Una ragazza que cumple medio siglo: los 50 años de la Maserati Bora

lunes, 12 de julio de 2021



Producido entre los años 1971 y 1978, la Bora es una de las coupés más recordadas de Maserati,

Este año se cumplen los 50 años de un gran clásico de Maserati, la Bora. Esta coupé presentada en 1971 cuenta con una carrocería firmada por el estudio Italdesign de Giorgetto Giugiaro. Utilizaba una mecánica V8 de 4.700 cc que ofrecía 310 cv. Y hoy, conocemos su historia, a continuación.

Poco después de que Citroën tomara el control de Maserati, el consejero delegado Guy Malleret le sugirió al ingeniero Giulio Alfieri que creara un biplaza de producción con motor central. Una vez esbozado el proyecto, Alfieri pasó a ocuparse de la mecánica mientras que de la parte estilística se encargó el estudio Italdesign de Giorgetto Giugiaro. 

Así nació el nuevo Maserati Bora, cuyo nombre interno era Maserati Tipo AM 117. Los primeros prototipos empezaron las pruebas en carretera durante el verano de 1969 y el modelo fue presentado ante el público del Salón de Ginebra en 1971.


Desde la perspectiva visual, las líneas de la Maserati Bora eran una evolución —no una revolución— del camino estético recorrido hasta entonces por el Tridente. 

La parte posterior era alta, con una gran puerta acristalada que permitía ver el compartimiento del motor desde fuera y con ventanillas laterales diseñadas para aligerar la línea del vehículo e iluminar el motor de ocho cilindros, poniéndolo en primer plano. 


En la rejilla delantera, en cuyo centro destacaba el tridente de Maserati, se adivinaban algunos guiños a la Maserati Ghibli. Giugiaro propuso un acabado satinado especial para el techo y el pilar A que le daba al automóvil un aspecto moderno y desenfadado. 

La pureza de las líneas laterales la rompía una tira de goma cuyo cometido era proteger la carrocería contra los pequeños golpes de la conducción cotidiana, una solución verdaderamente insólita en un vehículo de este calibre.


Se decidió instalar un potente V8 atmosférico de 4,7 litros, montado longitudinalmente detrás del habitáculo, y se optó por uno de 4.709 centímetros cúbicos, con una carrera de 85 milímetros y un diámetro de 93,9 milímetros, que era capaz de generar 310 caballos a 6.000 revoluciones por minuto. 

Junto con el motor de ocho cilindros en V a 90°, se instaló en disposición Transaxle una caja de cambios manual de cinco velocidades más la marcha atrás, que transmitía la potencia al eje trasero del vehículo. 


Para reducir las vibraciones y el ruido, se creó una peculiar estructura de soporte tubular para la transmisión, que se anclaba al chasis monocasco de acero. 

La suspensión independiente en ambos ejes se combinaba con cuatro frenos de disco ventilados y la dirección asistida, la cual se accionaba mediante el mismo sistema hidráulico que controlaba los faros delanteros escamoteables. 


Para mejorar la posición de conducción, se hizo posible la regulación de la altura y la profundidad del volante. Los pedales también eran completamente regulables y el asiento del conductor, aunque mantenía una posición fija, se podía ajustar en altura.

La Maserati Bora 4.7, del que se realizaron 289 unidades, era capaz de ponerse a una velocidad máxima de 280 kilómetros por hora. En 1974 se presentó la Maserati Bora 4.9, una variante actualizada de la que se fabricaron 275 ejemplares, hasta el año 1978. 

Este modelo tenía las mismas características que el 4.7, con un ocho cilindros que mantenía inalterada la carrera de 89 milímetros y aumentaba el diámetro a 93,9 milímetros, para obtener una cilindrada de 4.930 centímetros cúbicos. El motor de 4,9 litros desarrollaba una potencia de 330 caballos e impulsaba a la Bora 4.9 hasta una velocidad máxima de 285 kilómetros por hora.