Prueba: Chery Tiggo 2 1.5 M/T

jueves, 26 de octubre de 2017



Durante cinco días y por algo más de 470 km evaluamos al nuevo modelo de Chery a nivel local, el Tiggo 2.
Por más de 470 km evaluamos al nuevo integrante de la familia Chery. Se trata del Tiggo 2 que llega importado desde China en una sola versión equipada con una mecánica 1.5 litros de 107 cv de potencia asociada a una transmisión manual de cinco relaciones. La prueba completa, a continuación.

El Chery A13 T es el nombre interno del modelo que estás viendo en imágenes. Pero en nuestro mercado y otros a nivel mundial, lo conocemos como Tiggo 2 (ver lanzamiento). Este aventurero es un derivado del A13, también denominado como Fulwin Hatch (ver lanzamiento), aunque por su nombre Tiggo, dentro de la gama Chery está posicionado por debajo del Tiggo 3 (ver lanzamiento).

Frente al Fulwin, este Tiggo 2 se diferencia por tener una estética más aventurera y enfocada en estilo a la gama de SUVs de la firma originaria de Wuhu, en China, donde también se produce el modelo que nos convoca en esta evaluación junto a los otros productos de la marca.


Por el momento la gama del Tiggo 2 se reduce a una sola variante que no tiene denominación de equipamiento. Tan solo se llama "1.5 M/T", haciendo referencia a la mecánica y la transmisión que utiliza, una manual de cinco relaciones. Su precio de venta al público es de U$S 18.990 y la garantía de 3 años o 100.000 km.

Este es el primer Chery que pasa por el garage de Autoblog en algo más de siete años de vida del sitio. Así que para este editor no es una evaluación menor. A continuación saldaré dos cuentas pendientes, probar al Fulwin Hatch (porque en el fondo este Tiggo 2, lo es) y al Tiggo 2 como el nuevo integrante de la marca a nivel local. Arranquemos con la evaluación sin dar más vueltas.


Exterior

Si bien Chery está comercializando en varios mercados (el nuestro incluido) al Tiggo 2 como un SUV, la realidad es que es la variante aventurera del Fulwin Hatch, así como el CrossFox es un derivado del Volkswagen Fox o el Sandero Stepway del Renault Sandero. Pero a los ojos de muchos, y por más que algunos reneguemos, esto es "una camionetita".

Visto desde el frontal el parentesco con su "hermano" mayor, el Tiggo 3, es notorio. Es más, si lo miramos desde ese ángulo, no veremos un solo rasgo del Fulwin ya que no se le parece en nada. La parrilla adopta el nuevo lenguaje de diseño de Chery y la acompañan dos grandes ópticas delanteras (con la palabra "Tiggo" grabada a los lados) y en la parte baja, dos luces diurnas que trabajan supliendo a los ausentes antinieblas delanteros.


Si miramos el lateral es donde este modelo delata a sus raíces. Es similar al del Fulwin, aunque tiene algunos toques particulares. El primero y más notorio es la adopción de varios plásticos de color negro en los guardabarros y las bases de las puertas. El otro es el generoso despeje, que alcanza los 186 mm en comparación con los 130 del Fulwin convencional.

En la parte superior aparecen barras de techo longitudinales en color gris satinado que combinan muy bien con el tono naranja de la unidad probada. También cambian los retrovisores, que son bastante generosos en tamaño, ayudando a la visibilidad, pero complicando en ruta a la insonorización, ya que no se llevan bien con el viento y transmiten bastante ruido eólico a la altura del pilar A.


La otra diferencia son las llantas de aleación, de diseño exclusivo para el Tiggo 2. Son de 16 pulgadas y en la unidad de prueba iban montadas sobre neumáticos Giti GitiComfort 228 V¹ en medida 205/55 R16. Pese a la estética aventurera, estos son cauchos para uso exclusivo en asfalto. Modelos rivales de este Tiggo 2 en algunas ocasiones suelen usar neumáticos de uso mixto.

