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| El Aircross Concept de Citroën nos adelanta cómo podría ser el próximo SUV compacto de la marca. |
Sin esperar a ningún salón del automóvil, Citroën decidió presentar al Aircross Concept. Se trata de un producto que nos podría adelantar al reemplazo del C4 Aircross, o bien adelantarnos cómo sería un SUV de la marca gala. Sea lo que sea, nos encanta que sigan rompiendo moldes.
Voy a comenzar esta nota con algo que no tiene nada que ver con el producto que ven en imágenes: me encanta el Citroën C4 Cactus. ¿Motivos? Varios, que ampliaré cuando llegue a Uruguay en los próximos meses, pero uno de ellos es que hayan roto todos los moldes de estilo. Algo en lo que Citroën supo hacer escuela y que con el tiempo se fue diluyendo.
Encontramos que es una especie de SUV compacto (sabemos que deriva de la plataforma modular de PSA, la EMP2) y cuyas dimensiones lo reafirman: 4,58 m de largo, por 2,1 m y 1,73 m de ancho y alto, respectivamente. Los volúmenes de la carrocería nacen del choque de diversas formas, que le dan ese eclecticismo típico de los Citroën. Y personalmente, me gusta bastante.
Los neumáticos realizados por la firma Continental tienen una generosa medida, 275/45 R22, y disponen de tacos macizos de goma con laminillas longitudinales, cuyos profundos surcos buscan ofrecer un alto nivel de motricidad en los terrenos más difíciles.
En la carrocería destacan elementos gráficos en los que el diseño está al servicio de la funcionalidad. Tal es el caso de la reinterpretación de los famosos Airbumps inaugurados por el C4 Cactus, adaptándolos ahora a las exigencias del SUV. Se trata de los AlloyBumps. Éstos están formados por una estructura alveolar en mousse de aluminio muy absorbente. Un material que combina protección, ligereza y estética.
Los elementos gráficos también ponen de relieve la búsqueda del aerodinamismo. El AirSign, firma cromada que subraya el cristal trasero, deja pasar el flujo de aire como por un túnel. Pero también las entradas de aire, los AirCurtains delanteros, participan en la aerodinámica global del Aircross. Las puertas, en tanto, cuentan con apertura tipo "suicida".
Por dentro encontramos una abundancia de horizontalidades en la consola central, dominada por dos pantallas panorámicas y HD de 12 pulgadas cada una. Los asientos tipo "kingsize" con respaldos amplios y cómodos, buscan dar la mayor comodidad en viajes largos, mientras que la parte alta de los asientos está tratada con un tejido de aspecto cálido y un cierto aire "vintage".
El Citroën Aircross combina así un motor térmico de gasolina con un motor eléctrico implantado a nivel del tren trasero del vehículo, que desarrolla una potencia de 95 cv (70kW) y un par de 200 Nm. Este propulsor eléctrico está alimentado por baterías ion-litio, recargables en solo tres horas y media sobre una toma de corriente doméstica (16A). Está combinado con una motorización a combustión 1.6 THP, cuya potencia es de 218 cv y el par de 275 Nm.
Gracias a la hibridación plug-in, puede circular en modo ZEV (Zero Emission Vehicle), que permite acceder una autonomía de 50 km con el motor eléctrico, aunque también permite limitar el consumo al combinar las dos energías, mientras que en ruta será el motor térmico el que tome el relevo.
Cuenta con una función "boost" asociando el par y potencia del motor térmico con el del motor eléctrico y permitiendo así 313 cv combinados. El consumo que declara es de unos ridículos 1,7 l/100 km, mientras que el 0 a 100 km/h se alcanza en tan solo 4,5 segundos.
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