tradicional y en el caso de este Versa, simulando hasta seis marchas virtuales. Aunque en el pasado estas transmisiones tuvieron casos de roturas y una confiabilidad cuestionable, Nissan dice haber solucionado estos problemas en el nuevo Versa al igual que en los Kicks y Note.
Aunque no tiene levas en el volante (ni tampoco las precisa, hay que decirlo), se las puede pasar desde el selector en el modo "L" (por "low") aumenta la acción freno/motor, y un botón para conectar o desconectar la función "Sport" que eleva el régimen del motor 2.000 rpm más que cuando lo llevamos desactivado. Le otorga cierta agilidad al vehículo porque hace trabajar al impulsor a niveles más altos, pero al final del día es más ruido que nueces. Por el resto, es la misma transmisión de siempre en cuanto a funciones.
Pasando a las prestaciones fábrica no declara velocidad final o aceleración de 0-100 km/h, aunque sí los siguientes consumos que en el Advance manual es: 6,0 l/100 km en ciudad, 4,2 l/100 km en ruta, y 5,2 litros cada 100 km en ciclo mixto. Pero en las mediciones de prueba, como pasa siempre, conseguí unos números bastante diferentes a los que Nissan muestra, aunque excelentes: 7,3 l/100 km en ciudad, 4,8 l/100 km en ruta, y 6,0 litros cada 100 km en ciclo combinado.
Yendo al Exclusive CVT, en tanto, fábrica tampoco declara velocidad final o aceleración de 0-100 km/h, aunque de consumos, que son los siguientes: 5,4 l/100 km en ciudad, 4,0 l/100 km en ruta, y 4,8 litros cada 100 km en ciclo mixto. Pero en las mediciones de prueba, al igual que en el Versa manual, obtuve números diferentes a los que Nissan muestra, pero igual de buenos que en el automático: 7,2 l/100 km en ciudad, 4,5 l/100 km en ruta, y 5,8 litros cada 100 km en ciclo combinado.
Yendo al Exclusive CVT, en tanto, fábrica tampoco declara velocidad final o aceleración de 0-100 km/h, aunque de consumos, que son los siguientes: 5,4 l/100 km en ciudad, 4,0 l/100 km en ruta, y 4,8 litros cada 100 km en ciclo mixto. Pero en las mediciones de prueba, al igual que en el Versa manual, obtuve números diferentes a los que Nissan muestra, pero igual de buenos que en el automático: 7,2 l/100 km en ciudad, 4,5 l/100 km en ruta, y 5,8 litros cada 100 km en ciclo combinado.
El depósito de combustible cuenta con 41 litros, siendo el más chico del segmento. Es una lástima ya que si bien los consumos son bastante buenos (en especial en ruta), esta capacidad limita bastante la autonomía, es decir, en viajes largos se tendrá que parar más veces a llenarlo. Unos ocho o diez litros extra sería el combo ideal. El peso en orden de marcha, en tanto, es de 1.109 kg para la versión manual y 1.139 kg en el caso de la automática.
Comportamiento dinámico
Sabiendo que los cimientos del Versa se siguen sosteniendo sobre la plataforma "V" de Nissan, muchos podrían suponer de antemano que la receta es la misma que antes, pero estarían equivocándose. Este sedán tiene unas suspensiones que tienden más hacia lo firme (algo extraño en un producto familiar) que en su antecesor, aunque no por ello perjudican el confort de marcha, si no todo lo contrario, también es un vehículo con un andar bastante cómodo y refinado.
Lo único que puede llegar a transmitir cierta dureza en el andar son los neumáticos de 17 pulgadas de la versión Exclusive, que ante algún pozo o vía de tren, dejan pasar algunas sequedades al habitáculo, pero son situaciones muy puntuales, aunque debo reconocer que son bastante molestas. En la versión Advance con llantas de 16 pulgadas, esto no sucede de forma tan marcada y es un producto notoriamente más cómodo que el automático.
Por el resto, este Nissan se siente más cómodo y aplomado que en la generación anterior, con poco balanceo de la carrocería tanto frontal como trasero cuando frenamos o aceleramos, algo de lo que sufren muchos sedanes de este segmento.
Esa sensación de ir sentado en el barco vikingo de un parque de diversiones cuando se toma una curva con entusiasmo, acá no está y se eliminó respecto al Versa anterior, un modelo con un seteo más blando y menos refinado de suspensiones.
Para el uso urbano sigue siendo un producto ágil y fácil de llevar, no solo por el chasis si no también por la dirección que es amigable a baja velocidad, siendo muy dócil. Cuando aumenta la velocidad se torna más firme, rápida y directa, pero con el mismo grado de comunicación de las ruedas hacia el volante que una intérprete de señas atada de manos.
No se preocupen, para el uso normal esto no importa. Tampoco voy a pedir que se comporte como un BAC Mono cuando doblemos fuerte. Es un sedán familiar clásico, y en eso este nuevo Versa, cumple más que bien estando entre los mejores del segmento. El esquema de suspensiones es simple como un pan con manteca: adelante lleva un sistema McPherson, y atrás usa una económica barra de torsión. Y solo con eso logra dar una gran sensación de solidez y aplomo, casi como si de un sedán de segmento C se tratase.
