Volkswagen pone en producción al XL1: el auto de 1 litro cada 100 km

viernes, 22 de febrero de 2013



El XL1 es el auto de serie con el menor consumo del mundo: apenas 1 litro cada 100 km recorridos.
La marca alemana finalmente transformó en una realidad al modelo con el consumo más bajo del mundo. El XL1 será un modelo de producción a partir de este año y su receta está en la trabajada aerodinámica y el bajo peso para lograr esa increíble cifra de consumo. Más información, tras el salto.

Después de años de desarrollo, prototipos y especulaciones, la marca alemana finalmente llevará al XL1 a sus líneas de producción y sus principal arma de conquista será el consumo más reducido de la historia para un auto de serie: 0,9 l/100 km. Recordemos que la marca desde 2002 -y luego en 2009- cuando presentó el concept 1-Litre, ya demostraba sus intenciones de lograr semejante cifra. 

En 2011 mostró el último prototipo, ya con el nombre definitivo y todo ese tiempo que transcurrió desde el primer modelo, fue usado para lograr que este proyecto fuera viable, y que además el XL1 sea un vehículo  apto para el uso diario. Y parece que ahora lo lograron. Veamos cómo hace Volkswagen para conseguir este consumo increíble.

Bajo peso + aerodinámica = el menor consumo para un modelo de serie

Con una carrocería compuesta en un 21,3% fibra de carbono reforzada con plástico (CFRP) y el resto en fibra de vidrio, acero y fibras naturales, y un diseño pensado solo desde la aerodinámica, que logra el increíble coeficiente de Cx 0,189, el XL1 se presenta como uno de los vehículos más extraños de la actualidad. 


Tiene además unas dimensiones bastante reducidas: 3,89 metros de largo, 1,66 de ancho y apenas 1,15 metros de alto. Solo con el fin de ser eficiente ante el viento, para lograr esa cifra de 1l/100 km, los retrovisores desaparecen para ser reemplazados por cámaras, los bajos están carenados, así como también las ruedas traseras, y un diseño casi calcado a una bala, aunque la marca declara haber encontrado inspiración en algo más tierno: los delfines. Una de las características llamativas del modelo es la forma en la que se abren las puertas, en forma de alas de gaviota. Sí, demasiadas referencias marítimas, creo.

Para seguir contando la receta de la carrocería, el XL1 lleva unos neumáticos de bajo rozamiento específicos desarrollados por Michelin, que se caracterizan por ser bastante angostos, en medidas 115/70 R15 y 145/55 R16, adelante y atrás respectivamente. El baúl cuenta con una capacidad de apenas 120 litros, que si pensamos el uso citadino de este modelo, y que es para dos personas, suena entendible.


Híbrido, gasolero y con 500 km de autonomía

El XL1 es un híbrido que se vale de un motor 0.8 TDI bicilíndrico con 48 cv y otro motor eléctrico de 27 cv de potencia. Estos impulsores van situados por detrás de los ocupantes en posición central, en tanto que la tracción es trasera. Ambos van acoplados a una transmisión automática DSG de siete marchas y embragues separados, para que el motor eléctrico pueda funcionar independientemente del impulsor a combustión. Cuando funcionan en conjunto, producen 69 cv de potencia y 140 Nm de par. 


Alcanza 160 km/h de velocidad final y acelera de 0 a 100 km/h en 12,7 segundos. Ofrece una autonomía de 50 kilómetros en modo 100% eléctrico y las baterías solo tienen 5,5 kWh de capacidad, y por eso se pueden recargar en menos de dos horas con una toma doméstica de 230 voltios y 16 amperios. Es aquí entonces donde entra la economía del impulsor diesel, que con los 10 litros de capacidad del tanque de combustible puede recorrer 500 km, es decir, 2 l/100 km cuando la carga de las baterías esté mermando.

El peso es otra de las claves. El conjunto pesa 795 kg, repartidos en los motores y baterías pesan 227 kg, el chasis 153 kg, el equipamiento 80 kg y los componentes electrónicos suman 105 kg. La ventas comenzarán posiblemente en 2014. Y les dejo una pregunta: dado que es un modelo revolucionario, ¿será un éxito comercial o un rotundo fracaso?