Prueba: Seat León Cupra 290 2.0 TSI DSG

viernes, 3 de diciembre de 2021



Probamos al último de los Seat con denominación deportiva: el León Cupra 290.

Evaluamos durante una semana y algo más de 1.200 kilómetros al más radical de los Seat León comercializados en Uruguay hasta el momento. Se trata del Cupra 290. Equipa una motorización 2.0 TSI con 290 cv de potencia, asociada a una transmisión automática DSG de doble embrague y seis relaciones.
La historia del Seat León (ver lanzamiento) ya fue revisada en las dos evaluaciones anteriores del compacto de la firma española. Primero fue con la variante Reference 1.6 M/T (ver prueba) y más acá en el tiempo con el 1.2 TSI Style Plus M/T (ver prueba). Ahora, ya sobre el final de la vida de este 2021, pero también de la existencia comercial de la tercera generación del León, llegó la hora de conocer a su versión más picante.

Estas variantes se denominan Cupra (un acrónimo de CUP-RAcing) y el primer León en llevar esta denominación, equipaba un motor 2.8 V6 atmosférico de 204 cv de potencia en la primera generación del modelo. Le siguió el León Cupra R que dejó paso a un motor 1.8 Turbo, el mismo que por aquel entonces equipaba al Audi S3 de la época y de este lado del mapa a los (hoy infames) Volkswagen Bora 1.8 T, primero con 210 cv y en una última fase ya con 225 cv.


Si nos vamos a la segunda generación del León, las versiones deportivas Cupra, mantenían al motor 1.8 turbo de 225 cv, pero que llegó a desarrollar 265 cv en las versiones Cupra R. La tercera generación, nacida en 2012 y que se dejó de producir a finales de 2020, tuvo también sus versiones Cupra con potencias que fueron en un constante increscendo: 265, 280, 290 y 310 cv. Pero también fueron las últimas dentro de la marca Seat, dado que en 2018, Cupra se independizó como sub-marca (ver nota).

Un poco después de que esto sucediera, comenzó a llegar Seat a Uruguay (ver apuntes del lanzamiento) y algo más acá en el tiempo, llegaron los primeros Seat León Cupra 290 (ver lanzamiento), el modelo por debajo del más radical León Cupra R 310, que nunca llegó. El que se comercializa aún en Uruguay (con apenas un par de unidades más en stock) lleva un impulsor 2.0 TSI de 290 cv de potencia asociado a una caja DSG automática doble embrague de seis marchas y tracción delantera. Y Autoblog pudo probarlo.


Exterior

El diseño de la tercera generación del Seat León siempre estuvo bien ejecutado e incluso siento que se mantiene en pie pese a ya tener un reemplazante presentado (ver nota) y que llegará a mediados del año que viene por acá. Esta última versión Cupra León previo al "divorcio a la catalana" de 2018, se sostiene en los detalles. Es un deportivo, pero sutil. Tal vez demasiado para algunos petrolheads. Es de esos productos que solo los que saben, saben qué auto es. Para el ojo no entrenado, es un Seat León más.

Por fuera se distingue gracias a los emblemas de Seat en un tono cobrizo, llantas de aleación con un diseño exclusivo, mientras que las pinzas de freno van en color negro con la inscripción "Cupra" en el tren delantero. Las ventanillas laterales y trasera son tintadas y también reciben un tratamiento oscurecido las carcasas de los espejos retrovisores exteriores. Y los detalles se terminan ahí. Bueno, tres cosas más: un difusor trasero en el paragolpes, acompañado de dos salidas ovaladas para los tubos de escape y que el emblema "León" que va en el portón trasero, acá es reemplazado por "Cupra" en color negro.


El hermoso color de la carrocería, por si se lo preguntaban, es específico de esta versión. No se puede comprar un León "no-Cupra" en este tono que la casa española denomina Magnetic Grey y le queda genial. Sí, es muy complicado para hacerle buenas fotos porque puede ser gris, azul o negro según donde le dé la luz. Pero combina a las mil maravillas con los detalles en tono cobre de los logos de esta versión. Lo bueno es que Cupra, ahora como marca, lo mantuvo en su paleta de opciones. Bien por eso.

