Probamos al Seat Arona: hermandad europea y latina

lunes, 4 de mayo de 2020



Evaluamos al SUV más pequeño de la gama Seat, el Arona. Llega desde España en dos versiones de equipamiento.
Una de las pruebas que habían quedado pendientes del 2019 era la del Seat Arona, el SUV chico de la marca española que se basa en el Ibiza. Pero al formar parte de un grupo automotriz como es Volkswagen, también tiene parte de sus raíces en el Mercosur. Adelanto de test, a continuación.

Uruguay está formado por descendientes de inmigrantes europeos, al igual que otros países de Latinoamérica. En su mayoría las raíces se remontan a España e Italia, pero también las hay en Francia, Inglaterra, entre otros. En el universo de los automóviles, también existe esa correlación entre productos nacidos en el Mercosur y Europa.

En el caso del Grupo Volkswagen es muy común ver productos fabricados en nuestra región que comparten elementos mecánicos con aquellos que se venden en el viejo continente. El caso más claro lo podemos ver en Seat o Audi en comparación a los Volkswagen fabricados en Argentina o Brasil. La ubicua plataforma modular MQB-A0 y A00 está presente en ambos márgenes del Atlántico.


Por ejemplo, en el caso de la MQB original, es decir, la utilizada en los segmentos C y D se utiliza en los Volkswagen Golf/Vento y Audi A3, pero también en los Seat León, Audi Q2, A4 y A5, Škoda Octavia, Superb, Volkswagen Arteon, Atlas, Golf Sportsvan, Passat y Touran. Pero su hermana, la MQB-A0, es decir, la que se utiliza para productos del segmento B, es todavía más popular en ambos continentes.

VAG, o Volkswagen Automotive Group, estrenó una derivada de la MQB hace dos años atrás con el Seat Ibiza (ver prueba), llamada MQB-A0, que hoy le da vida a todos estos modelos: Audi A1 Sportback, Škoda Scala y Kamiq, así como a los Volkswagen Polo, Virtus, T-Cross y en algunos meses más, también al Nivus, la versión SUV con silueta de coupé del T-Cross. El otro producto que también se vale de la MQB-A0 es el que ves en imágenes, el Seat Arona (ver lanzamiento).


A nuestro mercado, además de compartir la plataforma con un rival y hermano de segmento como es el Volkswagen T-Cross, Seat también decidió dotarlo de la misma mecánica para Latinoamérica, con el conocido 1.6 MSI de 110 cv de potencia y transmisiones manual de cinco relaciones o automática de seis. Era inevitable la comparación entre ambos, más quedando a precios similares, solo que uno proveniente desde Brasil y el otro desde España.

Sin embargo, el Arona tiene más puntos en común con el T-Cross europeo (ver nota) que con el que se vende en el Mercosur (ver prueba). Por ejemplo, tiene la misma distancia entre ejes que aquel, comparte algunos elementos de seguridad que no están presentes en el modelo brasileño e incluso se produce también en España, solo que en lugar de Martorell, casa de Seat, el Volkswagen se fabrica en Navarra. ¿Pero tendrá alguna otra similitud o diferencia con el T-Cross Mercosur? Lo sabremos dentro de unos días más cuando puedan leer la evaluación completa del Seat Arona.

Aclaración: Esta prueba de manejo fue producida antes del período de distanciamiento social y cuarentena sugerida por el Gobierno nacional.