En Buenos Aires, probamos a la versión más radical del mediano del rombo. 250 cv y 0-100 km/h en 6,1 segundos. |
En nada más que dos horas este equipo de trabajo tomó la decisión de partir hacia Argentina para subirse a uno de los hot hatches más radicales del momento. Gracias a la invitación de Carlos Cristófalo de Autoblog Argentina, pudimos probar al Mégane III R.S. (R.S. es por Renault Sport) un auto que jamás llegará a nuestro mercado, y por su naturaleza exótica y salvaje, valía la pena dejar todo en Uruguay y viajar a manejar durante tres días a esta bestia negra.
Exterior
Personalmente para poder escribir sobre autos que me movieron mucho emocionalmente, tengo que recurrir a las comparaciones. En materia de diseño, me hizo acordar a una especie de guardia de seguridad con borceguíes y campera de cuero, y aún más en este color Negro Nacré. Como dato curioso, en Argentina -de momento- solo se vende en dos colores, amarillo y negro. El R.S. luce malvado, rabioso y temerario. Es más ancho que el Mégane III convencional, especialmente gracias a los pasarruedas ensanchados. Con la cinta métrica en mano, este R.S. mide 4,299 m de largo, 1,848 m de ancho y 1,435 m de alto. La distancia entre ejes tiene 2,636 m.
Estéticamente cuenta con un kit aerodinámico, provisto de varios faldones, deflectores y difusores, que anticipan a aquel que se vaya a sentar al volante, que no es cualquier auto. En la parte baja del frontal llaman la atención las luces LED diurnas, mientras que los faros principales son de bi-Xenón direccionales con lavafaros. Para desmarcarse de cualquier otro Mégane, en el frontal lleva orgulloso la sigla R.S. en la diminuta parrilla.
Laterlamente transmite una sensación deportiva por donde se lo mire. Ya sea por la caída del techo progresiva, o la línea de cintura que le marca dos hombros que culminan sobre las ópticas traseras. La ventanilla trasera fija, se trepa hacia el techo del auto, siendo este uno de los rasgos más característicos del Mégane III tres puertas. Otra cosa que destaca en el lateral son las generosas llantas negro mate de 18 pulgadas con neumáticos Michelin Pilot Sport en medida 235/40 ZR18. Entre los cinco radios dobles se pueden ver los cálipers rojos, que adelante van firmados por Brembo®. Además, también se esconden ahí los discos ranurados, para reducir peso.
La zaga del R.S. es uno de los puntos que más me gustan, dentro de un conjunto de diseño que me atrae mucho. La luneta va bien arriba, perjudicando la visual hacia atrás y queda coronada por un generoso spoiler envolvente, que aloja la tercera luz de freno. Por debajo, en el portón trasero hay otro distintivo de Renault Sport y el remate trasero se cierra con un gran difusor inferior, con una bellísima salida de escape central en forma de trapecio cromado. Para contrarrestar la mala visibilidad trasera, hay sensores de estacionamiento.
La zaga del R.S. es uno de los puntos que más me gustan, dentro de un conjunto de diseño que me atrae mucho. La luneta va bien arriba, perjudicando la visual hacia atrás y queda coronada por un generoso spoiler envolvente, que aloja la tercera luz de freno. Por debajo, en el portón trasero hay otro distintivo de Renault Sport y el remate trasero se cierra con un gran difusor inferior, con una bellísima salida de escape central en forma de trapecio cromado. Para contrarrestar la mala visibilidad trasera, hay sensores de estacionamiento.
Interior
Las puertas, como todo coupé, son grandes. Tras abrir la del lado izquierdo, nos encontramos con un interior familiar para aquellos que tengan en su garage un Fluence, por ejemplo, pero con algunos detalles exquisitos que iré marcando en esta sección. Sacando de lado las butacas, los cinturones amarillos el volante y el instrumental, el resto lo toma prestado de un Mégane III convencional, o de su primo Mercosur, el Fluence.