Por su parte el motor 1.6 trabaja casi que en silencio en el tránsito, y la caja de cambios lo lleva a regímenes bajos con el fin de otorgar números de consumo contenidos. Tal es así que a unos 70 km/h, el mil seis gira a apenas 1.400 rpm, que si activamos el modo "Sport" el impulsor trabajará a esa velocidad a unas elevadas 3.100 vueltas en la variante CVT.
En el Versa manual, en tanto, a igual velocidad, va en quinta a 1.800 vueltas. Yendo a velocidades de ruta, en el CVT se viaja a 110 km/h a 2.100 vueltas y 3.800 en modo "Sport", mientras que el manual trabaja en quinta a 3.100 rpm. Una sexta relación a la versión manual no le vendría nada mal, porque ya se puede ver que en los consumos, la caja automática tiene unas cifras apenas más reducidas, producto de que hace trabajar menos exigido al impulsor.
Ya en la ruta el nuevo Versa y sus suspensiones entregan comodidad, mientras que el impulsor apenas se siente en los regímenes normales, solo haciéndose notar cuando las transmisiones lo obligan a trabajar por encima de las 5.000 vueltas en los adelantamientos. Acá es donde la CVT se siente menos a gusto producto de la lentitud de reacciones de la caja más que por cualquier otra cosa, ya que este sedán pesa poco y la potencia del motor es la adecuada. Tampoco le sobra torque, pero cumple bien para los parámetros del segmento al tener una buena relación peso/potencia.
Es decir, adelantar vehículos no será problema. Solo basta hundir con ganas el pie derecho al acelerador y dejar que la transmisión haga lo suyo en el automático o jugar uno mismo con las marchas si estamos en la versión manual. Por ejemplo, vayamos a ver los números fríos y duros. El Versa Advance va de 80 a 110 km/h en 5,40 segundos en 3ª, 7,03 segundos en 4ª y 10,00 segundos en 5ª, en tanto que el CVT cumple la misma recuperación en D en 6,04 segundos. Es decir, casi los mismos tiempos que el manual.
Sin embargo lo que nunca esperé del Versa es que pudiera ser un vehículo "entretenido" para salir a buscarle los límites en curvas siendo un sedán chico sacado de la primera página del manual. El grado de confianza y estabilidad que transmite dejará boquiabierto a más de uno (a mi, sin ir más lejos) y se lo percibe muy superior y refinado frente a su antecesor, pese a utilizar casi la misma receta dinámica. Poniéndose quisquillosos, por llevar un simple eje rígido trasero lo vemos hacer algunas acrobacias con las ruedas posteriores cuando se lo exige. Pero nada que escape a lo visto en sus rivales de segmento.
Pero pese a eso, así como también la inclinación natural de una suspensión que tiende hacia el confort sin abandonar una firmeza muy agradable, se lo percibe muy estable para corregir en lo rápido porque sus reacciones son bastante predecibles. Pero tiene un par de trucos bajo la manga para lograr esto. Como veremos en el apartado de seguridad, tener un arsenal de asistencias de conducción de serie que le ayudan mucho a sacar tanto provecho a este chasis a nivel dinámico y que en este apartado pega un salto enorme frente al Versa anterior e incluso frente a todos sus rivales directos.
Equipamientos
El Versa Advance cuenta de serie con: pack eléctrico (cuatro levantavidrios, espejos, y bloqueo), aire acondicionado manual, asiento del conductor regulable en altura, tapizados en tela, volante multifunción regulable en altura y profundidad, pantalla táctil de siete pulgadas con AM/FM/MP3/Aux-In/Bluetooth/iPod/3USB/Android Auto/CarPlay, comandos por voz, y audio streaming, cuatro parlantes, respaldo trasero rebatible 60:40, botón de encendido/apagado del motor, llave inteligente iKey, dirección eléctrica, computadora de a bordo con pantalla a color de siete pulgadas, control de velocidad crucero, apertura interna del baúl y del depósito de combustible, cámara de retroceso, sensores de estacionamiento traseros, faros antiniebla delanteros, encendido automático de luces, y llantas de aleación de 16 pulgadas sobre neumáticos en medida 205/55 R16.
El Exclusive suma o reemplaza sobre el Advance: volante multifunción en cuero regulable en altura y profundidad, pantalla táctil de siete pulgadas con AM/FM/MP3/Aux-In/Bluetooth/iPod/USB/GPS/Android Auto/CarPlay, comandos por voz, y audio streaming, seis parlantes, tapizados en cuero, faros delanteros LED con luces diurnas LED, climatizador automático de una zona, computadora de a bordo con pantalla a color de siete pulgadas y brújula integrada, modo de manejo Sport, y llantas de aleación diamantadas de 17 pulgadas sobre neumáticos en medida 205/50 R17.