En el sector trasero al igual que el delantero, también gana una estética diferencial frente al modelo del que deriva. Presenta un listón cromado horizontal en el portón trasero y en la parte baja cuenta con un falso difusor que aloja también a los sensores de estacionamiento posteriores y la cámara de retroceso. Si vamos a las cotas, el Tiggo 2 mide 4.200 mm de largo, 1.760 mm de ancho y 1.570 mm de alto. La distancia entre ejes, en tanto, es la misma del Fulwin Hatch, con 2.527 milímetros.


Interior

Si bien por fuera poco puede ocultar su parentesco con el Fulwin, en el interior el Tiggo 2 se despega de su hermano "no-aventurero" por un tratamiento muy diferente al que puede verse en aquel modelo. Por no decir que son dos interiores distintos por donde se los mire, porque uno apuesta a los plásticos negros en distintas tonalidades, aunque opacos y carentes de estilo propio. Mientras que el otro juega con el color y las texturas por doquier, con un planteo más lúdico y juvenil.

Este Tiggo 2 usa una receta similar a la de uno de sus rivales más directos, el Chervolet Onix Activ (ver contacto) que es tapizar al interior con tonos de naranja y terracota. El resultado es menos invasivo que en el producto de General Motors, pero de todas formas logra un estilo similar. En términos de calidad, el Tiggo 2 sube el listón frente a los Fulwin, pero el esquema sigue siendo de plásticos duros y tendiendo a lo rústico en el tacto. De todas formas, no se ven piezas mal ajustadas o tampoco se oyen "grillos".


Si bien en ese sentido no hay quejas, sí las hay en la posición de manejo. Pese a que la butaca es bastante cómoda, no se puede regular en altura. Es fija. Y para colmo, está puesta tan arriba como se pudo, porque para alguien de 1,80 m como yo la línea de visión queda en la parte superior del parabrisas. Es un mal endémico de todos estos productos que se creen que son SUVs solo por sentarte a medio metro del suelo. La regulación en altura (solo en altura) del volante tampoco ayuda a mejorar esto, porque es bastante escasa.

El instrumental tiene solo dos agujas físicas que corren de forma inversa al resto de la industria, como en el i-Cockpit de los Peugeot 308 y sus derivados. En el medio del tablero va un display monocromo con bastante información de la computadora de a bordo así como también los medidores de temperatura del líquido refrigerante del motor así como también del combustible remanente en el depósito.


En el centro del habitáculo y enmarcada en el único plástico "piano black" de todo el interior va la pantalla multimedia táctil de ocho pulgadas con AM/FM/USB/iPod/Bluetooth y compatibilidad con Android (llamada Chery Cloudrive), que en otras palabras menos marketineras, se trata de un "espejamiento" directo de la pantalla de un smartphone del robotito verde. Su funcionamiento es bastante sencillo, aunque en algunos momentos del día los reflejos solares complican la visualización de la pantalla. Por el resto, es correcta, aunque no tiene navegador ni Android Auto o Apple CarPlay, que hoy por hoy son tan necesarios como el aire.

Pasando a las plazas traseras el Tiggo 2 cuenta con una habitabilidad bastante correcta para dos adultos y un niño, o por qué no, un adulto con cuerpo de adolescente. Aquellos que viajen en las plazas laterales no tendrán problemas a lo largo, mientras que a lo alto irán más ajustados solo aquellos que pasen con holgura el 1,80 m de alto, porque hasta esa talla se viaja muy cómodo. La plaza central, como la mayoría de los productos de segmento B, está pensada solo para viajes cortos por ser la más escasa de espacio, pero no por ello es incómoda. Su mayor limitación está a lo ancho al tener un falso túnel central que roba algo de lugar para las piernas.


