
Sin embargo, uno de los modelos que Monkey Harris odia públicamente es el Mazda MX-5. ¿Por qué? Sus argumentos son que gran parte del periodismo motor internacional lo coloca como un "driver´s car", en tanto que el periodista inglés solo lo toma como un roadster normal, que no transmite nada y que simplemente es basura. Igual usa otra palabra, pero me evitaré ponerla en texto, él la dice mejor en video.
Impulsado por sus compañeros de trabajo, tanto en Drive, como en la página PistonHeads, Harris decidió darle una segunda chance al modelo de la marca nipona, probando un Miata de primera generación, para reconsiderar si es tan bueno como dicen, o tan espantoso como él viene sosteniéndolo hace años.

El modelo nipón se presentaba como una versión apetecible de esos vehículos, producto de contar con una confiabilidad que los ingleses carecían, además de un precio más tentador, pero conservando -o al menos eso dicen- el mismo espíritu de los modelos británicos a la hora de conducirlos por caminos de la campiña europea.
El MX-5 contó con dos nombres más, como ser Miata o Eunos, y sus potencias fueron aumentando con el correr de los años, partiendo de un sencillo 1.6 de 115 cv en el año 89, hasta llegar a las variantes actuales, correspondientes a la tercera generación, con potencias de casi 170 cv. Sin más, veamos el video, a ver si Harris se amigó con el Mazda.
Video: Is the Mazda MX-5 Any Good? - Chris Harris On Cars