En ambos casos es una dotación bastante correcta por el precio de estas versiones. Sin embargo, aparecen algunos faltantes en ambas si los enfrentamos con algunos rivales. Por ejemplo, el Advance podría tener sistema "un toque" en todas las ventanillas, bloqueo central automático en rodaje, volante en cuero, o navegador integrado. En el Exclusive, en tanto, carece de techo solar eléctrico, espejo interno con anti-encandilamiento automático, climatizador de dos zonas o sensores de estacionamiento delanteros.
Comportamiento dinámico
Sabiendo que los cimientos del Versa se siguen sosteniendo sobre la plataforma "V" de Nissan, muchos podrían suponer de antemano que la receta es la misma que antes, pero estarían equivocándose. Este sedán tiene unas suspensiones que tienden más hacia lo firme (algo extraño en un producto familiar) que en su antecesor, aunque no por ello perjudican el confort de marcha, si no todo lo contrario, también es un vehículo con un andar bastante cómodo y refinado.
Lo único que puede llegar a transmitir cierta dureza en el andar son los neumáticos de 17 pulgadas de la versión Exclusive, que ante algún pozo o vía de tren, dejan pasar algunas sequedades al habitáculo, pero son situaciones muy puntuales, aunque debo reconocer que son bastante molestas. En la versión Advance con llantas de 16 pulgadas, esto no sucede de forma tan marcada y es un producto notoriamente más cómodo que el automático.
Por el resto, este Nissan se siente más cómodo y aplomado que en la generación anterior, con poco balanceo de la carrocería tanto frontal como trasero cuando frenamos o aceleramos, algo de lo que sufren muchos sedanes de este segmento.
Esa sensación de ir sentado en el barco vikingo de un parque de diversiones cuando se toma una curva con entusiasmo, acá no está y se eliminó respecto al Versa anterior, un modelo con un seteo más blando y menos refinado de suspensiones.
Para el uso urbano sigue siendo un producto ágil y fácil de llevar, no solo por el chasis si no también por la dirección que es amigable a baja velocidad, siendo muy dócil. Cuando aumenta la velocidad se torna más firme, rápida y directa, pero con el mismo grado de comunicación de las ruedas hacia el volante que una intérprete de señas atada de manos.
No se preocupen, para el uso normal esto no importa. Tampoco voy a pedir que se comporte como un BAC Mono cuando doblemos fuerte. Es un sedán familiar clásico, y en eso este nuevo Versa, cumple más que bien estando entre los mejores del segmento. El esquema de suspensiones es simple como un pan con manteca: adelante lleva un sistema McPherson, y atrás usa una económica barra de torsión. Y solo con eso logra dar una gran sensación de solidez y aplomo, casi como si de un sedán de segmento C se tratase.
Por su parte el motor 1.6 trabaja casi que en silencio en el tránsito, y la caja de cambios lo lleva a regímenes bajos con el fin de otorgar números de consumo contenidos. Tal es así que a unos 70 km/h, el mil seis gira a apenas 1.400 rpm, que si activamos el modo "Sport" el impulsor trabajará a esa velocidad a unas elevadas 3.100 vueltas en la variante CVT.
En el Versa manual, en tanto, a igual velocidad, va en quinta a 1.800 vueltas. Yendo a velocidades de ruta, en el CVT se viaja a 110 km/h a 2.100 vueltas y 3.800 en modo "Sport", mientras que el manual trabaja en quinta a 3.100 rpm. Una sexta relación a la versión manual no le vendría nada mal, porque ya se puede ver que en los consumos, la caja automática tiene unas cifras apenas más reducidas, producto de que hace trabajar menos exigido al impulsor.
Ya en la ruta el nuevo Versa y sus suspensiones entregan comodidad, mientras que el impulsor apenas se siente en los regímenes normales, solo haciéndose notar cuando las transmisiones lo obligan a trabajar por encima de las 5.000 vueltas en los adelantamientos. Acá es donde la CVT se siente menos a gusto producto de la lentitud de reacciones de la caja más que por cualquier otra cosa, ya que este sedán pesa poco y la potencia del motor es la adecuada. Tampoco le sobra torque, pero cumple bien para los parámetros del segmento al tener una buena relación peso/potencia.
Es decir, adelantar vehículos no será problema. Solo basta hundir con ganas el pie derecho al acelerador y dejar que la transmisión haga lo suyo en el automático o jugar uno mismo con las marchas si estamos en la versión manual. Por ejemplo, vayamos a ver los números fríos y duros. El Versa Advance va de 80 a 110 km/h en 5,40 segundos en 3ª, 7,03 segundos en 4ª y 10,00 segundos en 5ª, en tanto que el CVT cumple la misma recuperación en D en 6,04 segundos. Es decir, casi los mismos tiempos que el manual.
Sin embargo lo que nunca esperé del Versa es que pudiera ser un vehículo "entretenido" para salir a buscarle los límites en curvas siendo un sedán chico sacado de la primera página del manual. El grado de confianza y estabilidad que transmite dejará boquiabierto a más de uno (a mi, sin ir más lejos) y se lo percibe muy superior y refinado frente a su antecesor, pese a utilizar casi la misma receta dinámica. Poniéndose quisquillosos, por llevar un simple eje rígido trasero lo vemos hacer algunas acrobacias con las ruedas posteriores cuando se lo exige. Pero nada que escape a lo visto en sus rivales de segmento.
