Probamos a los Kia K3: agua de Rio en un mar de SUVs

lunes, 6 de mayo de 2024




Evaluamos al Kia K3, el reemplazante del exitoso pero discontinuado Rio. Lo probamos en sus dos carrocerías, Sedán y Cross, con la única mecánica disponible para nuestro país, el 1.4 litros atmosférico con 99 cv de potencia y 133 Nm de torque, asociado a una transmisión automática de seis relaciones.

Si siguen las noticias de Autoblog desde hace unos años, estarán al tanto del cambio de estrategia de Kia Motors Uruguay, a la hora de discontinuar su gama de vehículos de pasajeros en función de darle más espacio a los SUVs y crossovers de la marca. Así fue como los Picanto (ver prueba doble), así como los Rio tanto en carrocería Hatch (ver prueba) como Sedán (ver lanzamiento) se dejaron de ofrecerse en nuestro mercado. También desapareció el poco recordado sedán Soluto (ver prueba), que llegaba desde China. Las razones eran varias. Desde un posicionamiento fuera de mercado de todos esos productos, a una preferencia por SUVs en esos rangos de precio, llevaron a la marca surcoreana a tomar esa decisión.

Pero en esa tormenta, además se sumaron otros dos factores. El segmento A -al que pertenece el Picanto- está desapareciendo a pasos acelerados en la última década, mientras que el B -al que pertenecía el Rio- fue suplantado en algunas marcas por SUVs-B y crossovers sub-compactos. En el caso de Kia Motors a nivel local, se dio en forma de dos productos que se discontinuaron el año pasado, los Sonet (ver prueba doble) y Seltos (ver lanzamiento), que tomaron provisoriamente el lugar del Rio tras su final de producción en México a finales de 2023. Pero que tampoco nunca llegaron a niveles de popularidad altos.


Esto llevó a que, al menos a nivel local, Kia Motors se quedara “sin el pan y sin la torta”, dado que había dejado de comercializar a los Picanto y Rio, pero al mismo tiempo, los Sonet y Seltos, cambiaron de sitio de producción (de India a China) aumentando su precio CIF en fábrica y haciendo que sea casi inviable seguir comercializándolos en nuestro mercado. Por eso era bastante necesario un cambio de planes para poder seguir teniendo al menos un producto que pudiera devolverle a la marca sus cifras de venta históricos que con esos dos SUVs nunca pudo retomar, tras el final de los Picanto y Rio.

Si bien el segmento A ya no tiene tanto lugar en unos cuantos mercados mundiales -entre ellos, Uruguay-, la aparición de un producto que tomara la exitosa posta del Rio, era casi una necesidad imperiosa. Por tal motivo, Kia decidió desarrollar a los K3 Sedán (ver nota) y K3 Cross/Hatch (ver nota), que reemplacen a ese modelo en los mercados de América Latina, también con producción en la planta de Nuevo León, en Pesquería, México. Se trata del primer modelo regional en incorporar a la plataforma denominada KP2, compartida con el Hyundai Accent de sexta generación (BN7).


Ese producto ahora tiene la tarea de volver a darle a Kia los volúmenes de venta que contaba en la época de los Rio. Durante su presentación en nuestro mercado (ver apuntes del lanzamiento), la marca comunicó que intentará colocar aproximadamente 350 unidades anuales de este K3 (ver lanzamiento), lo que correspondería a unas 30 por mes. Es decir, cifras similares a las que su antecesor llegaba a comercializar en sus mejores épocas y a precios bastante similares a los que ahora están ofreciendo a su reemplazante.

El K3 se puso a la venta en marzo pasado con dos carrocerías (Sedán y Cross), en dos niveles (EX y GT-Line) con el conocido impulsor de su antecesor, el Kappa 1.4 litros con 99 cv de potencia y 133 Nm de torque, junto a una transmisión automática de seis relaciones. Los precios van desde los U$S 28.490 de la variante Sedán EXCross EX (U$S 29.490), hasta los U$S 31.990 y U$S 32.990 de los Cross y Sedán GT-Line, respectivamente. Autoblog pudo tomar contacto con dos K3 GT-Line (Cross y Sedán) y este viernes podrán leer la prueba doble de un producto que navega en las aguas del discontinuado Rio, mientras el resto del mercado está nadando en un mar de SUVs.