Tarcísio Triviño: "el cliente de vehículos eléctricos puede ser cualquiera que ya no quiera gastar más en combustible"

lunes, 21 de marzo de 2022



Autoblog asistió al lanzamiento regional del Volvo C40 Recharge en Ciudad de México.

Desde Ciudad de México, México (*) Autoblog asistió al lanzamiento regional del Volvo C40 para toda América Latina. Allí conversamos con Tarcísio Triviño, director de mercados importadores de Volvo Cars para America Latina, para conocer más sobre de la estrategia de electrificación de la marca.
Los días 14, 15 y 16 de marzo, Volvo Cars Latin America & Caribbean invitó a más de 80 medios de la región a Ciudad de México al lanzamiento regional del C40 Recharge. El evento se desarrolló en el Hotel W de la capital mexicana y el estado de Morelos. El primer día se asistió a una conferencia de prensa en donde presentaron al producto:  Rafael Ugo (director de marketing de Volvo Cars Latin America & Caribbean), Felipe Yagi (responsable de marketing y comunicaciones de los importadores Volvo Cars Latin America & Caribbean), Abdallah Madi (gerente de producto de Volvo C40 para la región), Tarcísio Triviño (director de mercados importadores de Volvo Cars para America Latina), y Luis Rezende (responsable de Volvo Cars para America Latina).

En el segundo día se incluyó una breve prueba de manejo ida y vuelta desde Ciudad de México a Cuautla, en el estado de Morelos, a 116 km de la capital, con una caravana de casi de varios C40 Recharge Twin (ver contacto), teniendo como destino la ex Hacienda Santa Inés, fundada en el siglo XVI. Durante esa época el azúcar era considerada el oro blanco por su alto auge y Morelos por su clima un lugar muy conveniente para su cultivo. En 1668 pasó a ser propiedad de las monjas de dicho convento. E incluso se dice que supo ser refugio de Pancho Villa.


A la noche del miércoles, el lanzamiento terminó con un cocktail y fiesta en Estación Quintanilla, que hoy es un centro cultural, pero que en 1880 el edificio funcionó como taller de mantenimiento y estacionamiento de tranvías de la Ciudad de México. En ese mismo lugar estaba instalada una gran batería que almacenaba la energía para la red alimentadora de la corriente de la ciudad, y que permanecen en el espacio cultural. Allí además se expuso un P1800S en impecable estado de conservación, además del C40.

Autoblog pudo conversar con Triviño (foto de portada), Rezende y Ugo (juntos en la foto de arriba) a lo largo de estos tres días para conocer más sobre de la estrategia de electrificación de la marca, así como entender qué papel juega en ella este nuevo C40 Recharge. La charla con ellos tres se transcribe a continuación.

¿Cuál ha sido la experiencia hasta el momento comercializando XC40 Recharge en America Latina? ¿Qué dicen los consumidores al respecto?


Tarcísio Triviño: Hasta ahora lo que estamos percibiendo en términos generales de nuestros clientes de XC40 Recharge, es que la primera preocupación que tenían de dónde ir a recargar la batería, desapareció con el uso. El 90% carga en el domicilio, con el wallbox. Y tampoco todas las noches, una vez o dos por semana. Nada más. Incluso uno de nuestros clientes, a esa pregunta que mucha gente le hace de cuánto demora en cargar su XC40, les responde “cinco segundos”, porque enchufa el auto y se va a dormir.

Muchos clientes vinieron de vehículos híbridos y ahora se pasaron a full eléctrico, por lo que la transición fue natural. Por ejemplo, en Brasil, XC40 ahora es todo eléctrico en algunos mercados como Brasil. Y tenemos todo vendido cada mes. Por lo que el feedback es muy bueno, porque esto también se está repitiendo en los otros mercados de la región.

Luis Rezende: Los consumidores están muy contentos y francamente, nos faltan unidades para poder cumplir con la alta demanda. En Brasil, Uruguay y Colombia, no alcanzamos el volumen que nos están pidiendo los consumidores. El C40 está dándonos las pautas de que va a tener un éxito parecido al de XC40 Recharge en toda la región.

A: Ahora yendo con C40, ¿qué papel viene a ocupar este producto en la estrategia de electrificación para America Latina, pero también global para Volvo?

TT: C40 viene para sumar una opción más en términos de carrocería a la oferta ya existente de XC40. No está pensado para quitarle ventas, sino para ser un producto complementario. El C40 es un producto muy importante para Volvo Cars porque fue el primero desarrollado desde cero como eléctrico. No hay, ni está previsto que haya un C40 a combustión o siquiera híbrido enchufable.