Pero pese a eso, así como también la inclinación natural de una suspensión que tiende hacia el confort sin abandonar una firmeza muy agradable, se lo percibe muy estable para corregir en lo rápido porque sus reacciones son bastante predecibles. Pero tiene un par de trucos bajo la manga para lograr esto. Como veremos en el apartado de seguridad, tener un arsenal de asistencias de conducción de serie que le ayudan mucho a sacar tanto provecho a este chasis a nivel dinámico y que en este apartado pega un salto enorme frente al Versa anterior e incluso frente a todos sus rivales directos.
Equipamientos
El Versa Advance cuenta de serie con: pack eléctrico (cuatro levantavidrios, espejos, y bloqueo), aire acondicionado manual, asiento del conductor regulable en altura, tapizados en tela, volante multifunción regulable en altura y profundidad, pantalla táctil de siete pulgadas con AM/FM/MP3/Aux-In/Bluetooth/iPod/3USB/Android Auto/CarPlay, comandos por voz, y audio streaming, cuatro parlantes, respaldo trasero rebatible 60:40, botón de encendido/apagado del motor, llave inteligente iKey, dirección eléctrica, computadora de a bordo con pantalla a color de siete pulgadas, control de velocidad crucero, apertura interna del baúl y del depósito de combustible, cámara de retroceso, sensores de estacionamiento traseros, faros antiniebla delanteros, encendido automático de luces, y llantas de aleación de 16 pulgadas sobre neumáticos en medida 205/55 R16.
El Exclusive suma o reemplaza sobre el Advance: volante multifunción en cuero regulable en altura y profundidad, pantalla táctil de siete pulgadas con AM/FM/MP3/Aux-In/Bluetooth/iPod/USB/GPS/Android Auto/CarPlay, comandos por voz, y audio streaming, seis parlantes, tapizados en cuero, faros delanteros LED con luces diurnas LED, climatizador automático de una zona, computadora de a bordo con pantalla a color de siete pulgadas y brújula integrada, modo de manejo Sport, y llantas de aleación diamantadas de 17 pulgadas sobre neumáticos en medida 205/50 R17.
En ambos casos es una dotación bastante correcta por el precio de estas versiones. Sin embargo, aparecen algunos faltantes en ambas si los enfrentamos con algunos rivales. Por ejemplo, el Advance podría tener sistema "un toque" en todas las ventanillas, bloqueo central automático en rodaje, volante en cuero, o navegador integrado. En el Exclusive, en tanto, carece de techo solar eléctrico, espejo interno con anti-encandilamiento automático, climatizador de dos zonas o sensores de estacionamiento delanteros.
Seguridad
Este apartado es en donde Nissan pega el salto más grande. No solo frente al Versa anterior, que siempre ofreció lo mínimo requerido por las normativas vigentes. Sino también lo hace en comparación a sus rivales directos, que quedan bastante relegados, en especial si miramos a la versión Exclusive, aunque ya desde el Sense la dotación es muy buena y superior a productos de igual o precio superior, siendo que es el más accesible de los tres niveles disponibles.
Todos los Versa traen de serie: seis airbags, frenos ABS+EBD+BA, control dinámico del vehículo (VDC), control de tracción (TCS), asistente de arranque en pendientes (HSA), cinco cinturones inerciales de tres puntas, cinco apoyacabezas, anclajes ISOFIX y TopTether para sillas infantiles. Ya a partir del nivel Advance, se suma alerta de olvido en asiento trasero (RDA), mientras que el Exclusive agrega a esto: frenado inteligente de emergencia (IEB), alerta de tráfico cruzado (RCTA), alerta de punto ciego (BSW), y monitor inteligente de visión periférica (IAVM) con cámaras 360º.
Todos los Versa traen de serie: seis airbags, frenos ABS+EBD+BA, control dinámico del vehículo (VDC), control de tracción (TCS), asistente de arranque en pendientes (HSA), cinco cinturones inerciales de tres puntas, cinco apoyacabezas, anclajes ISOFIX y TopTether para sillas infantiles. Ya a partir del nivel Advance, se suma alerta de olvido en asiento trasero (RDA), mientras que el Exclusive agrega a esto: frenado inteligente de emergencia (IEB), alerta de tráfico cruzado (RCTA), alerta de punto ciego (BSW), y monitor inteligente de visión periférica (IAVM) con cámaras 360º.
Por los U$S 25.490 que cuesta el nivel Exclusive, este sedán es el vehículo con frenado autónomo más accesible del mercado uruguayo. No es un dato menor. A su vez, a U$S 20.990, el Sense tiene una de las mejores relaciones precio/seguridad del segmento B, y es de los pocos modelos del segmento en tener seis airbags y controles de tracción/estabilidad en toda la gama. Es ejemplar lo de Nissan y un salto abismal en comparación con la generación previa del modelo, sumando ahora las tecnologías que la marca engloba en su concepto Nissan Intelligent Mobility.