Pero, tras sentarse en las excelentes butacas Recaro® con tejido textil,gracias al cielo no eran de cuero, uno se olvida el parecido con el interior del sedán cordobés. Las mismas abrazan a la altura de los muslos a los ocupantes delanteros como nunca vi en otro auto. Realmente agarran y no dejan que te muevas en curvas fuertes. Son ridículamente finas, casi no hay acolchado y a la hora de manejar, incluso la posición más alta de la butaca, es bien baja. La columna se regula tanto en altura como en profundidad, y honestamente, pese a la dureza del asiento, se pueden pasar varias horas en ruta sin quejas.
Pero, tras sentarse en las excelentes butacas Recaro® con tejido textil,
Otro detalle que me gustó del interior fue el techo panorámico fijo, que le agrega algo de lujo a un interior de un auto netamente pensado para correr. Y es acá donde me quiero detener. No es un auto caro por ser de lujo, ya que está en las antípodas de eso. Es lo que se conoce en la jerga como un deportivo hard core. Todo en su interior está pensado para que lo que realmente importe es que el conductor se sienta a los mandos de un auto de carreras, no de un auto deportivo premium con olor a cuero y pantallas táctiles. El R.S. es un deportivo con mayúsculas, subrayado y negritas.
En el tablero llama la atención el tacómetro amarillo, que muestra, con unos números bien grandes, que el final de la diversión empieza cerca de las 6.000 vueltas. En el velocímetro se ve la firma Renault Sport, con una escala hasta los 280 km/h y en la tercera esfera hay una pantalla con la computadora de abordo con el aviso cuando desconectamos el ESP (Nunca lo hicimos con el auto en movimiento, no estamos tan locos) además de un pequeño medidor de combustible. Carece de indicador de temperatura de agua del motor.
En materia de calidad el R.S. sigue la línea de los restantes modelos de la gama Mégane III-Fluence, es decir, satisfactoria. Hay una especial atención en los detalles, como los cinturones amarillos, las costuras del mismo color en el volante y el selector de cambios, o la pedalera de aluminio con tacos de goma. Ya que hablo de la misma, párrafo aparte para el embrague tramposo del R.S. Tiene un recorrido largo y un acople corto y bien arriba, haciendo que los que se suban por primera vez, seguro pasen un poco de vergüenza.
Las plazas traseras son buenas para dos adultos no muy altos, ya que la caída del techo no perdona a los más grandes. El acceso a las mismas no presenta mayor dificultad, y se le podría pedir que las ventanillas traseras no sean fijas. El resto es para sacarse el sombrero, con tres apoyacabezas, tres cinturones de tres puntas y anclajes ISOFIX y TopTether para sacar a pasear seguros a los pequeños demonios.
El baúl es por lejos uno de los puntos más irrelevantes para el usuario del Mégane III R.S., pero de todas formas cumple con unos 377 litros de capacidad ampliables rebatiendo el respaldo trasero en proporción 60:40. Por debajo de una alfombra está el auxilio en igual medida que las cuatro ruedas exteriores.
Mecánica
Motor
Sin dudas el motivo por el que este auto valía la pena manejarlo. El denominado F4R 874 es un 1.998 cc inyección indirecta, 16 valvulas, turbo e intercooler capaz de lograr los 250 cv a 5.500 rpm. Tiene un torque de 340 Nm disponibles a partir de las 3.000 vueltas y que se entregan de forma constante hasta rozar las 6.000 rpm. Gracias a esta mecánica el R.S. puede moverse de 0 a 100 km/h en apenas 6,1 segundos y conseguir una velocidad máxima de 250 km/h.
Para hacerse una idea de lo que es esta bestia, es el auto de tracción delantera más veloz y potente del mercado argentino. Como si esto fuera poco, tiene el récord de 8:07.97 en el trazado del Nordschleife dentro del circuito de Nürburgring, que lo hace el auto de calle de tracción delantera más rápido del "infierno verde" (Ver video). El consumo promedio es de 8,4 l/100 km, en ciudad hace 11,5 l/100 km, mientras que en ruta consigue que esa cifra baje a unos 6,7 litros cada 100 km. El depósito de combustible aloja 60 litros. Si el uso es extremo, el consumo es descomunal, especialmente en ciudad. Tras haberlo usado para el Focus Group de Argentina Autoblog, la autonomía había bajado casi 200 km.
