Probamos al Citroën C3: cielos seductores

viernes, 25 de noviembre de 2011




Estuvimos manejando a la segunda generación del Citroën C3. Llega desde Francia y gracias a un diseño más moderno y un curioso parabrisas panorámico intenta seducir a los amantes de los ambientes luminosos.

Al manejar este C3 Seducción, como lo denominan en nuestro país, no sé si me sedujo a lo Salma Hayek, pero sí me dejó una muy buena impresión, sobre todo de bienestar al volante. De ahí a la seducción per sé falta un trecho. De todas formas no puedo dejar de reconocer que el auto me parece atractivo y siento que más que seducir, el C3 le hace mimos al conductor.

Ya sea con una amable dirección eléctricamente asistida, que nos hace disfrutar la odiosa tarea de estacionar, una suspensión mullida que se traga los pozos, que sumada a unas butacas casi de poltrona, evitan que nuestras posaderas sufran las calles de la ciudad. Y lo que es mejor, un parabrisas panorámico que hace que uno se sienta a los mandos de una especie de pequeño helicóptero terrestre.

Citroën denomina al C3 como "visiodrive" y básicamente toda la campaña publicitaria a nivel mundial se basa en eso, en el bendito parabrisas Zenith. Y vaya que si hacen bien en hacerlo. La sensación es muy difícil de explicar y no molesta en los días soleados, como muchos podrán pensar, dado que tiene una parte tonalizada. Y si molesta mucho, un parasol plástico se puede correr, así los rayos solares no nos cocinan las ideas.


En la totalidad de la prueba usamos el parasol abierto, primero porque de alguna forma tenemos que tomar un poco de color para el verano que se acerca y segundo porque la experiencia de manejar algo así no se volverá a repetir en otros autos. No tener un travesaño que delimite el parabrisas del techo es muy extraño y me atrevo a decir que es digno de las naves de Los Supersónicos que algunos mirábamos volar a la hora de la merienda.

La pregunta del millón es, para aquellos que gustan de los techos solares o esos panorámicos pseudo invernadero como los que tanto usa Peugeot, por ejemplo, ¿se comprarían este "visiodrive" en lugar de todo un techo vidriado?

La pregunta queda para que debatan en este adelanto, y la semana que viene tendrán la prueba completa del nuevo Citroën C3 para conocerlo más allá de lo que se puede ver desde el parabrisas panorámico.

Mientras, les dejo de bonus track una referencia a la prueba. Debo confesar que por unas horas me sentí como Gustavo Cerati en este video.