Sin ir más lejos, la dotación del Versa Exclusive casi iguala a la de un Leaf Tekna (ver prueba) o un Qashqai Exclusive (ver lanzamiento), ambos modelos de Nissan que cuestan casi el doble. En el caso de las asistencias a la seguridad, trabajan de forma impecable y jamás tuvo lo que a veces se da como un "falso-positivo" en la detección de peligros inminentes. Es bastante menos intrusivo en sus tecnologías que otros productos con soluciones similares. El Versa puede determinar el riesgo de colisión a velocidades superiores a 5 km/h. Si calcula un riesgo inminente de colisión, alerta al conductor y prepara los frenos para aplicar una máxima fuerza de frenado, a velocidades por debajo de 80 km/h.
Si el conductor no reacciona, se activa el frenado autónomo de emergencia (IEB), que puede reducir la velocidad del vehículo hasta los 40 km/h, e incluso detenerlo a cero para evitar un impacto. Cabe destacar que en nuestra región no detecta peatones, animales ni obstáculos en el camino. En el caso del alerta inteligente de punto ciego (BSW), trabaja a velocidades por encima de los 32 km/h alertando con sonidos y alertas visuales en el instrumental, así como también en los retrovisores exteriores. No detecta bicicletas, peatones ni animales. Pero sí autos, motos y camiones.
El RCTA, o alerta de tráfico cruzado, por su parte, lo que hace es avisarle al conductor mediante sonidos y alertas visuales que un vehículo se aproxima al salir de un estacionamiento o garage, activándose a velocidades inferiores a los 8 km/h hasta 20 metros de distancia. Cabe destacar que el sistema no detecta peatones, bicicletas, motocicletas, o animales. En otros mercados, como el Norteamericano, se agrega la función Rear Automatic Braking (RAB) o frenado automático trasero, que complementa la funcionalidad del RCTA con frenado al detectar objetos, vehículos o peatones. Pero no está disponible en los Versa que llegan a Latinoamérica.
Pero un elemento que los Versa sí tienen a partir del nivel Advance y que es ideal para un producto familiar es el alerta de olvido en asiento trasero (RDA, por Rear Door Alert). Se trata de un aviso que funciona supervisando las puertas traseras del vehículo y que sirve para no olvidarse que llevamos niños o mascotas en el auto.
Esta solución se hizo popular en Norteamérica como respuesta a las estadísticas de muertes de niños olvidados por sus padres en el auto en un día de calor intenso en los Estados Unidos. Sí, esas cosas pasan. De acuerdo con KidsAndCars.org, se registran en ese país un promedio de 37 víctimas mortales por año. En Uruguay estas estadísticas no se llevan en cuenta, pero no dudo que sucedan casos similares, más durante las épocas estivales, cuando el calor es mayor.
La función se activa cada vez que se abre y cierra una puerta trasera en los 10 minutos anteriores al arranque del vehículo o si se abren y cierran mientras el vehículo ya está en marcha. Cuando el vehículo se apaga después de una activación de la puerta, el sistema emite una alerta sonora y aparece un mensaje en la pantalla del instrumental con el recordatorio: "revisar asiento trasero por objetos".
En resumen, Nissan pega no solo un salto grande frente a una generación previa que solo ofrecía doble airbag delantero y frenos ABS, sino que redobla la apuesta quedando con la mejor dotación de seguridad del segmento B hasta el momento. No solo superando a toda su competencia directa, sino también a varios modelos premium que no son capaces de tener asistencias a la seguridad de serie, pese a que cuestan el doble o triple que este Versa Exclusive. Ya no quedan excusas para no ofrecerlas a precios lógicos, porque hay marcas generalistas que lo están haciendo.
Precios, garantías y competidores
La gama del Versa, como ya dije varias veces en este informe, se compone de tres niveles: Sense, Advance y Exclusive. Los precios arrancan en U$S 20.990, pasando luego a U$S 22.990 y U$S 25.490 respectivamente de las dos variantes evaluadas por Autoblog. La garantía es de 3 años o 100.000 km (extensible a 5 años o 120.000 km). Son valores razonables para el segmento, y sería interesante que existiera una versión Advance CVT para aquellos que quieran la caja automática, sin tener que ir por el Exclusive.
Sin embargo, considerando la cantidad de equipamiento de seguridad que se gana en la versión Exclusive frente al Advance, y existiendo U$S 2.500 de diferencia entre ambos, es la opción más recomendable de la gama. Pero también lo es el Versa Sense más accesible, si el presupuesto es más ajustado y el Advance también es una buena compra si queremos un upgrade frente a un Sense. En resumen, son tres opciones más que válidas.
