Contacto en Paraguay: Pulse y Fastback Abarth 1.3 Turbo 270 AT6

lunes, 16 de septiembre de 2024




Stellantis Latam
presentó en Asunción, Paraguay, a los Pulse y Fastback Abarth que llegarán próximamente al mercado uruguayo y paraguayo. Autoblog viajó hasta la capital paraguaya para manejarlos previo a su lanzamiento oficial en el mercado local. Primeras impresiones, a continuación.
Desde Aratirí, Paraguay (*) - Abarth es una de esas marcas de gente que “sabe de autos”. Muchos de ustedes seguramente ni sepan qué es. Esta subsidiaria de Fiat Group Automobiles, fue fundada en 1949 en Bolonia, Italia, por el piloto y preparador italo-austríaco Carlo Abarth. Hoy es propiedad del gigante Grupo Stellantis, pero entre 1949 y 1959, la firma se dedicó a producir carrocerías y algunos chasis para Ferrari, Pininfarina, Scaglietti, o Zagato. Incluso también preparó productos de Porsche y Simca.

Abarth fue vendida a Fiat S.p.A. el 31 de julio de 1971 y se convirtió en la sección de competición de Fiat, dirigida en aquel entonces, por el famoso Aurelio Lampredi. Algunos modelos producidos por Fiat Group o sus subsidiarias, como Lancia o Autobianchi, se renombraron como Abarth, siendo el más famoso el Autobianchi A112 Abarth. En la época en que Seat formó parte del grupo, hubo preparaciones de modelos, como los 600, 131, 127, Panda, Ritmo o el mítico Fura Crono Abarth. Más acá en el tiempo, ya bajo el ex-conglomerado FCA, fueron famosos los Stilo, Grande Punto además de los 124595 Abarth. Pero esta historia es muy lejana y desconocida para el mercado uruguayo.


Sin embargo, esto está a punto de cambiar. Porque pese a que se importaron unas pocas unidades del Abarth 500 a nuestro país de forma oficial (ver lanzamiento) en 2015, ahora la idea de Stellantis es que Abarth tenga una presencia oficial y definitiva, de la mano de dos modelos, los inéditos Pulse Abarth (ver nota) y Fastback Abarth (ver nota). Estos productos serán el puntapié en los mercados regionales para el lanzamiento de la firma, basados en los conocidos Fiat Pulse (ver prueba) y Fastback (ver prueba). Aunque tienen una impronta deportiva desde lo técnico y una estética que también acompaña a este espíritu más “racing”.

En Uruguay se comercializarán entre septiembre y octubre y los precios de preventa serán revelados en los próximos días. Pero antes de que eso suceda, Autoblog fue uno de los medios locales invitados por Sevel Uruguay y Stellantis Latam al Autódromo Rubén Dumot, en Aratirí, Paraguay, a unos 20 kilómetros de Asunción. En los 1.860 km de extensión del trazado, pudimos manejar durante una mañana a los Pulse y Fastback Abarth, que van equipados con el conocido motor Turbo 270, un 1.3 litros cuatro cilindros turboalimentado con 175 cv de potencia y 270 Nm de torque, asociado a una transmisión automática de seis relaciones, de origen Aisin. El contacto desde tierras guaraníes se transcribe, a continuación.


EXTERIOR

Comencemos por una aclaración pertinente. El nombre comercial y publicitario de este modelo es “Pulse y Fastback Abarth”. No “Abarth Pulse y Fastback”, una forma extraña de llamarlo, pero el 595 también era el 595 Abarth, y no el Abarth 595. Porque si prestaste atención, no hay logos de Fiat en ningún rincón de la carrocería, aunque se vendrán en los salones de la marca turinesa. Por eso, y para hacerle justicia a la memoria de “Don Carlo Abarth” en Autoblog les diremos “Abarth Pulse y Fastback” y no Fiat. Algo a tener en cuenta es que esta no es sólo una versión deportiva. Abarth pasa a ser toda una nueva marca para nuestro mercado, que incidentalmente, se va a comercializar en los showrooms que ya tiene Fiat.