Para hacerse una idea de lo que es esta bestia, es el auto de tracción delantera más veloz y potente del mercado argentino. Como si esto fuera poco, tiene el récord de 8:07.97 en el trazado del Nordschleife dentro del circuito de Nürburgring, que lo hace el auto de calle de tracción delantera más rápido del "infierno verde" (Ver video). El consumo promedio es de 8,4 l/100 km, en ciudad hace 11,5 l/100 km, mientras que en ruta consigue que esa cifra baje a unos 6,7 litros cada 100 km. El depósito de combustible aloja 60 litros. Si el uso es extremo, el consumo es descomunal, especialmente en ciudad. Tras haberlo usado para el Focus Group de Argentina Autoblog, la autonomía había bajado casi 200 km.
Luego de haberlo manejado, puedo decir con fundamento que es el cuatro cilindros más demente que manejé en mi vida. Para poder expresar lo que empuja y cómo uno se hunde en la butaca mientras se pisa el acelerador a fondo, voy a recurrir nuevamente a las comparaciones. La primera vez que lo pisé a fondo me sentí por unos segundos un paseador de diez Rottweilers rabiosos a la caza de un gato.
Es tan grande la sensación potencia que transmite que para que se hagan una idea, ni con el Camaro y sus 400 cv viví lo algo parecido a acelerar de 0 a 100 km/h el R.S. Primero sentí como se enterraba mi espalda en la Recaro® de un golpe seco, casi como si un ninja me hubiera dado una patada en el pecho. Segundo, cómo luchaba con el volante contra el torque del motor. Y tercero, al mismo tiempo de ese cóctel de sensaciones adrenalínicas, tenía que prestarle atención al pitido de la caja pidiéndome que pasara a segunda ya. Todo eso me pasó en menos de cinco segundos, mucho menos de lo que te llevó leer este párrafo.
Puede que muchos digan que es demasiada potencia y torque para un solo eje, pero así el Mégane R.S. perdería su halo de bestia indomable y también desaparecería esa característica que ya casi no se ve en los deportivos actuales, y es que el conductor tenga que domesticar al auto y de paso conocer los límites propios.
Es tan grande la sensación potencia que transmite que para que se hagan una idea, ni con el Camaro y sus 400 cv viví lo algo parecido a acelerar de 0 a 100 km/h el R.S. Primero sentí como se enterraba mi espalda en la Recaro® de un golpe seco, casi como si un ninja me hubiera dado una patada en el pecho. Segundo, cómo luchaba con el volante contra el torque del motor. Y tercero, al mismo tiempo de ese cóctel de sensaciones adrenalínicas, tenía que prestarle atención al pitido de la caja pidiéndome que pasara a segunda ya. Todo eso me pasó en menos de cinco segundos, mucho menos de lo que te llevó leer este párrafo.
Otra cosa genial del 2.0 turbo del R.S. es el sonido. Sin temor a equivocarme, suena casi tan bien como muchos motores de mayor cilindrada. Por debajo de de las 4.000 rpm, es un Mégane III normal, bien aislado y silencioso. Al pasar esa barrera, el cuatro cilindros turbo se despierta y ruge bastante. El sonido es delicioso, parejo y ronco, sacándole una expresión de felicidad en la cara de los que vayan abordo. El secreto de su embriagante sinfonía está en el “Sound Pipe", un sistema que va adosado al escape, que transmite una mayor presencia del motor en el habitáculo y el exterior. Si uno viaja en las plazas traseras, se escucha mucho mejor que al volante, y además se escuchan más claras las contra explosiones.
Puede que muchos digan que es demasiada potencia y torque para un solo eje, pero así el Mégane R.S. perdería su halo de bestia indomable y también desaparecería esa característica que ya casi no se ve en los deportivos actuales, y es que el conductor tenga que domesticar al auto y de paso conocer los límites propios.
