El Aston más veloz de la cuadra: 330 km/h de velocidad final. Con ustedes, el Vantage V12 S. |
Para celebrar su primer centenario, Aston Martin lo está haciéndolo por todo lo alto. Hace algunos días les presenté al CC100, un hermoso concept del cual se fabricarán dos unidades, y se venderán a un precio prohibitivo para la mayoría de los mortales.
Pero para los que no hayan llegado a la reducida lista de futuros compradores de ese biplaza, la marca de Gaydon les tiene reservada una propuesta más "económica" y masiva, el Vantage V12 S. ¿Qué es? Una nueva versión del conocido Vantage V12, pero alterada con anabólicos y llevada a punto caramelo de la performance.
Estéticamente destaca por encima del V12 "a secas" por llevar una parrilla rediseñada, completamente en negro, un generoso difusor frontal, y cuatro incisiones en el capot, para darle un poco de aire extra al V12 que vive allí debajo.
En la retaguardia tiene un aplique negro pintado a mano en la tapa de baúl, mientras que el paragolpes trasero lleva un enrome difusor, también realizado en el mismo material, secundado por dos salidas de escape gordas. El otro detalle diferencial viene por el techo, también en color negro mate, pintado artesanalmente.
En la retaguardia tiene un aplique negro pintado a mano en la tapa de baúl, mientras que el paragolpes trasero lleva un enrome difusor, también realizado en el mismo material, secundado por dos salidas de escape gordas. El otro detalle diferencial viene por el techo, también en color negro mate, pintado artesanalmente.
Adentro, sigue la invasión del carbono y soluciones para reducir peso. Las butacas están realizadas en un compuesto entre fibra de carbono y kevlar, bajando 17 kg a la masa total de la carrocería. Van revestidas en dos materiales diferentes al tacto, pero igual de exquisitos de tocar: cuero y Alcántara.
Sin embargo, lo más destacado de este V12 S, se esconde por delante del habitáculo, y por detrás del agresivo frontal. El impulsor pertenece a la nueva generación de motores AM28, de Aston Martin, y ya lo vimos instalado en el gran turismo más moderno de la marca, el nuevo Vanquish (ver nota).
Para este Vantage V12 S, ofrece nada más y nada menos que 565 cv de potencia a las 6.750 rpm, además de un torque igual de impresionante: 620 Nm a las 5.750 vueltas. Esto representa, un 11% más de potencia y un 9% más de torque que el V12 Vantage.
Con estas cifras, logra estas otras: 330 km/h de velocidad máxima, siendo el Aston Martin de producción, más veloz de la historia. El 0-100 km/h en tanto, queda en apenas cuatro segundos. Dicha mecánica, va acoplada a una transmisión automática secuencial de siete relaciones, denominada por la marca como Sportshift III. Cierro la nota con lo que todo petrolhead espera de un animal como este: su sonido.
Video: Aston Martin V12 Vantage S