Un alemán diferente: más datos e imágenes del nuevo Opel Mokka

miércoles, 14 de octubre de 2020



Opel divulgó más imágenes y datos de las versiones con mecánica naftera de la nueva generación del Mokka.
Tras haber divulgado las primeras informaciones del Opel Mokka en su variante eléctrica, llamada e-Mokka (ver nota), ahora la firma de Rüsselsheim propiedad del Grupo PSA divulgó el resto de las informaciones de las variantes térmicas de su nuevo crossover urbano. Lo repasamos, tras el salto.

La segunda generación del Mokka prescinde del apéndice X en su nombre, al igual que la primera generación más vendida en su debut en 2012, que en Sudamérica conocimos bajo la denominación Tracker. El nuevo modelo está basado en la segunda generación del Corsa, que comparte la plataforma CMP con los Peugeot 208 y 2008 de segunda generación, por lo que en términos mecánicos ya se sabe que el nuevo Mokka tendrá las mismas configuraciones que esos dos modelos y también su hermano Corsa.


A pesar de una distancia entre ejes ligeramente más larga (+2 mm), el nuevo Mokka es 12.5 cm más corto que la generación anterior, al mismo tiempo que ofrece a sus cinco pasajeros un espacio de carga similar de hasta 350 litros en su baúl. Su longitud total de solo 4,15 metros hace que sea muy fácil maniobrar y estacionar en áreas urbanas y suburbanas. También destaca por ser el primer modelo que presenta el nuevo frontal de la marca y el puesto de conducción totalmente digital de nueva generación: el Opel Vizor y el Opel Pure Panel, respectivamente.

Ni pantallas analógicas ni animaciones decorativas sofisticadas e inútiles: la experiencia es clara y limpia, la información proporcionada se centra en lo que realmente se necesita. El panel de instrumentos, más descongestionado, se extiende horizontalmente integrando dos pantallas panorámicas; la que está delante del conductor tiene un tamaño de hasta 12 pulgadas. Sin embargo, para permitir un uso intuitivo y la concentración continua del conductor en la carretera, los diseñadores de Opel han mantenido algunos botones de control para funciones esenciales, evitando la exploración peligrosa en submenús.


El nuevo Mokka continúa la tradición Opel de ofrecer tecnologías innovadoras de segmentos superiores al público en general. Se incluyen sistemas avanzados como ACC (Control de Crucero Adaptativo), cuya función stop and go, permite al conductor sobrellevar los atascos de manera confortable: el Mokka-e eléctrico puede reaccionar automáticamente a los movimientos del vehículo precedente sin necesidad de accionar los frenos o el acelerador. Además, el sistema de mantenimiento activo de carril, centra automáticamente al nuevo Mokka sobre el carril.

El sistema de iluminación también ofrece tecnologías de niveles superiores con el sistema matricial adaptativo IntelliLux LED, que evita los reflejos, gracias a sus 14 células LED, y es único en su categoría. Todas las variantes del modelo Mokka vienen de serie con luces LED en la parte delantera y trasera, un freno de estacionamiento eléctrico y reconocimiento de señales de tráfico. También puede disponer de una cámara de visión trasera panorámica de 180 grados.


El nuevo Mokka se basa en una nueva versión de la plataforma de energía múltiple CMP (Plataforma Modular Común). Este sistema modular ligero y eficiente ofrece la máxima flexibilidad en el desarrollo del vehículo y permite tanto el montaje de propulsiones puramente eléctricas a batería como de motores de combustión interna. El cliente decide su opción.

El equipo de ingeniería en Rüsselsheim ha trabajado particularmente en reducir el peso de forma importante, por un lado, ahorrando hasta 120 kg en comparación con la generación anterior, y mejorando la rigidez del cuerpo, por otro lado, ganando hasta un 30% de rigidez torsional en el caso de la versión eléctrica con su estructura de batería integrada de baja altura.



Los motores ofrecen potencias que van desde los 100 a los 130 cv. El de acceso a la gama se trata de un 1.2 Turbo asociado a una caja manual de seis velocidades con 100 cv, mientras que el segundo disponible es un 1.2 Turbo con 130 cv de potencia. Va asociado al cambio manual de seis velocidades o a un automático de ocho. El par máximo del primer 1.2 es de 205 Nm, mientras que el 1.2 de 130 cv produce 230 Nm. Con la mayor parte del par máximo disponible, ambos motores destacan por gran facilidad de conducción. Al menos el 95% del par máximo está disponible entre 1.500 y 3.750 rpm, en combinación con el bajo peso del vehículo, prometen una gran facilidad en la conducción.

La conducción se beneficia de la alta eficiencia de los motores. El nuevo Mokka con 130 cv con caja manual alcanza una velocidad máxima de 202 km/h, con una aceleración de 0 a 100 km/h en 9,2 segundos. El 1.2 Turbo con 100 cv por su parte, declara una velocidad máxima de 182 km/h, y acelera de 0 a 100 km/h en alrededor de once segundos. En las versiones con caja automática con los programas de cambio adaptativo y la tecnología Quickshift, el conductor puede cambiar de marcha mediante las levas situadas en el volante.