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| Para su 90º aniversario, MG realizó un concept, el MG3 Trophy Championship. |
Basándose en un común y silvestre MG3, Morris Garages preparó como modelo conmemorativo de su 90º aniversario que festejan este año, al Trophy Championship Concept, un pequeño hatchabck preparado por la propia marca básicamente con el fin de demostrar su potencial dentro del campo deportivo.
Por fuera encontramos algunos aditamentos aerodinámicos, tales como el splitter frontal, faldones laterales, difusor trasero y el alerón posterior que descansa sobre el portón del baúl. Además aparece un juego de llantas de aleación multirrayos de 17 pulgadas pintadas de color negro, para contrastar con el rojo de la carrocería, además de ser completamente ajustable.
Bajo la misma los ingenieros de MG también echaron mano de una importante rebaja de peso, quitándole implementos de confort al conjunto -levantavidrios, aire acondicionado, etc.-, mientras que las suspensiones fueron endurecidas así como también se le agregó un diferencial de deslizamiento limitado.
Las suspensiones delanteras Mcpherson son totalmente ajustables, con una barra estructural frontal y unas suspensiones traseras con sistema coil over . El conjunto se completó con un refuerzo estructural inferior, con una jaula de seguridad, butacas de competición y neumáticos slick.
Sin embargo, lo más interesante de este concepto se esconde debajo del capot. MG tomó el 1.5 VTi que equipa al modelo de calle, pero ahora se ve potenciado por un turbocompresor, pistones de aluminio, un nuevo árbol de levas y una ECU optimizada. Es así, que de los 106 cv y 136 Nm de torque, la potencia aumenta hasta los 204 cv y 260 Nm de par máximo.
Si bien por ahora seguirá llevando el apellido conceptual, es posible que MG esté estudiando comenzar una categoría monomarca con este modelo, y honestamente, no sería una mala idea, aprovechando su participación actual con el MG6 en el BTCC.
Por fuera encontramos algunos aditamentos aerodinámicos, tales como el splitter frontal, faldones laterales, difusor trasero y el alerón posterior que descansa sobre el portón del baúl. Además aparece un juego de llantas de aleación multirrayos de 17 pulgadas pintadas de color negro, para contrastar con el rojo de la carrocería, además de ser completamente ajustable.
Bajo la misma los ingenieros de MG también echaron mano de una importante rebaja de peso, quitándole implementos de confort al conjunto -levantavidrios, aire acondicionado, etc.-, mientras que las suspensiones fueron endurecidas así como también se le agregó un diferencial de deslizamiento limitado.
Las suspensiones delanteras Mcpherson son totalmente ajustables, con una barra estructural frontal y unas suspensiones traseras con sistema coil over . El conjunto se completó con un refuerzo estructural inferior, con una jaula de seguridad, butacas de competición y neumáticos slick.
Sin embargo, lo más interesante de este concepto se esconde debajo del capot. MG tomó el 1.5 VTi que equipa al modelo de calle, pero ahora se ve potenciado por un turbocompresor, pistones de aluminio, un nuevo árbol de levas y una ECU optimizada. Es así, que de los 106 cv y 136 Nm de torque, la potencia aumenta hasta los 204 cv y 260 Nm de par máximo.
Si bien por ahora seguirá llevando el apellido conceptual, es posible que MG esté estudiando comenzar una categoría monomarca con este modelo, y honestamente, no sería una mala idea, aprovechando su participación actual con el MG6 en el BTCC.
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