Probamos a uno de los últimos lanzamientos de la gama eléctrica de JAC Auto, el e-J7. |
"Los autos eléctricos son carísimos" es una frase que vengo escuchando en el último tiempo bastante seguido. Y más con cada prueba de este tipo de productos que puedo realizar en el sitio. Sin embargo, es una verdad a medias, si soy sincero. Comencemos por asumir que ningún automóvil es "barato" o "accesible" por estos días y menos en un país atomizado a impuestos y tasas como Uruguay. Y aún más cuando ya no existen más modelos en el entorno de los U$S 10.000. Hoy para acceder a un primer 0km hay que irse cerca de U$S 12.000 y la oferta no es muy variada tampoco. Incluso se limita a una marca.
Si ampliamos un poco el panorama de compra, empezamos a ver que tenemos un mercado variado en opciones de marcas, siluetas y por sobre todo, fuente de energía. Aunque el gasoil quedó en las manos de los utilitarios y vehículos de trabajo, en el uso privado las opciones a combustión o electrificadas, son muchísimas. Pero en especial estas últimas. Hoy en el mercado local hay más de 40 modelos eléctricos.
Y a medida que trepamos en la escala de precios, algo que está dándose en los últimos 3 o 4 años, es que los productos eléctricos se arriman cada vez más a sus equivalentes a combustión de cada segmento. Un ejemplo de esto es JAC Motors, que permite explicar con claridad este punto. Su primer modelo de acceso es el e-S1 (ver lanzamiento), un citycar eléctrico que cuesta al público U$S 24.990. Un valor que sin darle muchas vueltas, duplica lo que cuesta un auto de segmento A equivalente e igual origen (China).
Sin embargo, en el siguiente escalón de su gama ya está presente el e-S4 (ver lanzamiento), que es un SUV compacto 100% eléctrico también. Tiene un valor de U$S 40.990, que ya es un precio que se para más cerca de otros modelos equivalentes a combustión. Y podemos trazar la misma comparación con el utilitario liviano de la marca, el M3 EV (ver lanzamiento), con un valor de U$S 42.990 a público.
Viendo este patrón, aquella frase de los eléctricos inaccesibles es un poco más endeble en sus argumentos. Más cuando empezamos a hacer cuentas sobre los costos operativos de estos modelos en comparación a uno con cilindros, pistones y combustión. Autoblog hizo un informe al respecto el año pasado, por si no lo recuerdan. Y en caso de que aún no lo hayas leído, te lo recomiendo. Tal vez precises un eléctrico en tu vida y todavía no lo sabés porque no te sentaste un rato a sacar números con tu auto actual (ver informe).
Pero no quiero irme por las ramas. Ahora nos convoca otro modelo de JAC que cumple con esta premisa de tener una opción eléctrica al mismo valor que uno a combustión. Se trata de la última novedad de la firma, el e-J7 (ver lanzamiento). Llega desde China en una sola variante de equipamiento y mecánica, con un impulsor capaz de producir 142 kW de potencia (190 cv) y 340 Nm de par máximo, así como una batería de 50,1 kWh que le permite 402 km de autonomía. ¿Su precio a público? U$S 37.990. Es decir, casi lo mismo que otros sedanes compactos a combustión. Por eso hoy planteo la pregunta para que debatan antes del test de esta semana: a igual precio, ¿eléctrico o naftero? Los leo en los comentarios.