Al ser dos versiones, una manual intermedia y una automática tope de gama, los competidores son unos cuantos. Vamos primero con los del Versa Advance: Chevrolet Prisma LTZ 1.4 M/T (U$S 20.790), Citroën C-Elysée 1.6 VTi 115 Feel BVM5 (U$S 22.490), Citroën C-Elysée 1.6 VTi 115 Feel Pack BVM5 (U$S 24.690), Fiat Cronos Drive 1.3 M/T (U$S 19.790), Hyundai HB20S 1.6 Premium M/T (U$S 21.490), Hyundai HB20S 1.6 Unique M/T (U$S 23.990), Kia Rio Sedán LX Plus 1.4 (U$S 22.490), Kia Rio Sedán EX Plus M/T 1.4 (U$S 26.990), Peugeot 301 1.2 PureTech Active Pack (U$S 21.490), Seat Toledo 1.6 Reference M/T (U$S 21.950), Seat Toledo 1.6 Reference Plus M/T (U$S 25.950), Toyota Etios Sedán 1.5 XLS M/T (U$S 19.990), Volkswagen Virtus 1.6 Trendline M/T (U$S 21.990), Volkswagen Virtus 1.6 Comfortline M/T (U$S 24.990) y Volkswagen Virtus 1.6 Highline M/T (U$S 26.590).
Sin ir más lejos, la dotación del Versa Exclusive casi iguala a la de un Leaf Tekna (ver prueba) o un Qashqai Exclusive (ver lanzamiento), ambos modelos de Nissan que cuestan casi el doble. En el caso de las asistencias a la seguridad, trabajan de forma impecable y jamás tuvo lo que a veces se da como un "falso-positivo" en la detección de peligros inminentes. Es bastante menos intrusivo en sus tecnologías que otros productos con soluciones similares. El Versa puede determinar el riesgo de colisión a velocidades superiores a 5 km/h. Si calcula un riesgo inminente de colisión, alerta al conductor y prepara los frenos para aplicar una máxima fuerza de frenado, a velocidades por debajo de 80 km/h.
Si el conductor no reacciona, se activa el frenado autónomo de emergencia (IEB), que puede reducir la velocidad del vehículo hasta los 40 km/h, e incluso detenerlo a cero para evitar un impacto. Cabe destacar que en nuestra región no detecta peatones, animales ni obstáculos en el camino. En el caso del alerta inteligente de punto ciego (BSW), trabaja a velocidades por encima de los 32 km/h alertando con sonidos y alertas visuales en el instrumental, así como también en los retrovisores exteriores. No detecta bicicletas, peatones ni animales. Pero sí autos, motos y camiones.
El RCTA, o alerta de tráfico cruzado, por su parte, lo que hace es avisarle al conductor mediante sonidos y alertas visuales que un vehículo se aproxima al salir de un estacionamiento o garage, activándose a velocidades inferiores a los 8 km/h hasta 20 metros de distancia. Cabe destacar que el sistema no detecta peatones, bicicletas, motocicletas, o animales. En otros mercados, como el Norteamericano, se agrega la función Rear Automatic Braking (RAB) o frenado automático trasero, que complementa la funcionalidad del RCTA con frenado al detectar objetos, vehículos o peatones. Pero no está disponible en los Versa que llegan a Latinoamérica.
Pero un elemento que los Versa sí tienen a partir del nivel Advance y que es ideal para un producto familiar es el alerta de olvido en asiento trasero (RDA, por Rear Door Alert). Se trata de un aviso que funciona supervisando las puertas traseras del vehículo y que sirve para no olvidarse que llevamos niños o mascotas en el auto.
Esta solución se hizo popular en Norteamérica como respuesta a las estadísticas de muertes de niños olvidados por sus padres en el auto en un día de calor intenso en los Estados Unidos. Sí, esas cosas pasan. De acuerdo con KidsAndCars.org, se registran en ese país un promedio de 37 víctimas mortales por año. En Uruguay estas estadísticas no se llevan en cuenta, pero no dudo que sucedan casos similares, más durante las épocas estivales, cuando el calor es mayor.
La función se activa cada vez que se abre y cierra una puerta trasera en los 10 minutos anteriores al arranque del vehículo o si se abren y cierran mientras el vehículo ya está en marcha. Cuando el vehículo se apaga después de una activación de la puerta, el sistema emite una alerta sonora y aparece un mensaje en la pantalla del instrumental con el recordatorio: "revisar asiento trasero por objetos".
En resumen, Nissan pega no solo un salto grande frente a una generación previa que solo ofrecía doble airbag delantero y frenos ABS, sino que redobla la apuesta quedando con la mejor dotación de seguridad del segmento B hasta el momento. No solo superando a toda su competencia directa, sino también a varios modelos premium que no son capaces de tener asistencias a la seguridad de serie, pese a que cuestan el doble o triple que este Versa Exclusive. Ya no quedan excusas para no ofrecerlas a precios lógicos, porque hay marcas generalistas que lo están haciendo.
La gama del Versa, como ya dije varias veces en este informe, se compone de tres niveles: Sense, Advance y Exclusive. Los precios arrancan en U$S 20.990, pasando luego a U$S 22.990 y U$S 25.490 respectivamente de las dos variantes evaluadas por Autoblog. La garantía es de 3 años o 100.000 km (extensible a 5 años o 120.000 km). Son valores razonables para el segmento, y sería interesante que existiera una versión Advance CVT para aquellos que quieran la caja automática, sin tener que ir por el Exclusive.
