Probamos al Peugeot 2008 Griffe: doble identidad

martes, 22 de septiembre de 2015



Evaluamos a la versión fabricada en el Mercosur del Peugeot 2008, la Griffe 1.6 THP.
No todos los días podemos ver un crossover con la potencia que otrora solía estar reservada a productos calificados como "temperamentales". Por eso en unos días podrán ver la evaluación completa del Peugeot 2008 Griffe: una carrocería familiar, con el motor (casi) de un deportivo.

Antes de arrancar con el adelanto de lo que estaremos evaluando en los próximos días, una lección de historia antigua griega. Un grifo es una criatura mitológica, cuya parte superior es la de un águila, mientras que la parte inferior es la de un león.

A su vez, es una imagen que también suele vincularse con la seguridad, protección, y el poderío. Sin ir más lejos, hay empresas de vigilancia que tienen en sus logotipos un grifo, e incluso, familias poderosas tienen a esta criatura entre sus escudos de armas. Es una gran representación de dos virtudes de estos animales combinadas, la fortaleza del león y la ferocidad del águila.


¿Qué tendrá que ver esto con un modelo como el 2008 que ven en imágenes? En que Peugeot decidió denominar a su variante más equipada y potente como "Griffe" (garra en francés), y cuya etimología (gryphos, en griego) tiene la misma raíz que la del nombre del animal mitológico.

Al igual que aquella criatura bestial, el 2008 es una conjunción de dos mundos, como ya lo explicamos hace algo más de un año cuando lo probamos por primera vez (ver adelanto de prueba), el de las berlinas y los SUVs, creando así el nuevo término "crossover".


En el caso de la versión que ahora nos está llegando producida desde Brasil (ver lanzamiento), el modelo vuelve a mostrar dos facetas: un aspecto de vehículo familiar combinado con un impulsor que solía reservarse a los productos con más carácter de PSA Peugeot-Citroën. Nobleza obliga, también ha sido usado por productos con un enfoque relajado también (C4 picasso, 3008, 5008, etc).

Según fábrica, este 2008 Griffe, logra una velocidad final de 206 km/h, y una aceleración de 0-100 km/h en 8,3 segundos, gracias a un impulsor 1.6 litros de inyección directa, turbo twin-scroll de alta presión (THP) que produce 165 cv de potencia y 240 Nm de par máximo. Si lo sacáramos de contexto, podríamos estar hablando de un modelo con la insignia "GT" dentro de Peugeot.


Para que tengan una referencia, les repaso algunos de los productos que supieron usar -o usan- esta mecánica: Peugeot RCZ, Citroën DS 3 y DS 4, Peugeot 208 XY, MINI Cooper S (en sus variantes Hatch, Cabrio, Coupé, Roadster, Countryman y Paceman). Hoy 165 cv nos parece una cifra "normal", pero hace unos años atrás (año 1996 para ser exacto) solo un deportivo como el Peugeot 306 GTi-6 podía llevar una potencia parecida: 167 cv. 19 años después tenemos un producto "familiar" como el 2008 con apenas 2 cv menos.

Por eso el 2008 Griffe es un híbrido interesante para conocer a fondo. Por fuera es un producto "manso", y aunque dentro tiene las garras bien afiladas. Doble identidad, igual que el grifo. Pudimos probarlo durante tres días y en los próximos días podrán ver la evaluación completa.