Otro detalle que le queda perfecto a esta versión son las llantas de aleación. Se denominan "Cupra" de 19 pulgadas y en la unidad probada iban sobre neumáticos Continental ContiSportContact 5P en medida 235/35 R19, a partir del MY2020. Los primeros León Cupra 290 que llegaron por acá, por su parte, tenían unos neumáticos más "chicos": 225/40 R18. Por el resto, este sigue siendo un León como los otros. Así que las cotas son las mismas: 4.281 mm de largo, 1.816 mm de ancho, y 1.435 mm de alto. La batalla en tanto es de 2.631 milímetros.


Interior

Adentro se mantiene ese espíritu sutil del exterior. Hay una multitud de pequeños detalles que revelan la naturaleza especial de esta versión, como las costuras en el volante y la palanca de cambios, una abundancia de superficies revestidas en Alcantara y varios detalles "Cupra" como los zócalos de puerta delanteros (iluminados), butacas deportivas con el logo de la versión en los respaldos o que en el sistema multimedia, en lugar del logo de Seat, va el de Cupra. Otra particularidad del interior es la luz ambiental que se puede configurar en diferentes tonos o una pedalera en aluminio con tacos de goma y un generoso reposapiés en el mismo combo de materiales.

Pero lo más destacado de este modelo es la posición perfecta de manejo. Al igual que otros León, tiene un amplio rango de regulaciones que permite tanto la columna de dirección (en altura y profundidad) como de la butaca (con ajustes manuales, incluyendo altura y lumbares en ambas butacas delanteras) demuestran que es un producto para cualquier anatomía. Por el precio de esta versión lo que sí se echa de menos, es un ajuste eléctrico, pero lo compensa con la excelente ergonomía y unas butacas con mucha sujeción del torso y muslos. Así que aprueba con muy buena nota y está entre las más logradas del segmento.


Este Cupra 290 fue el último de los León de tercera generación en incorporar el display multifuncional configurable "Seat Digital Cockpit" con una pantalla de 12,3 pulgadas a color para el instrumental. Se trata del mismo conjunto que se puede encontrar en otros modelos del Grupo Volkswagen, ya sea de esa marca como de Audi. Es por lejos uno de los más personalizables y completos del mercado. En este Cupra, al igual que en los Volkswagen R o Audi RS, tiene una vista que permite colocar al tacómetro en el centro del tablero, que siempre es un plus en este tipo de productos.

Luego al centro del habitáculo mantiene al igual que en las versiones más descafeinadas, al sistema multimedia "Media System Plus" con pantalla táctil de ocho pulgadas con AM/FM/CD/MP3/2 USB-A/Aux-In/SD/Bluetooth/Seat Full Link (Android Auto, Apple CarPlay y MirrorLink), comandos por voz y audio streaming. En tren de pedirle cosas, le faltaría un navegador (al no tener mapas habilitados para Uruguay nos perdemos esto en el Seat Digital Cockpit), pero al tener el "espejamiento" del smartphone, eso ya está solucionado en parte al utilizar las apps de navegación conocidas por todos como son Waze, Google Maps, etc.


En las plazas traseras del León Cupra 290, al igual que en otros León, dos adultos irán cómodos a lo largo, y la altura de la cabeza al techo es buena, mientras que la distancia de las rodillas a las butacas delanteras también es generosa. Eso sí, un tercer ocupante ya no irá tan feliz, un mal endémico de la gran mayoría de los hatchbacks de segmento C, aunque el Seat sabe resolverlo un poco mejor que varios rivales.

¿En qué sentido? Muy simple. Si bien el asiento es plano en esa plaza, y la distancia de la cabeza al techo es buena, el túnel de transmisión, que tanto se precisa en las versiones con tracción integral (en Europa supo haberlas para este Cupra 290), en esta FWD no tiene lógica ninguna, y solo está para incomodar las piernas de quien viaje en el medio. Tres podrán ajustarse en un viaje corto. Pero en uno largo, ya no.