Frenos y suspensiones
El peso en orden de marcha es de 1.320 kg, que si lo dividimos entre los 250 cv nos da una escalofriante relación peso potencia de 5,28 kg/cv. Los frenos son de discos ventilados adelante de 340 mm, ranurados y asistidos por cuatro pistones y cálipers Brembo®. Atrás tiene discos sólidos de 290 mm, también ranurados. Van a la par de la potencia que tienen que parar. Una frenada brusca con este conjunto es igual de bestial que la aceleración del motor. Para al auto en línea recta y ejerciendo mucha inercia sobre los pasajeros.
Cuenta obviamente con ABS con REF (Repartidor electrónica de frenada), AFU (Ayuda al frenado de Urgencia), control de tracción ASR y ESP de serie, con tres modos de utilización, uno "normal" por defecto con todo conectado, un modo "Sport" para un ESP menos intrusivo, con un umbral de intervención más tardío y una respuesta del acelerador más rápida, y finalmente está el modo "Off" que desconecta absolutamente toda la batería de asistencias electrónicas.
Transmisión
La caja, junto con el motor, son los dos puntos inobjetables del R.S. Cuenta como todo deportivo pura sangre que se precie de tal, con una transmisión manual, en este caso de seis relaciones. Las cinco primeras están bien pegadas, mientras que la sexta es tan solo una sobremarcha, ya que el motor deja de empujar en ese cambio, encargándose solo de bajar consumos y mantener la billetera del dueño saludable.
Tiene un tacto preciso y aprovecha cada caballo de los 250 que galopan bajo el capot. Un detalle que no me gustó de la caja fue el indicador de pasaje de cambios al llegar al corte. Es molesto, con un insoportable pitido y una señal luminosa en el instrumental que aparece apenas al acercarse a la zona roja sin importar a qué velocidad. Lo peor de todo: no se lo puede mandar a callar.
Comportamiento dinámico
Acá hay que dividir el análisis en dos niveles, el comportamiento en ciudad por un lado y en autopista por otro. En el primero el chasis Cup, sumado a los neumáticos perfil 40, unas butacas rígidas y una suspensión brusca, no se llevan bien con el estado de las calles bonaerenses, que no se alejan mucho de un campo de batalla. Como si fuera poco, allí abundan también las calles empedradas, haciendo que cada adoquín llegue a las vértebras de los ocupantes con éxito. Es duro y aquellos que consideren al R.S. como un auto para el uso diario, realmente les tendrá que gustar este tipo de reglajes tan secos. Personalmente me van los autos tan duros, pero sé que a la mayoría le gusta que la suspensión absorba cálidamente los pozos y badenes.
En autopista todo eso que dije antes queda de lado y el R.S. se siente en su habitat natural. Con un asfalto impecable el andar es envidiable. El auto no solo dobla como sobre rieles, sino que además va tan bien apoyado que su manejo a altas velocidades se torna disfrutable. Por si no queda claro, este R.S. es el escalón intermedio entre un deportivo legal y uno de carreras, pero producto de sus prestaciones y reacciones tan radicales, estas se encargan de borrar un poco esa línea divisoria.
La dirección es precisa, y "pesada" para tener asistencia eléctrica, comunicando mucho de lo que las ruedas van pisando. Un detalle racing del volante, es que está cosido en hilo amarillo sobre el aro del mismo, el "punto cero". En materia de estabilidad, ni Facundo ni yo nos atrevimos a buscarle los límites al R.S., ya que antes de encontrárselos, mucho antes aparecieron los nuestros.
Acá hay que dividir el análisis en dos niveles, el comportamiento en ciudad por un lado y en autopista por otro. En el primero el chasis Cup, sumado a los neumáticos perfil 40, unas butacas rígidas y una suspensión brusca, no se llevan bien con el estado de las calles bonaerenses, que no se alejan mucho de un campo de batalla. Como si fuera poco, allí abundan también las calles empedradas, haciendo que cada adoquín llegue a las vértebras de los ocupantes con éxito. Es duro y aquellos que consideren al R.S. como un auto para el uso diario, realmente les tendrá que gustar este tipo de reglajes tan secos. Personalmente me van los autos tan duros, pero sé que a la mayoría le gusta que la suspensión absorba cálidamente los pozos y badenes.
