Probamos al Haval Jolion: buscando jugar con los líderes

miércoles, 12 de octubre de 2022



Probamos a nuestro segundo modelo de Haval, el que toma la posta del H2: el Jolion.

Evaluamos al modelo de acceso a la gama Haval en Uruguay, el Jolion. Se trata del reemplazo del H2, y ahora la sub-marca de Great Wall Motors buscará competir en el segmento más peleado del mercado de los SUVs: el de los sub-compactos. Pero antes, el ya clásico adelanto previo a la evaluación completa.

El Haval H2 (ver lanzamiento) fue el primer modelo que se comercializó en nuestro mercado con esa marca de origen chino. Era un SUV sub-compacto que estrenaba el emblema de la sub-marca de sport utilities de Great Wall Motors y había sido lanzado en el Salón de Pekín de 2014. Pero en algunos mercados como el uruguayo, también sirvió como la carta de presentación de la marca.

Es que además fue el primer modelo de la firma en ser comercializado en nuestro país bajo una sociedad compuesta entre Grupo Fiancar y Homero de León, siendo el único caso del mercado uruguayo en donde una marca es importada por dos representantes. Raro de explicar a veces, pero funciona así. Ambos importaban autos y SUVs de Great Wall por separado, pero ahora lo hacen juntas para Haval y Great Wall.

La historia de Haval a nivel global, ya fue repasada brevemente hace unas semanas en el adelanto de la prueba del hermano mayor del modelo que nos convoca hoy, el H6 (ver prueba). Y con ese pie, ya me anticipo a hablar del Jolion (ver lanzamiento) que será el protagonista de la segunda prueba con la marca Haval en Autoblog. Este SUV es el reemplazo del H2 mencionado más arriba. Tal reemplazo es, que hasta el nombre cambió.

Fue presentado en el Salón de Beijing de 2020 y se produce en Tianjin, China, estrenando la nueva plataforma modular B30 (también llamada L.E.M.O.N.) de Great Wall, compartida con el H6 de tercera generación (ver lanzamiento) que probamos acá hace unos días. En julio de 2021 llegó a Uruguay en dos variantes (Middle y Top) equipadas con un motor 1.5 litros cuatro cilindros turbo de 141 cv, asociadas a una transmisión manual de seis marchas o automática secuencial de doble embrague y siete relaciones, ambas con tracción delantera.

La tarea del Jolion, al igual que lo fue del H2 en su momento, es la de establecer a Haval como un jugador más dentro del segmento de los SUVs más populares. No la tiene fácil. En esta parte del mercado están productos muy establecidos como los Chevrolet Tracker (ver prueba), Nissan Kicks (ver prueba), Renault Duster (ver prueba), Volkswagen T-Cross (ver prueba), Hyundai Creta (ver prueba), Peugeot 2008 (ver prueba) o Jeep Renegade (ver prueba), por citar algunos casos bastante populares.

Si bien Haval no busca ser líder de segmento, dado que los volúmenes que llegan a Uruguay no son iguales a los de sus rivales más populares, ni tampoco cuenta con una red de concesionarios muy extensa, de todas formas busca hacerse un lugar en base a un producto que ofrece bastante equipamiento por el precio, una mecánica que está entre las más potentes del segmento y un diseño atractivo. ¿Logrará con esos atributos ser un jugador a tener en cuenta para este segmento? Lo sabremos con el análisis completo de este Haval Jolion.