El baúl, por su parte, ofrece 380 litros, que pueden crecer, rebatiendo los respaldos traseros en proporción 60:40, sin volumen declarado por Seat. Por debajo de la alfombra, está uno de los pocos puntos criticables del León en cualquiera de sus versiones: el auxilio temporario. En este Cupra 290 es un Linglong en medida T125/80 R18.


Motor y transmisión

EA888. Ese código alfanumérico es muy probable que le sea ajeno a más de uno. Pero aquellos que lo conozcan, sabrán que es la denominación del archi-conocido motor 2.0 TSI del Grupo Volkswagen, que ha sido aplicado en diversos modelos. Por las inquietas manos de Autoblog ha pasado desde un Tiguan Allspace (ver prueba) hasta un Audi TT Coupé (ver prueba) con esta mecánica. Pero su aplicación más famosa, sin dudas, estuvo en el Volkswagen Golf GTi (ver lanzamiento) de séptima generación.

Ahora llegó el turno de conocerlo una vez más. Pero en una de sus expresiones más exprimidas, como lo es la de este Cupra 290, que incluso por la cantidad de modificaciones y ajustes propios que tiene sobre la base del EA888, lo hacen cambiar de denominación: EA113. Cuenta con 1.984 cc de cilindrada, doble árbol de levas a la cabeza, cuatro cilindros, 16 válvulas, turbo, intercooler e inyección directa. La transmisión es una automática secuencial de seis relaciones y doble embrague (DSG), denominada DQ250. Produce una potencia máxima de 290 cv entre las 5.900 y 6.400 rpm y un torque de 350 Nm entre las 1.700 y las 5.800 vueltas.


El comportamiento del conjunto mecánico se puede describir con una sola palabra: brutal. Cuando uno se llena el pie con el acelerador, es un misil tierra-aire vestido de hot-hatchback. La respuesta del impulsor es instantánea, siempre hay potencia y par disponible en todo el rango de utilización. Como recompensa a la inmadurez, el escape realiza mediante una serie de mariposas una serie de repiqueteos y explosiones que cuando sube o baja de cambios, sacándole al conductor la risa más infantil y tonta posible. Es un auto muy fácil de llevar rápido. Pero inversamente difícil de poder llevar a un ritmo suave y sosegado.

A su vez, este impulsor va asociado a una de las mejores cajas automáticas de la actualidad. Se trata de la secuencial doble embrague DSG, en este caso, de seis velocidades y con levas al volante. Su funcionamiento no es nada que ya no haya dicho una y mil veces de las automáticas doble embrague del Grupo Volkswagen: son suaves como la seda, rápidas como un halcón, y eficientes como un tren alemán. Además, este Cupra incorpora a la función "Launch Control", que debería renombrarse como "Lunch Descontrol". Porque para activarla, hay que desconectar el ESC por completo, colocar la caja en "S", activar el modo "Cupra" (más sobre esto en el apartado dinámico) y proceder a almorzarse los neumáticos del tren delantero. Porque sí, es de esos autos con tanto par a un solo eje, que los aniquila si los exigimos.


Al igual que en otras S tronic (o lo que es igual, DSG) que hayamos probado, en el TT cuenta con un modo "S", que trabaja de forma más veloz y deportiva aún. En situaciones normales, el motor trabaja con la caja en "D", y haciendo los cambios a unas 2.000 vueltas uno atrás del otro. Si movemos el selector al modo "S", hará lo mismo pero reteniendo las marchas a regímenes más elevados (4.000-5.000 rpm). Mientras que si pisamos a fondo y vencemos el kick-down del acelerador, pasará las marchas casi a las 6.000 vueltas con un sonido intoxicante del 2.0 y su comparsa de explosiones resonando en el escape.