Un detalle que comparte el Tiggo 2 con el Fulwin es que las puertas traseras son gigantes, así que el acceso es muy fácil incluso si tenemos que hacerlo con una silla para niños, que a su vez, tendrán sus respectivos anclajes de serie (ISOFIX y TopTether). Ya que menciono los elementos de seguridad pasiva, tiene tres apoyacabezas y tres cinturones inerciales de tres puntas. Esto ya es mucho más que lo que ofrecen varios rivales. Bien por esto, Chery.

El baúl cuenta con 341 litros, que son 39 litros menos de los que declara el Fulwin. ¿Dónde se perdieron? Vaya uno a saber, porque en la práctica no es un espacio tan limitado y cumple bien para el promedio de usuarios de este segmento. En el caso de no alcanzar, la capacidad puede ser ampliable hasta los 1.330 litros rebatiendo el respaldo trasero en proporción 60:40. Por debajo del piso del baúl está el auxilio, que es del tipo temporario de la especie galleta: un Giti en medida T125/70 R16.


Motor y transmisión

Mecánicamente entre el Tiggo 2 y un Fulwin Hatch no hay diferencias. Ambos llevan un impulsor denominado SQR477F y que está desarrollado por Chery junto a la empresa austríaca ACTECO. Tiene una cilindrada de 1.497 cc, 16 válvulas, cuatro cilindros, inyección multipunto, doble árbol de levas a la cabeza, y 107 cv de potencia a las 6.000 vueltas. El par máximo, en tanto, es de 135 Nm disponibles a las 2.750 vueltas.

La transmisión es una manual de cinco relaciones y la tracción es delantera, aunque en otros mercados también lleva en opción una caja automática con convertidor de par y cuatro marchas. Sin embargo, como no llega a Uruguay, hablemos del matrimonio entre este 1.5 y esta transmisión manual. El motor le permite moverse con agilidad al Tiggo 2, gracias a un torque que se presenta a regímenes entre medios y bajos, por lo que en el universo urbano, es donde más a gusto se siente.


Este impulsor trepa rápido en vueltas, y es ideal para moverse en el tránsito por la pronta entrega del par motor saliendo en los semáforos. Se percibe correcto, aunque no es un impulsor enfocado al uso enérgico, más bien todo lo contrario, porque se centra en la suavidad de marcha así como también el comportamiento sereno, urbano y familiar.

En ruta, en tanto, el mil cinco va bien (solo bien), trabajando a un ritmo medio con una quinta muy larga, que no le deja sacar todo su potencial a la luz. El impulsor tiene una respuesta más contundente llegando a las 2.500 rpm, pero con un comportamiento algo quedado en el régimen alto. Como veremos más adelante, sus recuperaciones en ruta no están entre las más ágiles, producto de unas relaciones de caja largas.


Ya que la menciono a la transmisión elegida para acompañar a este motor, como ya dije antes, es una manual de cinco relaciones. Su funcionamiento es correcto y prioriza la suavidad de manejo en ciudad, con marchas largas en las primeras tres y aún más largas las últimas dos, pero en especial la quinta que busca priorizar los consumos por sobre el rendimiento del impulsor.

El punto destacado de la caja, (denominada con todo este código alfanumérico: QR515MHF) es que el selector tiene un tacto agradable y no manifiesta imprecisiones cuando queremos pasar rápido de marchas en la ruta o en el tránsito más denso, por ejemplo. Es un conjunto mecánico que no maravilla, pero que tampoco se despega de lo que se puede encontrar en rivales de similares características en este segmento.


Chery declara para el Tiggo 2 una velocidad final de 170 km/h, mientras que el consumo mixto está en los 5,9 litros cada 100 kilómetros. No hay cifra de aceleración de 0 a 100 km/h oficial. En los registros de prueba, en tanto, obtuve 8,4 litros cada 100 km en ciudad, 6,6 l/100 km en ruta, y 7,5 litros cada 100 kilómetros en el ciclo mixto. Son cifras correctas para esta cilindrada y potencia. El depósito de combustible lleva 50 litros y el peso en vacío declarado es de 1.215 kg.

