Si no puedes vencerlos, úneteles: Mazda renueva al CX-9

sábado, 28 de noviembre de 2015



Mazda renovó por completo al CX-9 para el Salón de Los Ángeles.
Mazda llevó al Salón de Los Ángeles a la nueva generación de su SUV más grande, el CX-9. Más allá del nuevo y atractivo diseño, este producto nipón es el primero de la nueva familia de productos de la marca que combina los motores SKYACTIV con turboalimentación. Más, tras el salto.


Y algún día tenía que pasar. Mientras Mazda estaba escapándose de la incorporación de mecánicas turboalimentadas pero valiéndose de la inteligente tecnología SKYACTIV de chasis, motores, y transmisiones, iba a llegar el momento en el que la masa vencería sobre la minoría.

Ese momento llegó con esta nueva generación del CX-9, un SUV mediano que se ubica por encima del CX-5 que conocemos en nuestro país (ver lanzamiento). El nuevo integrante de la familia Mazda presentado en Los Ángeles estrena una mecánica SKYACTIV-G 2.5T con 2.5 litros de cilindrada y capaz de producir 250 cv de potencia y 420 Nm de par asociado a un cambio automático de seis relaciones.


Por más convencional que parezca, Mazda siendo Mazda no podía hacer un turbo igual al que hace el resto de la industria. Como consecuencia, desarrolló uno llamado Dynamic Pressure Turbo, que es el primer sistema de turbocargador con la posibilidad de variar el grado de presión en relación con la velocidad del motor.

A bajas revoluciones, por ejemplo, el sistema abre los puertos más pequeños para que la turbina genere una mayor presión (1,2 bar) y abre las válvulas secundarias solo cuando se alcanza el régimen de revoluciones necesario. A su vez, tiene un sistema de escape 4-3-1, lo cual aprovecha mejor al turbocompresor.


La tracción, en tanto, será de serie delantera, aunque opcionalmente podrá dotarse una integral permanente iACTIV AWD que, a través de una serie de sensores que analizan las condiciones del camino hasta 200 veces por segundo y determinan la cantidad de par que necesita cada una de las ruedas.

En materia de diseño, como verán, sigue el estilo KODO de Mazda, pero aplicado a una carrocería curiosamente, más pequeña que su antecesora. Mide 5.033 mm de largo, lo que representa 30 mm menos, pero la distancia entre ejes fue ampliada en 55 mm. Los voladizos también son más cortos, 59 mm y 25 mm adelante y atrás respectivamente.


Por dentro promete un ambiente premium para siete pasajeros, gracias a la utilización de elementos como cuero Nappa, madera Rosewood, así como apliques en la consola de aluminio real satinado y pulido. También hay elementos con plásticos de inyectado blando en el tablero de alta calidad percibida, siempre según la información de prensa, claro está. Pero viendo las imágenes, le creo.

El equipamiento, como era de esperar, es muy completo. Incluye sonido Bose, pantalla TFT de 4.6 pulgadas en el cuadro de instrumentos, sistema de entretenimiento Mazda Connect, climatizador de tres zonas, múltiples ajustes eléctricos, sistemas de alerta de colisión con frenado automático, control de crucero adaptativo, monitoreo de ángulo muerto, cámaras de estacionamiento, y asistente para carril, entre otros elementos.


Video: Mazda CX-9