Entonces en términos de diseño también estamos entrando en un nuevo segmento, pero además sumando todos los elementos de tecnología que Volvo está previendo tener en la gama de productos de futuro, como ser la integración con Google Assistant en el sistema multimedia, el sistema “one pedal driving”, las luces LED Pixel, además de los materiales reciclados y sustentables del interior. Es la puerta a la Volvo del futuro, con productos 100% eléctricos, sustentables, con mucho diseño y eficientes.

Rafael Ugo: C40 es un producto que vuelca todas las expectativas de diseño y tecnología del futuro de Volvo. Es un vehículo mucho más para “mi” que para “nosotros”, siendo hoy el modelo más “emocional” que tenemos en la gama hasta el momento. No vino para quitarle clientes al XC40, sino que es un consumidor que viene de otros segmentos y marcas, ni siquiera de la propia Volvo. Busca atraer a los que quieran diseño, tecnología, sustentabilidad y un diferencial en términos generales.

¿Usted podría definir a un consumidor latinoamericano de la gama Recharge o son todos distintos dependiendo de cada país?

TT: Aunque tenemos encuestas realizadas sobre consumidores, ayer estuve escuchando un caso de un cliente que tenemos en Brasil, con dos establecimientos ganaderos, que es un señor de 70 y pocos años, que compró un XC40 Recharge eléctrico para moverse entre sus dos estancias, que está una a 300 km de la otra. Colocó dos wallbox, uno en cada lugar, y listo. Ese podríamos pensar de antemano que jamás podría ser el perfil de un cliente de un Volvo eléctrico. Pero lo es. A lo que quiero llegar con este ejemplo es que con C40 podríamos buscar a un cliente que desea un diseño más deportivo. Pero el cliente de eléctricos puede ser cualquier persona que ya no quiera gastar más en combustible en términos generales y que guste de lo último de la tecnología.


LR: Son clientes muy parecidos, creo. Aprecian a la tecnología por igual, sin importar el mercado. Siendo modelos 100% eléctricos, ya vienen convencidos en dar el paso a la electrificación total, porque en su gran mayoría son consumidores de vehículos híbridos enchufables, no solo con Volvo, sino también con otras marcas rivales. Entonces sabemos que es una tendencia que no tiene retorno. Una vez que prueban las ventajas del eléctrico y conviven con ellas, no hay marcha atrás hacia la combustión. Incluso cuando podemos ponerle tecnología que facilite el uso a diario, como la integración con Google Assistant en el caso del C40, por ejemplo, ayuda muchísimo a decidir por el producto más allá de las ventajas conocidas de los eléctricos. Esto es, el torque instantáneo, la aceleración potente, y el silencio que hace del manejo una experiencia muy relajada.

¿Qué limitaciones ven en la región en estos momentos de cara a poder comercializar a próximos modelos la gama Recharge en el futuro cercano? ¿Están trabajando en aportar desde la red de recargas públicas en algún país?

TT: En América Latina tenemos pensado colocar más de 700 cargadores en los mercados en donde Volvo tiene importadores privados. En México y Brasil, que son filiales directas de la marca, tenemos planificado instalar 300 y 2.000 respectivamente. Nuestros clientes, por su parte, se llevan un wallbox a su casa con cada Volvo que compren. Entonces no vemos que haya limitaciones, al menos no para un consumidor de Volvo en América Latina en estos momentos.

Pero más allá de eso, no vemos limitaciones en la infraestructura porque los importadores recomiendan colocar puntos de carga pública en espacios donde nuestros clientes se mueven en cada país, siempre considerando espacios que insuman una frecuencia de al menos dos horas, como supermercados, clubes o parkings. Luego se gestiona la concesión con algún proveedor de cargadores local y los colocamos en esos puntos. Normalmente estamos trabajando con la firma Enel X en América Latina.


LR: Queremos hacer hincapié en que las cargas rápidas son importantes para quitar ese miedo a depender de la infraestructura. Porque la gran mayoría de las recargas de nuestros clientes latinoamericanos, se están realizando en wallbox domésticos. En Uruguay las costumbres son similares a las de otros mercados. Y estamos viendo eso. Queremos que el auto eléctrico no sea solo para la ciudad, sino que también permita un uso versátil y sin limitaciones para que lo utilicen cuando lo precisen. El mundo ideal sería que haya compañías que inviertan en redes de recarga pública junto a los fabricantes. Ya hay países que están en este camino, como Estados Unidos, República Dominicana o Panamá. Pero por ejemplo, en Brasil esto aún no existe. Por eso tomamos la iniciativa desde Volvo de satisfacer esa necesidad. Ya pusimos 13 puntos y la idea es llegar a más de 300. Para poder tener gamas 100% eléctricas, hay que cubrir antes eso. Y si nadie los cubre, los vamos a cubrir nosotros.