Comportamiento dinámico

Pese a que presenta un aspecto muy aventurero, al igual que sus rivales, este Chery pasará la gran parte del tiempo visitando caminos asfaltados y rara vez bajará a la tierra. Pensando en eso, en el ámbito urbano el Tiggo 2 tiene un logrado confort de marcha con un esquema que prioriza un andar con una suspensión tirando hacia lo suave y blando, otorgando una buena cuota de comodidad en el uso diario.

El despeje extra al suelo de 56 mm de despeje frente a su hermano "no-aventurero" no dejará que lo perturben lomos de burro, baches chicos, caminos adoquinados, badenes o cualquier tipo de obstáculo urbano. Y además tampoco lo hará con los ocupantes, ya que las suspensiones filtran muy bien todo en esos casos.


Si bien los neumáticos son gorditos y tienen un buen perfil (55% de 205 mm), a veces igual llegan al habitáculo algunas sequedades en ambos trenes cuando pasamos por vías férreas o pozos muy marcados de la calle, haciendo tope en las torretas de suspensión.

Pasando a la mecánica hay que decir que es correcta para circular entre los tránsitos más densos y con un nivel de insonorización bastante correcta, aunque se lo siente mucho en el habitáculo por encima de las 4.000 vueltas. A su vez me llamó la atención (para bien) suavidad del impulsor, porque no se la percibe como una motorización algo rasposa en su funcionamiento, a diferencia de otros productos que comparten origen con el Tiggo 2. Chery logró una cuota extra de refinamiento en este sentido.


El impulsor trabaja a unos 70 km/h trabaja en quinta marcha a 1.900 vueltas con un consumo que en ciudad rara vez pasará los 8,5 litros cada 100 kilómetros incluso si lo exigimos con un ritmo de manejo más ágil. Es decir, números bastante lógicos para un motor de 107 cv. Un detalle bastante mejorable del modelo es la insonorización a nivel de viento (por los espejos) y rodamiento (por los neumáticos), además de la ya mencionada del motor por encima de un régimen medio.

Si salimos a la ruta, a nivel dinámico no presenta (grandes) vicios direccionales si nos encontramos con algún viento cruzado o ante el pasaje de camiones o buses por la otra mano. En donde encuentra a su mayor problema es en las recuperaciones de velocidad. De 80 a 110 km/h en 4ª tarda 12,21 segundos, mientras que en 5ª hacer la misma recuperación le lleva 17,71 segundos. Consejo: bajar a 4ª o 3ª para hacer un adelantamiento seguro y solucionado el problema, ya que en tercera cumple ese aumento de velocidad en unos más lógicos 9,26 segundos.


En contrapartida, el 1.5 sí gana en economía de combustible cuando salimos a recorrer varios kilómetros, especialmente gracias a la larga relación final de la caja. Manejando dentro de los límites legales, se le pueden sacar cifras cercanas a los 6,6 litros cada 100 km, pero con el motor en las 3.000 rpm en quinta y viajando a unos 110 km/h constantes. No son números que sorprendan, pero son acordes a su naturaleza y que cumplen con las expectativas de un usuario de este tipo de aventureros urbanos.

La dirección cuenta con asistencia hidráulica, aunque no es de las más comunicativas en tramos de curvas rápidas, de todas formas entrega un feedback correcto. Para estacionar se presenta como bastante amigable por lo liviana que es pese a no ser de las modernas y de por sí anestesiadas con asistencia eléctrica.


Al doblar fuerte, en tanto, la trompa se inclina mucho sobre el tren delantero y no se muestra muy a gusto en esas maniobras, mientras que el trasero (de eje rígido) no llega a despegarse del suelo, dando una sensación de que se lo puede corregir fácilmente con el volante cuando empecemos a sentir la falta de adherencia. En otros mercados ofrece los controles de tracción y estabilidad en opción. Sería bueno que en Uruguay también se pudiera disponer de estas asistencias.

