Mejor imposible: Nissan presentó al GT-R preparado por Nismo

martes, 19 de noviembre de 2013



Lo logró: El Nissan GT-R Nismo se convierte en el auto de producción en serie más rápido del mercado.
Cuando parecía que el desarrollo del GT-R ya estaba cerca de sus límites, Nissan demuestra que no. Hoy se presentó oficialmente a la variante preparada por Nissan Motorsports -alias Nismo-, que con 600 cv y cambios en el chasis y aerodinámica, sube aún más el listón. Video y más, tras el salto.


El Nissan GT-R es sin lugar a dudas una de las mejores estrategias de la marca en la última década. Lograr un deportivo que muestre el potencial tecnológico de la firma -y de la industria nipona en general- y poder venderlo con un precio de escándalo tiene su mérito.

Cada año, cuando parece que su desarrollo alcanzó un techo, recibe mejoras que le permiten mantenerse actual y robarle algunas décimas al cronómetro paseando por Nürburgring. Pero esta vez fueron más allá. Bastante más.


Nismo, el preparador oficial de la marca, hace años que venía jugando con la idea de echarle mano a un GT-R, y se hizo realidad. El resultado es impresionante: logra girar en el infierno verde en apenas 7:08,679. Son dieciséis segundos menos que el GT-R de calle.

Es superado apenas en diez segundos por el Porsche 918 Spyder (ver nota) y los modelos de Radical (ver). Ninguno de sus rivales italianos o alemanes con más pedigree tiene tiempos similares. Para tener una referencia, el McLaren MP4-12C necesita 7:28.


¿Cuál es la receta? El impulsor 3.8 V6 biturbo recibe modificaciones que le permiten alcanzar 600 cv y unos bestiales 652 Nm de par máximo, gracias a la incorporación de piezas del GT-R que compite en el GT3.

Pero la clave del GT-R está -además de en la tracción integral inteligente- en el chasis. Recibe diversos elementos de las unidades preparadas para las 24 Horas de Nürburgring, con barras estabilizadoras de mayor grosor.

Los espirales y amortiguadores fueron creados en conjunto con Bilstein, y mantienen el sistema DampTronic de amortiguación adaptativa, pero con una configuración más radical. Además, se cambiaron las geometrías de la suspensión delantera, que recibió refuerzos estructurales.


La aerodinámica también fue revisada. Los aditamentos en fibra de carbono y nuevos paragolpes permiten mejorar el coeficiente, y incrementar en 100 kg el downforce cuando el auto viaja a 300 km/h. Puertas adentro, recibe nuevas butacas y tapizados específicos.

No hablo más, suban el volumen.

Video: Nissan GT-R Nismo - Nürburgring