Prueba: Chevrolet Spin LTZ AT6 (Parte 1)

miércoles, 9 de enero de 2013



Evaluamos a la Spin, la nueva oferta de Chevrolet  en el Mercosur para las familias numerosas que busquen espacio interior.
Meses después de su presentación evaluamos a la Chevrolet Spin, el nuevo MPV compacto de la marca. Nos subimos por un fin de semana a la variante LTZ con caja automática y siete asientos. ¿Querés saber qué nos pareció? La primera parte de la prueba, tras el salto.

La Spin es un MPV chico nacido con el objetivo de reemplazar en el Mercosur a dos modelos discontinuados de lo que fue alguna vez era Opel: los Meriva y Zafira. Desarrollado y fabricado en Brasil, el Spin está basado en la plataforma del Cobalt, modelo con el que también comparte mecánicas y transmisiones.

Este nuevo integrante de la familia Chevrolet llega para ubicarse en espacio por encima de la Meriva, aunque por debajo de la Zafira en modularidad interior. A nuestro país llega desde octubre del año pasado en dos versiones, LT y LTZ, con cinco y siete plazas respectivamente, con transmisión manual de cinco relaciones o automática secuencial de seis. Sus precios arrancan en la LT manual de cinco plazas en U$S 26.990 y van hasta los U$S 29.990 de la LTZ automática de siete asientos.


Autoblog pudo subirse durante cuatro días a una esta última versión de la Spin, la LTZ de siete asientos con transmisión automática secuencial Active Select de seis relaciones y el único motor disponible en este modelo, un 1.8 8v de 106 cv de potencia. Como decía, tiene un precio en nuestro país de U$S 29.990, y una garantía de 2 años o 100.000 km. Vayamos a conocerlo en detalle.

EXTERIOR

El diseño, que genera bastante polémica, nació del lápiz de mi amigo -otro día les cuento la historia- Carlos Barba, creador de las Montana o S10, por citar algunos ejemplos. En el frente encontramos la típica parrilla Chevrolet, de importantes dimensiones, que se ve más disimulada que en otros modelos de menor tamaño de la marca. Un caso similar al visto en Ford con la nueva EcoSport, cuya trompa elevada, pasa más desapercibida en persona que en imágenes.

Vista lateralmente, se destaca la reducida superficie vidriada, que junto a la abundancia de chapa, no puede disimular los 1,64 m de alto de la carrocería. Como consecuencia, quedan algo perdidas entre tanta altura las llantas de aleación de 15 pulgadas de bonito diseño, que van sobre neumáticos Bridgestone Turanza en medida 195/65 R15.


La caída del techo es casi inexistente, con el fin de aprovechar el espacio para la cabeza en la tercera fila de asientos. Esto hace que el remate trasero sea la parte más controversial de todo el diseño, que ya de por sí es poco agraciado, producto de una ventanilla trasera que no sigue la línea de la carrocería.  

Comparada con sus antecesoras la Spin es 36 cm más larga, así como 4 cm más ancha y alta que una Meriva, en tanto que frente a una Zafira es 5 cm más larga, 1 cm más angosta y 2 cm más baja. La distancia entre ejes respecto a ambos modelos es menor, con 1 y 7 cm menos que Meriva y Zafira respectivamente.

En resumen, ya que nunca tuve intenciones de marearlos con tantos números, mide 4,36 m de largo, 1,73 m de ancho, 1,64 m de alto y su distancia entre ejes está en los 2,62 metros.


INTERIOR

Al sentarse al volante encontramos una posición de manejo elevada, típica de un MPV, contando con regulación en altura del volante y la butaca del conductor mediante una rueda en el asiento, pudiendo encontrar la postura ideal fácilmente, mirando al resto del tránsito desde arriba.

El espacio interior es enorme, y por momentos nos hace olvidar del no tan agraciado aspecto exterior de la Spin. La calidad del interior se ubica en la media del segmento, por encima de lo que era la Meriva, aunque por debajo de lo que se podía ver en Zafira. Si bien los materiales utilizados y encastres son correctos, algunos plásticos como los usados en la guantera tienen una calidad al tacto mejorable.


El volante en cuero, similar, por no decir el mismo que vimos en el Cruze, lleva los comandos de la computadora de abordo, la telefonía Bluetooth y la radio, que además en esta versión automática agregan los del cruise control. 