En autopista todo eso que dije antes queda de lado y el R.S. se siente en su habitat natural. Con un asfalto impecable el andar es envidiable. El auto no solo dobla como sobre rieles, sino que además va tan bien apoyado que su manejo a altas velocidades se torna disfrutable. Por si no queda claro, este R.S. es el escalón intermedio entre un deportivo legal y uno de carreras, pero producto de sus prestaciones y reacciones tan radicales, estas se encargan de borrar un poco esa línea divisoria.
Equipamiento
En Argentina, el Mégane III R.S. llega con una sola versión de equipamiento, que ofrece: el chasis Cup + diferencial con deslizamiento limitado, difusor trasero, pinzas de freno Brembo® color rojo, llantas de aluminio de 18” AX-L color negro mate, tablero específico Renault Sport, dirección asistida eléctrica, tarjeta llave manos libres con mando a distancia, volante regulable en altura y profundidad, baquets Recaro®, radio AM/FM/CD/MP3 con dos entradas RCA, regulador y limitador de velocidad, iluminación
DRL con LEDs, faros bi-Xenón direccionales con lavafaros, levantavidrios y espejos con comando eléctrico, sensor de estacionamiento trasero, retrovisor interior con anti-encandilamiento automático, techo acristalado fijo, climatización automática bi-zona, alerón trasero Sport, pedales y apoyapiés de aluminio, volante revestido en cuero con "punto cero" en pespuntes color amarillo entre otros ítems.
Lo único negativo del equipamiento son dos puntos relativos al equipo de audio. Primero que es el mismo que equipan, por ejemplo, los Fluence 1.6, y tanto su recepción como la calidad de sonido distan mucho de ser un audio digno de un auto de más de U$S 50.000. Como si esto no fuera poco, en nuestra unidad no había una entrada USB. La gente de Renault Argentina, nos dijo que la primera partida del R.S. carecía de ese ítem y que a partir de este año ya cuentan con USB y conectividad Bluetooth. En relación a un audio con mejor calidad, por ahora, a conformarse con el bello sonido del 2.0 turbo, que basta y sobra.
Lo único negativo del equipamiento son dos puntos relativos al equipo de audio. Primero que es el mismo que equipan, por ejemplo, los Fluence 1.6, y tanto su recepción como la calidad de sonido distan mucho de ser un audio digno de un auto de más de U$S 50.000. Como si esto no fuera poco, en nuestra unidad no había una entrada USB. La gente de Renault Argentina, nos dijo que la primera partida del R.S. carecía de ese ítem y que a partir de este año ya cuentan con USB y conectividad Bluetooth. En relación a un audio con mejor calidad, por ahora, a conformarse con el bello sonido del 2.0 turbo, que basta y sobra.
Seguridad
El R.S cuenta de serie con seis airbags, ABS, sistemas ASR, AFU, REF, CSV y ESP (tri-modo), cinturones de tres puntos en todos los
asientos, anclajes ISOFIX y TopTether para sillas infantiles en las plazas traseras, faros bi-Xenón direccionales con lavafaros, además de los eficientes frenos Brembo® delanteros y los cuatro discos ranurados tanto adelante como atrás, que lo detienen con decisión ante las exigencias y que no mostraron fatiga en ninguna de las pruebas que realizamos.
El Mégane III R.S. se comercializa en Argentina a un precio de $ 236.200, es decir, unos U$S 53.000. Un valor que si tomamos en comparación con los precios nuestro país, varios ya están haciendo el nudo corbata y arrimando la silla cerca del monitor. En la vecina orilla se para frente a rivales de la talla del Volvo C30 T5 Racing con 230 cv y un valor de U$S 55.900, un Alfa Romeo Giulietta Quadrifoglio Verde de 230 cv y U$S 42.300 o un Audi S3 a U$S 62.400. De su llegada a Uruguay solo podrá hacerlo en un solo formato: a escala.
A FAVOR:
Lo hicimos solo con el auto parado, lo prometemos y hay testigos. |
A FAVOR:
EN CONTRA:
PRECIO Y GARANTÍA:
- Renault Mégane III R.S. 2.0 - $ 236.200 (equivalente a U$S 53.000 apox.)
