Probamos al Volkswagen Taos: un ciudadano del mundo

lunes, 6 de septiembre de 2021



Probamos al nuevo SUV regional de Volkswagen que llega para ubicarse entre T-Cross y Tiguan: el Taos.

Evaluamos durante casi 1.100 km a uno de los lanzamientos más importantes del 2021 en el segmento de los SUVs compactos. Se trata del Volkswagen Taos, la nueva apuesta de la marca para completar el espacio entre T-Cross y Tiguan Allspace. Lo probamos en su variante 1.4 250 TSI con equipo Highline.

Que la globalización es la palabra clave en la industria automotríz actual, no es ninguna novedad. Sin embargo, es curioso encontrar cómo el mismo producto que tenemos en un mercado en particular, también se vende en otras partes, algunas muy lejanas, con pocos puntos en común. Una de las firmas que más sabe explotar esto es Volkswagen. ¿Por qué? Porque es uno de los grupos automotrices más grandes del planeta. Por ende, tiene presencia en casi todos los continentes y con más de una marca en su haber.

Por eso no es sorpresa encontrarse que en China, por ejemplo, tienen una gama compuesta por 16 sedanes, todos muy similares además. Sí, 16 son: Jetta, Santana, Lavida, Gran Lavida, Bora, Sagitar, Lamando, Phideon, Passat, Magotan, con sus respectivas generaciones de cada uno conviviendo entre sí, totalizando ese número. Pero también en aquel mercado tienen muchísimos SUVs. Son 15: Touareg, Tiguan, Tiguan L (Allspace para nosotros), Tiguan X, Tayron, Tayron X, T-Roc (distinto al que se vende en Europa, tiene chasis largo), T-Cross (idéntico al del Mercosur), Tacqua (esto también es un T-Cross), Teramont, Teramont X, y Talagon, además de los eléctricos ID.6 e ID.6 X.

Sí, me estoy olvidando de uno. A ese lo dejé para el final porque tiene una estrecha relación con el modelo que nos convoca en este adelanto de prueba. El conocido de forma interna como "Proyecto Tarek" que inició su vida comercial en 2018 en aquel país como el primer SUV que llenaría el espacio entre los T-Cross (ver prueba) y Tiguan Allspace (ver prueba) en los mercados de Asia, Rusia, Norteamérica y Latinoamérica. Pero no se ofrecería en Europa, dado que allí existe un producto como Tiguan (ver nota), que cumple con ocupar ese espacio.

Los derivados del "Proyecto Tarek" se producirían en esas regiones para mercados específicos con una característica clave: ser un producto inferior a un Tiguan Allspace, pero superior a un T-Cross en términos de precios y posicionamiento general. Asia estaría cubierta por tres plantas de FAW-VW en China (Yizheng, Ningbo, y Ürümqi), Rusia con una factoría de GAZ (en Nizhny Novgorod), Norteamérica en la conocida planta de Puebla, México, y por último, para Latinoamérica, en General Pacheco, Argentina.

Sin embargo, en algunas otras regiones, ya existían modelos equivalentes en tamaño y posicionamiento como dije. Volkswagen tenía al Tiguan de batalla corta para el mercado europeo. Pero también otras tres marcas pertenecientes a VAG (Volkswagen Automotive Group) comercializan SUVs compactos de características similares a los integrantes del "Proyecto Tarek" en varios lugares: Seat Ateca (ver prueba), Škoda Karoq (ver nota) y Jetta VS5 (ver nota), este último solo disponible en el mercado interno chino, dentro de una sub-marca de vehículos más accesibles que los de marca Volkswagen.

Al "Proyecto Tarek" se le había conocido en 2018 como Tharu (ver nota) para el mercado chino. Sin embargo, para el resto del mundo, se elegiría otra denominación: Taos (ver nota). Este nombre nace de un pequeño pueblo en Estados Unidos, rindiéndole homenaje a un ingeniero que luego se convertió en escritor y mecánico de automóviles con un taller pequeño ubicado en Taos, Nuevo México, especializado en mantenimiento y reparación de modelos de Volkswagen.

Taos se vende en esos mercados que mencioné, pero con algunas diferencias. Para China, el Tharu es un SUV bastante accesible y low-cost en términos de calidad. Autoblog pudo verlo en persona en el Salón de Shanghái de 2019 (ver nota), más cercano al Jetta VS5 en espíritu. El que se vende en Rusia, por ejemplo, es un modelo que comparte muchos paneles y piezas de todo tipo con el Škoda Karoq, dado que ambos se producen allí. El que se hace para Norteamérica, es el que más se parece al que tenemos en el Mercosur, con la salvedad de utiliza una mecánica más moderna (1.5 TSI EVO versus 1.4 TSI 250), pero un tren trasero más arcáico (eje rígido contra multibrazo del argentino).

Es que este modelo es un ciudadano del mundo. Mismo modelo, con varias identidades y además, con distintas improntas. En algunas partes es un SUV de acceso, en otras es un escalón intermedio entre sus hermanos, y para otras regiones, como la nuestra, es la apuesta más importante en términos de SUVs compactos para la marca alemana. Taos (ver lanzamiento) llegó también al mercado uruguayo y a las manos de Autoblog siendo el primer medio local en evaluarlo durante casi 1.100 kilómetros. Y este viernes podrán leer la prueba completa.