Probamos al Ford Ka: un antídoto para la ansiedad

martes, 19 de mayo de 2020



Probamos a la gama del Ford Ka, con las variantes Ka+ y Ka Freestyle (foto) en una evaluación doble.
Hace algunas semanas atrás, Autoblog pudo probar al Ford Ka en sus dos versiones, los Ka Freestyle y Ka+ SEL. Durante una semana y más de 1.100 km fueron evaluados tras esperarlos bastante tiempo y justo presentándose en un contexto bastante complejo. Adelanto de un test doble, a continuación.

Esta nota está siendo escrita varias semanas antes de poder subirme a probar a los Ford Ka. Hoy es viernes 13 de marzo y se acaba de anunciar que estamos dentro de una pandemia por un virus bastante contagioso. Seguro para cuando estén leyendo esto, ya estaremos todos hartos de leer notas o escuchar comentarios sobre el COVID-19. Ahora mismo no van ni 24 horas y estoy agotado de esto.

Por ahora lo que sé, es que los dos Ford Ka que tenía pensado retirar la semana que viene, van a tener que esperar un poco más para visitar mi garage para ser evaluados. Seguro para cuando estén leyendo esto, es porque pude volver a ir a retirar un auto de test, aunque utilizando un barbijo, guantes y desinfectante. ¿Habrá pasado un mes? ¿Dos? ¿Diez? No lo sé aún. Lo bueno es que pude manejarlo, volver a probar vehículos después de mucho tiempo y ustedes podrán leer la evaluación más adelante.


No es por agarrármela con nadie ni con nada, pero es como que el Ka estuviera engualichado. Me explico: este modelo pasó varios obstáculos para poder llegar a nuestro mercado desde que se puso a la venta en la región en 2014. Recién seis años más tarde, por fin arribó a Uruguay. Pero lo hizo justo en uno de los momentos más caóticos, convulsionados y llenos de incertidumbre no solo del mercado automotriz, sino también del planeta entero en lo que va de este siglo.

Recién a finales de 2019, Ford do Brasil decidió que Uruguay sería el tercer país, luego de Argentina y el propio Brasil, que recibiría en todo el continente al Ka de tercera generación. No cuento a México, porque ellos reciben al Figo (es el Ka, pero con otro nombre) desde India. Pero sí, ni Chile, ni Perú, ni Colombia, así como tampoco Paraguay, Panamá o Costa Rica todavía lo tienen. Y con el panorama actual de la pandemia sanitaria, es posible que tampoco puedan recibirlo ni siquiera este año.


A su vez, en nuestro mercado llegó en un momento en el que la atención del segmento B estaba puesta en dos lanzamientos que hicieron bastante ruido, como son los Chevrolet Onix/Onix Plus o Nissan Versa, que renovaban por completo una oferta que estaba precisando con urgencia una actualización que los pusiera a la par de los rivales más modernos. Ford, por su parte, estaba en el limbo con Fiesta, con las últimas unidades en stock y una producción que finalizó el año pasado.

Por último, volvemos al inicio de este adelanto: el bendito COVID-19. Apenas unos días después de producirse el lanzamiento comercial de los Ka (ver lanzamiento), caímos en pandemia y cuarentena voluntaria, así como también la economía se clavó de cabeza. Y no solo en el mercado automotríz, sino todo el planeta, se frenó en seco. También se detuvo la ansiedad por este lanzamiento, por los que ya se habían hecho en 2020 y por todos los que vendrán, en realidad. Son pocos los que hoy piensan en cambiar por un 0km.


En los papeles al menos, el Ka podría tomar el espacio del Fiesta con comodidad. No solo una vez que se agote el stock actual de unidades, sino en comparación con la versión que producían en Brasil hasta finales del 2019. Plantea una mejor dotación de seguridad y confort de serie, más espacio interior que su hermano, uno de los motores más potentes del segmento, una estética agradable y precios lógicos. Pero justo le viene a tocar el peor momento para llegar. Es un modelo que se lanzó regionalmente en 2014, y por varios factores le tocó caer en el 2020. Justo en este año maldito.

Nadie quiere ser el que llega en el peor momento del mercado de los últimos 20 años. Ford precisa de este modelo para no perder su lugar ganado en un segmento en el que supo ser referencia con la llegada del Fiesta mexicano y que intentó defender con el que provenía desde Brasil. Estoy ansioso por saber si el Ka puede conservar ese lugar. Si pude manejarlo, entonces ya sé la respuesta a esa duda. Ustedes, por otro lado, tendrán que esperar unos días más o buscarse un antídoto para la ansiedad. Que por estos días, como ya sabrán, está muy presente en todos nosotros.