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| 1.6 turbo 200 cv y caja automática secuencial de doble embrague. Con ustedes, el nuevo Clio R.S. |
La estética del Clio IV, ahora remixada por RenaultSport
Este Clio R.S. -o RenaultSport si lo prefieren- parte de la última creación del rombo, el Clio IV, que es el primer modelo completamente realizado por el holandés Laurens van den Acker, ex-jefe de diseño de Mazda, y ahora dueño de la batuta en la casa del rombo.
Estéticamente ya hablé del Clio en su momento, y conocen más o menos de qué va, así que haré foco en lo que nos presenta este nuevo Clio R.S. Se destacan las nuevas llantas de aleación de 17 pulgadas exclusivas para el R.S, aunque si no son suficientemente generosas, se puede optar a costo extra por unas de 18 pulgadas. Un detalle, a gusto personal, exquisito, es el spoiler delantero gris plata que enmarca la entrada de aire inferior del paragolpes, junto a las luces diurnas LED que en este caso están colocadas en una posición diferente con respecto a los Clio IV más calmados, ahora bajando desde la parrilla a la entrada de aire inferior del paragolpes.
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Ese aplique gris luego se replica en el difusor trasero, y ya que lo menciono, tanto el alerón posterior como el difusor generan un 80% y un 20% más de carga aerodinámica que en la generación anterior del Clio R.S.
Puertas adentro, hay detalles decorativos en rojo, en los asientos, cinturones, en el "punto cero" del volante, apliques del tablero y del selector de cambios. Las butacas delanteras son deportivas, con los laterales muy pronunciados para dar mayor sujeción lateral. Llevan el logo "R.S." tatuado en los apoyacabezas, en tanto que para los amantes del cuero, se pueden escoger de forma opcional en ese tapizado.
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Menos contaminante, más eficiente, pero manteniendo los 200 cv
Hete aquí el punto de discusiones sobre este nuevo Clio IV R.S. ¿Debería haber mantenido el motor 2.0 de 200 cv y la caja manual? A mi gusto, sí, pese a que soy un defensor a ultranza del downsizing. Pero bueno, solo soy un humilde petrolhead, los ingenieros de Renault tienen más conocimiento que yo, así que no pueden estar tan errados.
Dejando de lado este momento de honestidad, vuelvo al traje de periodista imparcial y les cuento un poco lo que trae este Clio R.S. en su cuarta evolución. Se vale de un cuatro cilindros turboalimentado de 1.6 litros, inyección directa y apertura variable de válvulas (VVT) que entrega 200 cv de potencia a las 6.000 vueltas y un torque máximo de 240 Nm plano entre las 1.750 y 5.600 vueltas.
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Como digo en el título "adiós caja manual", este Clio R.S. se encuentra asociado exclusivamente a una caja de cambios automática secuencial de doble embrague, denominada EDC, con seis velocidades y levas detrás del volante, siendo el primer Renault de la historia en llevar levas de cambio. Si bien no se han divulgado cifras de aceleración o velocidad final, la marca gala hace gracia de los datos de consumo y emisiones de este Clio IV R.S., consumiendo dos litros menos cada cien km que el Renault Clio III R.S y bajando en un 25% las emisiones de CO₂ respecto de su predecesor.
Se podrá elegir entre dos configuraciones diferentes de tren de rodaje, al igual que el anterior: Chasis Sport, que será la configuración "por defecto", con un balance duro, aunque siendo deportivo pero sin sacrificar el confort de marcha. En tanto para los que gusten de las suspensiones secas como galleta de avena, estará el famoso Chasis Cup, con un 15% más de rigidez y una carrocería rebajada en 5 mm.
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Entre ambas butacas dispone de un botón selector denominado R.S. Drive para activar o desactivar un modo deportivo en el que se modifica varios elementos del conjunto moto-propulsor, como el mapeo del motor y de la caja de cambios EDC, los ajustes del control de estabilidad y de tracción, el tacto de la dirección asistida y la respuesta del pedal del acelerador.