Seat declara una aceleración de 0 a 100 km/h en 5,9 segundos, mientras que velocidad final está en los 250 km/h, limitada electrónicamente. No hay consumos declarados por fábrica para esta mecánica. Durante mi prueba obtuve los siguientes valores: 9,4 l/100 km en ciudad, 7,1 l/100 km en ruta, y 8,3 l/100 km en el ciclo mixto. Considerando la potencia y cilindrada, son cifras, digamos, normales y esperables para un producto como este. Si uno sufre del "síndrome de pie de plomo", estos números se pueden disparar muy alto y también muy rápido. El depósito de combustible cuenta con 50 litros de capacidad, y en esta versión con caja DSG y motor 2.0 TSI, el peso en orden de marcha está en los 1.421 kilogramos.


Comportamiento dinámico

Los Seat León siempre tuvieron un excelente comportamiento dinámico, siendo un producto muy maduro y neutro en sus reacciones y sensaciones que transmite. En gran medida, esto es responsabilidad de la plataforma MQB del Grupo Volkswagen, todo un ejemplo de refinamiento y equilibrio en la industria. Partiendo de esa fórmula, el León Cupra no hace otra cosa que volcarla hacia el dinamismo y la deportividad. Por lo que el resultado es un hot-hatch utilizable en el uso diario desde el chasis, pero con el agregado de una mecánica bestial y llena de respuesta en todos los rangos. Es un combo casi perfecto.

Comencemos por las suspensiones. Es un auto firme y deportivo con llantas de 19 pulgadas y perfil 35 de neumáticos, no voy a mentirles. No busquen que haga milagros del confort de ningún tipo con nuestras calles detonadas. Aunque no llega a un grado de molestia para los ocupantes en condiciones normales. En calles con empedrados o ante vías férreas, por ejemplo, se percibe (bastante) la dureza que las caracteriza, porque es un deportivo, claro está. Para un León que tenga un mayor grado de confort, hay otras versiones. Pero aquellas, por el contrario, carecen de algunos elementos únicos de este Cupra.


Por ejemplo, tenemos al selector Cupra Drive Profile, que ofrece tres modos de conducción: Comfort, Sport y Cupra, además de un cuarto ajuste (Individual) personalizable que nos permite configurar la rapidez de la transmisión, la dirección y el diferencial a gusto. El que más utilicé fue Cupra, por razones obvias. En este modo las respuesta del acelerador es más sensible, la caja DSG opera en el modo de cambio más deportivo, mientras que la dirección progresiva y el diferencial autoblocante del eje delantero funcionan asimismo en su configuración más deportiva.

Ya que lo menciono, el diferencial autoblocante Haldex (en contraposición de un Torsen, por ejemplo, que es electrónico) de deslizamiento limitado mejora la tracción y el manejo, pese a estar ante un tracción delantera. Está formado por un sistema multidisco que actúa hidráulicamente y va regulado por una centralita electrónica. Y funciona de maravillas. Siguiendo con la dirección, como decía, es progresiva y con este sistema, el conductor necesita dar menos vueltas de volante para conseguir los giros deseados en las carreteras más reviradas o en las maniobras de estacionamiento. Opera con una relación progresiva mediante una correa dentada variable.


¿En qué se traduce todo esto? En que el León Cupra 290 es un arma de precisión. Seat (bueno, Cupra ahora) preparó casi que un auto para track days disfrazado de civil. Es cierto, muchos dirán que es un deportivo de tracción delantera y eso suele arruinar un poco la experiencia de manejo. Pero este no es el caso. Si bien en pisos húmedos la pérdida de tracción constante está si estamos imprimiendo un manejo exigido, en condiciones ideales de asfalto seco, este León es una bestia devoradora de curvas y jamás pierde la trazada. Si bien no hay torque steer, o esa sensación de que cuando acelerás, el auto te "saca el volante de las manos", tampoco llega a arrastrar tanto la trompa como otros FWD en las curvas. Pero se lo nota subvirante, aunque muy controlable también. Es un deportivo brutal, pero también muy neutro.

