Dos años, un equipo: así es Autoblog Uruguay

Una de las últimas notas y la primera. En el medio, dos años de trabajo.

Y llegó el segundo año. Sí, parece mentira que sigamos al aire, ni nosotros caemos todavía. Esta vez no hablaremos de cifras ni nada por el estilo. Hoy vamos a dejarles dos textos, uno de Facundo y otro mío, para que entiendan lo que es Autoblog para nosotros.

Como es nuestro cumpleaños, nos vamos a permitir un alto entre tanta noticia y vamos a mostrarles que atrás de estos dos reporteros digitales, también hay dos tipos -que son todo el equipo que hay en esto llamado Autoblog-, que se mueven por la vocación de hacer lo que les gusta más, escribir de autos y poder compartirlo con todos ustedes. Sin más, el agradecimiento del equipo.

Facundo

A veces cuesta entender la dimensión real de lo que es Autoblog después de estos dos años. Más para alguien que arrancó a los 14 con su primer -humilde- blog, movido sólo por una pasión y ese aburrimiento que aparece los últimos días de las vacaciones de julio. Con expectativas casi nulas, que crecieron un poco con la creación de Urucars un par de años más tarde, pero que seguían siendo insignificantes comparadas con la realidad actual.

Perdon, la idea no es hacer una biografía, pero busco que entiendan un poco. Que entiendan algo que a mi me cuesta, y que ya ni me acuerdo como pasó. Cuesta bajar a tierra que de un proyecto casero terminamos haciendo un medio que es referencia en el mercado local, o que es el más leido en su rubro. Aunque siga siendo casero. Cuesta imaginar que más de 5.000 personas leen todos los días algo que escribís, más cuando al principio dudábamos que existiera en Uruguay un lugar para Autoblog.

Queríamos leer sobre autos. Pero que fuera material uruguayo actualizado y que la publicidad no pudiera más que las opiniones. Si otros países pueden tenerlo, nosotros también. ¿Y si nadie lo quiere hacer? Lo hacemos nosotros.

Y nos tocó pagar derecho de piso, nada fue gratis ni nada llegó de arriba, pero las ganas que había de seguir fueron más fuertes. Hubo momentos complicados, de esos que llegás a pensar en largar todo, pero por suerte, una vez más, las ganas pudieron más.

Ahora es un placer. Ver esto funcionando y madurando día a día. Y no es sólo gracias a nosotros, debemos muchos agradecimientos. El primero lo debo hace tiempo: a mis padres. No es fácil entender que tu hijo quiera a los 15 años faltar al liceo para ir a un evento, que se tenga que quedar hasta tarde escribiendo, o los nervios de que se vaya a probar algun auto potente de más, pero nunca dejaron de apoyarme en hacer lo que la vocación dijera.

También a todas las marcas que confiaron en nosotros, las que lo hicieron desde un principio, y las que se asustaron con lo nuevo pero se fueron ablandando con el tiempo. A Rodrigo, ahora ya un amigo, por darle un lugar a un pibe que recién arrancaba, y a Carlos por la idea y el apoyo de siempre.

A mi novia para que no se enoje, que banca viajes, que revise el mail cada diez minutos, y hasta algun susto -intencional- haciendo fotos de pruebas. Y no me voy a olvidar de aquellos que nos pusieron algun obstáculo cuando comenzábamos el viaje, sin contar que habia ESP para esquivarlo y seguir adelante. Gracias, de ustedes también aprendimos.

Antes de aburrirla -si no es tarde-, el último agradecimiento. A todos nuestros lectores, tanto a los comentaristas ruidosos (los quiero igual) que son más que en varios sitios que nos triplican en tráfico y le dan ese toque a cada nota, como al resto -silenciosos como un híbrido- que confian en nosotros a la hora de buscar información, entretenerse o hasta de comprar un auto.

Gracias, y por muchos años más de esto, sea en el formato que sea.

Rodrigo

Pensar en Autoblog como un gran sitio, con oficinas y redacción de última, influyente en el ambiente, y planificado concienzudamente es una idea que me gusta que crezca en la cabeza de quienes nos leen. ¿Por qué? Déjenme ejemplificarlo. Este sitio no nació con la intención de ser el más leído de Uruguay en su rubro, ni de llegar antes que los colegas a la noticia del momento, ni tampoco de creernos que lo ponemos en tinta digital está labrado en piedra rosetta. Arrancamos sin ninguna idea o expectativa de nada. A ver si hay pique, como dicen los pescadores.

Hace dos años esto arrancó casi como una cosa simple, un blogcito y finalmente terminó significando un giro de 180° a nivel profesional y personal. Pasar de ser lectores, a redactores, de ver cómo otros prueban autos y leerlos, a probarlos incluso antes que ellos, de leer noticias a generarlas.

Además de eso, y perdón por ser autorreferencial, pero pocos tipos en el mundo podemos darnos el gusto de trabajar con gente como Facundo o Carlos, que además de admirarlos a nivel periodístico-profesional, son grandes personas a las que ya considero más hermanos que otra cosa. A las otras personas a las que le debo esto, es a mis viejos, que siempre me apoyaron en todo lo que hice, desde mi decisión de elegir por la carrera que de a poco voy terminando, hasta estos últimos dos años -y los que vendrán- con el sitio. A ellos cuatro, mi eterno agradecimiento por todo. Párrafo aparte para agradecerle a Alexis Vilariño, que supo bancarme un año con esto, y algunos más antes. Aunque hoy ya no forme parte del sitio, su trabajo sigue formando parte de lo que es hoy Autoblog.

A modo de anécdota, para que tengan una idea de lo que es para nosotros esto, voy a hacer pública por primera vez una anécdota que guardo como una de las cosas más increíbles que nos pasó en Autoblog. Hace poco menos de un año, otro medio de prensa quiso comprar el sitio, y tras una semana de insistirnos les dijmos que no. No por la cifra, ya que nunca manejaron un solo número, ni tampoco importaba, sino por lo que significaba dejar caer en manos ajenas algo que se creó con cariño y ganas junto a la gente que uno quiere. Eso es lo más grande que hay y en lo personal, me llena más que los ceros de cualquier cheque.

Es por eso que mirando en retrospectiva en estos dos años Autoblog creció en visitas, en notas, en edad, mejoramos en la calidad del trabajo que les ofrecemos -especialmente los videos, que los primeros no eran dignos ni de mostrárselos a nuestras madres-, pero en los huesos sigue siendo lo mismo del inicio: dos amigos que disfrutan ver, manejar y escribir sobre autos por el mero hecho de disfrutar la tarea. Solo que hoy en lugar de leernos 30 personas a la semana, ahora son más de 5.000 por día, y como si fuera poco hay un gran grupo de empresas que nos apoyan, ya sea dándonos información, un auto para probar, invitándonos a eventos o auspiciándonos, cosas que hace en el arranque ni se nos pasaban por la cabeza que iban a aparecer tan rápido. Las gracias a todos ellos.

Y dejo para el final al motor de todo esto: vos. Sí, a vos, tus amigos, parejas, familiares, conocidos, enemigos, vecinos, jefes, empleados, etc. que nos eligen, leen, comentan y apoyan, alimentando las ganas de seguir adelante, dejándonos compartir con ustedes lo que más disfrutamos hacer y entreteniéndolos e informándolos de la mejor manera posible, o al menos, de la que mejor nos viene saliendo hasta ahora.

Un saludo, muchas gracias a todos y ojalá nos sigamos leyendo muchos años más.