- 3 años o 100.000 km
COMERCIALIZA
- Renault Argentina. Web: www.renault.com.ar
Galería: Contacto: Renault Mégane III R.S. 2.0
Atractiva presentación, informativa y divertida! saludos
ResponderBorrarEste blog ha sido eliminado por un administrador de blog.
ResponderBorrarbueno... habrá que mudarse para Argentina :)
ResponderBorrareso eso eso
BorrarNi les conviene
BorrarPrecioso el RS, que suerte tienen en Argentina!.
ResponderBorrarModelo "sui géneris" que parece no muchos más competidores, excepto quizá agregando a la lista el SEAT LEON R, con 2.0 turbo de 265 CV (de origen Audi, si mal no recuerdo). Los 53.ooo en Argentina (que deben ser algunos menos si el precio en pesos lo dividimos por la cotización real del dólar) seguramente se irán cerca de los 68 o 70.000 para pasearlo por la Interbalnearia o por la 8 camino a Minas, mientras se hincan las rodillas ante el altar del templo de SUCIVE...
ResponderBorrarEstimados Redactores: Interesante historia de un viaje pasional sobre un auto digno de ser manejado, pues estos autos no se conducen.
ResponderBorrarEn mi caso hubiera hecho lo mismo, a pesar de estar acercándome a la Centuria, pues a los que nos gustan los autos por momentos podemos perder algo de lógica, ante propuestas " Indecentes sobre ofrecimientos de conducción ".
Lo digo por experiencias vividas, ya siendo mayorcito, en una oportunidad un primo español me ofreció su Lancia Thema 8-32, que era nada más que la versión especial con motor Ferrari; el primo me hizo que cortara el inyector por velocidad, no por cuenta vueltas, lo cual es espeluznante, más tratándose de que ocurrió en la M40 de Madrid.
Es una lástima que no lo traigan al Uruguay, independientemente del precio que pudiera llegar, el cual entiendo que sería de alrededor de USD 69.000.-, haciendo una relación y agregándole el nefasto IMESI al 30%. Siempre habría interesados en comprarlo, pues hay gente que tiene la misma pasión que nosotros y le da a sus gastos o inversiones la prioridad que entiende más satisfactoria.
¿ Acaso no hay gente que cuelga un cuadro en su pared que vale USD 50.000/80.000, y después de mirarlo 100 veces pasa al lado sin darse cuenta ?, ¿ porqué no darle el gusto al que tiene ganas de tenerlo, si además le vuelca al FISCO USD 42.000 por cada unidad ?.
Todo un tema que no todos están capacitados para darse cuenta; como he comentado más de una vez: No todos están capacitados para ser asesorados.
Saludos.
Creo que ya es hora de iniciar una cruzada desde estas páginas, como primicia, pero ampliándola a todos los medios para masificarla,para que se bajen los impuestos a los autos en Uruguay.
ResponderBorrarEs muy llamativo que con la voracidad fiscal que hay en la vecina orilla los precios de los autos sean 20,30 y hasta 40% mas bajos que acá.
Admito que este Renault no es un auto de venta masiva,pero creo no equivocarme que acá rondaría los U$S 80000.
Además sería bueno que cada vez que presenten un auto que se venda acá publiquen el precio en los países del casi inexistente Mercosur.La semana pasada estuve en Asunción y sin hablar de los autos importados usados (tema para otro análizis y que en lo personal entiendo que acá una norma así haría mucho bien) no podía creer los precios pegados en los parabrisas de los autos 0km a la venta.
Saludos
Excelente redacción, muy entretenida y gráfica -sobre todo el pasaje de los rotweiller-. El auto es imponente por donde s elo mire, como soy un poco rompe le pondría 2 salidas de escape en cada uno de los costados de la trasera -4 en total- en vez de la central pero es un detalle menorísimo.
ResponderBorrarEl precio en Argentina hace que la comparación con nuestro país sea brutal.
saludos.
me gustaría saber por qué es tan seguro que no hay chance de verlo en Uruguay?