Entre tantos elogios, voy a tirar unas negativas. La insonorización es pésima en ruta. Los neumáticos transmiten cada cosa que pisan al habitáculo y cuando el asfalto está gastado o pasamos por un camino de tierra, es una sinfonía de piedritas golpeando en los guardabarros. Tiene sentido, con los semejantes rodillos de caucho con pisada 235 mm y perfil 35 (es decir, solo 8,2 centímetros de goma entre el auto y el suelo), es lógico que todo se sienta más en el interior del Cupra. No llega a ser molesto, ojo. Pero todo se siente más que en otros León. Luego la insonorización mecánica y eólica es correcta, cercana a los 70 db a velocidades de carretera (110 km/h).


En términos de cifras, repasemos la elasticidad del motor, así como también las cifras de recuperaciones en carretera para ya ir cerrando este apartado. El 2.0 TSI viaja a 70 km/h en D6 a 1.600 rpm (S4 a 2.750 rpm), en tanto que a 110 km/h en sexta también (D6), trabaja a 2.550 vueltas (S5 a 3.250 prm a igual velocidad). Y si les sorprende la precisión, sí, el tacómetro tiene marcas cada 50 revoluciones por minuto.

Las recuperaciones ante adelantamientos, también son obvias y muy veloces. Para ir de 80 a 110 km/h, demora para ir entre D6 y D3, unos muy ágiles 3,06 segundos, que además pueden cronometrarse desde el tablero, porque sí, también tiene un reloj para medir tiempos de vuelta o aceleraciones incorporado. Como dije más arriba, es un producto con el que tenés que tener todos los drivers con la última actualización de tus reflejos porque todo va rapidísimo una vez que lo querés usar en todo su potencial.


Equipamiento

El Cupra 290 solo se ofreció con una configuración de equipamiento de serie. Al principio de la comercialización, circa 2019, se lo podía configurar a gusto incluso. Tal y como pasó con la primera unidad arribada a Uruguay (ver nota). Contaba por ejemplo con: Connectivity Box (cargador inalámbrico para smartphones), asientos delanteros deportivos tipo bucket calefaccionados, y sistema de audio Beats Audio con diez altavoces, amplificador digital de 12 canales, subwoofer y una potencia total de 340 watts.

Pero el probado, al igual que las otras (pocas) unidades que llegaron por acá, traían de serie una buena dotación de todas formas: pack eléctrico (cuatro levantavidrios, espejos y bloqueo), dirección electromecánica (Servotronic), faro antiniebla trasero, faros delanteros Seat Full LED con luces de marcha diurna en LED, luces traseras LED, respaldo trasero rebatible 60:40, climatizador automático Climatronic con dos zonas y salidas de aire para las plazas traseras, asientos delanteros deportivos "Cupra" regulables en altura con ajuste lumbar, sistema multimedia con pantalla táctil de ocho pulgadas "Media System Plus" con AM/FM/MP3/2USB-A/CD/SD/Bluetooth/Seat Full Link (Android Auto, Apple CarPlay y MirrorLink), comandos por voz y audio streaming, ocho altavoces, computadora de a bordo, display multifuncional configurable "Seat Digital Cockpit" (instrumentos digitales) de 12,3 pulgadas a color, volante deportivo multifunción regulable en altura y profundidad, tapizados en Alcantara, retrovisores exteriores calefaccionados (con función tilt down de estacionamiento para el lado del acompañante) y plegables eléctricamente, cristales traseros oscurecidos, freno de estacionamiento electromecánico con función "Hold", control de velocidad crucero y limitador de velocidad, selector de manejo "Seat Drive Profile" con cuatro modos: Comfort, Sport, Cupra e Individual, volante deportivo "Cupra" multifunción en cuero regulable en altura y profundidad con levas de cambio integradas, sensores de lluvia y luces, salida de escape doble cromada, spoiler trasero, pedalera deportiva en aluminio con tacos en goma, sensores de estacionamiento delanteros y traseros, iluminación ambiental, techo solar eléctrico panorámico, puertos USB-A para las plazas traseras (2), y llantas de aleación "Cupra" de 19 pulgadas sobre neumáticos en medida 225/35 R19.


