Fiat llevó al Bravo al extremo para el salón paulista

viernes, 26 de octubre de 2012



Decirle extremo es poco. Fiat llevó al Salón de San Pablo al Bravo XTreme.
Fiat llevó al Salón de San Pablo un concept car basado en el hatchback compacto de la marca. El Bravo Xtreme Show Car es un ejercicio de diseño llevado al extremo del tuning pero un interesante motor 1.4 T-Jet de 253 cv de potencia. Conocemos de qué se trata, tras el salto.

Un Bravo más agresivo y deportivo que nunca

Antes de comenzar a desmenuzar de qué se trata este show car, hay que ser honestos con la gente de Fiat: si querían llamar la atención, lo lograron. No sé si por extravagante, o agresivo, pero logra sacar algún comentario seguro. Como es costumbre de la marca italiana en Brasil, siempre presenta un auto concepto, y este año esa tarea recayó sobre el Bravo.

Este ensayo de diseño nació de las mesas del Fiat Design Center LATAM. Lo que primero resalta entre tanta pintura opaca, es el logo de la marca tipo “vintage”, utilizado en modelos como el Fiat Mefistofele, un deportivo de 1908. Acompañan al visual frontal dos entradas de aire laterales con LEDs, que aumentan la percepción de que el auto es más ancho de lo que realmente declara la cinta métrica, aunque desde la gacetilla no se han divulgado cifras de las dimensiones de la carrocería.

Los diodos luminosos también toman protagonismo en las ópticas principales, y en la zaga el paragolpes presenta unas falsas salidas de aire laterales además de un gran difusor de aire funcional, con dos salidas de escape cromadas bastante llamativas. En el perfil lo que más destacan son las anabolizadas llantas de aleación, que si bien Fiat no declaró de qué medida son, se puede inferir que pasan holgadamente las 18 pulgadas.


Si por fuera se reformuló la estética de un Bravo de calle, en el habitáculo la nueva disposición de los asientos se encargan de hacer lo propio adentro. De tener dos butacas y un asiento trasero, este Bravo XTreme pasa a contar con cuatro butacas deportivas individuales al mejor estilo Porsche Panamera, salvando las distancias, queridos porschistas. Para los que viajen detrás, hay pantallas instaladas en la parte posterior de las butacas delanteras, lo cual es normal en cualquier concept moderno. Lo curioso de este caso, es que mediante cámaras los pasajeros posteriores pueden mostrar la carretera o el camino, a través de imágenes generadas por cámaras ubicadas en el exterior. Si no les gusta lo que se ve por delante del vehículo, las pantallas también pueden ser usadas para algo más terrenal, como ver algún DVD. Lo que no pudimos ver fueron imágenes del interior, ya que Fiat no divulgó ni una sola.

El panel de instrumentos del Bravo lleva dos colores, el blanco para el velocímetro, y medidores de combustible y temperatura, mientras que el tacómetro se ilumina en rojo, otro detalle para acentuar el espíritu deportivo de este show car. Los otros cambios internos fueron un selector de cambios diferente y la sustitución del freno de mano convencional por uno eléctrico.

Llevando el 1.4 T-Jet hasta los 253 cv de potencia y 340 Nm de par máximo

Tras haber conocido el exterior, hay que decir que el Bravo Xtreme no es un mero ejercicio estético. Además de los diseñadores de Fiat, los ingenieros también tuvieron rienda suelta para divertirse un rato con este show car. Para conseguir eso, utilizaron la mecánica que utilizan en Brasil los Linea de la Copa Fiat, un propulsor 1.4 16v T-Jet, con una "preparación específica", que no podremos saber de qué se trata, pero lo que importa es que produce nada más y nada menos que 253 cv a 6.600 rpm de potencia y un bestial torque máximo de 340 Nm a las 5.000 vueltas, lo suficiente para dejar abiertas algunas bocas y otras, de los ingenieros de Fiat, con una sonrisa malvada de oreja a oreja.


Pero los retoques no fueron solo en la mecánica, ya que ese incremento de potencia también los obligó a hacer modificaciones en materia de chasis. Los ingenieros de la marca rediseñaron la suspensión para ofrecer mayor precisión, utilizando elementos como resortes 10% más firmes y amortiguadores específicos en la suspensión delantera, en tanto que la trasera recibió cambios para reducir al máximo el rolido de la carrocería. Todo eso, sumado a los neumáticos de bajísimo perfil, repercutieron en que el auto quedara 5 mm más bajo que el Bravo de calle. Pese a que solo es un concept, ¿a cuantos de ustedes les gustaría ver un Bravo Mercosur con 253 cv bajo el capot? Mi respuesta es otra pregunta: ¿dónde firmo?