ResponderBorrarotra cosa que me llamó la atención del video es que los 265 equinos deberían estar muy bien atados para que no se desprendan de la carrocería, porque me pareció que movían demasiado todo el auto.....ojo, capaz es una impresión mía porque estaba filmado muy de cerca, por eso apelo a los comentarios de quienes lo vieron en vivo y en directo.
saludos
Lo que más me gusta es ese acuerdo entre lo usable, lo estético, y lo deportivo. Una escala fácil de mover en la ciudad, y óptima en ruta/autopista. Un amigable conjunto de las dimensiones estáticas y de las dinámicas excepto por algunos detalles de manejo que nos cuenta el redactor, como el embrague engañoso por largo y brusco (podían haberlo hecho corto y evolutivo, pero es francés, no es alemán, no le pidamos peras al olmo), o la dureza de la suspensión. Lo que menos me gusta es (además de los últimos dos puntos que evoqué) el precio, y su origen que hará que al tiempo ande perdiendo los pedazos o con epilepsia de algún grado dificil de controlar. Se acuerdan de los Renault Fuego? Hasta podría llamarse Fuego II. Caro me parece para ser un francés de 250 cv. Hay coches de 200 cv casi por la mitad de precio y si agregar 50 cv adicionales implica pagar 30.000 dólares más, estan pasados. Lo mismo vale para el 308 rcz. Jamás me compraría uno, no por lo que parece sino por lo que es. Sinceramente pensé que este auto en uruguay no superaría los Usd 50.000. teniendo en cuenta que es basado en el megane III 3 puertas. (si lo trasladáramos al mercado uruguayo).
ResponderBorrarOffTopic: Ayer hice cola para llegar el tanque y cuando fui a pagar con 100 verdes, estaba a 20!. Una Brasilerada!.
Felicitaciones Rodri & Facu por ser tan decididos a la hora de vijar cuando la propuesta vale la pena. Yo también son rápido para los viajes. Y cuando uno está en destino, hay que aprovecharlo y sacarle el máximo jugo. El megane analizado, no deja de ser un destino, un lugar. Al que no se vuelve cada día. Claro que es sano no quitar el ESP jejeje (hay muchos abogados allá afuera).
Supongo que los muchachos de Santa Rosa, ya que no dan señas de traer el megane III, les harán llegar algo más que un gorrito, por el efecto colateral publicitario de la nota.
Saludos y felicitaciones porque siento un gran empuje desde la redacción. Muchos CV en trabajo, que todos vemos en resultados, principalmente quienes seguimos el blog desde sus inicios (por pura suerte nos enteramos antes).
Nó se dicen los precios de la vecina orilla! oculten la verdad!!! jajajaj que TRISTE!!!!
ResponderBorrarEXCELENTE NOTA POR DONDE SE LA LEA, incluido el triste final!!! hay gente que aun no sabe que hasta una Cherry Tigo debe de costar mas barata en la Argentina!
Volviendo, al Mégane RS aunque me cueste saber lo que cuesta una Giulietta Q.V. en Argentina. Debo decir que el viaje valió la pena! Ya que la nota esta muy bien redactada y logra que la imaginación fluya. Como siempre, y ya esta haciéndose costumbre los contactos en Autoblog.UY son mas que completos. Opinando como Bonaerense que no soy, me fijo en el precio y su garantía, y este Renault me llama mucho la atención. Quizás sea porque vi toda la vuelta a Nurburing y quiera encontrar el limite como lo hizo el piloto cuando casi lo pierde. En fin, un solo punto en contra que según el importador ya lo están solucionando y a mi no me molesta, la radio. Ah y algo mas, vaarios autodromos, repartidos por casi toda la argentina.
Es complicado comentar sabiendo que en el país de al lado, los precios y las garantías son mas justas. O que en Brasil el Fiat punto se ofrece con varias motorizaciones incluida una versión con el 1.4 T-jet.
Saludos!!!
Tremendo auto, me da la sensación que se tomaron muchísimas cosas del 308, pero claro este además de ser más caro es motor más grande y mucho más potente. Muy lindo
ResponderBorrarEstimado, me interesa tu comparacion con el 308.
BorrarQue crees que le copiaron o tomaron?