Equipamiento

El Tiggo 2 se ofrece con una sola versión de equipamiento que para los U$S 18.990 que vale, ofrece bastante más que algunos rivales que ponen su precio de venta al público por encima de esa cifra. Trae de serie: pack eléctrico (cuatro levantavidrios, espejos, y bloqueo), control de velocidad crucero, tapizados en tela, faro antiniebla trasero, dirección hidráulica, respaldo trasero rebatible 60:40, Gear Shift Indicator (GSI), aire acondicionado manual, computadora de a bordo, barras de techo longitudinales, volante multifunción regulable en altura, apertura interna del depósito de combustible, sensores de estacionamiento traseros, pantalla multimedia táctil de ocho pulgadas con AM/FM/USB/iPod/Bluetooth y compatibilidad con Android (Chery Cloudrive), seis parlantes, cámara de retroceso, luces diurnas LED, y llantas de aleación de 16 pulgadas sobre neumáticos en medida 205/55 R16.


Si bien la dotación es bastante buena, siempre quedarán cosas en el tintero dentro del buzón de reclamos. En este caso, por el precio, el Tiggo 2 podría ofrecer algunos amenities más, como ser: volante regulable en profundidad, compatibilidad con Android Auto o Apple CarPlay (más allá del espejamiento con Android que sí ofrece), climatizador automático de una zona (al menos) o un retrovisor con anti-encandilamiento automático. Incluso en algunos mercados ofrece entre sus opcionales llantas de 17 pulgadas, techo solar eléctrico o la más necesaria regulación en altura de la butaca del conductor, que cambiaría bastante la posición de manejo de este producto para bien.


Seguridad

La dotación de seguridad del Tiggo 2 comprende doble airbag delantero, frenos ABS+EBD, anclajes ISOFIX y TopTether para sillas infantiles, cinco apoyacabezas, cinco cinturones de tres puntas, así como también el encendido de las balizas ante una detención de emergencia. En relación a la estructura, por ahora no hubo pruebas de organismos de evaluación independiente sobre este modelo.

Si bien está en la línea de sus rivales en este sentido, ofreciendo más o menos lo mismo, en otros mercados este modelo tiene entre sus opciones a los controles de tracción y estabilidad, así como también al asistente de arranque en pendientes. Lo curioso es que la dotación de airbags es la misma en todos los países donde se vende: tan solo dos y delanteros. Podría ofrecer al menos los laterales delanteros (tipo cabeza/tórax) en opción.


Los frenos, en tanto, son de discos ventilados en el eje delantero y de discos sólidos en el tren posterior, una dotación que no suele verse en este segmento. Su funcionamiento es correcto, deteniendo al vehículo siempre en linea recta, y como ya dije, encendiendo las balizas para alertar a otros conductores.

Pero cuando empezamos a exigir al sistema un poco más, el tacto del pedal de freno suele ponerse algo esponjoso ante reiteradas detenciones de emergencia. También se percibe algo ansioso al ABS y actúa de forma muy prematura, pero no es nada que llegue a poner en juego la eficacia del sistema ni tampoco pierde la trayectoria.


Precio, garantía y competidores

El Chery Tiggo 2 se ofrece en una sola versión y a un valor de U$S 18.990 junto a una garantía bastante buena, de 3 años o 100.000 kilómetros. La cantidad de rivales directos se reduce a tres por estos días, aunque no hace mucho tiempo atrás las variantes "aventureras" de hatchbacks chicos pululaban por nuestras calles, sobre todo los de origen chino y Mercosur.

