Toyota ya comenzó a producir el i-Road su nueva solución de movilidad urbana. |
En el Salón de París, Toyota presentó al i-Road, un producto que parece un prototipo, pero que no lo es, aunque su producción en serie será muy especial. Es un vehículo de movilidad urbana, con un concepto similar al presentado por Renault con el Twizy (ver primera impresión), aunque con tres ruedas en lugar de cuatro.
El diseño del Toyota i-Road se ha refinado
con respecto al del prototipo que la marca presentó hace un tiempo atrás, para ofrecer
una mejor visibilidad, protección, maniobrabilidad y
facilidad de uso.
En los laterales, las puertas cuentan ahora
con ventanillas manuales, de forma que el i-Road puede quedar totalmente cerrado.
Esto le confiere al nuevo producto de Toyota una ventaja
considerable con respecto a las motocicletas, ya que se puede conducir sin
casco ni ropa protectora especializada, independientemente
del estado del tiempo.
La parte trasera fue rediseñada con un
voladizo más corto, unos nuevos grupos ópticos
reubicados y una pequeña luna trasera
para mejorar la visibilidad al maniobrar.
En el interior, junto con los pedales normales
del acelerador y el freno de cualquier otro
coche urbano, se ha adoptado un diseño de para aumentar la facilidad de uso y conducción. Con 2.345 mm de longitud, 1.455 mm de altura,
870 mm de anchura y una distancia entre
ejes de 1.695 mm, el nuevo i-Road es 5 mm más corto, 10 mm más alto y 20 mm
más ancho que el prototipo, pero sigue presentando
unas dimensiones ultracompactas.
El sistema totalmente eléctrico cuenta con una batería de ion de litio que impulsa un par de motores eléctricos
de 1,9 kW (2,6 cv) montados en las ruedas
delanteras. Toyota declara que ofrece una autonomía aproximada
de 50 km, después de los cuales puede
recargarse mediante una toma de corriente
doméstica convencional en apenas tres horas.
Una de las claves del i-Road es la nueva tecnología "Active Lean" (inclinación activa) de Toyota.
El sistema funciona en conjunción con transmisión
a la rueda trasera a través de un volante
convencional, incorpora un motor y un
engranaje de inclinación montados sobre la
suspensión delantera y conectados mediante
una horquilla a las dos ruedas delanteras.
Una ECU calcula la inclinación necesaria en
función del ángulo de la dirección, el sensor
de giroscopio y la velocidad del vehículo.
El
sistema mueve automáticamente las ruedas
hacia arriba y hacia abajo en sentido opuesto,
y puede aplicar un ángulo de inclinación para
contrarrestar la fuerza centrífuga del viraje.
También entra en funcionamiento cuando
el i-Road se desplaza en línea recta por
una superficie poco uniforme, de forma que
el sistema de inclinación compensa automáticamente
los cambios de la superficie de
la vía para mantener el nivel de la carrocería.
La tecnología ofrece una
experiencia de conducción con la intensidad de una motocicleta, una maniobrabilidad
excepcional y un ángulo de
giro mínimo de apenas tres metros, pero sin
necesidad de que el propio conductor estabilice
el vehículo en las maniobras a baja
velocidad o en parado.
Es por esto que el sistema elimina la necesidad de
que el conductor baje los pies a la superficie
de la calle en ningún momento, como podría pasar con una moto.
El i-Road será una realidad en principio solo para la ciudad francesa
de Grenoble.
La alianza formada entre la ciudad,
el área metropolitana Grenoble-Alpes,
Électricité de France (EDF), Sodetrel, Toyota
y Citélib llevará a cabo una prueba de tres
años con el objetivo de aumentar la eficiencia
y eficacia de los sistemas de transporte público
(tranvías, autobuses, trenes) mediante la
interconectividad con vehículos de movilidad
personal totalmente eléctricos.
El papel de Toyota en esta nueva alianza
consistirá en suministrar 35 i-Road como parte de una
flota total de 70 unidades ultracompactas totalmente eléctricas. Todos los vehículos
se podrán cargar en uno de los más
100 puntos de recarga repartidos entre las 30
nuevas estaciones de recarga situadas cerca
de paradas de transporte público por toda la
ciudad.
Los participantes de este revolucionario
programa de vehículos compartidos podrán
utilizar dos aplicaciones para smartphone
específicas.
Una de ellas ofrece un planificador de itinerarios, diseñado para
ayudar a los usuarios a alcanzar su destino
siguiendo la ruta y el modo de transporte más
eficiente, a partir de información del tráfico
en tiempo real, los horarios del transporte
público y la disponibilidad de unidades. A través de
esta aplicación, los usuarios también podrán
reservar un i-Road disponible.
Video: Toyota i-Road