Explicado este tecnicismo, veamos de qué están hechos por fuera estos dos modelos. Frente a los Pulse y Fastback de Fiat, los Abarth llevan una carrocería que reduce su altura en 10 milímetros (ahora tiene 188 mm de despeje del suelo), se agrandaron las tomas de aire y se repasó todo el exterior con detalles alusivos a la firma del escorpión. Además de los notorios emblemas con ese artrópodo arácnido depredador, los dos tienen techo en color negro de serie, spoiler delantero en rojo (trasero en negro), y retrovisores externos negros (antes en el Pulse eran rojos, haciendo juego con unos gráficos en las puertas, pero ya no más). Luego hay diferencias entre ellos. Fastback pasa a tener todos los contornos de paragolpes y pasarruedas en color carrocería. En el Pulse, en tanto, respeta el plástico negro de las versiones de Fiat y la “e” de su nombre, va con un tono rojo en el portón trasero. El Fastback tiene un alerón discreto y negro sobre el baúl. Te gusten o no, hay que reconocer que son productos llamativos.


Las llantas son de diseño exclusivo en los dos modelos y están calzadas con neumáticos diferentes en medida y marca/modelo. El Pulse lleva unos Dunlop SP SportMaxx 215/50 R17, mientras que en el Fastback se utilizan unas Goodyear Eagle F1 Assimetric 6 215/40 R18. En lo personal, me gusta más la estética del Pulse que del Fastback, pero es algo que tengo también para los modelos de Fiat. Las desproporciones del voladizo trasero del segundo le seguirán siendo extrañas a muchos. Reconozco que todavía me cuesta digerirlas del todo, aunque me acostumbré y hasta diría que “no me disgusta”. El Pulse, en tanto, me resulta más cohesivo en sus líneas. Y al tener una silueta bicuerpo, creo que es el más fiel a la historia de Abarth de los dos. Aunque reconozco que el Fastback también logra tener su encanto desde ciertos ángulos de la carrocería, como los ¾ posteriores con las dos salidas de escape y el spoiler.

Algo a tener en cuenta es que la paleta de colores va a ser limitada en ambos modelos a cinco tonos: Gris Strato, Rojo Montecarlo, Blanco Banchisa y Negro Vulcano. Otro detalle, casi una firma de identidad de Abarth, es que tienen una doble salida del escape, que dicho sea de paso, tiene uno sonido bastante agradable y muy distinto al de los otros Pulse/Fastback. Suena ronco tanto afuera como adentro, con una mayor presencia cuando se activa el modo de manejo “Poison” que reemplaza al “Sport” de los Pulse y Fastback de Fiat, aunque con una impronta similar, darle un poco más de respuesta al conjunto mecánico. En términos de dimensiones, el Pulse Abarth mide 4.115 mm de largo (+56 mm respecto al Pulse), 1.777 mm de ancho (+ 3 mm) y 1.544 mm de alto (-33 mm), con una distancia entre ejes de 2.532 milímetros. En el caso del Fastback, declara 4.425 mm de largo (-2 mm respecto al Fastback), 1.780 mm de ancho (+ 6 mm) y 1.544 mm de alto (-1 mm), con una distancia entre ejes de 2.532 milímetros.


INTERIOR

Puertas adentro los detalles también están bien claros. Tampoco hay emblemas de Fiat, que fueron cambiados por los del escorpión, e incluso se agregaron algunos más en la funda del selector de cambios, y los respaldos de las butacas delanteras tienen un bajo relieve del escorpión. También incorporan un aplique en una -falsa- fibra de carbono con una textura más blanda, acompañada por una placa metálica con el logotipo de Abarth, que es un agregado bastante simpático. Sin embargo, mi detalle menos preferido es un gráfico en los zócalos de puertas delanteros que rezan “pick your poison” (elegí tu veneno en inglés), haciendo referencia al veneno del escorpión. Además el interior del techo, va revestido en color negro.