Al igual que los otros Clio IV, este R.S. cuenta con la pantalla multimedia R-Link, que incluye en este caso la aplicación R-Sound Effect, que simula el sonido de diferentes tipos de motores, a través de los altavoces, acompasado el audio con la aceleración. Maldigo a Robert Moog por su creación cada día más. Contrariamente, aplaudo a Laurens van den Acker por el diseño de este auto.
¿Y ustedes? ¿Qué les parece el nuevo Clio R.S., ahora turboalimentado, solo cinco puertas, con caja automática y sonido de motor sintetizado? Espero sus comentarios.
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Ese aplique gris luego se replica en el difusor trasero, y ya que lo menciono, tanto el alerón posterior como el difusor generan un 80% y un 20% más de carga aerodinámica que en la generación anterior del Clio R.S.
Puertas adentro, hay detalles decorativos en rojo, en los asientos, cinturones, en el "punto cero" del volante, apliques del tablero y del selector de cambios. Las butacas delanteras son deportivas, con los laterales muy pronunciados para dar mayor sujeción lateral. Llevan el logo "R.S." tatuado en los apoyacabezas, en tanto que para los amantes del cuero, se pueden escoger de forma opcional en ese tapizado.
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Menos contaminante, más eficiente, pero manteniendo los 200 cv
Hete aquí el punto de discusiones sobre este nuevo Clio IV R.S. ¿Debería haber mantenido el motor 2.0 de 200 cv y la caja manual? A mi gusto, sí, pese a que soy un defensor a ultranza del downsizing. Pero bueno, solo soy un humilde petrolhead, los ingenieros de Renault tienen más conocimiento que yo, así que no pueden estar tan errados.
Dejando de lado este momento de honestidad, vuelvo al traje de periodista imparcial y les cuento un poco lo que trae este Clio R.S. en su cuarta evolución. Se vale de un cuatro cilindros turboalimentado de 1.6 litros, inyección directa y apertura variable de válvulas (VVT) que entrega 200 cv de potencia a las 6.000 vueltas y un torque máximo de 240 Nm plano entre las 1.750 y 5.600 vueltas.
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Como digo en el título "adiós caja manual", este Clio R.S. se encuentra asociado exclusivamente a una caja de cambios automática secuencial de doble embrague, denominada EDC, con seis velocidades y levas detrás del volante, siendo el primer Renault de la historia en llevar levas de cambio. Si bien no se han divulgado cifras de aceleración o velocidad final, la marca gala hace gracia de los datos de consumo y emisiones de este Clio IV R.S., consumiendo dos litros menos cada cien km que el Renault Clio III R.S y bajando en un 25% las emisiones de CO₂ respecto de su predecesor.
Se podrá elegir entre dos configuraciones diferentes de tren de rodaje, al igual que el anterior: Chasis Sport, que será la configuración "por defecto", con un balance duro, aunque siendo deportivo pero sin sacrificar el confort de marcha. En tanto para los que gusten de las suspensiones secas como galleta de avena, estará el famoso Chasis Cup, con un 15% más de rigidez y una carrocería rebajada en 5 mm.
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Entre ambas butacas dispone de un botón selector denominado R.S. Drive para activar o desactivar un modo deportivo en el que se modifica varios elementos del conjunto moto-propulsor, como el mapeo del motor y de la caja de cambios EDC, los ajustes del control de estabilidad y de tracción, el tacto de la dirección asistida y la respuesta del pedal del acelerador.
Al igual que los otros Clio IV, este R.S. cuenta con la pantalla multimedia R-Link, que incluye en este caso la aplicación R-Sound Effect, que simula el sonido de diferentes tipos de motores, a través de los altavoces, acompasado el audio con la aceleración. Maldigo a Robert Moog por su creación cada día más. Contrariamente, aplaudo a Laurens van den Acker por el diseño de este auto.
¿Y ustedes? ¿Qué les parece el nuevo Clio R.S., ahora turboalimentado, solo cinco puertas, con caja automática y sonido de motor sintetizado? Espero sus comentarios.
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