Probamos a la Fiat Strada Adventure Cabina Doble: tres para cuatro

jueves, 19 de febrero de 2015



Nos subimos durante cuatro días y más de 560 kilómetros a uno de los productos más pedidos por ustedes: la Fiat Strada.
Finalmente pudimos probar a uno de los modelos más pedidos por ustedes, la Fiat Strada Cabina Doble 3 puertas. Durante cuatro días y más de 560 km la manejamos para entender el por qué del liderazgo en el segmento de las pick-ups chicas del Mercosur. El adelanto del test, tras el salto.


Hace tiempo que quería conocer a fondo este producto. Muchos de ustedes, a lo largo de estos cuatro años y monedas han pedido una infinidad de veces que probáramos a la Strada. Tras insistirle a la gente de Sevel Uruguay, casi hasta el límite de la tolerancia humana, durante algo así como once meses consecutivos, finalmente pude hacerme con una unidad para la prueba.

¿Cuál es el misterio que esconde la Strada? ¿Por qué hace más de 15 años es líder en el Mercosur, dejando a todas sus rivales en aprietos cada vez que se cierra un balance de ventas mensual o anual? ¿Qué le ve el público de la región a una simple pick-up de trabajo o recreacional? ¿Qué tiene la Fiat que las otras no?


Estas y otras preguntas empezaron a revolotear en mi cabeza días antes de retirar la unidad, y fue entonces cuando decidí hacer un poco de repaso histórico. La Strada se lanzó en el año 1998 como la reemplazante de la veterana Fiorino pick-up, y en aquel entonces solo se ofrecía como una "camioneta" de cabina simple y una humilde tarea, ser una herramienta de trabajo.

En aquellos días, cuando este humilde redactor apenas tenía 10 añitos, el mercado de pick-ups chicas estaba dominado por Volkswagen con su Saveiro. Fiat estaba intentando recuperar el terreno perdido con la Fiorino, que decía adiós por entonces, y la Strada, al menos en sus primeros años, no acompañaba ese objetivo, al menos en los inicios.


Un año más tarde aparecía el primer mojón que marcaría la apuesta de Fiat a futuro, la incorporación de una versión con cabina extendida, siendo la segunda en ofrecerla en el segmento B, por detrás de Volkswagen. En el 2000, Fiat hizo pasar al Palio (modelo del que deriva la Strada) por el lápiz de Giorgetto Giugiaro con un profundo restyling, y dos años después, le tocó visitar la mesa de diseño a la Strada.

Y es aquí donde la historia comienza a dar un giro a favor de Fiat. Allí se presentaba a la primera generación de la Strada Adventure, una variante con mejoras a nivel de suspensiones, amortiguación, protecciones de chasis, y neumáticos, que le permitirían transitar por caminos en mal estado. Es decir, la gran mayoría de los caminos del Mercosur. El primer golpe estaba dado.


La Adventure se convirtió en un éxito de ventas en Brasil, Argentina, y también en nuestro país. En 2004 recibió una nueva actualización, y cuatro años más tarde, otra más, que estrenaba en la versión Adventure la posibilidad de contar con el diferencial electrónico "Locker", una novedad absoluta para el segmento. Ahí tienen el segundo cross de derecha a los rivales.

Ya con una gama consolidada, el liderazgo del segmento por encima de Saveiro, enterrando a la Courier de Ford, dándole dolores de cabeza a Chevrolet con la primera Montana, y posteriormente a Peugeot con la Hoggar, Fiat se paraba firme en el mercado y se ponía en guardia para dar el tercer batacazo.


En 2010 se presentaba junto a las carrocerías de cabina simple y extendida, una tercera opción: la doble. Y fue aquí donde la competencia ya no pudo alcanzar a Fiat. Las ventas de Strada se dispararon en el Mercosur, vendiendo incluso más que el Palio en algunos mercados, siendo el nuestro uno de los ejemplos más contundentes.

En Latinoamérica, la firma tiene más de la mitad del mercado de utilitarios livianos, y en Uruguay el share es de más del 50%. La marca es líder del segmento de pick-ups chicas por amplia ventaja y solo Volkswagen puede darle pelea, ya que Chevrolet ocupa un tercer lugar y lejos, mientras otros rivales como Peugeot o Ford, desistieron de seguir la batalla hace años.


Con el fin de no perder el trono, es que Fiat presentó a finales de 2013 una solución simple, pero muy ingeniosa para su versión cabina doble: le agregaron una puerta que facilita el ingreso a las plazas traseras. Este producto llegó a nuestro país hace exactamente un año (ver lanzamiento), y con él, Fiat volvió liderar el segmento de pick-ups chicas también en 2014.

Sumando una puerta, la Strada volvió a sacarle ventaja a sus rivales, ya que nadie había pensado en algo similar hasta entonces. Pero no solo mejoró en ese sentido, también incrementó el volumen de carga en un 18%, además de aumentar la altura de la caja en 8 cm.


Hoy la marca tiene la gama más amplia del segmento, y nuevamente fue pionera en una solución que su competencia tardó en responder. Volkswagen ahora tiene una Saveiro Cabina Doble (ver lanzamiento), sin puerta lateral aunque homologada para cinco pasajeros, y Renault está próxima a presentar una pick-up derivada del Duster (ver nota), la Oroch.

Ya sea que su competencia pueda ofrecer un poco más de espacio para pasajeros, o cuatro puertas tradicionales, es innegable que Fiat pegó primero. Y no dos veces, sino cuatro. Es por eso, y porque ustedes la pedían, que la probamos. La crítica completa se publicará la semana que viene.