Editorial: "Rush, pasión y gloria"

Rush nos muestra tres años del campeonato mundial de Fórmula 1, y una de las rivalidades más fuertes de la categoría en mucho tiempo: Lauda versus Hunt.

El pasado jueves 12 de diciembre, el equipo de Autoblog fue invitado por ENEC-Cine a la función para prensa de Rush, y en algunos días más, llegará a las salas el film de Ron Howard basado en la rivalidad entre Niki Lauda y James Hunt en los años 70. Reseña libre, tras el salto.

"The closer you are to death, the more alive you feel. It's a wonderful way to live. It's the only way to drive." (Cuanto más cerca estás de la muerte, más vivo te sentís. Es una manera maravillosa de vivir, es la única forma de conducir) - James Hunt (Chris Hemsworth) en "Rush". 

Hacía años que no tenía tanta ansiedad por ver una película. Las de James Bond son mi debilidad personal, pero este año "Rush" pudo más. Lo único que me hace ruido de la película es el agregado "pasión y gloria" que le sumaron en Latinoamérica, pero también le podrían haber puesto "Lauda y Hunt a toda marcha" y ahí sí hubiéramos salido varios a quemar casas de traductores. Por suerte no pasó.

Dejando de lado eso veamos de qué trata la película. Para hacer la historia corta, el eje está centrado en la historia real de la rivalidad entre Niki Lauda y James Hunt en la Fórmula 1 de los años 70, que arranca en 1973 con las primeras armas y batallas de ambos en la Fórmula 3, y concluye en el Gran Premio de Japón 1976, cuando el británico salió por primera -y única vez- campeón del mundo de Fórmula 1. Lauda tiene en la película dos de sus tres campeonatos (1975 y 1977). Luego ganó el de 1984 también, pero no entra en "Rush".

Todo lo que pasa entre esos tres años en los que transcurre "Rush", es puro vértigo y velocidad. Y lo mejor de todo es que por más que estemos en una butaca de cine mirando una ficción, esto todo fue real hace más de 40 años atrás. El ascenso de Lauda a la Fórmula 1 a fuerza del dinero y la terquedad, comprando su lugar en BRM, luego su contratación en Ferrari, la caída de Hunt por falta de patrocinantes en el equipo Hesketh y su regreso a las pistas con McLaren, así como el punto de quiebre, el accidente de Lauda que casi lo saca del mundo de los vivos.

Ron Howard, el director del film, ("Una mente brillante", "Apolo 13", o "Frost/Nixon" por citar tres de las mejorcitas películas que hizo, aunque tiene varias de las otras también) juega mucho con los datos reales de aquellas temporadas y por suerte sabe sacarle el jugo al máximo. Los detalles de época, los mamelucos, los autos, y las pistas, que si bien en muchos casos no son las reales, la ambientación hace un trabajo brillante.

Sin embargo tengo que ser justo. La película ya solo vale la entrada por ver al actor Daniel Brühl (Fredrick Zoller, de "Bastardos sin gloria"), interpretando a Niki Lauda. No es bueno, es excelente. Y si no se lleva algún tipo de premio, una nominación al Óscar seria lo menos que se merece, sería una crueldad.

Imita al austríaco en gran forma, en su forma de caminar, hablar, las expresiones faciales, todo. Chris Hemsworth (Thor, vamos que todo el mundo lo ubica por eso), el actor encargado de personificar a James Hunt es bueno (muy), pero el alemán le saca unos cuantos cuerpos en la interpretación al australiano. Los momentos altos son los posteriores al conocido accidente de Lauda, eriza verlos, y en especial los de su recuperación en el hospital.

Las mujeres de ambos pilotos tienen un papel primordial en la vida de cada uno, y también tienen una correlación con sus parejas. Marlene Lauda (Alexandra Maria Lara, mucho gusto) es una esposa compañera, casera, fiel y centrada en su marido, mientras que Suzy Miller (Olivia Wilde A.K.A. "La 13" de Dr. House) es una mujer que transpira sensualidad, tiene una vida social muy activa, y termina dejando a su pareja (Hunt) por otro. En fin, son un espejo del hombre que tienen por pareja, y en ambos casos son su "cable a tierra" al salir del monoposto.

A su vez, la rivalidad entre Rush y Lauda era sana. O sea, es obvio que había broncas, toreadas entre ambos al salir a la pista, miradas poco felices en el paddock o comentarios en los podios o las conferencias de prensa. Pero sacando de lado eso, fuera del circuito se respetaban bastante, y eso en un deporte tan competitivo es un valor muy fuerte. Sí, Lauda, es mostrado como un tipo frío y calculador, y Hunt como uno emocional y arriesgado, porque así eran ambos como pilotos. Pero ambos también se aconsejan constantemente a lo largo del film, simplemente por respeto mutuo, pero además, porque había empatía entre ambos. Y sí, eso también pasaba en la realidad.

Y eso quizás es lo rico de la película, haber sabido rescatar esa química y aprovecharla al máximo en base a muy buenas actuaciones, un guión que respeta bastante fielmente la historia, y una ambientación de época que vista en una pantalla de cine, si sos un petrolhead de verdad, te pone la piel de gallina cuando suenan los V12 y ves circuitos como Nürburgring en todo su esplendor. El combo audiovisual es intoxicante. Es la primera película sobre autos (en serio) que llega a los cines en mucho tiempo. Y no, no estoy contando las de la saga "Rápidos y Furiosos", que empezaron como eso, y terminaron en película de robos con autos.

Tampoco es caprichoso por parte del guionista (Peter Morgan) y del director de "Rush" centrarse en el campeonato de 1976. Fue épico. Pero no épico nivel Sebastian Vettel, no. Acá realmente estabas parado arriba del sillón de tu casa comiéndote las uñas hasta que bajara la bandera a cuadros. La carrera final de ese año, en el circuito de Monte Fuji, está perfectamente recreada y genera exactamente eso. Porque vamos a ser claros, fue un campeonato de infarto: Hunt salió campeón a un punto de ventaja de Lauda. En victorias acumuladas, el inglés le sacó una de ventaja al austríaco (6 vs. 5), mientras que Lauda tuvo 9 podios y Hunt 8. Y todo en 16 carreras. O sea, no sé qué más claro tengo que ser para aclarar lo parejo que fue. Y a esto súmenle que en el GP de Alemania, Lauda tiene el accidente. La realidad estaba gritando: "en su cara, guionistas de Hollywood."

No quiero extenderme más, porque creo que con este texto ya di el empujón que faltaba para invitarlos a verla en el cine. La fecha de estreno será el 9 de enero. Gracias a la productora encargada de la distribución de "Rush" en Uruguay, ENEC-Cine, habrá una función privada a la cual algunos de ustedes podrán asistir, y además regalaremos algunas entradas para que vayan a ver la película mediante un sorteo sobre el cual ampliaremos detalles más en unos días. Previo a todo eso, los invito a ver los trailers de "Rush". 

Video: Rush: Pasión y Gloria

Imágenes | Universal Pictures