Contacto: Renault Arkana esprit Alpine E-Tech Hybrid 1.3 TCe EDC

Probamos a la actualización del Renault Arkana E-Tech Hybrid. Llega importado desde Corea del Sur ahora en un solo nivel de equipamiento (esprit Alpine), que va asociado al 1.3 litros TCe mild-hybrid con 140 cv de potencia junto a una transmisión automática de doble embrague y siete relaciones (EDC).

Société des Automobiles Alpine SAS, comúnmente conocida como Alpine, es un fabricante francés de automóviles deportivos y de competición establecido en 1955. La marca fue creada en 1954 por Jean Rédélé, que era originalmente propietario de un taller mecánico, en la localidad francesa de Dieppe y cuyo modelo emblemático es el bellísimo y atemporal A110 Berlinette. Hoy la marca sigue instalada en ese pueblo, pero manteniendo una relación estrecha con Renault Groupe, porque pertenece a él.

A tal punto que Alpine se fusionó con Renault Sport en 1976 y la producción de modelos con la marca Alpine cesó en 1995. La firma se relanzó con la introducción del nuevo A110 en 2017 (ver nota). Y en enero de 2021, como parte de una reestructuración de la empresa, Renault anunció la fusión de Renault Sport para formar una unidad de negocio. Pero también en ese entonces, la denominación esprit Alpine comenzó a ofrecerse como una versión de estética sport en varios modelos de la marca del rombo.

Así como BMW tiene sus M Sport, Audi sus versiones S line o Mercedes-Benz las AMG Line, ahora Renault también ofrece una versión con tratamiento deportivo, pero solo en lo visual. Ya la ofrecía, pero se llamaba R.S. Line. Desaparecida Renault Sport como entidad, ahora esprit Alpine (léase ɛspʁi en francés, no “espirit” como muchos dicen) pasa a ocupar ese rol. En nuestro país el Arkana E-Tech Hybrid fue el primero en estrenar esta variante, aprovechando su actualización de mitad de vida, revelada en Europa en julio de 2023 (ver nota). Ese update llegó a Uruguay en marzo de 2025 (ver lanzamiento).

Llegó importado desde la planta que el grupo franco-japonés tiene en Busan, Corea del Sur, en la fábrica de Renault Samsung Motors, dado que en ese mercado se comercializa como Samsung XM3. Lo hizo asociado a un motor 1.3 litros turbo (TCe) mild-hybrid (E-Tech Hybrid) con 140 cv de potencia y 260 Nm, junto a una transmisión automática EDC de doble embrague y siete relaciones. Luego de haber evaluado a los Arkana E-Tech Hybrid 1.3 TCe EDC (ver prueba) en 2022 e Intens 1.3 TCe EDC en 2024 (ver prueba), ahora llegó el momento de conocer a la actualización con estética esprit Alpine.

EXTERIOR

No voy a explayarme mucho sobre el diseño del Arkana porque ya hace 3 años que está entre nosotros. Es un estilo conocido que, en su mayoría, suele agradar bastante con esa silueta de crossover tipo fastback. Los cambios vienen de la mano de incorporar a la nueva identidad de la marca con el logotipo Renault “Nouvel’R” que acá fuera estrenado por el Kardian (ver prueba), integrado en el frontal con un borde negro brillante que se une a los faros. El diseño del logotipo sirve de base para el nuevo patrón de la parrilla, basado en la repetición de rombos de forma “deconstruida” y haciéndose eco del rombo central.

Por último, en la parte trasera, el logotipo situado en el centro del portón trasero está acabado en negro, color que también se utiliza para las letras del nombre. Los faros, por su parte, han recibido un tratamiento ligeramente ahumado en el cristal para aportar un toque de modernidad. El cromado de los elementos decorativos (rejilla del radiador, marco de las ventanillas, etc.) ha desaparecido en favor del color negro. Personalmente creo que ganó mucho el estilo con esta actualización.

En el caso específico de esta versión esprit Alpine, se distingue por tener un aplique inferior en el paragolpes delantero en gris satinado, junto a detalles negro brillante. Las nuevas llantas de aleación diamantadas “esprit Alpine” de 18 pulgadas van sobre neumáticos Kumho Ecsta HS51 en medida 215/55 R18. También lleva los logotipos de la versión con la letra “A” en el característico azul Alpine. Algo curioso es que no existe un tono específico. En la marca existieron todos estos tonos de azul a lo largo de los años: Azur Bleu, Acier Bleu, Pacifique Blue y Estoril Bleu. Sí, casi como el Estoril Blau de los BMW.

