Ahora es oficial: así es el nuevo Honda Insight

jueves, 3 de mayo de 2018



La tercera generación del Honda Insight se presentó en el pasado Salón de Nueva York 2018.
Usando como base al Civic, Honda presentó en el Salón de Nueva York 2018 a la tercera generación del Insight, su modelo híbrido para competirle de lleno al exitoso Toyota Prius. Utiliza un conjunto mecánico capaz de producir 155 cv de potencia y aunque suene extraño, carece de transmisión.


La tercera generación del Honda Insight fue presentada en los Estados Unidos hace algunos días atrás y como podrán ver en las imágenes del informe, dio un giro bastante radical en términos de estilo respecto a la segunda. Ahora se asemeja bastante más a su hermano, el Civic, pero combinando ese diseño con una carrocería que es en realidad un fastback y no un sedán como aquel.

Por dentro las novedades son totales en términos de disposición y estilo. Por ejemplo cuenta con asientos delanteros hasta con doce ajustes eléctricos, además de ventilación y calefacción. En relación al infoentretenimiento ganó una pantalla táctil de ocho pulgadas con compatibilidad para Apple CarPlay y Android Auto. Otros elementos interiores comprenden un head up display a color, conectividad LTE 4G, emparejamiento de teléfonos inteligentes vía Bluetooth con NFC, etc.


Sin embargo, lo más interesante del Insight es su conjunto mecánico. Lleva un motor térmico 1.5 atmosférico con cuatro cilindros de ciclo Atkinson, asociado a un motor eléctrico. La potencia combinada del sistema es de 155 cv y par máximo de 267 Nm. Honda no ha ofrecido más datos sobre las prestaciones del sistema. Y no llegamos todavía a lo más interesante de esta berlina híbrida.

La gran novedad es un sistema llamado i-MMD (Intelligent Multi-Mode Drive) cuya particularidad es la ausencia total de una caja de cambios. En conducción habitual, el motor térmico trabaja con el generador eléctrico. Así nutre de energía a la batería y a un motor eléctrico, único encargado de hacer girar las ruedas mediante una relación fija. Pero se desconecta el motor térmico cuando el motor naftero no es necesario, como en retenciones o en situaciones de baja carga, haciendo innecesario el uso de una transmisión convencional.