Mercedes-AMG comenzará a comercializar híbridos enchufables en el corto plazo. |
Mercedes-AMG ya anticipa al nuevo sistema de electrificación E Performance, que se utilizará tanto con mecánicas V8 como de cuatro cilindros en configuración de hibridación, siendo la primera vez que la firma de Affalterbach se pasa a la impulsión con esta fuente de energía. Más, a continuación.
El concepto modular desarrollado por AMG para sus híbridos de altas prestaciones combina el motor AMG de ocho o de cuatro cilindros con un motor eléctrico síncrono de excitación permanente, una batería de altas prestaciones desarrollada en Affalterbach y la tracción integral completamente variable AMG Performance 4MATIC+. El motor eléctrico (con una potencia de hasta 150 kW y un par motor de hasta 320 Nm, en función de la gama de modelos) se sitúa junto al eje trasero, donde se integra junto con una transmisión de dos marchas con acoplamiento eléctrico y el diferencial autoblocante del eje trasero con regulación electrónica para configurar una unidad de propulsión eléctrica (Electric Drive Unit, EDU) de dimensiones compactas.
La batería de altas prestaciones ligera está dispuesta asimismo en la zaga del vehículo, por encima del eje trasero. La potencia del motor eléctrico desarrollado exclusivamente por AMG se transmite directamente al eje trasero (sin necesidad de pasar por el cambio automático de 9 marchas AMG SPEEDSHIFT MCT 9G) y se convierte inmediatamente en fuerza de propulsión para incrementar el ímpetu al ponerse en marcha, al acelerar o al adelantar.
Al mismo tiempo, como corresponde al principio constructivo de un motor eléctrico, esta fuerza se transmite con el par motor máximo desde el primer giro de las ruedas, algo que se aprecia por un comportamiento especialmente ágil al arrancar con el vehículo. El diferencial autoblocante con regulación electrónica integrado en el eje trasero permite asignar a cada una de las ruedas traseras el par motor idóneo, teniendo en cuenta la situación actual de conducción. Como consecuencia, el conductor experimenta de forma inmediata un aumento sensible de las prestaciones, pues el vehículo híbrido acelera con mayor agilidad a la salida de las curvas. Esto es posible gracias a la unión mecánica entre la tracción integral completamente variable y los semiejes de las ruedas delanteras por medio del árbol articulado.
La disposición de la unidad de propulsión junto al eje trasero mejora la distribución del peso y de la carga sobre los ejes del vehículo, como requisito para una maniobrabilidad convincente. El concepto de AMG garantiza asimismo un rendimiento muy elevado durante la recuperación energética, pues el principio en que se basa este sistema reduce al mínimo las pérdidas mecánicas e hidráulicas del motor y el cambio. La concepción modular hace posible la implementación en varias gamas de modelos. Esta flexibilidad es un aspecto clave para la electrificación futura de la gama de modelos de AMG.
La transmisión de dos marchas con mando automatizado y una desmultiplicación armonizada en el eje trasero hace posible extender su eficacia, desde la transmisión de un par motor elevado a las ruedas para la puesta en marcha con agilidad hasta el despliegue de una potencia elevada y fiable al circular a alta velocidad. Un actuador eléctrico acopla la segunda marcha a medida que aumenta la velocidad —como máximo, al superar una cota aproximada de 140 km/h—, lo que corresponde a un régimen máximo de giro del motor eléctrico de unas 13.500 rpm. Al mismo tiempo, el motor eléctrico desplaza los cambios de relación del cambio MCT acoplado al motor de combustión interna.