Yendo al sector trasero, además de los mencionados cambios del update del modelo, en esta variante incorpora dos (muy) falsas salidas de escape cromadas, en color negro brillante, que al menos pasan bastante desapercibidas. Algo curioso es que por la inclinación de la luneta (que complica bastante la visibilidad hacia atrás), carece de un brazo limpialuneta. Cerrando con el apartado exterior, me atrevo a decir que es uno de los Renault más bonitos que se comercializan en nuestro mercado. En términos de dimensiones el Arkana sigue midiendo 4.568 mm de largo, 1.821 mm de ancho, 1.571 mm de alto y una distancia entre ejes de 2.720 milímetros. Si bien este producto utiliza la misma plataforma CMF-B del Clio V (ver prueba), por ejemplo, este crossover pertenece por dimensiones en el segmento C (compacto).

INTERIOR

En el interior, los cambios son un poco más llamativos y significativos. Se destacan los asientos tapizados con una mezcla de eco-TEP (10% de materiales de origen biológico) y Alcantara, con costuras azules y un logotipo Alpine en el respaldo. Algo curioso es que esta tapicería solo está presente en las butacas delanteras, no en el asiento posterior. Los cinturones de seguridad presentan dos franjas azules y en los paneles de las puertas y el volante presentan un pespunte tricolor azul-blanco-rojo, mientras que la parte del tablero situada frente al pasajero delantero tiene un acabado con un efecto pizarra, algo cuestionable.

Por último, incorpora un selector de cambio electrónico del tipo auto-centrante que funciona bastante bien y las otras mejoras llegan en forma de pantallas mejoradas. El instrumental sigue siendo un display de 10,2 pulgadas bastante configurable, pero el sistema multimedia pasa a ser de 9,3 pulgadas con una pantalla vertical muchísimo mejor que la de siete pulgadas de modelos previos. También incorpora las cámaras “Multiview” frontal, laterales y trasera (MVC) con detector de obstáculos lateral. Y aunque la resolución no es de lo mejor, es un sistema muy superior al previo. Cambia también el logo del volante y la pedalera en esta configuración, pasa a ser metálica con tacos de goma. Todo ayuda a una mejor percepción general del modelo y reconozco que el tratamiento esprit Alpine, le levantó mucho la imagen.

En la posición de manejo, la única novedad es que ahora el asiento del conductor cuenta ahora con calefacción para el asiento (también el acompañante) y volante, manteniendo la regulación eléctrica y lumbar de la versión Intens previa para ambas butacas. Pero la postura sigue siendo la misma. Esto es bueno, dado que tiene una columna de dirección que regula -con generosidad- en profundidad y algo menos en altura, mientras que la butaca tiene un respaldo muy cómodo. Aunque el asiento sigue quedando algo corto para las piernas de los más largos. Pero en términos generales, consigue una buena postura.

Luego en términos de habitabilidad, baúl y calidad de materiales, no hay cambios significativos, por no decir que no los hay. En relación a la calidad, usa (y por suerte también abusa) de los plásticos de inyectado blando, estando presentes incluso en las contrapuertas tanto delanteras como traseras. Hay un esmero general en términos de presentación y uso de materiales con esta versión y como dije más arriba, cambia por completo la percepción frente a las variantes previas. Y en comparación con otros productos de la gama local de Renault, queda también como uno de los mejor terminados a la venta en la actualidad.

También mantiene el conocido espacio para llevar con comodidad a cuatro adultos y de forma eventual, hasta un quinto. El espacio entre las butacas delanteras y las piernas de los que viajen allí es muy generoso. Y como si fuera poco, el piso tiene un falso túnel, pero es bastante plano (aunque no completamente), algo que no es muy común en este segmento. Además las puertas son grandes y se abren a un buen ángulo, facilitando el acceso de personas o padres queriendo instalar sillas infantiles. Pero el techo interior en color negro de esta versión, le quita algo de luminosidad al habitáculo y genera cierta claustrofobia en las plazas traseras gracias también a la silueta tipo fastback. Por último, el baúl conserva la capacidad mínima de 480 litros, ampliable hasta 1.263 litros de máxima. Por debajo del piso de cargas está el neumático de auxilio temporario (un T145/90 D16, de la marca Khumo).

EQUIPAMIENTOS

Como siempre digo, en caso de querer conocer la dotación completa la tiene en el link “ver lanzamiento” de la introducción. Destaco que el Arkana ahora incorporó con esta actualización el paquete completo de asistencias a la conducción que nunca tuvo en las ediciones previas. Ahora cuenta de serie con: detector de fatiga para el conductor, frenado automático de emergencia (AEBS) con detección de peatones y ciclistas, advertencia de colisión frontal (FCW), alerta de punto ciego (BSW), alerta de cambio de carril (LDW), alerta de distancia segura (DW), alerta de tráfico cruzado trasero (RCTA) con función de frenado, frenado autónomo de emergencia con detección de peatones y ciclistas, control de velocidad crucero adaptativo con Stop & Go y función de centrado de carril (active driver assist), limitador de velocidad, reconocimiento de señales de tránsito con alerta de velocidad máxima, y encendido automático de luz de carretera/luz de cruce (AHL).

