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| Audi presentó en Nueva York a la nueva variante del R8 de segunda generación, la Spyder V10. |
El nuevo Audi R8 Spyder es 14 mm más corto que el modelo anterior, con una longitud total de 4.426 mm. Ha crecido 36 mm en anchura, hasta un total de 1.940 mm. No han variado con relación a la primera generación del R8 Spyder ni la altura (1.244 mm) ni la distancia entre ejes (2.650 mm).
El techo retráctil pesa solo 44 kg. Se abre en 20 segundos mediante un sistema electrohidráulico y se puede accionar en marcha hasta una velocidad de 50 km/h. El módulo está alojado tras los asientos y comprende los componentes de la protección antivuelco, la capota, su alojamiento, el alojamiento de la luneta trasera y las articulaciones de la cubierta del compartimento, hecha de fibra de carbono reforzada y movida hidráulicamente. El techo, a su vez, está disponible en tres colores: negro, marrón y rojo.
Con un peso en vacío de 1.612 kg, el nuevo Audi R8 Spyder V10 logra una relación entre peso y potencia es sólo 3,19 kg/cv. La clave para esta cifra es el nuevo Audi Space Frame (ASF) con el principio de construcción multimaterial. Como el R8 Coupé, combina componentes de aluminio y de polímero reforzado con fibra de carbono, estructuralmente integrados.
Con una cilindrada de 5.204 cc, el V10 de este Audi genera una potencia de 540 cv y un par de 540 Nm a 6.500 rpm. Además de inyección directa en la cámara de combustión (FSI) el V10 también tiene inyección en el colector de admisión (MPI). Y no, no tiene turbo. El resultado son unas prestaciones bestiales: acelera de 0 hasta 100 km/h en 3,6 segundos y hasta 200 km/h en 11,8 segundos. Si el conductor continúa acelerando, la aguja del velocímetro sólo se para cuando llega a 318 km/h.
Comparado con el modelo anterior, el consumo medio es un 10 por ciento menor, gracias a tecnologías como la desconexión de cilindros COD (cylinder on demand), el sistema de inyección doble o el modo de marcha por inercia en la caja de cambios S tronic de siete velocidades con doble embrague. Con este último sistema, cuando el conductor levanta el pie del acelerador a una velocidad superior a 55 km/h, el motor se desacopla de la transmisión y el R8 Spyder avanza entonces por inercia. El consumo medio es de 11,7 l/100 km, por si alguno quería saber ese "detalle nimio".
El sistema de tracción integral quattro combina tres módulos de tecnología punta: la caja de cambios de siete velocidades S tronic, un embrague multidisco accionado electrohidráulicamente en el eje delantero, con control electrónico y un sistema de refrigeración por agua, y por último un diferencial autoblocante mecánico en el eje trasero.
A su vez, va acompañada por el Audi drive select, que permite al conductor elegir entre los modos básicos comfort, auto, dynamic e individual. En cada uno de ellos, este deportivo muestra un carácter diferente. El sistema interviene en la respuesta del acelerador, la dirección, la caja de cambios S tronic, la función de control del sonido de las salidas de escape y el sistema de opcional de amortiguación adaptativa Audi magnetic ride.
Video: Audi R8 Spyder V10
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