Es oficial, híbrido y bestial: así es el Mercedes-AMG One de producción

viernes, 3 de junio de 2022



Cinco años después de haber sido revelado como concepto, Mercedes-AMG oficializó al One.

Con ocasión del 55.° aniversario de la marca, Mercedes-AMG One, presentado como concepto en el año 2017. Es un híbrido de altas prestaciones equipado con un motor de combustión interna y cuatro motores eléctricos y desarrolla una potencia total de 782 kW (1.063 cv). Solo se producirán 275 unidades.

El Mercedes-AMG One de producción está equipado con un motor de combustión interna y cuatro motores eléctricos y desarrolla una potencia total de 782 kW (1.063 cv). La velocidad máxima se limita por vía electrónica al alcanzar los 352 km/h. El proceso de desarrollo, de una complejidad extrema, es fruto de la estrecha cooperación con los especialistas en Fórmula 1 de la empresa Mercedes-AMG High Performance Powertrains en Brixworth. Gran Bretaña será asimismo el primer mercado que verá el Mercedes-AMG One en acción, dentro del marco del Festival of Speed en Goodwood (del 23 al 26 de junio de 2022).

El singular Hypercar no entusiasma solamente por su equipo de propulsión híbrido E PERFORMANCE, procedente de la Fórmula 1, sino también por otros equipos tecnológicos asumidos del deporte del motor. El elenco se extiende desde el monocasco de fibra de carbono y la carrocería de fibra de carbono, pasando por la unidad motor/cambio con funciones portantes y los componentes aerodinámicos activos, hasta el tren de rodaje «push rod» con varillas de empuje. 


Gracias a su compleja tecnología, el biplaza ofrece atributos y funciones que superan a los de un bólido de Fórmula 1. Entre otros, dispone de la tracción integral completamente variable AMG Performance 4MATIC+ con eje trasero de propulsión híbrida, eje delantero de propulsión eléctrica y Torque Vectoring. Además, puede circular en régimen exclusivamente eléctrico.

El motor híbrido V6 de 1.6 litros y el turbocompresor sencillo con asistencia eléctrica son equiparables por su tecnología a los componentes del actual propulsor de Fórmula 1. Los cuatro árboles de levas en cabeza se accionan mediante ruedas dentadas rectas. Para poder alcanzar un nivel elevado de número de revoluciones se han sustituido los muelles de válvula mecánicos por variantes neumáticas. El propulsor, montado por delante del eje trasero en la posición correspondiente a un vehículo con motor central, puede alcanzar un número de revoluciones máximo de 11.000 rpm. No obstante, el equipo de mando lo mantiene con fiabilidad por debajo del régimen máximo de la Fórmula 1 para aumentar su durabilidad y poder utilizar la gasolina súper plus disponible libremente en el mercado.

El motor de altas revoluciones recibe asistencia de un turbocompresor de alta tecnología. La turbina de gases de escape y la turbina del compresor están dispuestas en lugares separados y unidas por medio de un árbol. Esto hace posible una posición de montaje más baja del turbocompresor. Sobre este árbol se monta un motor eléctrico de unos 90 kW de potencia. Este motor impulsa directamente con regulación electrónica el árbol del turbocompresor, acelerando la rueda del compresor hasta un régimen máximo de 100.000 rpm antes de que el caudal de gases de escape asuma esta tarea.  Esta unidad se designa en el lenguaje de Fórmula 1 Motor Generator Unit Heat (MGU-H).


Los dos motores eléctricos de 120 kW de potencia cada uno que se montan en el eje delantero pueden alcanzar un régimen máximo de 50.000 rpm. Están acoplados a las ruedas delanteras a través de sendos engranajes reductores. Este eje delantero de propulsión exclusivamente eléctrica permite una regulación selectiva de cada rueda y, por consiguiente, una distribución individual del par, que se traduce en un nivel especialmente alto de dinamismo («Torque Vectoring»). 

Al mismo tiempo, los dos motores eléctricos permiten también aprovechar de modo ideal la energía de frenado para la recuperación energética: hasta un 80 % en condiciones normales de marcha. Esta energía se almacena en la batería y está a disposición para aumentar la autonomía en régimen eléctrico o para incrementar la potencia del equipo de propulsión. Cada motor eléctrico cuenta con su propia electrónica de potencia, ubicada en los bajos del vehículo, muy cerca de los motores eléctricos.

El acumulador energético de iones de litio es también fruto de un desarrollo específico de Mercedes-AMG. Su tecnología se ha acreditado en los bólidos híbridos de Fórmula 1 de la escudería Mercedes‑AMG Petronas F1 bajo las condiciones más duras imaginables y se utiliza también en la batería del Mercedes‑AMG GT 63 S E PERFORMANCE. La batería AMG High Performance combina una potencia elevada —que el conductor puede solicitar con frecuencia y de forma repetida durante la conducción— con un peso bajo, lo que contribuye a mejorar las prestaciones del vehículo. A esto se añade una absorción rápida de energía durante la carga y una densidad de potencia elevada. Esto significa lo siguiente: si se conduce con dinamismo por un terreno de topografía variable, el conductor puede reclamar con espontaneidad la potencia máxima del equipo de propulsión durante las subidas, mientras que la batería se recarga con rapidez en las bajadas.


La disposición de las células de la batería y su refrigeración son similares a las del bólido Mercedes-AMG de Fórmula 1. No obstante, el número de células es muy superior, para poder satisfacer las exigencias de la conducción diaria. La capacidad asciende a 8,4 kWh, cifra suficiente para conducir 18,1 kilómetros en régimen exclusivamente eléctrico. Para la carga se utiliza corriente alterna mediante el cargador integrado de 3,7 kW. Por lo demás, también es posible cargar la batería mediante recuperación o utilizando la energía generada por el motor de combustión interna. La batería de alto voltaje de iones de litio y el convertidor CC/CC para refuerzo y recarga de la red de a bordo de 12 V se alojan en los bajos del vehículo, por detrás del eje delantero, donde ocupan poco espacio.

La transmisión de fuerza a las ruedas traseras se lleva a cabo a través de un cambio manual de 7 marchas totalmente nuevo. El diseño de construcción ligera del cambio ayuda a ahorrar peso, y la integración en la carrocería bruta refuerza la rigidez sin reducir el espacio disponible. Dimensionado para la elevada capacidad de par y el alto margen de revoluciones de la potente cadena cinemática híbrida de Fórmula 1. Las barras de mando y el embrague de fibra de carbono de 4 discos se controlan por vía hidráulica. Se han elegido las desmultiplicaciones del cambio de modo que reduzcan al mínimo la diferencia de potencia al cambiar a una marcha más larga y se mantenga elevado el número de revoluciones del motor de combustión interna. El diferencial autoblocante está integrado en la transmisión.

La amortiguación adaptativa regulable puede adaptarse mediante la selección del programa de conducción. Los reglajes del tren de rodaje C (Comfort) y S (Sport) están disponibles en los programas de conducción EV, Race Safe, Race e Individual; los reglajes S (Sport) y S+ (Sport+) en los programas de conducción Race Plus y Strat 2. En el marco de las medidas aerodinámicas activas es posible reducir por vía hidráulica la altura del tren de rodaje, en 37 milímetros en el eje delantero y en 30 milímetros en el eje trasero. Al mismo tiempo, un elevador para el eje delantero (que puede activarse solamente en los programas para conducción por vías públicas) impide que el pueda chocar con el suelo, por ejemplo, en rampas de acceso a cocheras subterráneas.




Video: Mercedes-AMG One