El instrumental, similar al del Sonic, y de clara inspiración en el motociclismo, cuenta con apenas un solo elemento de aguja, el tacómetro, en tanto que odómetro, velocímetro y cantidad de combustible en el tanque son digitales. Si bien fue bastante criticado, en lo personal me acostumbré fácilmente a su lectura y también ayuda a contrastar con la sobriedad del interior.

Cuenta con varios -y amplios- portaobjetos en el habitáculo, que ayudan a guardar objetos personales de todo tipo, desde un celular hasta botellas. Los asientos son cómodos para viajes largos, ya que no cansan las piernas o la espalda. Le faltaría un apoyabrazos central para descansar el brazo derecho cuando se viaja en ruta, y más en este caso, siendo automática y con la posibilidad de usar el cruise control. 


Abrimos la puerta posterior para ver como viajan atrás en la Spin. En la segunda fila el espacio es correcto tanto a lo ancho como a lo alto, además de permitir regular el respaldo en algunos grados para mejorar la comodidad, o el espacio para las piernas de los que vayan en la tercera fila.

Dos adultos pueden viajar sin problemas, en tanto que un tercero va algo más apretado a lo ancho. Punto en contra para la falta de apoyacabezas y cinturón de inercial de tres puntas en la plaza central, así como de anclajes ISOFIX para sillas infantiles, algo inentendible en un vehículo de casi U$S 30.000 y uso netamente familiar.

El acceso a la tercera fila de asientos no resulta complicado, pudiendo sencillamente plegar y levantar con dos palancas la segunda fila. Allí hay espacio suficiente para dos niños, o adultos que no superen los 1,70 m de alto. Hay apoyacabezas, cinturones de tres puntas, y dos huecos portaobjetos para ambas plazas, así como también de una luz de lectura que también oficia de iluminación para el baúl.


Si bien mientras estuvo en el garage de Autoblog -por obvias razones- no tuve que transportar a una familia numerosa, sí pude comprobar la comodidad de las siete plazas ante el pedido de algún que otro amigo con la pregunta"¿no me alcanzás hasta...?"

Para hablar de la capacidad de carga voy a mencionar tres de las diez -sí, leiste bien, diez- medidas que da Chevrolet para el baúl de la Spin. En la configuración de siete plazas tiene una capacidad de 162 litros, que aumentan hasta los 533 l con la tercera fila de asientos solo rebatida, ya que a diferencia de lo que ocurría en la Zafira con el sistema Flex7, no puede ocultarse. Si usamos solo la primer fila de asientos, abatiendo la segunda, la capacidad crece hasta los 952 litros.

El auxilio es temporal, en medida 115/70 R15, una solución poco acorde a nuestras rutas, y más teniendo en cuenta las dimensiones de la Spin, así como por su capacidad de hasta siete pasajeros.

MECÁNICA

El motor es el veterano 1.8 de ocho válvulas utilizado por varios modelos de la marca, como la pick-up Montana, por ejemplo. En la Spin entrega 106 cv de potencia a las 5.600 rpm y 160 Nm de torque máximo a las 3.200 vueltas, contando con un 90% del mismo disponible a partir de las 2.500 rpm.

En nuestra unidad, este impulsor iba asociado a una moderna transmisión automática secuencial denominada Active Select de seis relaciones, que toma prestada de los Sonic o Cruze, y que como veremos en la segunda parte, en ciudad no logra entenderse con un motor que la supera en años como el que equipa este MPV.


La entrega de gran parte del torque a tan bajas vueltas, nos garantiza agilidad en el tránsito urbano, en tanto que al salir a la ruta, la caja de sexta permite viajar a regímenes bastante bajos, así como también reducir la rumorosidad del impulsor, que se hace sentir en el habitáculo, en especial por encima de las 3.500 vueltas.

Si bien fábrica no declara consumos, durante la prueba obtuvimos un elevado consumo en ciudad de 16 l/100 km en promedio, y unos más lógicos 7l/100 km en ruta. Con esta combinación mecánica, según el fabricante, a la Spin le toma 12 segundos llegar de 0 a los 100 km/h y alcanza una velocidad máxima de 168 km/h. El depósito de combustible tiene una capacidad de 50 litros, en tanto que el peso en orden de marcha está en los 1.255 kg.

Galería: Chevrolet Spin LTZ AT6
 Prueba: Chevrolet Spin LTZ AT6 (Parte 2)