Probamos al Ford Fusion: ¿ser aspiracional o racional?

viernes, 26 de septiembre de 2014



Evaluamos al Ford Fusion, el buque insignia de la casa del óvalo en Uruguay.
Tras casi 15 años de ausencia, Ford regresó al segmento D con el Fusion. Es hoy uno de los productos de la marca con la mejor relación precio/producto, y está listo para hacerle la vida imposible a generalistas y premium por igual. La cuestión es, por el mismo precio ¿es mejor opción?


La barrera psicológica de los 50 mil dólares sirve en muchos casos para separar las aguas entre marcas generalistas y premium. También es culpable de una de las disyuntivas más grandes del mercado automotriz, ¿comprar un auto estatutario o un auto que da estatus? ¿base premium o full generalista?

Ante una de las dos opciones que elijas, una charla de amigos en un asado, por ejemplo, puede ser fatal. Al igual que pasa con el mundo de los smartphones que quieren parecerse a un iPhone, y aquellos que son. Los autos sufren de lo mismo. No tenés ese celular que todos quieren, pero siendo más accesible y ofreciendo casi las mismas ventajas. Eso sí, seguís sin tener el que marca la moda.

Cuando Ford lanzó el Fusion hace unos meses atrás, se presentó como una potencial amenaza para los modelos premium. Es cierto, podés comprar un auto alemán, con uno de esos tres logos en el frontal para que tu vecino se muera de envidia, y todos los que te vean sepan que te va bien. O tener uno que te de simplemente satisfacción personal, además de no dañar tanto a tu bolsillo. Podés tener el Samsung S5, pero muchos te dirán "Está buenísimo, pero no es un iPhone 6". Opciones, opciones y más opciones.


Por la misma plata (o menos) hoy en el mercado local se puede optar por una marca que quizás no tenga el estatus de una premium o una generalista aspiracional, por un producto fabricado en un país que no está asociado con la ingeniería automotriz de punta, aunque le vende todos sus autos a los Estados Unidos, y que personalmente supere tus expectativas. ¿Difícil decisión, no?

La cuestión, para dejar de dar tantas vueltas, es la que planteo en la bajada de esta nota. ¿Hay clientes de marcas exclusivas dispuestos a bajarse de su auto para subirse a un Ford?, y lo que es más importante, ¿gastarías casi 50 mil dólares en un modelo no-premium, pero siendo más potente y equipado que el premium que podrías tener?

Es cierto, Audi, BMW, o Mercedes-Benz son sellos claros e intachables de estatus, pero por el valor de un Fusion no estás precisamente llevándote la crème de la crème, sino las versiones más accesibles de los rivales no directos del Ford. Para hacer un comparativo express, usaré solo el Audi A4 como ejemplo de esas preguntas, por ser tracción delantera como el producto del óvalo.


Repasemos el tema precios. Un Fusion SE Luxury SelectShift vale U$S 47.900. Motor 2.0 litros turbo de 240 cv, usado por modelos premium, como los Jaguar XF o Ranger Rover Evoque, caja automática doble embrague de sexta, y equipado con tapizados en cuero, butacas calefaccionadas con memorias, una gran pantalla táctil multimedia, sistema de comandos vocales, ocho airbags, etc.

Lo más cerca al valor del Ford que ofrece Audi es el A4 1.8 TFSI, por un precio de U$S 58.490. Motor 1.8 turbo de 120 cv, caja automática de octava Multitronic tipo CVT. Está bien equipado, hay faros bi-Xenón, butacas eléctricas, seis airbags, sensores de lluvia y luz, tapizados símil cuero, un equipo de audio de 180 watts, etc. Y para intentar equiparar la potencia del Ford, un A4 2.0 TFSI quattro con 225 cv vale U$S 83.990.


Por otro lado, pese a que no son rivales, muchos ven al Fusion como el enemigo del Volkswagen Vento GLI, y ahí, si bien el Ford pertenece a un segmento D y el Vento al C, la comparativa se pone aún más jugosa. Es más, hasta algunos que venden Ford en nuestro país buscan robarle ventas a ese modelo específicamente con este producto.

Ambos provienen desde México, superan los 200 cv de potencia, son tracción delantera, ambos automáticos (el VW con doble embrague) y el Vento GLI DSG cuesta "apenas" U$S 2.400 menos que el Fusion, es decir, 45.500. En otras palabras: siendo que VW es una marca 100% generalista, en Uruguay existe gente a la que le pesa más el producto en sí, que un simple logo en la parrilla. Sino salgan a la calle a contar Ventos GLI...


Sabiendo del éxito de ese modelo, y de que hay gente dispuesta a pagar más de 50 mil dólares por un VW, es que la marca alemana importó (aunque en pequeñas cantidades) al Passat con un motor 2.0 turbo, como el Ford, pero con 29 cv menos de potencia, 211, igual que el GLI, y a un valor que queda U$S 3.000 por arriba del Fusion, U$S 50.900. Está picado el partido, ¿no?.

La semana que viene en Autoblog tendremos la prueba del Fusion 2.0 EcoBoost SE Luxury, y entre muchas cosas, intentaré responder la primera pregunta: ¿es más razonable un generalista muy equipado de casi 50 mil dólares, o un premium entrada de gama por el mismo valor? No sé a ustedes, pero para mi es claro. Aunque tendrán que esperar unos días más para saberlo.

Fotos: Autoblog y BR1 | Photography