Seguridad

Este Cupra 290 cuenta de serie con la siguiente dotación de seguridad: siete airbags (frontales y laterales delanteros, de cortinas, y de rodillas para conductor), frenos ABS+HBA+EBD, sistema de asistencia de freno anti multi-colisión (MKB), luces traseras de emergencia (EVDWLA), control electrónico de estabilidad (ESC) y tracción (ASR), sistema de asistencia hidráulica del freno (HBV), sistema de regulación del motor (MSR), bloqueo electrónico del diferencial con acción del ESC (XDS+) con asistente de tracción dinámica, asistente de arranque en pendientes (HHC), anclajes ISOFIX y TopTether para sillas infantiles, indicador de presión de neumáticos, alarma, y cinco cinturones inerciales de tres puntas.

Es una dotación bastante correcta para el segmento en donde participa Seat. Sin embargo, en otros mercados, en especial en el europeo cuando se comercializaba, el Cupra 290 tenía de serie algunas otras tecnologías de asistencia a la seguridad que podría ser interesante que se ofrecieran en Uruguay, como por ejemplo: detector de fatiga, asistente de frenada en ciudad (Front Assist), asistente de salida involuntaria de carril, asistente de luces en carretera cortas/largas, detector de ángulo muerto, alerta de tráfico posterior o control de crucero adaptativo con sistema de protección de peatones.


En términos de seguridad igual quiero remarcar la potencia del equipo de frenos del Cupra. En el eje delantero está equipado con un sistema de frenos de alto rendimiento, desarrollados específicamente también para este modelo. Utiliza pinzas de freno de cuatro pistones aplican una fuerza de frenado a discos ventilados de 340 mm. En las entradas de aire del paragolpes delantero se alojan exclusivos conductos enfriadores que canalizan el aire por la carrocería para reducir el calor de los discos y las pinzas. En la parte trasera, los discos macizos de 310 milímetros. En Europa, cuando este modelo se vendía, ofrecía el Paquete Performance opcional, que sumaba un sistema de frenos Brembo de cuatro pistones de alto rendimiento con discos delanteros perforados y neumáticos Michelin Pilot Sport Cup 2.

El ESC, por su parte, ha sido desarrollado específicamente para esta versión y permite una conducción muy deportiva, manteniendo en todo momento los más altos niveles de seguridad, como era de esperar con una bestia de casi 300 cv. Para un uso extremadamente dinámico, como en un circuito, también se puede desactivar optando entre dos modos: el primer nivel desactiva el control de tracción y pone el ESC en modo deportivo, y el segundo desactiva, en tanto, ESC por completo. Y bien digo, por completo. En conjunción con el modo Cupra, este León queda en su nivel más analógico de utilización.


Precio y garantía

Las últimas unidades comercializadas de este Seat León Cupra 290 2.0 TSI DSG se ofrecen a U$S 59.950. La garantía, por su parte, es de 5 años o 100.000 km. No es un precio accesible, hay que decirlo. Sin embargo, considerando que es el único hot-hatchback compacto con transmisión automática de doble embrague y tracción delantera, este Cupra 290 no tiene rivales directos tampoco, haciéndolo un producto casi único en el mercado, además de una verdadera "ganga" considerando el tipo de modelo que es y la potencia que ofrece a cambio. Pero a los ojos de muchos, también será un Seat carísimo.

Es cierto, muchos harán el ejercicio fácil de compararlo con los Honda Civic Type R (ver prueba) y Type R GT (a U$S 72.900 y U$S 69.900, respectivamente), pero aquellos modelos nipones tienen caja manual y un planteo bastante más radical que este Seat desde todo punto de vista. O podrían hacerlo con el Toyota GR Yaris (ver prueba). Pero a U$S 83.990, siendo además un segmento B, con tracción integral permanente, venta limitada a seis unidades (casi todas vendidas, además) y de homologación FIA WRC, es un "animal" diferente a esos dos incluso. Compararlos entre sí, es no entender la naturaleza de cada uno. Son tres productos brillantes en sus respectivas propuestas.