Yo tengo un 308 y no le encontre mucha similitud.
Slds
Me pareció a simple vista nomás que tenia un aire, por ejemplo en la parte de adentro, los pedales son exactamente iguales, las llantas, los asientos, la parte trasera (no el caño de escape) igual claro, son otro tipo de autos pero tienen cosas parecidas, no por eso son francesas ambas. Saludso
BorrarExcelente artículo, disfruté la lectura como si hubiera estado ahí, muchas gracias.
ResponderBorrarComo me gustaría ver y escuchar uno de éstos por Montevideo.
Ahora vamos por el 500 Abarth!
Excelente auto, no solo la potencia del motor, tambien en cuando agilidad que quedo demostrada en el circuito de Nürburgring.
ResponderBorrarAhora es un coche para algunos, no solo por el precio, sino por la suspension "durita" que haria un infierno circular por nuestras calles.
Aquellos que tengan probelmas de hernia de disco abstenerse.
Exelente nota y hermoso juguete, los envidio!! (Veo que se olvidaron de las reivindicaciones que oportunamente proclamó el SUNCAuy).
ResponderBorrarAhora, para criticar un poco, quién rayó la llanta delantera derecha? Lo taparon con draypen negro?
Saludos y nuevamente felicitaciones por la nota y por la voluntad de sacrificio inagotable, que se nota, los embarga en todo momento...aaaandá!
Deliciosa y entretenido redacción, me imagino la sensación de estar al volante de esa fiera, fiera porque mas allá de los 250 burros, recordemos que es tracción delantera! La verdad impecable.
ResponderBorrarCon respecto a lo difícil de ver un Megane RS en nuestro país, si les sirve como consuelo me he cansado de ver un Megane III coupé color naranja estacionado en la calle Maldonado entre Ejido y Stgo. de Chile, en principio con patente europea (evidentemente algún compatriota que regresó del viejo continente y se trajo ese pequeño recuerdo) y luego empadronado en Montevideo. No es un RS claro está, pero de todos modos es una rareza en nuestro país.
en uy el que quiera este tipo de autos y tiene los billetes suficientes deberia ir por el subaru impreza en sus versiones picantes, mucho mejor auto en todo sentido respecto a este rs, y lastima que no se importa el mitsu evo o hasta el ralliart, mucho mas autos que este megane...
ResponderBorrarEstuve leyendo la nota y es muy entretenida, tengo mucho cariño por Uruguay siempre los leo aunque soy del otro lado del charco en la pcia de Bs As, con el panorama que hay aca les falto sumar el Peugeot RCZ que sale $220.000.
ResponderBorrarSi te lo venden en pesos el Megane III RS todo bien, si lo quieren vender precio dolar hay que ver cual cotizacion toman jeje si 4,4 oficial que no venden a nadie o 6,1 del mercado paralelo, es un numerito de diferecia
TENGO LA FORTUNA de haber sido adjudicado en "la monumental SRL" por un monto de 250.000 para gastarlos en un vehiculo, y realmente no se q elegir, no quiero un auto de marca importada xq es un bardo por los service. tengo q viajar 400km hasta mendoza capital para hacer uno. -.- y aca en mi ciudad hay concesionarios de peugeot,renault, hyundai, toyota, q te hacen el service oficial...para q siga vigente la garantia... mi duda esta entre elegir "este megane III RS, la coupe genesis de hyundai o el rcz de peugeot...
ResponderBorraryo tengo una familia pequeña conformada por mi señora y mi hija recien nacida... asiq podrán ver que necesito un baúl relativamente standart como para llevar el chango como mínimo. y quiero uno de esos 3 vehículos, ya que son el sueño de todo hombre. imagínense la ansiedad mia que tengo tan solo 20 años. si alguien que sea honesto y me pueda tirar un dato preciso sobre cual elegir de esas tres verdaderas maquinas que mencione...le estaré eternamente agradecido...xq fui a cada una de las concesionarias pero como todo cada marca quiere vender su auto ;) y es lo mas lógico. un abrazo le mando a todos los fierreros del sitio ;)
cuando estaría llegando el megane iii
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