Sin embargo, considerando la cantidad de equipamiento de seguridad que se gana en la versión Exclusive frente al Advance, y existiendo U$S 2.500 de diferencia entre ambos, es la opción más recomendable de la gama. Pero también lo es el Versa Sense más accesible, si el presupuesto es más ajustado y el Advance también es una buena compra si queremos un upgrade frente a un Sense. En resumen, son tres opciones más que válidas.
Al ser dos versiones, una manual intermedia y una automática tope de gama, los competidores son unos cuantos. Vamos primero con los del Versa Advance: Chevrolet Prisma LTZ 1.4 M/T (U$S 20.790), Citroën C-Elysée 1.6 VTi 115 Feel BVM5 (U$S 22.490), Citroën C-Elysée 1.6 VTi 115 Feel Pack BVM5 (U$S 24.690), Fiat Cronos Drive 1.3 M/T (U$S 19.790), Hyundai HB20S 1.6 Premium M/T (U$S 21.490), Hyundai HB20S 1.6 Unique M/T (U$S 23.990), Kia Rio Sedán LX Plus 1.4 (U$S 22.490), Kia Rio Sedán EX Plus M/T 1.4 (U$S 26.990), Peugeot 301 1.2 PureTech Active Pack (U$S 21.490), Seat Toledo 1.6 Reference M/T (U$S 21.950), Seat Toledo 1.6 Reference Plus M/T (U$S 25.950), Toyota Etios Sedán 1.5 XLS M/T (U$S 19.990), Volkswagen Virtus 1.6 Trendline M/T (U$S 21.990), Volkswagen Virtus 1.6 Comfortline M/T (U$S 24.990) y Volkswagen Virtus 1.6 Highline M/T (U$S 26.590).
Yendo a la competencia del Exclusive CVT, por su parte, los rivales de este Versa son estos otros: Chevrolet Prisma LTZ 1.4 A/T (U$S 22.690), Citroën C-Elysée 1.6 VTi 115 Feel Pack EAT6 (U$S 27.990), Hyundai HB20S 1.6 Comfort A/T (U$S 20.490), Hyundai HB20S 1.6 Unique A/T (U$S 25.490), Kia Rio Sedán EX Plus A/T 1.4 (U$S 28.490), Toyota Etios Sedán 1.5 XLS A/T - (U$S 20.990) y Volkswagen Virtus 1.6 Highline Tiptronic (U$S 29.290). Como verán, la variedad es extensa. Sin embargo, en ambas versiones, Nissan queda muy bien posicionado frente a productos de similares precios e incluso en comparación con aquellos que los superan en este aspecto. Sin dudas el posicionamiento de esta segunda generación del Versa fue todo un acierto. Hoy los tres niveles ofrecidos están entre las opciones más recomendables dentro del universo de sedanes del segmento B.
Conclusión
Desde su lanzamiento, el Nissan Versa era la opción por default del segmento B para aquellos que buscaran un producto con mucho espacio interior, buen valor de reventa, una mecánica eficiente, confiable y probada, además de un comportamiento dinámico aceptable. Pero en materia de equipamientos de confort, tecnologías aplicadas a la conectividad y seguridad, estaba muy lejos de la competencia más moderna.
Con esta segunda generación la marca japonesa decidió ponerse al frente de sus rivales con un producto que no solo es el más reciente y actual del segmento, sino que también da un salto tan grande, que pone en vergüenza a más de un sedán compacto, es decir, del segmento siguiente. Mientras la nueva generación del Sentra no llega aún (ver nota), no es para nada descabellado pensar que alguien elija un Versa por ansiedad o incluso llegue a preferirlo antes que un Kicks, dado que está en inferioridad de condiciones en términos de seguridad disponible frente a un Versa Exclusive.
Dejando esto a un lado, esta segunda generación del Versa también es una de los embajadoras de una nueva camada de productos accesibles. Esto es, modelos que incorporan tecnologías de seguridad vistas hasta el momento solo en productos de segmentos C y D. Nissan fue el primero en incursionar en esto, seguido en apenas unas semanas más por los renovados Chevrolet Onix y Onix Plus (ver nota). Con esta oferta se empezará a actualizar de forma paulatina una franja del mercado que no podía acceder a vehículos con frenado autónomo y otras ayudas a la conducción. A ambas marcas, las aplaudo de pie.
Nissan tiene hoy en este nuevo Versa a una de las nuevas referencias del segmento B y por ende a la mejor opción de compra si están en la búsqueda de un sedán chico bien equipado y a valores razonables. Así de bueno es, además de haber pegado un salto cósmico en comparación con su antecesor. Aunque muchos hoy están quejándose por una ligera suba de precios o por las entregas que están algo postergadas como consecuencia de la alta demanda que tiene este modelo. Son las consecuencias de un lanzamiento reciente, bien posicionado y que supera con claridad a sus rivales. Al igual que la generación que reemplaza, este nuevo Versa está más que nunca, condenado al éxito.