RU: La recarga y la infraestructura se resuelve con los clientes cargando en su casa. Si tienen la posibilidad o la necesidad de tener que depender de la red pública, lo planifican de antemano. Los vehículos como el C40 tienen en el sistema multimedia un calculador de autonomía al final del recorrido que ya te anuncia con qué cantidad de batería vas a llegar a destino y si vas a tener que depender de un cargador público o no. Entonces el cliente está tranquilo de que va a llegar a su objetivo de viaje incluso antes de salir de casa. En Volvo les damos esa tranquilidad de uso, porque hacemos de la infraestructura un complemento al uso doméstico, no es algo prioritario.

¿Cuál es la visión de Volvo Cars sobre el mercado de eléctricos en la región y en particular en Uruguay?


TT: En Brasil hay una ciudad llamada Curitiba, que es muy pequeña. Entonces a las empresas les gusta hacer ensayos de mercado antes de presentar algo más masivo, y así conocer las posibles fallas o aciertos que se podrían tener a gran escala. Con Uruguay nos pasa lo mismo, pero en relación a toda América Latina. Y lo que estamos viendo es que es un mercado que nos está contando mucho de lo que vamos a ver en toda la región cuando tengamos una gama 100% electrificada en todos los países americanos, aunque todos tienen ritmos diferentes. Experiencias como la de Uruguay nos va a permitir saber en donde tener éxito y donde tenemos que mejorar.

Hoy tenemos un volumen quizás chico, pero que en market share estamos ya en un 10%. Hoy queremos llegar al 20%, porque es el número que Volvo maneja globalmente en todos los mercados en donde participa. Lo único que limita en Uruguay no poder llegar a esa cifra aún, es la disponibilidad de productos por la crisis de semi-conductores y de transportes que dejó la pandemia en estos últimos años. Una vez que esto se resuelva, tenemos toda la expectativa de poder alcanzar ese objetivo con tranquilidad. En relación a los clientes uruguayos, hemos tenido una gran recepción de los productos y estamos felices con la imagen que Volvo tiene en Uruguay.

En el resto del continente, solo dos países tienen una gama 100% electrificada, Uruguay y Brasil. Luego a nivel global, hay uno más en Europa, que es Noruega y el otro es Tailandia, en Asia. El resto del mundo, aún no está tan avanzado como esos cuatro mercados. Ni siquiera Suecia está a la par de Uruguay en este sentido. Puerto Rico es otro mercado que está limitado por la disponibilidad para alcanzar un porcentaje más alto de mercados electrificados. Globalmente estamos en el 20% de electrificación y América Latina ya va por el 65%. Estamos muy cerca y bastante adelante de otros mercados.


LR: Para América Latina es muy importante el mercado de eléctricos. Países como Uruguay o Brasil están muy alineados con la estrategia de electrificación total de nuestra gama y van más adelantados que el resto de la región. Somos también muy revolucionarios y logramos ser la marca que vende más vehículos eléctricos premium en América Latina, quedando además terceros en el mercado premium de la región. La región juega un papel muy importante y Uruguay forma parte clave de ese liderazgo. Regresamos a ese país en 2018 muy fuertes, sabemos que no es un mercado grande y queremos tratar a cada cliente con un respeto altísimo. El Grupo Gildemeister está dándonos esa tranquilidad de que cada consumidor uruguayo que elige a Volvo, se vaya satisfecho con la atención y el producto que eligió.

RU: Lo que más me gusta de Uruguay es que el consumidor de ese país es más avanzado en términos de consciencia de sustentabilidad que en otros mercados. Sin ir más lejos, estamos vendiendo todo lo que llega de XC40 Recharge y tenemos expectativa que el C40 va a repetir el éxito, porque Volvo ya tiene una imagen construida de producto premium eléctrico o híbrido muy fuerte en Uruguay. Es un consumidor de las últimas tecnologías y defensor de la electrificación pura. Por lo que está muy cerca de nuestra visión de mercado a futuro de cara a la electrificación total, que ya anunciamos que será en el año 2030. Mercados como Uruguay ya van muy preparados a llegar a hacia ese objetivo.