Pasemos a la competencia actual de este Chery: Chevrolet Onix Activ 1.4 M/T (U$S 20.990), Renault Sandero Stepway Expression 1.6 16v (U$S 18.990), Renault Sandero Stepway Privilège 1.6 16v (U$S 20.890), Volkswagen CrossFox 1.6 16v (U$S 22.790). Si bien no son hatchbacks, sino puros crossovers chicos, por precio también podrían entrar en esta lista los siguientes modelos: Chana CX20 1.4 Sport (U$S 18.990), FAW D60 1.5 Luxury  (U$S 18.990), FAW D60 1.5 Luxury (c/techo solar) (U$S 20.990), JAC S2 1.5 Intelligent (U$S 20.690), Great Wall M4 1.5 M/T (U$S 17.490), Lifan X50 VIP 1.5 M/T (U$S 17.490) y ZX Auto Urban Ark 1.5 Luxury (U$S 18.990).


Hoy Chery arriba último con este producto al segmento, pero con la carta de presentación de que el Fulwin es uno de los modelos con mejor reputación de la gama, así como también el nombre "Tiggo" en términos de SUVs accesibles. Esto ayuda a que aquellos que siempre quisieron un hatch chico aventurero tengan también una justificación más para elegirlo por sobre rivales muy afianzados, como es el caso del Sandero Stepway.

También es cierto que está creciendo de forma lenta un nuevo segmento de SUVs chicos (en su gran mayoría de origen chino) en el entorno de precios de estos modelos mencionados que podría poner en jaque a la oferta de los hatchbacks con aspecto de sport utility. Solo restará ver si el mercado inclina la balanza para un lado o el otro, ya que por ahora es un movimiento que está dando sus primeros pasos en el mercado local.


Conclusión

En un mundo gobernado por los SUVs y los crossovers, creaciones como este Tiggo 2 tienen su lógica, aunque en la práctica sigan teniendo las mismas virtudes y defectos que los modelos originales en los que se basan. Charlando con dueños de Fulwin durante los días de prueba, todos remarcaron las mismas bondades que encontré en el Tiggo 2: comodidad de uso, un habitáculo y baúl amplios, buen andar en ciudad y consumos lógicos.

La estética tipo SUV también aporta algo de frescura a un modelo que ya carga con unos para nada despreciables nueve años de vida. Sí, el Fulwin original data del año 2008. ¿Pasa rápido el tiempo, no? Con una serie de retoques bastante más profundos que los que otros rivales hicieron para sentirse sport utilities, los de Chery logran un producto que convence a varios de que esto es un SUV. Pero no lo es.


El resultado es un Fulwin con un despeje más generoso y la capacidad de burlarse del mal estado de nuestras calles como pocos modelos pueden hacerlo. A esto tenemos que sumarle una mejora notoria en términos de equipamientos de confort que sigue la receta que hizo tan exitosos a los modelos provenientes de China desde tiempos ancestrales: dar más que el resto a cambio de menos dinero.

Sin embargo el mercado uruguayo está cambiando demasiado rápido para aquellos productos con la poca flexibilidad de adaptarse a las nuevas demandas. Hoy el consumidor mira a la reventa como una de las patas fundamentales de la compra de un 0km, y varias marcas de origen chino están sufriendo el síndrome "pan para hoy, hambre para mañana" y sus modelos han caído en una depreciación abismal.


El Tiggo 2 tiene por ende, una tarea doble. O triple diría. Al no tener en su gama un SUV de segmento B, este Fulwin aventurero tiene que llenar ese espacio. Además es el encargado de mantener viva la llama de ese producto, que ya no tiene el ritmo de ventas que ostentaba hace unos años atrás. Y por último, con el nombre "Tiggo" puesto por sus cuatro rincones, también es el primer escalón de entrada a la gama de SUVs (reales) de la marca.

Chery ha sabido ganarse una buena fama en el olimpo de las marcas de origen chino en los últimos diez años y no solo tienen una clientela fiel, sino también fanáticos y fundamentalistas. En lo personal es el primer modelo de la marca que pruebo y debo decir que todos los elogios que escuché de propietarios del Fulwin puedo decir que eran ciertos. Solo que ahora, al igual que tantos otros productos, su tan amado modelo tuvo que ponerse una vestimenta de aventura. Pero la esencia es la misma de siempre.



