Bestia de Nürburgring: Mercedes-AMG presenta al GT R

domingo, 26 de junio de 2016



Este es el Mercedes-AMG GT R, la versión más radical del gran turismo de Affalterbach.
Desarrollado en el Nürburgring y presentado este pasado viernes en Brooklands, en el Reino Unido, el Mercedes-AMG GT R es la nueva versión de calle más radical de este gran turismo alemán. Su mecánica 4.0 V8 bi-turbo ahora desarrolla 585 cv y suma tecnologías dinámicas a nivel de chasis.
Luego de adelantarlo con algunos teasers, finalmente Mercedes-AMG le quitó el velo a su GT R, la variante más extrema y deportiva del gran turismo de Affalterbach. Frente al AMG GT (ver lanzamiento) cuenta con una mejor aerodinámica, más potencia, menos peso y una estética muy agresiva.

Ya que la menciono, voy a hacer mención de una de las cosas que más me gusta de este producto: el color. Sé que a muchos le parecerá "poco elegante" terraja, pero defiendo ese tono denominado "AMG Green Hell Magno", que en realidad es un homenaje al circuito Nürburgring Nordschleife, donde Mercedes-AMG hizo gran parte de su desarrollo. Es más, a finales del año pasado pude ver en ese lugar algunas "mulas" de este  GT R camufladas y jamás olvidaré el sonido que hacían.


Para conseguir ese hermoso y bestial rugido, el 4.0 litros V8 bi-turbo ya conocido de los GT y GT S, ahora desarrolla 585 cv de potencia a 6.250 rpm y 700 Nm de par disponibles entre 1.900 y 5.500 vueltas. Se trata de un incremento de 123 cv y 100 Nm más que el AMG GT y 75 cv y 50 Nm frente al GT S.

Para conseguir estas mejoras se adaptaron dos nuevos turbos -que soplan a 1,35 bares en lugar de 1,2- y se recalibró la relación de compresión de la mecánica, aunque no se especifica cuánto en la información de prensa que comunicó Mercedes-AMG. También se redujeron los tiempos de cambio de marchas de la transmisión automática de doble embrague y siete marchas, AMG Speedshift DCT 7, mientras que la tracción sigue siendo trasera.


El resultado de todos estos retoques son una aceleración de 0 a 100 km/h de apenas 3,6 segundos, una velocidad punta de 318 km/h y un consumo homologado de 11,4 litros a los cien kilómetros. Las otras modificaciones fueron realizadas a nivel de carrocería. Por ejemplo, cuenta con 4,6 centímetros más de ancho adelante y 5,7 centímetros atrás. 

Los neumáticos de serie son Michelin Pilot Sport Cup 2 en medidas 275/35 ZR 19 adelante y 325/30 ZR 20 atrás, junto a llantas de aleación de menor peso que las convencionales. En la parte trasera incorpora una salida de escape central y otras dos más integradas en el difusor, por lo que los paragolpes también se vieron modificados con difusores de mayores dimensiones.


Lo otro que tiene es un gran trabajo a nivel aerodinámico. En el frontal cuenta con una nueva parrilla (con aberturas activas) tomada del AMG GT3 de competición, mientras que en los guardabarros suma las entradas air curtains en los laterales. Incluso tiene dos salidas de aire debajo de los grupos ópticos traseros, que son acompañadas de un generoso alerón posterior regulable.

Pero ahí no terminan las soluciones para combatir al viento. También tiene un perfil ubicado bajo el splitter delantero que puede desplazarse hacia abajo hasta cuatro centímetros a partir de 80 km/h, alterando el flujo de aire y creando el llamado "efecto Venturi", que aumenta la carga aerodinámica en el eje frontal.


Sin embargo, la mayor novedad viene por parte del chasis que cuenta con dirección en ambos ejes. En el tren trasero, por ejemplo, ofrece la posibilidad de cambiar el ángulo de las ruedas en 1,5 grados, girando en dirección opuesta a las delanteras hasta una velocidad máxima de 100 km/h. Por encima de esa velocidad el sistema permite que ambos trenes giren juntos.

También se realizó una dieta de materiales, incorporando un techo realizado en fibra de carbono. El resultado del adelgazamiento es un reparto de pesos de 47,3% adelante y un 52,7% atrás. Otras piezas, como el titanio o el aluminio también fueron usados de forma extensiva en la transmisión y chasis.


La suspensión es completamente ajustable y se puede regular mediante la amortiguación variable AMG Ride Control que a su vez cuenta con tres niveles (Comfort, Sport y Sport Plus). El ESP por su parte, cuenta con tres modos: On, Off y Sport Handling Mode, mientras que el control de tracción trae nueve -sí, nueve- seteos diferentes.

A nivel de frenos por su parte, trae de serie cuatro discos de compuesto cerámico de 390 milímetros para el eje delantero y 360 milímetros para el trasero, mientras que en opción se ofrecen unos también carbonocerámicos que pesan incluso 17 kilogramos menos y con discos más grandes, de 402 mm en el eje delantero.


Video: Mercedes-AMG GT R