A su vez, en la posición de conducción hay otros detalles menores, como nuevos gráficos para el tablero, una pedalera metálica con tacos de goma antideslizante y costuras en color rojo tanto para el volante, selector de cambios y los tapizados de los asientos. Luego estos Abarth incorporan de serie un elemento poco visto en este rango de precios, un freno de estacionamiento electromecánico con función “Auto Hold”, que da paso a un portaobjetos central de doble fondo, que es muy practico, (aunque es algo que ya estaba presente en los Fastback convencionales), siendo algo nuevo para este Pulse Abarth. Luego, por el resto, se repite cada pieza, emblema, tecla o perilla ya vista en sus hermanos que llevan los logos Fiat.


La calidad del interior es un poco mejor a la de aquellos modelos. Es decir, si bien está ese aplique de inyectado blando símil fibra de carbono -de dudoso gusto-, se nota que Stellantis está escuchando las críticas. Todos son materiales rígidos, pero la presentación en general es correcta y ya no existen tantos ajustes de piezas mejorables. Sin embargo, la tapa de la guantera sigue estando desencuadrada como pasa con otros Pulse o Fastback. Más allá de esto, se nota un poco más de “cariño puesto” que en los equivalentes de Fiat. Por ejemplo, hay mejores tapizados y apliques con mejor calidad percibida. Se los siente apenas más refinados que aquellos modelos, aunque también más llamativos al igual que por fuera.

Para hacer rápido este pasaje, hablemos bastante por arriba de posición de manejo, pantallas y habitabilidad. Comenzando por la primera, es similar a la de los otros Pulse y Fastback, en donde la butaca va igual de elevada y es incluso la misma que encontramos en sus hermanos Fiat, con ajustes manuales. En el caso del acompañante también, pero a diferencia del conductor, acá no se permite regular la altura. Los asientos, por su parte, son bastante anchos, mullidos y anatómicos, algo que en todas las veces que manejé un Pulse o Fastback, destaqué por sobremanera. El volante, en tanto, se regula en altura como profundidad, con un buen grip y un aro “gordito”, además de dos levas de cambio bastante agradables al tacto. En términos generales se consigue una postura de conducción bastante cómoda en ambos productos.


Yendo con las pantallas, ambos llevan un instrumental digital de siete pulgadas TFT, con funciones como medidor de fuerza G y de presión del turbo (con escala hasta 1.8 bar). Se manejan desde las teclas a la izquierda del volante. La pantalla central es la conocida Uconnect con 10,1 pulgadas, que ofrece funciones como Apple CarPlay y Android Auto con conexión inalámbrica, y permite conectar hasta dos teléfonos inteligentes funcionando al mismo tiempo. Además tiene navegador GPS integrado de serie (muy poco visto en este segmento, bien por eso), que ya he dicho que funciona perfecto con el mapeo que tiene de los caminos Uruguay, y que como siempre se lo puede complementar usando Waze o Google/Apple Maps para información en tiempo real.

En términos de conectividad, además del ya mencionado espejamiento de smartphones de forma inalámbrica, también son de serie dos puertos USB, uno tipo C y otro A, ubicados justo encima del cargador inductivo para smartphones, también de serie, otro acierto de configuración. Dicho sea de paso, tiene una salida de aire para ir enfriando al dispositivo mientras se carga. Es sabido que los celulares levantan temperatura cuando cargan por inducción, más en lugares calurosos como Paraguay. A su vez, hay otros USB-A y C colocados entre los asientos delanteros, que permite a los pasajeros de los asientos traseros cargar sus otros smartphones o lo que deseen enchufar allí, aunque quedan algo cerca del piso.


Por último, hablemos de habitabilidad. En el caso del Pulse se cumplen los mismos comentarios realizados en su equivalente de Fiat. Esto es, que dos adultos de hasta 1,80 metros viajarán bien a lo largo y ancho, mientras que a lo alto, el espacio de la cabeza al techo es correcto inclusive para adultos, aunque no para los más altos. Al centro, al igual que pasa con otros productos de este segmento, un tercer ocupante adulto ya no irá tan feliz. En el Fastback la situación es similar, aunque frente a su hermano, el respaldo trasero tiene una inclinación mayor y permite viajar más relajado y cómodo a lo alto. No se viaja tan erguido ni recto. Deja una postura más descansada allí. Ambos suman salidas de aire posteriores, adicionalmente, algo que sí tienen los otros Fastback, mas no los Fiat Pulse “no-Abarth”.

