Probamos al MG4: hyper-hatch eléctrico, pero con pedigree

martes, 26 de diciembre de 2023



Ahora bajo la representación de Grupo Eximar, MG vuelve al mercado uruguayo, entre varios modelos, con el MG4.

Evaluamos por primera vez a un producto de MG o Morris Garages. Con el segundo relanzamiento de la marca, llegaron productos muy interesantes como el MG4. Este hatchback compacto busca combinar la modernidad de la electrificación, con la deportividad que originó a esta firma inglesa hace casi un siglo.

Con el advenimiento de los eléctricos y esa carrera por las prestaciones que tanto corren algunas marcas en pos de mantenerse relevantes en el mercado, el concepto de “hyper-hatch” comenzó a ser una realidad. Pero, ¿qué clase de productos son? Tomando como punto de partida los “hot-hatchbacks”, es decir, berlinas de cinco puertas, chicas o compactas, con más potencia de la que necesitan, el “hyper-hatch” es la hipérbole de ese concepto. Si un “hot-hatch” tiene 200 cv, el “hyper” debería tener -al menos- el doble.

Hay firmas que vienen corriendo esa carrera por la potencia desde hace más de un siglo. MG es un ejemplo. Más allá de sus idas y vueltas financieras que la llevaron a tener más dueños que un boliche de la costa, hay algo que la firma inglesa nunca dejó de intentar: hacer vehículos más deportivos que lo normal.


MG toma su nombre de las iniciales de “Morris Garages”, la fábrica y taller de autos de William Morris, en el cual Cecil Kimber, -fundador de MG, era el gerente general. Kimber comenzó modificando carrocerías sobre chasis ya existentes, y dotó motores -con prestaciones deportivas para venderlos a un mejor precio, lo que definió desde un principio a sus modelos.

Cecil Kimber logró construir en 1927, es decir, a solo 3 años de la fundación de la empresa, un deportivo con un diseño compacto, moderno y deportivo, llamado Midget, que cimentó las bases de otro paradigma de la industria -en especial inglesa- como son los biplazas deportivos y con techo desmontable. Años más tarde e incluso en la actualidad, MG sigue siendo una de las marcas emblemáticas de este formato. Le siguieron los MGA y MGB, que incluso llegaron a montar mecánicas V8.


Ya en los inicios de los 2000, MG estaba pasando por penurias, algo de lo que las empresas inglesas automotrices saben una cosa o dos. Sino, vayan a leer la historia de British Leyland y después me cuentan. Pero volvamos a MG. Después de años difíciles, marcados por las constantes regulaciones y exigencias del mercado británico, MG se fusionó con Rover, formando el grupo MG Rover. Juntos lanzan el MG TF, conocido como el último modelo deportivo roadster de la marca, al menos hasta este 2023 con la llegada del Cyberster eléctrico.

Pero no quiero irme por las ramas, porque eso será cuestión de otros informes. La unión con Rover acaba en fracaso y quiebra. Por lo que en el año 2008, la crisis mundial provoca una gran recesión que se extiende a la industria automotriz, incluso haciendo quebrar a conocidas marcas norteamericanas (vuelen alto, Saturn y Pontiac). El gigantesco grupo chino SAIC Motors compra MG, logrando que la historia se siga escribiendo hasta nuestros días.


Este renacer de la marca inglesa ahora de la mano de SAIC trajo consigo un reflote del concepto de deportividad que se había dejado de camino al salvataje económico de la empresa. Un ejemplo de ello es el MG4 (ver lanzamiento), la punta de lanza de una nueva MG que se proyecta como una de las empresas de mayor crecimiento en los últimos tres años en el viejo continente. Según el analista de JATO Dynamics, Juan Felipe Munoz (ver informe) MG alcanzó el Top 20 europeo en agosto con casi 14.900 unidades. Y estamos hablando de una empresa que hace 15 años básicamente estaba en quiebra.

Esta cifra es superior a la registrada por Suzuki, MINI, Mazda o Jeep. Los eléctricos supusieron el 59% de este volumen, situándose como la séptima marca eléctrica más vendida, por delante incluso de grandes como Opel, Audi, Skoda, Peugeot o Renault. Uno de los responsables de esto fue el MG4, que además de ser un hatchback eléctrico de volumen, es también un hyper-hatch que retoma los valores prestacionales de sus ancestros, pero escalados a los de de deportivos del 2023: dos motores que producen 320 kW (435 cv de potencia) y 600 Nm de torque. Promete una aceleración de 0 a 100 km/h en 3,8 segundos y una velocidad máxima limitada a 200 km/h. Sin dudas es un hyper-hatch eléctrico moderno, pero con un pedigree de casi un siglo. Autoblog pudo probarlo y en unos días más podrán leer el análisis completo de este regreso de MG a nuestro mercado, ahora de la mano de Grupo Eximar (representante e importador también de Volvo JLR -Jaguar/Land Rover-).