 |
| 370 cv de potencia y 500 Nm de torque. Esta bestia pintada de azul no es un pitufo rabioso, es el BMW M2 Coupé. |
Era un rumor a voces y ahora es una realidad. Finalmente BMW presenta al M2, la versión más radical y deportiva de la Serie 2 Coupé. Aunque para muchos resultará el relevo del 1 M Coupé (ver lanzamiento), estamos ante un producto diferente, ya que aquel era un deportivo hardcore, sin opción de caja automática. Aunque como veremos, el M2 no está tan lejos de describirse bajo ese anglicismo.
Estéticamente lleva un faldón delantero provisto de grandes entradas de aire, musculosos flancos que incluyen las típicas branquias que distinguen a los modelos M, llantas de aluminio de 19 pulgadas con diseño de dobles radios, así como una zaga mucho más ancha (8 cm para ser exacto) que en el M235i, en la que sobresalen los cuatro terminales de escape dobles. Si los Serie 2 "normales" ya eran atractivos y sugerentes en sus líneas, el M2 es directamente pornográfico.
Adentro también está repleto de pequeños detalles exquisitos como los tapizados de Alcántara que revisten a las puertas y la consola central, así como otros diversos elementos con fibra de carbono visible que terminan de cerrar un ambiente deportivo pero sobrio. Los asientos envolventes llevan costuras en contraste y el emblema "M" grabado en los apoyacabezas. Tanto el volante como el selector de cambios también van firmados por Motorsport.
En una época donde con la creación de las versiones diesel de Motorsport pensábamos que la "M" había pasado a ser por "marketing", los muchachos de BMW salen a dotar al M2 con una bestia de impulsor para taparle la boca a varios y hacerle rememorar a los fanáticos de la firma bávara, que el espíritu de aquellos E30 o mismo de las versiones Tii o Alpina del 2002, siguen vivas también hoy en este modelo.
El M2 lleva un nuevo propulsor (denominado B58) de seis cilindros en línea, de 3.000 cc del nuevo BMW M2, provisto de la tecnología M TwinPower Turbo, tiene una potencia de 370 cv a 6.500 rpm y un par máximo de 465 Nm entre las 1.400 y 5.560 revoluciones, que llega a ser por unos breves instantes de 500 Nm con la función overboost. La tracción creo que no hace falta que diga que es trasera, ¿no?
Pese a que hay de serie una caja manual de seis relaciones (perdonen si me estoy babeando mucho) BMW insiste en resaltar las prestaciones de sus modelos equipados con la transmisión automática opcional, que en este caso es de siete marchas con doble embrague (M DKG) y cuenta con la función "launch control". En el caso de la caja manual, es exactamente la misma que llevan los actuales M3 y M4 de serie.
Mal que nos pese a los que gustamos de las manuales, la M DKG saca mejores números en todo: 4,2 segundos de 0 a 100 km/h, mientras que la manual lo hace en tres décimas más, 4,5 segundos. La velocidad final en ambos casos es de 250 km/h, limitada electrónicamente. Con el M Driver´s Package opcional, la velocidad máxima se corta electrónicamente a 270 km/h.
A nivel de chasis ambos ejes son de aluminio, y provenientes de los M3 y M4, al igual que muchas piezas del impulsor como los pistones, por ejemplo. Los frenos son de material compuesto, mientras que el diferencial M de regulación eléctrica, trabaja junto al sistema M Dynamic Mode (MDM) que forma parte del control dinámico de la estabilidad (DSC), y que permite un ligero deslizamiento de los neumáticos para derrapar controladamente al trazar curvas en los circuitos, mientras el conductor puede disfrutar al máximo de hacer el más delicioso puré de caucho.
Más que la versión más deportiva y radical de la Serie 2, estamos ante una serenata de amor para petrolheads. Los dejo con el video de producto que además muestra a dos de los deportivos de BMW más deseables de los últimos 40 años: 1 M Coupé y M3 E30, danzando con el M2.
Video: BMW M2
.gif)