En términos de baúles y capacidades, el Pulse declara 370 litros, que pueden ampliarse rebatiendo el respaldo trasero, hasta los 841 litros (hasta la altura de la bandeja del baúl) o 1.238 litros si contamos hasta el techo. En Fastback, por su parte, son unos bestiales 600 litros de capacidad, que son 230 más que el Pulse, por ejemplo. Es casi como adosarle a un Pulse el baúl de un Mobi (ver prueba) más o menos. Ese volumen puede ampliarse rebatiendo el respaldo trasero en proporción 60:40, hasta los 1.087 litros. Pasando al neumático de auxilio, en ambos se ofrece uno del tipo temporario. En cualquiera de las variantes lleva un Continental T125/80 R16, con la limitación de velocidad (80 km/h) y distancia (50 km).


EQUIPAMIENTOS

Hay una sola variante denominada Turbo 270 AT6 para los dos productos que ofrece de serie: cuatro airbags (delanteros frontales y laterales cabeza/tórax), frenos ABS+EBD, control de tracción (ASR), asistente de arranque en pendientes (Hill Holder Assist), sistema de alerta de frenada de emergencia ESS, controles de estabilidad (ESC) y de tracción plus (TC+), sistema de regulación de torque (MSR), control dinámico vectorial del torque (DTV), control de mitigación de vuelcos (ERM), asistente de frenado de emergencia (PBA), frenado de emergencia autónomo (AEB), alerta de cambio de carril (LDW) encendido automático de luces altas en carretera (AHB), cinco apoyacabezas, cinco cinturones inerciales de tres puntas, anclajes ISOFIX y TopTether para sillas infantiles, alerta de límite de velocidad programable, monitoreo de presión de neumáticos (iTPMS), pack eléctrico (cuatro levantavidrios, espejos y bloqueo), ópticas delanteras LED con luces diurnas (DRL), faros antiniebla delanteros LED (con función de curva), ópticas traseras LED, dirección asistida eléctricamente, asiento del conductor con ajuste de altura, aire acondicionado automático y digital con salidas de aire para las plazas traseras, alerta de velocidad programada, instrumental digital de siete pulgadas, alarma, volante multifunción en cuero con levas de cambio regulable en altura y profundidad con levas de cambio integradas, control de velocidad crucero y limitador de velocidad, retrovisores exteriores con luz de giro integrada y función “tilt down” para estacionamiento, respaldo trasero rebatible 60:40, sensores de estacionamiento delanteros y traseros, cámara de retroceso, sistema multimedia UConnect con pantalla táctil de 10,1 pulgadas con AM/FM/1USB-A/1USB-C/GPS/Bluetooth/Android Auto (inalámbrico)/Apple CarPlay (inalámbrico) y comandos vocales, puerto de carga USB-A para las plazas traseras (1), cargador inalámbrico para smartphones por inducción (Qi), freno de estacionamiento electromecánico con función “Auto Hold”, retrovisores exteriores en el color Negro Vulcano, modo “Poison” con botón de conducción en el volante, tapizados en cuero, retrovisores exteriores con plegado eléctrico y luz de cortesía, Keyless Enter 'n Go con encendido/apagado por botón, encendido a distancia, carrocería bi-color, espejo retrovisor interior con anti-encandilamiento automático, doble salida de escape deportiva, interior con revestimiento en color negro, y llantas de aleación de 17 pulgadas sobre neumáticos en medida 215/50 R17.


En términos generales, las dos versiones están muy bien configuradas respecto a los equipamientos de confort en relación al precio. Salvo por un pequeño detalle. Al igual que sucede con otros Pulse y Fastback, en estos Abarth también hace mucho ruido la ausencia de los airbags de cortina, algo que todos sus rivales ya ofrecen de serie. Sería bueno que Stellantis reviera esto a la brevedad y que también podamos conocer la seguridad estructural de ambos modelos, ya que mencionan que llevan una nueva plataforma con un 87% por aceros de alta y ultra alta resistencia. 

