Adiós al padre del Grupo Volkswagen: falleció Ferdinand Piëch

martes, 27 de agosto de 2019



Este pasado domingo falleció a sus 82 años el ingeniero Ferdinand Piëch, el creador del Grupo Volkswagen actual.
Era nieto del mítico ingeniero austríaco Ferdinand Porsche. Su gran afición, respondió en cierta ocasión cuando le preguntaron por sus hobbies, era "construir automóviles". Este pasado domingo falleció a los 82 años en Alemania el padre del Grupo Volkswagen como lo conocemos hoy en día.

El antiguo director general de Volkswagen y hasta 2015 jefe del consejo de supervisión del gigante alemán de la automoción, Ferdinand Piëch, murió a los 82 años. Durante casi una década (entre 1993 y 2002) dirigió la empresa, el mayor fabricante de automóviles del mundo, después de lo cual presidió dicho órgano supervisor.

El ingeniero austríaco sufrió un ataque el domingo en un restaurante de la localidad bávara de Rosenheim, donde residía. Finalmente murió en el hospital, según adelantó el diario Bild, sin que se haya todavía determinado la causa. Para tener una dimensión de la importancia de Piëch, cuando se convirtió en CEO en 1993, Volkswagen estaba casi en bancarrota. Cuando renunció como presidente en 2015, Volkswagen era una potencia automotriz mundial de ocho marcas de automóviles, a punto de convertirse en el fabricante de automóviles más vendido del mundo.


Nacido en Viena en 1937, era nieto del mítico ingeniero austríaco Ferdinand Porsche. Inició su carrera en 1963 precisamente en la empresa Porsche, pasando por Audi (actualmente propiedad de VW), donde se convirtió en director general, antes de dirigir Volkswagen. Las desavenencias con Martin Winterkorn lo alejaron definitivamente de la firma en 2015, cuando renunció a sus cargos. Su gran afición, respondió en cierta ocasión cuando le preguntaron por sus hobbies, era "construir automóviles". Dos modelos clásicos datan de los primeros tiempos del imperio automovilístico que el nieto de Ferdinand Porsche, Ferdinand Piëch, ayudó a construir: el Escarabajo o “Beetle” fue diseñado por Porsche. Un primo de Piëch, Alexander Porsche, concibió el exitoso modelo 911, el hermano mayor del escarabajo.

En 1969, Piëch lanzó al mercado uno de los autos de Le Mans más exitosos del siglo XX. En aquel entonces, el Porsche 917 era el automóvil alemán más rápido. En 1970 y 1971 ganó la legendaria carrera de Le Mans. Le siguieron otros modelos, pero para entonces Piëch y su primo Wolfgang Porsche ya se habían separado tras una disputa.


Audi no tenía ni la fuerza de Porsche ni la clase de Mercedes o el elegante diseño de BMW, cuando Volkswagen compró la empresa en 1969. En su calidad de miembro de la junta directiva encargado de la tecnología, en los años 70, Piëch introdujo innovaciones importantes. Por ejemplo, mejoró un motor diésel ajustándolo a las necesidades de un auto familiar.

Piëch no inventó la tracción en las cuatro ruedas. La patente data de 1893, pero era algo que casi no se usaba para automóviles. Esto cambió con la llegada del Audi “quattro”, que dominó las carreras de los años 80. Gracias a este éxito, Audi pudo vender más de 10.000 modelos aptos para la calle. También la era de Piëch representó la incorporación de marcas como Bugatti, Bentley, Lamborghini, Ducati, ItalDesign, Scania, Skoda, Man y Porsche al Grupo Volkswagen, mientras que a comienzos de los años ’80 y ’90, Piëch tuvo la idea de desarrollar los Audi 80, 90, 100 y 200 sobre una misma plataforma. Esta base estructural en común permitió aumentar las compras de componentes por gran volumen y reducir los costos. Cuando asumió al frente del Grupo VW-Audi, la primera decisión de Piëch fue sumar al Volkswagen Passat a esa misma plataforma.


Bajo el mando de Piëch también se llevó a cabo la ambiciosa compra de la legendaria marca Bugatti y la creación del mítico Veyron. Al modelo se le infundió nueva vida con 16 cilindros y una velocidad máxima de 407 kilómetros por hora. Un ejemplar cuesta cerca de dos millones de dólares. Otros modelos que también nacieron bajo el mando de Piëch fueron los Audi A2, Volkswagen XL1, Touareg o Phaeton, así como el Porsche Cayenne.

En 2001, el ex-jefe de BMW Bernd Peter Pischetsrieder se convirtió en presidente del consejo de administración de Volkswagen. Sin embargo, en 2006, Piëch se mostró descontento con su trabajo y Pischetsrieder tuvo que dejar su puesto. Lo mismo pretendía hacer con Martin Winterkorn, pero fracasó.

Si bien Piëch se vio obligado a retirarse de su papel como líder de Volkswagen cuando cumplió 65 años, siguió siendo una figura clave en el consejo de supervisión de la empresa hasta su jubilación en 2015, a medida que surgía el escándalo del Dieselgate que le costó el puesto a Winterkorn. Piëch intentó en los últimos años crear su propia marca de vehículos exclusivos y deportivos, llamada Piëch Automotive AG, con un modelo llamado "Mark Zero", una coupé eléctrica de 600 cv de potencia, que provienen de tres motores eléctricos de 150 kW cada uno, uno en el eje delantero y dos en el eje trasero.