Probamos al Geely Emgrand GS: ¿el fin de los prejuicios?

martes, 31 de octubre de 2017



Por cuatro días y más de 520 kilómetros evaluamos a la última novedad de Geely en el mercado uruguayo, el Emgrand GS.
Por cuatro días y más de 520 kilómetros evaluamos a la última novedad de Geely en el mercado uruguayo, el Emgrand GS. Este crossover compacto será la próxima prueba que podrán leer, pero como ya es un clásico desde hace siete años, un pequeño adelanto para ir haciendo boca.

En todos estos años de trabajo como periodista especializado me ha tocado que muchos medios no especializados me entrevisten o consulten sobre el oficio que realizo con tanto gusto así como también por mi predilección por los autos desde que era un niño.

Son entrevistas hechas por gente que entiende los autos como un objeto, un bien de consumo, o un medio de transporte. Nada más. No es una forma errónea de verlos, simplemente es muy distante a la que tenemos aquellos que tenemos escalofríos al escuchar un V12 rugir al límite de sus revoluciones. Eso para ellos es ruido. Para nosotros una obra musical hecha por ingenieros.


Mi forma de medir si una entrevista me gustó o no, es pasando por el peine fino las preguntas que me hacen. Y una que es recurrente en todos los casos es: "los autos chinos, ¿son todos malos, no?" Y en todos los casos apelo a una relativización que los deja mudos, porque esperan la respuesta tribunera de mi parte: un grandísimo sí.

Como todos los bienes de consumo del mundo, los hay buenos y malos, independientemente del origen que provengan. En el momento que les digo eso, asienten con la cabeza porque se dieron cuenta de lo poco original y vacía que fue la pregunta. Y porque además, es cierto.


Se ha creado una especie de "cuco" sobre este origen en los últimos 10 años. Algunos consumidores supieron sobrepasarlo, y otros se aferran a él junto a sus convicciones, aunque lo más cerca que estuvieron de tener contacto con un producto originario de China haya sido su teléfono celular o su computadora. Y muchas veces sin que ellos mismos lo supieran. Ahí los prejuicios del origen ni aparecen.

Sin embargo con el correr de los años, también me han tocado probar modelos de todo tipo, calibre y por sobre todas las cosas, orígenes. Y en el caso de los provenientes desde China he podido ver el avance acompañando mis años de periodista. Mirar hacia atrás y leer las primeras evaluaciones para luego contrastar con lo que son hoy, es casi como leer un libro de historia. Y eso que fue hace nada más que cinco o seis años atrás.


Por eso cuando vi en el Salón de Buenos Aires 2017 a la presentación del Geely Emgrand GS (ver nota), que luego llegó a Uruguay un par de semanas luego (ver lanzamiento), lo primero que dije fue: ¡qué rápido avanzaron estos tipos!

Lo único que me faltaba era preguntarme si ese progreso era solo visible o también palpable. Por eso le pedí una unidad a la gente de Geely Uruguay para ver si finalmente estamos ante el fin de la pregunta "los autos chinos, ¿son todos malos, no?" o si estamos ante el verdadero fin de los prejuicios. Tendrán que saberlo dentro de unos días más.