De todas formas, no olvidemos que ya hubo resultados para el Fiat Pulse (sobre el que este Pulse Abarth está basado) y no fueron alentadores: obtuvo solo dos estrellas con el protocolo actual en las pruebas de Latin NCAP. Un puntaje muy mejorable, dado que la protección del pecho del conductor fue marginal, aunque el organismo declaró que la estructura fue considerada como estable y es capaz de soportar mayores cargas. Con este upgrade mecánico, hubiese sido interesante ver otro en seguridad también.


MOTOR Y TRANSMISIÓN

La única mecánica disponible para estos Abarth es la conocida GSE T4 que utilizan y seguirán usando varios de los productos pertenecientes a la fusión entre FCA y PSA (Stellantis). Es un 1.332 cc de cilindrada, cuatro cilindros, 16 válvulas, e inyección directa multipunto secuencial. Produce 175 cv de potencia a las 5.750 rpm y un par máximo de 270 Nm a las 1.850 vueltas. La transmisión es una automática secuencial de seis relaciones. Siendo que es un producto enfocado a un público más ávido a la conducción que otros Pulse/Fastback, sería interesante tener una variante con transmisión manual.

Cabe destacar que con esta motorización ambos modelos llegan al mercado como unos de los crossovers sub-compactos de producción regional más potentes de su categoría. A su vez, este nuevo motor cuenta con cadena de distribución silenciosa “de por vida” que no requiere ningún tipo de mantenimiento. Los elogios o conclusiones a las que se llega con esta incorporación son similares a los ya dichos en las pruebas de los modelos de Jeep como Renegade (ver prueba), Compass (ver prueba) y Commander (ver prueba), que también lo utilizan. Pero también de la pick-up Toro de Fiat (ver prueba).


Sumado al sonido más ronco, con “pops & bangs” de los escapes de estos Abarth, el Turbo 270 se sigue caracterizando por ser una mecánica que a partir de las 1.500-2.000 rpm ya muestra toda su elasticidad y potencial. También es un motor que permite una gran dualidad de uso. Si queremos manejar relajados, va bien insonorizado, o también le podemos imprimir más agilidad con mucha facilidad. Es muy silencioso incluso a regímenes medios y se presenta como una mecánica progresiva, suave y refinada. Sin dudas, el que más a tono se siente con el modelo y su espíritu más, digamos, “aspiracional”. Ya era un impulsor ágil en los Renegade o Compass, pero puesto en este producto de Abarth, además hasta diría que te invita a un manejo casi diría, deportivo.

La única transmisión ahora es la automática de seis relaciones de origen Aisin (la AW60T), que junto al 1.3, se llevan de maravillas. Es un combo perfecto con el motor T270, siendo de lo mejor del segmento en este sentido. Además, incorpora levas de cambio al volante, con una pieza metálica de buena calidad. No son prácticas en lo personal, porque no suelo utilizarlas. Pero si sos de los que sí, ahí están para vos. Fábrica declara 210 km/h de velocidad final (218 km/h en Fastback) y una aceleración de 0-100 km/h en 8,0 segundos. No hay cifras de consumo mixto homologadas de forma oficial. No fue posible medir consumos en las pruebas en Paraguay. Será una tarea reservada para el análisis en Uruguay. El depósito de combustible aloja 47 litros en ambas carrocerías, mientras que los pesos en orden de marcha son de 1.280 kg (Pulse) y 1.299 kg (Fastback).


COMPORTAMIENTO DINÁMICO

Las pruebas en el pequeño trazado del Autódromo Rubén Dumot no fueron muy extensas (tres giros con cada modelo, en caravana con instructor), pero de todas formas sirvieron para llevarse una primera impresión de los modelos de cara al análisis completo cuando los tengamos en Uruguay. A ambos se los percibe más enfocados al manejo que sus equivalentes en Fiat. La dirección se nota más precisa (un 4% más según Stellantis) y rápida de reacciones, pero también se nota que hay una nueva calibración de marchas, que hace que los cambios sean más rápidos y deportivos. 