Además de esto, mantiene ítems ya vistos en la versión Intens que se ofreció hasta finales del año pasado, como por ejemplo, el sistema de sonido premium Bose con nueve altavoces y Fresh Air Subwoofer (FAS), que tiene un sonido más que decente, además del techo solar eléctrico con apertura tipo spoiler. Más allá de esto, sigue careciendo si consideramos el precio, de los siguientes elementos: climatizador automático de dos zonas (tiene de una sola, pero con salidas de aire posteriores), conexiones USB-C (son todas USB-A, de carga y transferencia más lentas), portón trasero eléctrico o la posibilidad de tener memorias en la butaca del conductor. Pero estos reclamos no son posibles ni siquiera en los mercados europeo o coreano.

MOTORES, BATERÍA Y TRANSMISIÓN

Si vienen siguiendo el devenir del Arkana a nivel local, habrán notado que primero vino con una configuración micro-híbrida, luego dejó de venir y ahora se vuelve a ofrecer. Desconozco los motivos de haber realizado semejante incoherencia. Pero la realidad es que ahora lleva una vez más al TCe HR13DDT micro-hibridado, que es el mismo impulsor M 282 de Mercedes-Benz, que Renault y Daimler desarrollaron en conjunto, aunque es más un motor fabricado por la firma francesa que por la alemana.

Se trata de un cuatro cilindros con 1.333 cc de cilindrada, inyección directa con turbocompresor, intercooler y distribución por cadena. Produce 140 cv de potencia disponibles a las 5.500 rpm y un torque máximo de 260 Nm entre las 1.800 y 3.750 vueltas. El sistema mild-hybrid integra un generador que consta de un motor eléctrico (sin cifras declaradas) asociado a una batería de ion litio con una capacidad de 0,13 kWh y 12V. Va asociado a una transmisión automática de doble embrague EDC con siete marchas, de origen Getrag. Si tenés un Arkana de los primeros que vinieron, acá no vas a encontrar ni una novedad.

En términos generales esta es una combinación mecánica que presenta una respuesta a medio régimen algo quedada, por debajo de las 1.800 rpm. Pero una vez que superamos esa cifra, la reacción sorprende para bien de una cilindrada tan pequeña. El par motor es plano en casi todo el rango de utilización, teniendo como resultado un impulsor elástico y bastante ágil. La electrificación se percibe de manera sutil, pero en especial cuando se activa el “modo de navegación a vela” en las fases de desaceleración o a bajas velocidades. Sin dudas, el mejor impulsor de la gama local de Renault en la actualidad, usado por la dupla Oroch (ver prueba) y Duster (ver prueba), así como en Nissan Qashqai (ver prueba) con elogios similares.

Los mismos comentarios que antes también le caben a la transmisión, con es una doble embrague de siete marchas desarrollada y producida por Getrag, pero ahora con un selector autocentrante que funciona bien por colocar las marchas con un solo impulso largo, como debe ser. Tiene un funcionamiento correcto y sufre del mismo acople torpe del embrague a bajas velocidades, por ejemplo, en maniobras de estacionamiento. Pero en general funciona bien. Es un conjunto acorde a la mecánica, pero no destaca frente a otras doble embrague. Fábrica declara una velocidad final de 205 km/h y una aceleración de 0 a 100 km/h en 9,1 segundos (10,07 segundos según Autoblog) y 5,7 l/100 km de consumo combinado. En las cifras de prueba, obtuve 6,5 l/100 km en ciudad (1 litro menos que el Intens previo y 0,5 menos que el E-Tech previo), 5,0 l/100 km en ruta (0,3 menos que el Intens y 0,1 más que el E-Tech anterior) y 6,0 l/100 km en ciclo mixto (0,7 litros menos que el Intens TCe y 0,6 menos que el E-Tech de 2022). El depósito de combustible mantiene los correctos 48 litros (demora bastante en bajarlos, así que rinde bien), mientras que el peso en orden de marcha es de 1.336 kg, es decir, lo mismo que antes.

COMPORTAMIENTO DINÁMICO

Salvo por el regreso de la micro-hibridación y las novedades estéticas o de equipamiento, la mayor novedad dinámica en este nuevo nivel esprit Alpine es que ahora cuenta con neumáticos y llantas un poco más generosas en dimensiones que en la versión Zen o anteriormente llamada E-Tech “a secas”, aunque idénticas en tamaño a las del Intens TCe. Solo en algunas ocasiones se pueden sentir que los neumáticos duros manifiestan cierto “divorcio” entre la comodidad del chasis. Pero lo compensan con un perfil 55, que es correcto para nuestras calles y rutas. Es un poco más firme que las previas versiones, pero apenas. No molesta. Eso sí, el nombre “esprit Alpine” es honesto. Tiene el espíritu, no es un crossover deportivo.