Conclusión

Comenzé el 2021 probando un Seat León 1.2 TSI diciendo que era la versión que más justicia le hacía a la tercera generación de este compacto español. Ahora, cerrando el año, volví a subirme a un León. Pero con un planteo muy distinto. Sin embargo, le cabe el mismo elogio: este es el mejor Seat que probé hasta el momento. Aunque es muy posible que mientras leas estas líneas, ya no quede stock del Cupra 290 en los concesionarios, de todas formas que este informe sirva como una despedida a un gran producto. O el incentivo para salir a buscar uno de segunda mano. Porque es brillante por donde se lo mire.

Este año fue muy especial en términos de evaluaciones porque tuve la dicha y la suerte de probar a los últimos tres hot-hatchbacks que van quedando por fuera del universo premium. Más adelante en el mes haré un editorial al respecto, porque siento que lo amerita. Sin embargo, con el paso de los días, esta lista se va achicando todavía más. El Type R está en final de producción, a la espera de la nueva generación en 2022. El GR Yaris llegará con más unidades, pero a cuentagotas. Y este León Cupra 290 ya forma parte de los libros de historia de Seat en estos momentos, mientras esperamos a la nueva generación en 2022 para nuestro mercado.


Es que más allá de ser una generación reemplazada, de todas las emociones que desata llevar con el pie derecho un acelerador a su punto máximo, también se esconde un producto brillantemente ejecutado. Y este Cupra 290 también es eso. Tiene un chasis impecable para llevar con holgura los más que suficientes casi 300 cv del impulsor, un habitáculo agradable, así como también un conjunto mecánico (motor/caja) para poner en un pedestal. O usarlo casi como un caballo de carreras. Pero en lugar de ir sobre un lomo equino, vas sentado en un butacón revestido en Alcantara desde una posición de manejo cuasi perfecta.

Sin dudas este León Cupra 290 deja la vara altísima ante la llegada a finales de 2022 del Cupra León. Parece que hablo del mismo modelo. Pero no. Acá el orden de los factores afecta al producto. Ahora ya no es más un Seat. Será un Cupra hecho y derecho. Mientras esperamos a que se repita la suerte de poder probar a la cuarta generación del más radical de los León, me quedará el recuerdo muscular, sensorial y auditivo de haber manejado al mejor hot-hatchback español. Así como también el sabor agridulce que deja saber que probé al último de los Seat deportivos. Es que los catalanes dejan ese delicioso retrogusto en boca: dulce, fuerte y picante. Y tras una semana con este aparato, este Cupra 290, también supo dejarlo.


A favor
  • Calidad de materiales y terminaciones
  • Capacidad del baúl
  • Conjunto motor/transmisión
  • Consumos reducidos
  • Comportamiento dinámico
  • Diseño
  • Diversión de manejo
  • Habitabilidad para cuatro adultos
  • Equipamientos de seguridad y confort
  • Prestaciones
  • Posición de manejo
  • Relación precio/mecánica
En contra
  • Rumorosidad de los neumáticos
  • Sin asistencias a la conducción
  • Sin opción de transmisión manual
  • Túnel (falso) de transmisión voluminoso
  • Neumático de auxilio temporario



FICHA TÉCNICA:

MOTORIZACIÓN
Cilindrada (cc) 1.984
Número de cilindros: 4
Número de válvulas: 16
Relación de compresión: 9,6:1
Diámetro x carrera (mm): 82,5 x 92,8
Inyección: directa multipunto, con turbocompresor e intercooler y distribución variable de válvulas doble
Potencia máxima (cv/rpm) 290/5.900 - 6.400
Torque máximo (Nm/rpm) 380/1.700 - 5.800
TRANSMISIÓN
Caja de velocidades automática secuencial DSG de doble embrague y seis relaciones
Tracción delantera
DIRECCIÓN
Electro-mecánica progresiva servoasistida variable con la velocidad Servotronic
FRENOS
Delanteros: de discos autoventilados
Traseros: de discos sólidos
EJES - SUSPENSIÓN
Delantera: brazo telescópico delantero McPherson con brazos triangulares transversales inferiores, chasis auxiliar de aluminio y estabilizador tubular transversal
Trasera: 4-link de cuatro brazos con disposición separada del muelle y del amortiguador, chasis auxiliar, estabilizador tubular transversal
NEUMÁTICOS
Dimensiones: 235/35 R19
Rueda auxiliar: T125/80 R18
PRESTACIONES
Velocidad máxima (km/h) 250
Aceleración 0-100 km/h (s) 5,9
Consumo (l/100km) Urbano: N/D - Carretera: N/D - Mixto: N/D
DIMENSIONES/PESO
Capacidad del baúl (l) 380
Peso en vacío (kg) N/D
Peso en orden de marcha (kg) 1.431
Largo total (mm) 4.281
Ancho total (mm) 1.816
Alto total (mm) 1.435
Distancia entre ejes (mm) 2.631
Capacidad del tanque de combustible (l) 50