Las suspensiones cuentan con resortes y amortiguadores hasta un 13% más firmes (7% adelante y 6% atrás). La suspensión delantera ganó una nueva geometría y la barra estabilizadora de mayor diámetro disponible para una mayor estabilidad. La parte trasera tiene un eje con mayor rigidez torsional (+15%). El balanceo de la carrocería es un 10% menor respecto a los Pulse convencionales. Dudo que sea material para meterse a un track day, pero sin dudas son dos modelos que permiten una cuota de diversión bastante más alta que en los Pulse o Fastback con el motor 1.0 Turbo 200. Y eso, acompañado de una agilidad mayor, siempre es bienvenido. Los frenos también son más grandes adelante, 305 mm, contra los de 284 milímetros que llevan los otros Pulse/Fastback. Eso sí, conserva los tambores traseros de los Turbo 200.


Con estas pruebas hice un poco de trampa, porque esta es una combinación que ya manejé. Aquellos lectores más memoriosos, recordarán que en el lanzamiento regional del Fastback en República Dominicana, había podido manejarlo con este motor (ver contacto) y las impresiones ya habían sido muy buenas. Ahora, “envenenado” por ser un modelo Abarth, las sensaciones se potencian aún más, por ese “fine tuning” deportivo y se nota el cambio de la dirección, suspensión, transmisión y del sonido del escape.

En relación a la elasticidad, a 70 km/h en D6 trabaja a 1.800 (D4 a 2.400 rpm en modo Sport), mientras que yendo a 110 km/h el impulsor gira a 2.100 en D6 (2.750 rpm y D5 con el modo Sport). Si bien con el 1.0 Turbo 200, tanto Pulse como Fastback se mueven bien, con el 1.3, van sobrados. Incluso las recuperaciones lo respaldan: rondan los 5,4 segundos de 80 a 110 km/h ambos modelos, aunque en Uruguay haré mediciones más minuciosas.


Esto trae como consecuencia, un grado mayor de diversión al manejo que en aquellos. Distan mucho de ser dos productos deportivos “hard core”, pero tampoco intentan serlo. Sin embargo, para quienes ya hayan manejado un Pulse o Fastback con el otro motor, van a notar que la diferencia es abismal: se redujo muchísimo el balanceo de la carrocería (tanto en curvas como en aceleraciones y frenadas) y la respuesta en toda condición es mucho más inmediata. Son productos más enfocados al manejo, sin llegar a ser deportivos radicales.

Está claro que Abarth buscó un punto intermedio entre un crossover convencional y hot-hatchback: eso es lo que va a encontrar su comprador. Si va en busca de eso, no se irá defraudado en absoluto. Pero pedirle que tenga un chasis crudo y listo para las pistas, es no entender el concepto. A su vez, el Autódromo Rubén Dumot tiene un asfalto en estado deplorable, lleno de pozos y grietas. Estos Abarth no se sintieron fuera de ambiente. Algo que un deportivo “no Mercosur”, con perfil bajo o poco despeje, lo estarían sufriendo mucho. Y con esto ya doy paso a la conclusión.


CONCLUSIÓN

En nuestro mercado no hay otros crossovers del segmento B que proponga algo similar a lo que plantean estos dos productos. Tampoco quedan hot-hatchbacks, salvo por el Suzuki Swift Sport (ver lanzamiento) que está próximo a su retiro en algún tiempo más. Lo único que se acercaría hoy al planteo de estos Abarth sería el Volkswagen Polo GTS (ver prueba) o el futuro Nivus GTS que llegaría con la actualización de ese producto antes de finales de año o comienzos del próximo. Al igual que en ese caso de los GTS, estos dos modelos de Stellantis se arriman bastante a ser deportivos, pero sin la intención clara de serlo del todo. Paso a explicarme, porque es un detalle muy sutil.