A favor
  • Capacidad del baúl
  • Confort de marcha en ciudad
  • Diseño
  • Equipamiento de confort
  • Garantía
  • Habitabilidad general
  • Relación precio/equipamiento

En contra
  • Falta de controles de tracción y estabilidad
  • Gama reducida a una sola versión
  • Insonorización en ruta
  • Neumático de auxilio temporario
  • Posición de manejo
  • Recuperaciones en ruta
  • Sin airbags laterales ni de cortinas

FICHA TÉCNICA

MOTORIZACIÓN
Cilindrada (cc) 1.497
Número de cilindros: 4
Número de válvulas: 16
Relación de compresión: 11,4:1
Diámetro x carrera (mm): 77,4 x 79,5
Inyección: indirecta multipunto secuencial
Potencia máxima (cv/rpm) 107/6.000
Torque máximo (Nm/rpm) 135/2.750
TRANSMISIÓN
Caja de velocidades manual de cinco relaciones
Tracción delantera
DIRECCIÓN
De piñón y cremallera con asistencia hidráulica
FRENOS
Delanteros: de discos ventilados
Traseros: de discos sólidos
EJES - SUSPENSIÓN
Delantera: independiente McPherson con barra estabilizadora
Trasera: eje fijo con resortes y barra de torsión
NEUMÁTICOS
Dimensiones: 205/55 R16
Rueda auxiliar: T125/70 R16
PRESTACIONES
Velocidad máxima (km/h) 170
Aceleración 0/100 km/h (s) N/D
Consumo (l/100km) Urbano: N/D  - Carretera: N/D - Mixto: 5,9
DIMENSIONES / PESO
Capacidad del baúl (l) N/D
Peso en vacío (kg) N/D
Peso en orden de marcha (kg) 1.290
Largo total (mm) 4.200
Ancho total (mm) 1.760
Alto total (mm) 1.570
Distancia entre ejes (mm) 2.555
Capacidad del tanque de combustible (l) 50
Despeje al suelo (mm): 186
Capacidades off-road (º): Ángulo de ataque: 24 - Ángulo ventral: N/D - Ángulo de salida: 32

Galería: Chery Tiggo 2 1.5 M/T | Créditos: Autoblog y Diego Olivera (oliverafotografo.com.uy).


EXTERIOR
Barras de techo longitudinales
Faro antiniebla trasero
Llantas de aleación de 16 pulgadas
Luces diurnas LED
SEGURIDAD
Airbags frontales delanteros
Apoyacabezas delanteros y traseros (5)
Anclajes ISOFIX y TopTether para sillas infantiles
Cinturones de seguridad inerciales de tres puntos (5)
Distribución electrónica del frenado (EBD)
Frenos ABS
CONFORT
Aire acondicionado
Apertura interna del depósito de combustible
Cámara de retroceso
Cierre centralizado de puertas con mando a distancia
Computadora de a bordo
Control de velocidad crucero
Dirección asistida hidráulicamente
Espejos retrovisores externos regulables eléctricamente
Gear Shift Indicator (GSI)
Levantavidrios eléctricos delanteros y traseros
Pantalla multimedia táctil de ocho pulgadas con radio AM/FM/USB/iPod/Bluetooth y compatibilidad con Android (Chery Cloudrive)
Respaldo trasero rebatible 60:40
Seis parlantes
Sensores de estacionamiento traseros
Tapizados en tela
Volante multifunción regulable en altura

PRECIO Y GARANTÍA:

U$S 18.990. 3 años o 100.000 km

COMERCIALIZA:

Asdara S.A. Dr. S. Ferrer Serra 2180. Tel. 2400 63 10. Web: cherymotors.com.uy