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| Con 220 cv, el Octavia RS es el más rápido de la historia: 248 km/h. |
¿Recuerdan a la tercera evolución del Octavia? De tener amnesia, o si nunca lo habían visto, en esta nota lo pudimos conocer. Ahora esta berlina de la marca checa, perteneciente al Grupo Volkswagen, nos muestra a su variante más rabiosa, denominada RS. Se ofrecerá con dos mecánicas, y dos carrocerías, berlina y Combi, que es la denominación de las rurales, dentro de la familia Škoda.
Los detalles que lo despegan de sus hermanos más conservadores, son la parrilla frontal con el logo “RS”, entradas de aire con rejillas tipo panal de abeja, así como paragolpes y faros antiniebla de diseño específicos. Las ópticas llevan bi-Xenón con luces diurnas LED. Las llantas de aleación pueden ser de 17, 18 o 19 pulgadas, en tanto que la suspensión está rebajada 12 mm respecto al Octavia berlina o 13 mm en el caso de la rural convencional.
Los últimos detalles deportivos que veremos por fuera en el RS, son las pinzas de freno pintadas en color rojo, el difusor posterior, las salidas de escape trapezoidales, y por último, solo en la berlina, un discreto alerón sobre la tapa de baúl.
Por dentro, pese a no tener imágenes que lo comprueben, la gacetilla de prensa de la marca habla de logotipos RS en el volante, palanca de cambios, zócalos de puertas, respaldos de asientos y alfombrillas. Adicionalmente hay para completar la estética deportiva, los muchachos de Škoda vistieron al RS con una pedalera en aluminio, cuero en el volante y selector de cambios, además de instrumental con diseño especial.
Los dos corazones que mueven a la gama del Octavia RS son un naftero y un gasolero. El primero es un 2.0 TSI con 220 cv, con transmisión manual o automática de doble embrague DSG, ambas de seis relaciones. El gasolero en tanto, es un 2.0 TDI con unos nada despreciables 184 cv.
Las prestaciones son 0-100 km/h en 6,8 segundos con caja manual, y una velocidad final de 248 km/h, una cifra que no se vería junto a la marca Škoda ni por error de tipeo, pero el Octavia RS es el primero en cerrarnos la boca. Con esta cifra se ubica como el más veloz de la historia de la compañía checa. No hay datos del naftero automático, ni de aceleración o velocidad máxima.
El turbodiesel en tanto, hace el 0-100 km/h en 8,1 segundos, y puede alcanzar una velocidad final de 232 km/h. Ambos impulsores llevan sistema Stop&Start, diferencial delantero XDS, dirección asistida electromecánica variable, y suspensión independiente a las cuatro ruedas, con sistema multilink en el eje trasero y McPherson adelante.
En cuanto a equipamientos de seguridad y confort, la lista se compone por algunos de los siguientes ítems: asistente de cambio de carril, sistema de frenado automático en ciudad con mitigación de colisión, detector de fatiga por microsueños, lectura de señales de tránsito, nueve airbags, control de crucero activo, acceso sin llave (denominmado por Škoda como KESSY), techo solar panorámico, asistente de estacionamiento activo, entre otros. Las ventas en el viejo continente comienzan el mes que viene.
Los detalles que lo despegan de sus hermanos más conservadores, son la parrilla frontal con el logo “RS”, entradas de aire con rejillas tipo panal de abeja, así como paragolpes y faros antiniebla de diseño específicos. Las ópticas llevan bi-Xenón con luces diurnas LED. Las llantas de aleación pueden ser de 17, 18 o 19 pulgadas, en tanto que la suspensión está rebajada 12 mm respecto al Octavia berlina o 13 mm en el caso de la rural convencional.
Los últimos detalles deportivos que veremos por fuera en el RS, son las pinzas de freno pintadas en color rojo, el difusor posterior, las salidas de escape trapezoidales, y por último, solo en la berlina, un discreto alerón sobre la tapa de baúl.
Por dentro, pese a no tener imágenes que lo comprueben, la gacetilla de prensa de la marca habla de logotipos RS en el volante, palanca de cambios, zócalos de puertas, respaldos de asientos y alfombrillas. Adicionalmente hay para completar la estética deportiva, los muchachos de Škoda vistieron al RS con una pedalera en aluminio, cuero en el volante y selector de cambios, además de instrumental con diseño especial.
Los dos corazones que mueven a la gama del Octavia RS son un naftero y un gasolero. El primero es un 2.0 TSI con 220 cv, con transmisión manual o automática de doble embrague DSG, ambas de seis relaciones. El gasolero en tanto, es un 2.0 TDI con unos nada despreciables 184 cv.
Las prestaciones son 0-100 km/h en 6,8 segundos con caja manual, y una velocidad final de 248 km/h, una cifra que no se vería junto a la marca Škoda ni por error de tipeo, pero el Octavia RS es el primero en cerrarnos la boca. Con esta cifra se ubica como el más veloz de la historia de la compañía checa. No hay datos del naftero automático, ni de aceleración o velocidad máxima.
El turbodiesel en tanto, hace el 0-100 km/h en 8,1 segundos, y puede alcanzar una velocidad final de 232 km/h. Ambos impulsores llevan sistema Stop&Start, diferencial delantero XDS, dirección asistida electromecánica variable, y suspensión independiente a las cuatro ruedas, con sistema multilink en el eje trasero y McPherson adelante.
En cuanto a equipamientos de seguridad y confort, la lista se compone por algunos de los siguientes ítems: asistente de cambio de carril, sistema de frenado automático en ciudad con mitigación de colisión, detector de fatiga por microsueños, lectura de señales de tránsito, nueve airbags, control de crucero activo, acceso sin llave (denominmado por Škoda como KESSY), techo solar panorámico, asistente de estacionamiento activo, entre otros. Las ventas en el viejo continente comienzan el mes que viene.
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