Son más ágiles y veloces que los otros Pulse/Fastback, sí. Pero no hipotecan el confort de marcha y equilibrio de sus versiones sin “picadura de escorpión”. Ese plus de potencia llega en el formato de un producto con pedigree deportivo, pero con una “tropicalización” al usuario latinoamericano. Pero ojo, no llega a ser decepcionante, todo lo contrario. Hay que saber moderar expectativas con estos modelos: son dos crossovers con un comportamiento muy divertido. Y además con un grado de deportividad racional, para poder disfrutarlo a diario sin tener que “padecerlo”. Tanto el Pulse como Fastback Abarth son el salvoconducto latinoamericano de poder tener un producto deportivo, pero que se puede usar todos los días.


A FAVOR
  • Capacidad del baúl (en Fastback)
  • Confort de marcha
  • Conjunto motor/transmisión
  • Diseño
  • Diversión de manejo
  • Equipamientos de confort y seguridad
  • Garantía
  • Habitabilidad para cuatro adultos
  • Robustez de las suspensiones
  • Tecnologías aplicadas a la conducción
EN CONTRA
  • Encastres de algunas piezas interiores
  • Plaza trasera central a lo ancho para adultos
  • Sin airbags laterales de cortina en opción
  • Sin opción de transmisión manual
  • Neumático de auxilio temporario
  • Visibilidad ¾ trasera algo limitada




FICHA TÉCNICA

MOTORIZACIÓN
Cilindrada (cc) 1.332
Número de cilindros: 4
Número de válvulas: 16
Relación de compresión: 10,5:1
Diámetro x carrera (mm): 70 x 86,5
Inyección: directa multipunto con sistema MultiAir de apertura variable de válvulas, turbocompresor e intercooler
Potencia máxima (cv/rpm) 175/5.750
Torque máximo (Nm/rpm) 270/1.850
TRANSMISIÓN - TRACCIÓN
Caja de velocidades automática de seis relaciones
Tracción delantera
DIRECCIÓN
De piñón y cremallera con asistencia eléctrica variable
FRENOS
Delanteros: de discos ventilados
Traseros: de tambores
EJES - SUSPENSIÓN
Delantera: independiente tipo McPherson, con brazos oscilantes inferiores, amortiguadores hidráulicos de doble efecto, resortes helicoidales y barra estabilizadora
Trasera: eje de torsión con ruedas semindependiente. amortiguadores hidráulicos de doble efecto, resortes helicoidales y barra estabilizadora
NEUMÁTICOS
Dimensiones: 215/50 R17 (Pulse) y 215/45 R18 (Fastback)
Rueda auxiliar: 195/60 R15
PRESTACIONES
Velocidad máxima (km/h) 210 (Pulse) y 218 (Fastback)
Aceleración 0-100 km/h (s) 8,0
Consumo (l/100km) Urbano: N/D - Carretera: N/D - Mixto: N/D
DIMENSIONES - PESO (PULSE)
Capacidad del baúl (l) 370/1.238 (Pulse) y 600/1.087 (Fastback)
Peso en vacío (kg) N/D
Peso en orden de marcha (kg) 1.280 (Pulse) y 1.299 (Fastback)
Largo total (mm) 4.115 (Pulse) y 4.425 (Fastback)
Ancho total (mm) 1.777 (Pulse) y 1.780 (Fastback)
Alto total (mm) 1.544
Distancia entre ejes (mm) 2.532
Capacidad del depósito de combustible (l) 47
CAPACIDADES OFF-ROAD
Capacidad máxima de vadeo (mm): N/D
Capacidades fuera de camino (º) ángulo de ataque: 20,0 - ventral: 21,2 - de salida: 27,0 (23 en Fastback)
Despeje al suelo (mm): 188


PRECIOS Y GARANTÍA

Comercialización prevista para finales de septiembre o comienzos de octubre. 3 años o 100.000 km.

COMERCIALIZA

Sevel Uruguay S.A. Av Italia 5575. Tel. 26050740. Web: www.fiat.com.uy


Galería: Pulse y Fastback Abarth 1.3 Turbo 270 AT6 | Crédito: Autoblog.
Contacto Pulse y Fastback Abarth 1.3 Turbo 270 AT6


(*) Viaje por invitación de Sevel Uruguay y Stellantis Latam