Galería: Seat León Cupra 290 2.0 TSI DSG | Créditos: Autoblog y Diego Olivera
Prueba Seat León Cupra 290 2.0 TSI DSG

EXTERIOR
Llantas de aleación de 19 pulgadas
Luces traseras LED
Faros antiniebla delanteros LED (con función de luz de curva) y trasero
Faros delanteros Seat Full LED con luz diurna en tecnología LED
Salida de escape doble cromada
Spoiler trasero
Techo solar eléctrico panorámico
SEGURIDAD
Alarma
Airbags frontales delanteros, laterales delanteros, de cortinas y de rodillas para conductor
Anclajes ISOFIX y TopTether para sillas infantiles
Apoyacabezas delanteros y traseros (5)
Asistente de arranque en pendientes (HHC)
Bloqueo electrónico del diferencial (EDS)
Bloqueo electrónico del diferencial con acción del ESC (XDS+)
Cinturones de seguridad inerciales de tres puntos (5)
Control de inercia del motor (MSR)
Control electrónico de estabilidad (ESC) y tracción (ASR)
Distribución electrónica de frenado (EBD)
Detector de cansancio del conductor
Frenos ABS
Luces traseras de emergencia (EVDWLA)
Monitoreo de presión de neumáticos
Sistema de asistencia de freno anti multi-colisión (MKB)
CONFORT
Alarma
Asientos delanteros deportivos "Cupra" con regulación en altura y lumbar manual
Cámara de retroceso
Climatizador automático Climatronic con dos zonas y salidas de aire para las plazas traseras
Cierre centralizado de puertas con mando a distancia
Control de velocidad crucero y limitador de velocidad
Computadora de a bordo
Dirección progresiva con asistencia electromecánica
Display multifuncional configurable "Seat Digital Cockpit" (instrumentos digitales) de 12,3 pulgadas a color
Encendido automático de luces
Espejos retrovisores exteriores calefaccionados y rebatibles eléctricamente (con función tilt down de estacionamiento para el lado del acompañante)
Freno de estacionamiento electromecánico con función "Hold"
Levantavidrios eléctricos delanteros y traseros con sistema "one touch"
Ocho parlantes
Pedalera deportiva en aluminio con tacos en goma
Puertos USB-A para las plazas traseras (2)
Respaldo trasero rebatible 60:40
Selector de manejo "Seat Drive Profile" con cuatro modos: Comfort, Sport, Cupra e Individual
Sensor de lluvia
Sensores de estacionamiento delanteros y traseros
Sistema multimedia con pantalla táctil de ocho pulgadas "Media System Plus" con AM/FM/CD/MP3/2 USB-A/Aux-In/SD/Aux-In/Bluetooth/Seat Full Link (Android Auto, Apple CarPlay y MirrorLink), comandos por voz y audio streaming
Tapizados en Alcantara
Volante deportivo "Cupra" multifunción en cuero regulable en altura y profundidad con levas de cambio integradas

PRECIO Y GARANTÍA:

U$S 59.950. Garantía: 5 años o 100.000 km.

COMERCIALIZA:
      Homero de León. Av. Gral. Rondeau 1719. Tel. 29244709. Web: www.seat.uy


      Bonus track en video: Seat León Cupra 290 | Autoblog Uruguay