Es sabido que los híbridos enchufables (PHEVs) vienen siendo la mejor opción para aquellos clientes que no estén preparados para pasarse de lleno a la electrificación total (EVs) pero que están con ganas de abandonar el universo de los vehículos a combustión, sin tener que vivir con el miedo constante de quedarse varados sin batería en caso de tener un automóvil impulsado por electricidad.
Un PHEV tiene lo mejor de tres mundos, aunando muchas de las ventajas de los eléctricos, los híbridos y los productos térmicos. De los EVs, vivir la experiencia de una conducción puramente eléctrica que no genera emisiones contaminantes, con algunos kilómetros de autonomía eléctrica que satisfacen los recorridos diarios de la mayoría de los usuarios. Y luego está la rapidez y sencillez de cargar energía de los modelos con motor de combustión, eliminando cualquier ansiedad por la autonomía. Y con consumos bastante reducidos en consecuencia. Digamos que al menos para nuestro mercado, es una gran solución.
Sin embargo, en el ambiente local de las marcas generalistas es poco común ver un PHEV. Es algo más propio aún de firmas premium o aspiracionales, como se las debería llamar en realidad. En el mercado local solo BYD tiene presencia con el Song Plus DM-i (ver prueba), que se caracteriza por tener un motor naftero 1.5 atmosférico con ciclo Atkinson de 108 cv de potencia y 135 Nm de par, junto a otro eléctrico de 132 kW (177 cv) de potencia y 316 Nm de par, entregando 214 cv combinados. La tracción es delantera y la transmisión una automática con reductor de una sola relación. La batería de LFP (fosfato de hierro y litio), en tanto, tiene 8,3 kWh de capacidad y prometiendo 51 km de autonomía 100% eléctrica.
Desde hace algunos meses, MG es la primera marca en salir a competirle a ese SUV compacto con una oferta similar. Se trata del E-HS (ver lanzamiento). Utiliza al igual que su rival más directo, dos mecánicas. La primera es una naftera denominada SGE NetBlue. Se trata de un 1.5 litros con inyección directa, turboalimentación, cuatro cilindros, y 16 válvulas con distribución variable. Genera 162 cv de potencia a 5.500 y un torque máximo de 250 Nm entre 1.700 y 4.300 rpm.
Digamos, una propuesta bastante similar a la vista en el producto de BYD, solo que con más potencia, un impulsor turboalimentado y una batería que casi duplica en capacidad a la del Song Plus DM-i, pero con ese concepto de tener lo mejor de los dos mundos. Sin embargo, ¿tendrá el modelo de MG las virtudes suficientes para superar a la propuesta de BYD también en otros aspectos o quedará en desventaja? Esa respuesta la podré dar dentro de unos días cuando ustedes vean el análisis completo del MG E-HS.