Sexy ahora se escribe con "Z": Aston Martin Vanquish Zagato

viernes, 27 de mayo de 2016



Así queda un Vanquish cuando sale directo de las mesas de diseño de Aston Martin y Zagato.
Una vez más el Concorso d’Eleganza Villa d’Este ve entre sus participantes a un producto nacido de la colaboración entre la británica Aston Martin y el carrocero italiano Zagato. Ahora sobre la base del Vanquish, se combinan la elegancia inglesa con lo seductor de los diseños italianos. Combo perfecto.

¿Cómo hacer a un Aston Martin todavía más sexy? Si bien eso parece imposible, existe una forma. Pasarlo por las mesas de diseño de algún carrocero italiano. ¿Algún ejemplo?

Lo que ves esta nota es el Aston Martin Vanquish Zagato, producto de la quinta colaboración entre el fabricante de deportivos y GTs británicos y la emblemática casa italiana de la "Z". La idea de este trabajo es participar de la edición 2016 del Concorso d’Eleganza Villa d’Este y como podrán ver, elegante es. Mucho.


Este prototipo (es técnicamente un one-off, es decir, se producirá solo una unidad) ha sido diseñado y desarrollado entre los equipos de Aston Martin en Gaydon, y el equipo de diseño de Zagato en Milán.

La base, tal y como lo dice el nombre, sigue siendo la del Vanquish. Con la pequeña salvedad de que su motor atmosférico de 6.0 litros V12 ha aumentado su potencia hasta los 600 cv (el modelo de calle entrega 565 cv de potencia).


A nivel estético encontramos una gran parrilla frontal, que alberga en su interior unos faros de iluminación diurna LED, que no forman parte del Vanquish de calle. También hay cambios importantes en el paragolpes delantero, con unas branquias aún más marcadas que perfilan la línea lateral. La carrocería está realizada íntegramente en fibra de carbono, mientras que en el interior abunda el cuero y las "zetas" de Zagato distribuidas en todo el habitáculo.

Pero el detalle más característico, sin duda, lo encontramos en su diseño de techo con un detalle típico de Zagato, el de esos dos abultamientos en el techo, a modo de doble burbuja, que en sus épocas de competición tenía más lógica para optimizar la altura del habitáculo y facilitar la conducción de muchos deportivos con casco.