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| Evaluamos al Peugeot New 308 PureTech con la nueva mecánica 1.2 THP de 130 cv de potencia. |
Peugeot presentó recientemente en Uruguay al New 308 1.2 PureTech con 130 cv de potencia. Autoblog ya pudo probarlo y en algunos días más podremos ver la evaluación completa de este producto que llega para defender sus colores con un 1.2 turbo que esconde mucho más de lo que dice.
Lo primero que haré es confesarles una mentira blanca. No hace unos días que probé este auto. Hace mucho más. A mediados de octubre Peugeot Uruguay me cedió esta unidad que ven en imágenes con la condición de que me inyectara una dosis de amnesia artificial. Nadie podía saber que esto era un modelo diferente a otros New 308 que circulan en la calle. Mucho menos publicarlo en Autoblog antes de que saliera a la venta.
El auto también ayudó a ese ejercicio amnésico. Por fuera si les dijera que es el 1.6 THP, posiblemente ustedes me creerían. Es más, cuando lo fui a retirar fue exactamente lo que dije: "es idéntico a un 1.6 Active. ¿Estás seguro que no estás dándome ese y no el PureTech?". Me dijeron que no, hice un gesto incrédulo con la cabeza y hombros, y sin chistar, me subí al león blanco.
Al subirme al auto lo primero que noto son dos cosas. Uno: tiene caja automática. La EAT6 III que Peugeot-Citroën desarrolló junto a nipona Aisin para darle carnet de jubilación a la anterior caja de seis marchas llamada AT6. Se denomina Efficient Automatic Transmission, y habrá que usarla para saber qué tanto de "efficient" tiene en sus huesos. Pero eso quedará para la prueba, paciencia.
Siguiendo con la inspección, llegué al punto dos: el kilometraje. La unidad que me prestaron no solo tenía matrículas "viejas" (es decir, no las Mercosur), sino 18.764 km recorridos. También, de no haber prestado atención al odómetro, no me hubiera dado cuenta de ese detalle. El auto parecía nuevo, sin un solo plástico flojo, nada.
Una vez que revisé que todo estuviera en orden, me dispuse a girar la llave. Nada. No había vibraciones. Ni repiqueteo de tricilíndrico. Solo un motor más debajo del capot. Desconfiado como soy, me bajé, abrí el capot y sí, efectivamente abajo estaba el nuevo motor EB2DTS, también conocido comercialmente como "PureTech 130". Me fijé en la libreta del auto, y de nuevo lo mismo. Pero igual no les creía.
Empecé a rodar sacándolo del garage de la marca y lo primero que noto es lo sereno que sonaba todo. Mis prejuicios me decían "130 cv y caja automática, te vas a dormir con esto", y yo los intentaba acallar subiendo el volumen de la pantalla multimedia táctil. Igual unos minutos más tarde no haría falta esto.
Salí por la calle Paraguay, rumbo a Avenida del Libertador, y en el primer semáforo se apagó el auto. "Claro, trae Star&Stop" me dije. La luz se puso en verde, quité el pie del freno, el 1.2 volvió a la vida, señalero a la izquierda y doblé. Una vez que encaré la avenida pisé con un poco más de fuerza el acelerador, y allí tanto mis prejuicios como todas mis intenciones de creer que esto era un 1.2, quedaron tirados de cabeza dando vueltas en la esquina de Paraguay y Paysandú.
"Dios mío lo que acelera esto" pensé. "Es un 1.2, no puede patear así, este auto está tocado". A fondo los tres cilindros sí se sintieron con su sonido característico, pero silenciados por un turbocompresor que no solo le da mucho empuje al pequeño motor, sino que también se lleva por delante a cualquier tipo de preconcepto sobre el downsizing.
Creo que ya hubo bastantes spoilers y no precisamente salidos de la carrocería de este New 308 PureTech, así que me callaré. En algunos días más tendrán la prueba completa de esta novedad recién llegada de Peugeot y que en Autoblog pudimos evaluar durante cuatro días y más de 400 kilómetros.
Cerraré esta nota por acá diciéndoles una sola cosa: si estaban esperando comprar un hatchback de segmento C, les recomiendo que se aguanten unos días más a la prueba que publicaré. Quizás hasta ahora un 308 no había entrado en tu radar. Después de conocerlo lo invadirá, sin que te des cuenta, como un caza stealth con su potencia camuflada.
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