Electrificando al turbo: Audi presenta al A6 TDI concept

jueves, 31 de julio de 2014



Turbodiesel, pero con un compresor eléctrico para eliminar el turbo lag. Con ustedes, el A6 TDI concept.
¿Alguien se imaginaba un A6 con motor turbodiesel asistido por un compresor eléctrico? Audi presenta al A6 TDI concept, un prototipo realizado sobre la base del conocido sedán grande, pero con motor 3.0 gasolero V6 de 326 cv con un par máximo de 650 Newton metros.

Este nuevo A6 con motor diesel es la excusa que los ingenieros de Audi encontraron para celebrar el 25 aniversario de la tecnología TDI de la marca alemana, y de paso mostrar que siempre se le puede encontrar una vuelta más al uso de este combustible que en nuestro país utilizamos para buses, camiones o maquinaria agrícola.

Mecánicamente este concept lleva un impulsor 3.0 TDI V6 con 326 cv de potencia y un par máximo de 650 Nm entre 1.450 y 2.800 rpm. Hasta ahí todo dentro de lo conocido. Sin embargo, el turbodiesel en este producto lleva un turbocompresor tradicional, asistido por un compresor eléctrico.


¿Para qué sirve el compresor eléctrico? dirán algunos, y paso a explicarlo. Es normal que en los motores turbocomprimidos haya un retraso en la respuesta a la aceleración, en algunos es más, en otros menos, pero estar, está. 

Por eso Audi lleva un tiempo trabajando en un turbo hibridado, compuesto por una turbina accionada por los gases moviendo el compresor de siempre, pero respaldado por un compresor eléctrico dispuesto a asistir al turbo, cuando los gases del escape no tienen fuerza para comprimir el aire de la forma ideal.


El "e-booster", llamado en criollo compresor eléctrico, funciona hasta las 3.000 rpm, y se alimenta mediante un sistema eléctrico independiente de 48v. A su vez, trabaja con una potencia máxima de accionamiento de 7 kW hasta el régimen máximo de giro en un lapso de apenas 250 milisegundos. De esta forma, el aire entra turbocomprimido en la admisión casi sin demora, con una respuesta constante y lineal.

Sin embargo, esta tecnología no actúa todo el tiempo. El compresor eléctrico trabaja mediante la intermediación de una válvula bypass, que a un régimen bajo se cierra dirigiendo el aire hacia este. Cuando la presión de los gases de escape aumenta lo suficientemente como para accionar el turbo, la válvula se abre y el compresor eléctrico se apaga, dejando solo al turbocompresor.


Con el biturbo eléctrico Audi se lanza ahora también a la electrificación del TDI como próximo paso a futuro. Los nuevos componentes de hibridación llegarán pronto al mercado, y en el futuro se ofrecerá una solución a medida para cada cliente y cada necesidad, incluso un TDI con tecnología híbrida enchufable. 

En lo que respecta al combustible, la marca apuesta por el Audi ediesel, que además de producirse de manera sostenible permite circular con emisiones neutras de CO2. Es por ello que en colaboración con la empresa de biotecnología Joule, la firma alemana trabaja para la producción de combustible sintético utilizando microorganismos especiales. Sí, leyeron bien. Como verán, el diesel en otros países, está más vivo que nunca.