A favor
- Calidad de materiales y terminaciones
- Capacidad del baúl
- Comportamiento dinámico
- Confort de marcha
- Consumos en ruta
- Diseño
- Equipamientos de confort y seguridad
- Garantía
- Habitabilidad para cuatro adultos
- Relación precio/producto/equipamientos
- Tecnologías aplicadas (en Exclusive)
En contra
- Depósito de combustible pequeño
- Lentitud de reacciones de la transmisión (en Exclusive)
- Neumático de auxilio temporario
- Plaza central trasera justa a lo ancho
- Transmisión de cinco relaciones (en Advance)
FICHA TÉCNICA:
MOTORIZACIÓN
Cilindrada (cc) 1.598
Número de cilindros: 4
Número de válvulas: 16
Relación de compresión: 10,9:1
Diámetro x carrera (mm): 83,6 x 78
Inyección: indirecta multipunto secuencial con apertura variable de válvulas (CVTCS)
Potencia máxima (cv/rpm) 118/6.000
Torque máximo (Nm/rpm) 154/4.400
TRANSMISIÓN
Caja de velocidades manual de cinco relaciones (Advance) o continuamente variable XTronic CVT D-StepLogic (Exclusive)
Tracción delantera
DIRECCIÓN
De piñón y cremallera con asistencia eléctrica variable
FRENOS
Delanteros: de discos ventilados
Traseros: de tambores
EJES - SUSPENSIÓN
Delantera: independiente con barra estabilizadora
Trasera: barra de torsión con barra estabilizadora
NEUMÁTICOS
Dimensiones: 205/55 R16 (Advance) y 205/50 R17 (Exclusive)
Rueda auxiliar: T125/70 D15
PRESTACIONES
Velocidad máxima (km/h) N/D
Aceleración 0-100 km/h (s) N/D
Consumo (l/100km) Urbano: 6,0 (Advance) y 5,4 (Exclusive) - Carretera: 4,2 (Advance) y 4,0 (Exclusive) - Mixto: 5,2 (Advance) y 4,8 (Exclusive)
DIMENSIONES / PESO
Capacidad del baúl (l) 424
Peso en vacío (kg) N/D
Pesos en orden de marcha (kg) 1.178 (Advance) y 1.204 (Exclusive)
Largo total (mm) 4.495
Ancho total (mm) 1.739
Alto total (mm) 1.455
Distancia entre ejes (mm) 2.618
Capacidad del tanque de combustible (l) 41
EQUIPAMIENTO ADVANCE:
EXTERIOR
Faros antiniebla delanteros
Faros delanteros con luces diurnas
Llantas de aleación de 16 pulgadas
SEGURIDAD
Airbags frontales, laterales delanteros y de cortinas
Anclajes ISOFIX y TopTether para sillas infantiles
Apoyacabezas delanteros y traseros (5)
Alerta de olvido en asiento trasero (RDA)
Alerta de olvido en asiento trasero (RDA)
Asistente de ascenso en pendientes (HSA)
Cinturones de seguridad inerciales de tres puntos (5)
Control dinámico del vehículo (VDC)
Control de tracción (TCS)
Control dinámico del vehículo (VDC)
Control de tracción (TCS)
Frenos ABS+EBD+BA
CONFORT
Aire acondicionado manual
Alarma
Apertura interna del baúl y del depósito de combustible
Asiento del conductor regulable en altura
Asiento trasero rebatible 60:40
Botón de encendido/apagado del motor
Cámara de retroceso
Cierre centralizado de puertas con mando a distancia
Computadora de a bordo con pantalla a color de siete pulgadas
Cuatro parlantes
Cuatro parlantes
Dirección con asistencia eléctrica
Encendido automático de luces
Espejos retrovisores regulables eléctricamente
Levantavidrios eléctricos delanteros y traseros con sistema one touch para el conductor
Pantalla táctil de siete pulgadas con AM/FM/MP3/Aux-In/Bluetooth/iPod/3USB/Android Auto/CarPlay, comandos por voz, y audio streaming
Sistema de entrada y encendido sin llave iKey
Sensores de estacionamiento traseros
Tapizados en tela
Volante multifunción regulable en altura y profundidad
EQUIPAMIENTO EXCLUSIVE (ADVANCE +):
EXTERIOR
Faros delanteros LED con luces diurnas LED
Llantas de aleación de 17 pulgadas
SEGURIDAD
Alerta de tráfico cruzado (RCTA)
Alerta de punto ciego (BSW)
Frenado inteligente de emergencia (IEB)
Monitor inteligente de visión periférica (IAVM) con cámaras 360º
Alerta de punto ciego (BSW)
Frenado inteligente de emergencia (IEB)
Monitor inteligente de visión periférica (IAVM) con cámaras 360º
CONFORT
Climatizador automático de una zona
Computadora de a bordo con pantalla a color de siete pulgadas y brújula integrada
Modo de manejo Sport
Computadora de a bordo con pantalla a color de siete pulgadas y brújula integrada
Modo de manejo Sport
Pantalla táctil de siete pulgadas con AM/FM/MP3/Aux-In/Bluetooth/iPod/USB/GPS/Android Auto/CarPlay y audio streaming
Seis parlantes
Tapizados en cuero
Volante multifunción en cuero regulable en altura y profundidad
PRECIOS Y GARANTÍA:
U$S 22.990 (Advance M/T) y U$S 25.490 (Exclusive CVT). Garantía: 3 años o 100.000 km