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| Renault reveló al Rafale para el mercado europeo, un nuevo integrante de su gama de SUVs y crossovers. |
Rafale es un nombre que suena a aviso de tormenta y cuya referencia aeronáutica está escrita en la historia de Renault gracias a los récords de velocidad establecidos por el Caudron-Renault Rafale, que alcanzó los 445 km/h en 1934. Este modelo se une a Austral y Espace en la familia de SUVs y crossovers derivados de la plataforma CMF-CD, con producción en la planta de Palencia, en España. Mide 4,71 m de largo y 1,86 m de ancho, mientras que su altura de 1,61 m. Su distancia entre ejes es de 2,74 m, en otras palabras, idéntica a la del Espace. Respecto a ese SUV para siete pasajeros, el Rafale tiene un mayor ancho de vías (+4 cm).
Será además el primer modelo de Renault que se presenta en Azul Alpine. Se trata de un color que nunca se ha usado a lo largo de la relación con la marca con sede en Dieppe y, una vez más, ha sufrido una sutil evolución al ofrecer un azul ligeramente más intenso en esta carrocería que en Alpine A110. El resto de la paleta disponible en el Rafale está compuesta por los colores Rojo Deseo, Negro Brillante y Gris Pizarra.
Con su arquitectura híbrida serie-paralelo, el E-Tech full hybrid de 200 cv está compuesto por un motor a combustión con turbocompresor de tres cilindros y 1.2 litros que produce 130 cv (96 kW) y 205 Nm de par y dos motores eléctricos. El motor naftero combina un ciclo de combustión Miller, recirculación de gases de escape a baja presión y un turbo de geometría variable, además de beneficiarse de una arquitectura de carrera larga (similar a la de un diésel).
El resultado es una eficiencia del 41%. En el apartado eléctrico, el motor principal desarrolla 70 cv (50 kW) y 205 Nm está alimentado por una batería de iones de litio de 2 kWh a 400 V. El motor eléctrico secundario HSG (High-voltage Starter Generator), con 25 cv y 50 Nm de par, se encarga de arrancar el motor de combustión interna y de gestionar los cambios de marcha sin necesidad de embrague. Pasando al chasis, al tener la misma base que Espace y Austral, el Rafale también cuenta con el sistema 4-Control de cuatro ruedas directrices, lo que permite tener más maniobrabilidad a baja velocidad y estabilidad a alta.
En términos de equipamiento estrena al techo panorámico de cristal "Solarbay" de 1.470 x 1.117 mm, desarrollado por la firma francesa Saint-Gobain. Su tecnología "AmpliSky" elimina la necesidad de una cortina. Se trata de un sistema activo completo que se vuelve opaco a voluntad y se basa en un desplazamiento de moléculas provocado por un campo eléctrico. Puede oscurecerse de forma secuencial gracias a los nueve segmentos que cubren la superficie del techo de cristal. El techo de cristal interactivo Solarbay puede controlarse con la voz a través de Google Assistant o con un botón situado en el techo.
En términos de seguridad, ofrece 32 ayudas a la conducción divididas en tres categorías: conducción, aparcamiento y seguridad. Entre ellas se encuentran: un head-up de nueva generación de 9,3 pulgadas; Active Driver Assist, un servicio de asistencia a la conducción de nivel 2, que combina el control de crucero adaptativo con Stop & Go, el centrado de carril, los datos de geolocalización y la cartografía específica para que el vehículo se adapte a la carretera; Función de cámara 3D con visión de 360°; aparcamiento completamente automático; aviso de ángulo muerto y de salida de carril al adelantar; frenado de emergencia automático al dar marcha atrás; salida segura para los ocupantes e iluminación inteligente Matrix LED Vision.
De momento se desconoce si Renault Uruguay lo contempla en los planes de presentación para el año corriente o el que viene. Pero considerando que tiene variantes híbridas, podría tener grandes chances de pasar a formar el catálogo local de la marca francesa en el corto plazo, dado que siguen sin tener un SUV situado entre el Duster y el discontinuado Koleos, salvo por el crossover Arkana. Sabremos más en los próximos meses.
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