Tanto el motor como la caja se encuentran a gusto en el uso más urbano. El 1.3 apenas se oye cuando está encendido, y la transmisión deja sacarle provecho a un impulsor que mueve con bastante agilidad una carrocería que pasa los 1.300 kilos y monedas en orden de marcha. El conjunto mecánico, por su parte, nos permite trabajar al impulsor a 1.500 vueltas, para circular a 70 km/h en D7. Pasando a velocidades de ruta, por su parte, la mecánica y caja trabajan viajando a 110 km/h con el selector en D7 a unas muy relajadas 1.900 rpm, los mismos números que registraban la variante E-Tech electrificada o la Intens TCe. Algo que también conserva es la buena insonorización general, con 65 dB a 100 km/h.

Las recuperaciones en carretera por su parte, tienen cifras lógicas para esta potencia y peso: para ir de 80 a 110 km/h se toma unos 6,77 segundos (6,20 y 6,63 marcaron los Intens y E-Tech en su momento), que es un tiempo bastante razonable para un crossover de corte familiar. Aunque muchos quieran traficarlo por deportivo por esa silueta tipo fastback, el Arkana no podría estar más en las antípodas de eso. La insonorización, en tanto, es correcta tanto a nivel de mecánica como también eólico, cumpliendo con unos correctos 68 db a los 100 km/h en ruta. Solo recién pasadas las 4.000 rpm se dejará escuchar el 1.3 en el interior, aunque su sonido no es para nada desagradable, e incluso en ese ritmo, el ruido tampoco se cuela tanto en el habitáculo. Aprueba con muy buena nota en este sentido y conserva todo lo ya conocido.

Al igual que la última versión Intens ofrecida, en esta esprit Alpine, incorpora un selector de modos de conducción Multi-Sense (Eco/Sport/My Sense). En el modo “Eco” (que no es el mismo que el Eco-Mode, por alguna razón que no entiendo) se centra en el ahorro de energía, con una dirección suave y la gestión del motor se ajusta para reducir el consumo de combustible. El modo “Sport”, por su parte, da una mayor respuesta del motor y la dirección es apenas más firme (no mucho). Por último, el seteo por defecto se denomina modo “My Sense”, que permite configurar de forma manual la iluminación ambiental, el diseño del instrumental y la dureza de la dirección con tres seteos (Comfort, Regular y Sport, pero sin diferencias). Así que para ser preciso, serían dos los modos reales. En lo personal, lo utilicé toda la prueba en el último y con la dirección en Sport. En conclusión, mantiene las mismas virtudes que tuvo siempre.

CONCLUSIÓN

Si venís prestando atención al texto, habrás concluido que este es el mejor Arkana que llegó a Uruguay hasta el momento. Y no estarás equivocado, porque es exactamente la impresión que deja. Ya sea por la estética, como por el retorno de la micro-hibridación a la oferta o las mejoras en los equipamientos, resulta ser el producto que Renault siempre tendría que haber ofrecido desde 2022 en adelante. Si miramos al E-Tech original o a la dupla Zen/Intens sin micro-hibridar, este esprit Alpine soluciona todos sus problemas. Pero el problema creo que ahora viene por el timing de traer esta configuración tan acertada finalmente.

En menos de un año, la marca ya anunció que tendrá un nuevo SUV-C denominado Boreal que se producirá en Brasil utilizando la plataforma del Kardian y de su futura pick-up compacta (la que saldrá del Niagara Concept). Todavía no hay fotos ni datos, pero ya hasta figura en la home de la web de Renault Uruguay como anticipo (ver web). Pese a esto, todo apunta a que será un “hermano” con estética Renault del ya conocido Dacia Bigster (ver nota) que ya se vende en Europa. Es decir, todo indica que se estaría replicando lo ya visto con el Dacia Stepway actual y el Renault Kardian en términos de desarrollo.

Por eso no es desatinado tener una sensación tan francesa como recurrente con esta marca, llamada “déjà vu” en donde un producto de extra-zona se ve arrinconado por un nuevo modelo regional con un mejor posicionamiento de precio, y que además, responde mejor a las necesidades, preferencias y gustos del cliente latinoamericano. Si estás pensando en lo que sucedió con Clio V tras la llegada del Kardian, entenderás a la perfección cuál es mi hipótesis con el futuro de Arkana. Ojalá me equivoque. Porque sería una lástima que tras dos desaciertos, justo desaparezca cuando por fin recibe a su mejor versión de todas.